Una novela deslumbrante sobre los recovecos del alma humana, sobre la fe, las dudas, los engaños, los autoengaños y los deseos inconfesables.
A sus setenta y dos años, Juan Cabrera vive prácticamente enclaustrado con sus libros en un pequeño piso del barrio de Argüelles. No es algo nuevo para él. Durante años estuvo confinado en un convento benedictino, del que salió con un indulto especial de exclaustración para un profeso de votos perpetuos. En el claustro ya no lograba escuchar a Dios, pero quizá su salida también se vio influenciada por la denuncia que hizo de tres novicios a los que descubrió en una situación impropia, o al menos entonces eso le pareció. Alejado de la familia, Cabrera recibe un día la visita de su sobrino Jaime, quien, poco después, propicia el encuentro entre su tío y Antón Rubial, uno de los novicios expulsados por la acusación del exmonje. Tras dejar la orden, Rubial rehízo su vida y se casó con Petri, con quien mantiene una relación complicada.
Entre estos cuatro personajes se irá tejiendo una enmarañada red de medias verdades, manipulaciones, deseos de venganza y celos, con enclaustramientos voluntarios e involuntarios y una creciente tensión. Álvaro Pombo vuelve a demostrar su virtuosismo para retratar el alma humana y aborda en esta deslumbrante novela temas como la fe, las dudas, la conciencia moral, el peligro de avivar el pasado y la mirada capaz de convertir una escena acaso inocente en pecaminosa.
Álvaro Pombo es un poeta, novelista y ensayista español, nacido en Santander en 1939. Su obra se caracteriza por su estilo refinado, su profundidad psicológica y su enfoque en la complejidad de las relaciones humanas y la identidad. Estudió Filosofía en la Universidad Complutense de Madrid y, más tarde, en el Birkbeck College de Londres, donde vivió durante casi dos décadas antes de regresar a España. Su formación académica y su experiencia en el extranjero influyeron en su estilo literario, que combina una sensibilidad poética con una ironía sutil y una aguda introspección.
Su estilo único y su profundidad temática han hecho de él una de las voces más importantes de la literatura española actual. A lo largo de su carrera, Pombo ha escrito numerosas novelas y poemarios que han sido aclamados por la crítica y premiados en distintas ocasiones. Entre sus obras más destacadas se encuentran El héroe de las mansardas de Mansard (1983), que explora el tema de la homosexualidad y el deseo en la España de posguerra; Donde las mujeres (1996), una reflexión sobre la soledad y las relaciones familiares; y La cuadratura del círculo (1999), en la que ahonda en el dilema entre los ideales y la realidad. Otros títulos importantes son El metro de platino iridiado (1990), que le valió el Premio Herralde, y La fortuna de Matilda Turpin (2006), con la que ganó el Premio Planeta. Su obra se caracteriza por un enfoque en temas existenciales y filosóficos, así como un lenguaje rico y colorido, en el cual aúna la musicalidad de la poesía con el vigor narrativo de la novela.
Además de su obra literaria, Álvaro Pombo ha tenido una activa participación en la vida pública y política española. Fue miembro de la Real Academia Española desde 2004, ocupando el sillón J y también se presentó a las elecciones al Senado como candidato del partido UPyD en 2011. La obra de Pombo ha sido fundamental en el panorama literario contemporáneo en lengua española, por su habilidad para reflejar los conflictos internos y las contradicciones de sus personajes.
Las reseñas de Resignator.. Título: El exclaustrado. Autor: Álvaro Pombo.
Tras diferentes vaivenes por novelas varias, por fin doy con literatura a lo grande. Y es que hay formas de escribir y formas de llegar a donde no se llega salvo con el uso quirúrgico de la literatura, y ya no del lenguaje solamente, sino del arte de contar y de contar emociones. Esto es lo que me he encontrado con esta novela de Pombo. Un formato que parece una tragedia griega, simple en la estructura, con su Deus ex machina y todo, da lugar a un juego de perspectivas, prejuicios, emociones, odios, estratagemas y formas de entender las relaciones que sumerge y hace brillar esas lucecillas que se encienden en la cabeza del lector cuando encuentra buen género. La recomiendo. Sólo no entiendo 6 laísmos en la parte en la que habla el narrador, y no el personaje, por lo que no puedo criminalizar al personaje. No entiendo por qué los utiliza, no entiendo por qué no se los corrigen. El laísmo, mucho anterior a la neurosis del género del giliprogre woke actual, es un defecto que confunde el complemento directo con el indirecto. Es un error sintáctico y debería ser objeto de hoguera o tormento similar. Entiendo que el autor lo ha hecho conscientemente, pero no entiendo el porqué.
Novela que se nota escrita a desgana y que bien podría ser el guión de una película de sobremesa de esas que echan entre semana.
La historia se mueve entre lo cutre, lo pedante y lo insulso. El narrador omnisciente hace de lupa magnificadora y aumenta hasta la saciedad una historia que no da para tanto. La narrativa se centra en sus cuatro personajes principales y lleva a todos a la vez, y por cada pequeña accion que hacen, hay un extenso estudio introspectivo. El problema es que ninguno de los personajes es lo bastante sólido ni genera la suficiente curiosidad como para aguantar todo este análisis. Cabrera y su conflicto interno resulta insípido, Jaime el sobrino es mas plano que un folio y va de un lado para otro sin hacer nada, Rubial es un manipulador genérico que solo le falta reirse con un mwahaha y Petri, que, pues bueno, ahí está la tía.
Es un libro tedioso, que pone a sus personajes en un estado constante de vaivén, con unos tiras y aflojas que parecen estar construyendo una relación compleja pero que no es así. La historia llega a un final apresurado y superfluo, que da fin a la historia de sus personajes de la forma más manida posible. No hay nada curioso ni original en la obra, solo una narrativa tediosa que me ha recordado mucho a «Contra Natura», solo que sin su lucidez.
“Los libros empequeñecen y aíslan las habitaciones, pero también ensanchan las avenidas del alma: sin conversación con los libros, Juan Cabrera se siente incapaz de imaginarse a sí mismo” ~ El exclaustrado de Álvaro Pombo.
Juan Cabrera ha sido fraile pero ahora vive solo recluido entre sus libros. Recuerda del pasado un episodio con Antón Rubial y ahora el pasado llama a su puerta de la mano de su sobrino Jaime, quien busca una reconciliación entra ambos. Es el trío de personajes de El exclaustrado al que se une Petri, una mujer que se dedicaba a poner copas en un bar hasta que se casó con Rubial.
Con el paso del tiempo afloran las discrepancias del pasado, y los conflictos del presente. Un libro que en parte es reflexión sobre la religión y la pérdida de fe –“¿En qué sentido preciso puede alguien –un creyente– decir que ha fallado a Dios?”– y, por otro, sobre hasta qué punto podemos intervenir en la vida de los demás. Nos encontramos con manipulación, malos tratos e igualdad de género.
non sei que pensar. farei mais adiante a reseña supoño, pero así a bote pronto, o final pareceume tan repentino, superfluo e desconectado do aire de pausa intelectual q todo o libro intenta proxectar que non sei moi ben que facer con el
juan cabrera dejó su orden religiosa años atrás tras tener una crisis de fe y haber denunciado a unos novicios por un comportamiento que él consideró inadecuado. ahora, juan acaba de recibir una visita de su sobrino jaime, interesado por el incidente de los novicios después de haberse encontrado con uno de ellos, antón rubial, quien, casado desde hace poco con petri, lleva años resentido con juan por una acusación que le pareció injusta y desea vengarse a toda costa.
la formación filosófica de álvaro pombo sale a relucir en muchas de las páginas de "el exclaustrado" en un estilo que intuyo que debe ser habitual en su bibliografía a pesar de que esta es la primera vez que leo una de sus obras. aunque como escritor pombo no nos suelta de la mano ni siquiera en los párrafos más densos, en demasiados momentos de la novela me ha parecido que el narrador omnisciente de "el exclaustrado" era en realidad un alter ego de juan cabrera cuya mirada colonizaba en exceso el relato. tanto la narración como la forma de hablar de los personajes —y esto resulta especialmente chocante en el caso de jaime y petri— tienen un tono a medio camino entre lo filosófico-teológico algo indigesto y un sainete anacrónico donde la gente en lugar de batirse en duelo al saltar de una carroza queda en un starbucks nada más salir del metro. más allá de esto, "el exclaustrado" es un solvente drama con toques de intriga que podría resumirse en la mitad de páginas pero cuya extensión final permite al autor ahondar en las disquisiciones de sus cuatro personajes sobre la ética y la responsabilidad, especialmente bien construídas en boca del narcicista y manipulador antón rubial.
Lo mejor que puedo decir de la novela El exclaustrado es que, si se empieza, hay que acabarla. Lo peor, que me ha costado bastante alcanzar el punto y final. En ésta, Pombo nos presenta un melodrama decimonónico transportado al siglo XXI en el que, salvo dos o tres escenas potentes, todo es introspección y psicología. Lo que pasa, se cuenta desde las mientes de unos personajes trasnochados, ligeros, cuando no ridículos, y, sin embargo, sobrecargados de plúmbea trascendencia. Es viejuno el dilema de fe en Juan Cabrera: no aporta. Es exagerada la supremacía de Antón Rubial: no es verosímil. Es ridícula la aportación del sobrino Jaime: no se entiende. Y, finalmente, son increíbles los juegos a los que se presta una "periquita" resabiada: no cuelan. EN EL HABER: Pombo escribe muy, pero que muy bien. Pero esta no es de lejos su mejor novela. EN EL DEBE: Además de lo expuesto más arriba, resulta insufrible el obsesivo y machacón LEÍSMO. ¿No tiene correctores ANAGRAMA?
No es un best seller que lees en un rato, pero con su dominio del lenguaje y su profundo conocimiento del alma humana, Pombo te atrapa también en esta novela, donde cada personaje vive encerrado en una realidad que se han dado a sí mismos y de la que no saben escapar, aunque les haga desgraciados. Quizá Jaime, en cuanto que joven que apenas ha vivido todavía, tiene una mochila más pequeña;el resto parece vivir aplastado bajo el peso de su pasado que no termina nunca. El personaje de el exclaustrado, descubriendo por primera vez destellos de bienestar a la edad de 72 años e incluso temiéndolos y deseando escapar de ellos a su mundo sin luz ni futuro, despierta ternura y compasión. Quizá los otros aún puedan salvarse de sí mismos, para él sólo queda una salida: la muerte.
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Creo que no era para mí. Pese a que hacia el final va teniendo más nervio, se me ha hecho un poco cuesta arriba llegar. Entiendo que escribe fantásticamente y que nutre el texto de reflexiones, referencias y frases eruditas; pero no es lo que estaba buscando. Me ha resultado un tanto aburrido y vago. Me da pena haber entrado en Pombo con este libro. No está mal… pero no me ha dicho nada. Ni mu, vaya.
Llevo una racha de malos libros que no es normal. Además de ser simple la trama y absurda la mayor de las veces no he entendido (otra vez) el boom del autor y del libro. En fin, hoy no se lee que toca ver la lotería ✨
Es un libro que cuando lo leí pasé por distintas etapas: ilusión, aburrimiento, misterio, etc. ninguna por tiempo excesivo. Te hace bailar con la psicología de los personajes, me provocó giros imprevisibles y un final inesperado. La gente no es tan mala, ¿o sí?
Me pareció un jodidísimo coñazo. Me mola todo lo que tenga una discusión teológica, pero este libro no me dio ninguna razón para seguir leyéndolo más allá de la página 30. Seguramente lo revisite en otro momento y me encante, pero por ahora se va a quedar ahí.
A sus 86 años y después del éxito de “Santander 1936”, creo yo que mi paisano vuelve a su escritura de siempre, lúcida, inteligente, con sus incisos de filosofía, en este caso entre la teología y Sartre. Una suerte reencontrarle después de su flamante Premio Cervantes 2024.
Interesante y original en las reflexiones interiores de los cuatro personajes. Cómo un desencuentro antiguo condiciona todo el desenlace. Lo que no me ha gustado es el final (un tanto rocambolesco)
lo mejor de Pombo siempre en sus novelas, pero no el mejor Pombooo (esta muy bien el libro y las reflexiones que tiene chefff kiss, pero la trama flojea un poco)