El ingeniero español Leonardo Torres Quevedo se halla en Londres en pos del mítico Ajedrecista de Maelzel, un autómata mecánico que se creía perdido desde hacía décadas. En compañía de Raimundo Aguirre, monstruoso ladrón y asesino, quién dice tener la pista del perdido autómata, inicia la búsqueda a través de los bajos fondos londinenses y alta sociedad victoriana.
Pero la búsqueda es interrumpida por el horror: las calles del deprimido barrio de Whitechapel amanecen con cadáveres de prostitutas abiertas sobre el adoquinado. Y Torres Quevedo y su compañero Aguirre se ven implicados en la caza de un asesino que firma sus crímenes como Jack el Destripador, entrando en una compleja partida de ajedrez con oscuras conspiraciones, el misterio y la muerte como piezas principales.
«Una rica ambientación que nos hace ver, oler y tocar el Londres de finales del XIX. Personajes inolvidables que horrorizan y conmueven. Una trama repleta de giros imprevisibles, pero siempre coherentes. Todo ello servido por la pluma iconoclasta de Daniel Mares, el talento más desatado de la fantasía española." Javier Negrete, autor de “La espada de fuego” y “Salamina”.
"Un largo paseo por el horror y la muerte, a la sombra del asesino más famoso de la historia y de la mano de uno de los autores más originales que produjo el círculo literario de la extinta TerMa madrileña." León Arsenal, autor de “El Hombre de la Plata” y “El Espejo de Salomón”
Hay una corriente de nuevas novelas victorianas muy interesante en nuestro país, y la novela de Daniel Mares fue la primera de este género que aterrizó en mis manos. A través de las palabras de un misterioso anciano conoceremos la historia de Torres de Quevedo, un inventor español que viaja a Londres para revivir un extraño encuentro con un desagradable personaje poseedor de una maravilla tecnológica: el Ajedrecista de Kempelen, un autómata capaz de ganar una partida de ajedrez. Todo esto aderezado con los crímenes de Whitechapel, perpetrados por Jack el Destripador, que suceden durante el transcurso del libro y en los que el protagonista se verá involucrado.
(...) Para finalizar, pese a todos los detalles que ensucian la novela, tales como la lentitud, exceso de información y ese final en el que cambia completamente el género de la novela, debo decir que me ha parecido muy buena, muy completa, lo cual denota el cuidado que le ha puesto el autor en las descripciones y muy adictiva, ya que te mantiene siempre en vilo. Que no te eche para atrás el volumen del libro, si no más bien todo lo contrario. (...) Lee la reseña completa en: http://www.sweetparanoia.com/2012/10/...
Lo más interesante del libro es todo lo referente a Jack el destripador, está muy bien documentado y me ha gustado mucho. En lo que respecta a la trama principal del libro es bastante prescindible y no aporta absolutamente nada. Lo peor, además de esto, es la identidad de Jack. No me gustó cómo se va revelando toda la trama, es demasiado poco creíble. Sinceramente habría preferido una teoría conspiranoica, realmente habría sido más interesante. Por último, comentar que a pesar de lo largo del libro deja muchas incógnitas sin resolver además de muertes gratuitas y no justificadas bastante importantes y de las que el autor poco revela. En definitiva, un libro al que le sobran muchas páginas y que se queda muy corto en las explicaciones de sus incógnitas. Tan largo llega a ser que cuando se llega al final ni siquiera se echan de menos las páginas que faltarían para redondear el libro porque solo piensas en acabarlo de una vez.
Magnífica historia en la que se mezclan hechos reales bien documentados con ciencia ficción de forma magistral, en ese aspecto me ha recordado en algo a "En costas Extrañas" de Tim Powers (solo en lo de combinar hechos históricos con ficción, porque ni el argumento ni la temática tienen nada que ver). El argumento va mejorando conforme avanza, cuando parece que no puede ser mejor hay algún giro que hace la historia aún más interesante. Por otro lado los numerosos giros argumentales, aun siendo muchos de ellos inesperados, son completamente creíbles. En fin, una gran novela, a mí por lo menos me ha enganchado desde el principio hasta el final.
Circo de los horrores en pleno Londres, asesinatos, un ajedrecista, autómatas...todo ello forma Los horrores del Escalpelo una novela, oscura, siniestra, macabra, intrigante y sobre todo, a mi parecer, una novela no apta para estómagos sensibles.
¿Negativo? ritmo lento, información de más. El final tampoco ha terminado de llenarme. Las cien últimas páginas ganan ritmo sin embargo en la recta final y sobre todo el descenlace me he quedado con la sensación de que no iba con la historia. Esperaba otra cosa.