Esta delicada fábula floral narra la historia de Dafne, una margarita que nace una mañana de marzo en un prado rodeado de robles, pinos y matas de enebro. El claro del bosque es la descripción luminosa y leve de una pequeña polis vegetal, un microcosmos en el que Dafne descubre las leyes implacables de la existencia. No hay, sin embargo, rastro de desesperación en este relato donde «hasta la muerte puede tener la gracia de un juego sin perder nada de su horror ni de su tragedia», como dice E. Pellegrini en el posfacio. Con la tersa y despiadada transparencia que la caracteriza, la escritura de Marisa Madieri deja que la vida se abra paso entre estas páginas.
Marisa Madieri è stata una scrittrice italiana. In origine il cognome della famiglia paterna (fiumana, ma di origini evidentemente ungheresi) era Madjarić, poi fu modificato in Madierich e successivamente in Madieri. La famiglia, esule dall'Istria, riparò a Trieste nel 1949, e per molti mesi visse in condizioni precarie, insieme a tanti altri profughi italiani, nel campo profughi del Silos presso la stazione ferroviaria. Di questo periodo avrebbe scritto poi nel suo primo libro Verde acqua (Einaudi 1987) in cui narra dell'esodo di Fiume, dell'identità di questa città e di altri fatti legati alla sua infanzia e adolescenza, in cui la memoria è anche ricerca delle proprie radici.
Studiò lingue e letterature straniere a Firenze, dove conobbe lo scrittore Claudio Magris, che sposò e da cui ebbe due figli, Francesco e Paolo. Conseguì anche il brevetto di pilota aereo e svolse opera di volontariato per il "Centro di aiuto alla vita". Scrisse poi altri racconti fra cui uno in forma di parabola, La radura (Einaudi 1992). È considerata una delle voci narranti più limpide delle vicende dell'esodo istriano.
Dicen de “El claro del bosque” que es una autobiografía metafórica, una confesión velada protagonizada por una margarita llamada Dafne.
Pero yo me pregunto qué vida no se siente reflejada en esta delicada y transparente fábula en la que todo cabe. Según las conversaciones que mantiene Dafne con otros seres vivos las margaritas viven un mes, pero en ese condensado espacio de tiempo toda vida se abre paso.
En el centenar de páginas que componen esta fábula floral Dafne conocerá las inescrutables y azarosas amenazas que ensombrecen nuestra existencia, aprenderá que todo nace y muere y que el paso de la vida es una crueldad biológica, será testigo de la eterna lucha entre todos los seres vivos y víctima de las primeras pasiones.
Marisa Madieri es una escritora de microcosmos y en ese hundirse logra que todo lo que escribe trascienda. Desde lo subatómico hasta lo cósmico.
Y es que en este bellísimo relato, la vida de las flores, a nuestro parecer tan breve e insignificante, cobra un valor incalculable. ¿Y no logra lo mismo con nuestras vidas la mejor literatura?
P.D: No quisiera cerrar la reseña sin aplaudir el maravilloso trabajo de Valeria Bergalli y Ernestina Pellegrini. La primera al traducir la obra, la segunda al escribir el posfacio.
Nabokov describió sus escritos como "hechos de corcho", y Einudi como "relatos escritos a lápiz". Encontré estas definiciones como las más acertadas pero la realidad es que no hay manera de replicar o intentar conceptualizar la prosa de Madieri.
Me conmovió enormemente esta fábula floral, la biografía de una margarita detallando las maravillas de la simpleza. Lo enorme que puede ser la alegría en elementos pequeños.
Una hermosísima fábula sobre la confrontación entre la inocencia y el mundo natural que logró conmoverme casi hasta las lágrimas con su último capítulo.