Luego de vivir toda su vida construyendo una ciudad imaginaria, una maestra de escuela escribe un diario para explicar las razones por las cuales ha decidido destruirla.
Escritor colombiano (Bogotá, 1979). "Escritor en el aire" (2011), "Razones para destruir una ciudad" (2012), "Cuaderno de entomología" (2017), "Juego de memoria" (2017), "Diario de a bordo de un niño astronauta" (2019).
Le doy un 4.5 . Esta breve novela es de simplicidad engañosa. Llena de un lenguaje poético, es la historia de los sueños y pérdidas que todos tenemos, en un ambiente donde no parece suceder nada. Natalia, un personaje cercano a la locura, resulta entrañable. Bello libro.
Esta novela narra la deriva hacia la locura de una solitaria profesora de escuela que idealiza la infancia perdida y está dispuesta a recuperarla construyendo una ciudad de fantasía. La historia de la ciudad (una Venecia mítica poblada de niños que no envejecen) se va trenzando con la de la protagonista, que acumula soledades, silencios y amores no correspondidos. Un final inesperado, incluso forzado, conecta con "la historia disparatada" de la violencia en Colombia. Me costó confiar en la verosimilitud de los personajes mientras las niñas "venden limonada en vacaciones" y su padre va a la tienda porque le parece "pintoresca". Pero lo que más me costó fue conectarme con el uso de la segunda persona, un recurso que se estira hasta la fátiga y que lleva, por ejemplo, al exceso de sintaxis cacofónicas ("habías sentido, habías pensado, habías visto..."). Entiendo que usar la segunda persona es un riesgo y que asumirlo fue valiente, pero no sé si al final valía la pena.
A pesar de que para mí ya constituye un mérito ser publicado y, además, ganar un premio, esta novela fue pesadísima de leer. La terminé solo por la esperanza de que mejorara, pero esto nunca pasó. Aunque los jurados la resaltaron por su “capacidad inventiva, poética e inteligencia” y por “su prosa bella, de ritmo cuidado y estructura pensada”, estas apreciaciones para mí parecen ser más de esa jerga empresarial tórrida, obscura y nebulosa que esconde imprecisiones y falsedades.
A esta novela no le encontré la poética, y ciertamente la prosa no me pareció bella sino que en el reproche que es toda la novela, terminé mareado por el cambio de voces esquizofrénico que. Hay que notar, y quizás esto es una cualidad por el hecho de haberse logrado, que la intención de la novela como monólogo reprochante se logra. Pero en la trama hay lugares comunes de la literatura, y un personaje principal que por momentos me parecía bella, pero la mayoría del tiempo desesperante.
Tengo que decir que al final lo que más me gustó fue un personaje, un viejo tierno llamado Alcides. En la novela él es un viejo reflexivo y taciturno que ofrece la compañía y el sociego que necesita Natalia, y el que necesité yo en el torbellino nubloso que fue para mí la lectura. Es verdad que la historia tiene una inventiva interesante, pero no llega más que a eso
Mi calificación estaría entre 3.5 y 4. Es una narración corta, dividida en 15 capítulos cortos donde el autor trata de narrar cronológicamente apartes de la vida de Natalia, la protagonista, quien físicamente vive en un pueblo cerca a Bogotá, pero mentalmente se traslada desde su ciudad imaginaria a la realidad y a veces a un mundo surrealista quién sabe en qué lugar dentro de su mente. Esta cargada de sentimientos infantiles y evocaciones a la niñez, época que la protagonista, desearía fuera eterna. Así como los niños, Natalia no se percata del mundo de los adultos que la rodean, quizá hasta que ya sea tarde para ellos. El autor logra una protagonista muy bien delineada prestando atención a los detalles que revela a través del diálogo que se presenta entre Natalia y su conciencia realista en un diario, acercándola así al máximo al lector. Buena novela, me hizo pasar un rato diferente y emocionarme por los sucesos que le ocurrían a la protagonista.
Es una novela corta, bien escrita, contada con fluidez, con dos grandes puntos a favor: la narración desde la voz de la conciencia de una mujer sospechosamente cercana a la demencia, y el desarrollo en paralelo de una ciudad fantástica junto a la vida sin emociones de la protagonista. Una historia bien lograda.