Una belleza casi independiente, en cuanto que es diferente a las demás, o solo a las malas y parecida a las realmente buenas, pero además poquísimo autobiográfica, con las claves precisas para ser armoniosa de principio a fin. En caso de que se lo pregunten: -Sí, se gana algo conociendo a la autora para luego leer la novela -. La tuve esperando unos 7 años en mi biblioteca, pero la leí en el transcurso de un día libre. Un día bien empeñado.
Muchos sentimientos como siempre me pasa con las historias de María José. Definitivamente creo que yo no encontré este libro, sino que él me encontró a mí. Era justo lo que necesitaba leer. Las separaciones, de toda índole, son difíciles y viviendo una en estos momentos se sintió como que mi corazón no estaba solo en esto (aunque suene cursi). Tal como Ágata uno ya no siente ganas de las mismas cosas, pero entonces aparecen otras nuevas. Gente de siempre y gente diferente, acompaña. También, coincidimos con A, en la situación laboral o la falta de esta y en esas ganas de encontrar algo que motive en este ámbito. Me gustó mucho como se fue desarrollando la historia. Y el final me pareció bonito y acorde. En resumen, me hizo sentir mucho y lo más probable es que las palabras no le hagan juicio.
sin ser la mejor novela que haya leído me produjo una sensación general bien positiva. me gustó la mirada femenina cínica de la protagonista. también me pareció destacable la vocación anti complaciente de su estructura y su "trama". recomendable.