Dios nos ha dado un regalo especial en el mensaje de despedida del apóstol Pablo a los ancianos de Éfeso (Hechos 20:17-38). Realmente no hay nada más en el Nuevo Testamento comparable a este pasaje. En “Hechos 20: Lobos rapaces vienen, protejan el rebaño”, Alexander Strauch proporciona una profunda y práctica exposición de esta extraordinaria porción de las Escrituras. Las instrucciones y súplicas de Pablo a los ancianos de Éfeso son igualmente necesarias hoy como eran aquel día en las costas de Mileto.