coleccion GRAN ANGULAR numero 124, primera edicion febrero 2002, 137 paginas, tapa blanda, en buen estado. Libro procedente de biblioteca, con los signos caracteristicos, texto en catalan
Son of a dressmaker and an erudite office worker, he was born in Barcelona on the 27th August 1968. After spending eight years in a religious school in la Ribera –just beside the Palau de la Música¡–, he attended high school at the extinguished academy ALMI and IES MONTSERRAT.
Despite his bad grades, he was accepted into the UAB’s faculty of Journalism, which he quited after four months. That the same year, he started to work as a waiter at LES PUCES DEL BARRI GÒTIC, a bar in the Gothic Quarter where he learned to play the piano.
In the following year, returning to the Universidad Autónoma de Barcelona, he started studying English Literature, which he combined with precarious language teacher jobs. After five years of being a sloth, he stalled at the third year of his studies and quited them again.
Having been attacked by travel fever since the age of seventeen, he decided to leave everything behind to travel the world. A bunch of chance encounters led him to live in Croatia and Slovenia during the armed conflicts.
Upon returning to Barcelona, he resumed his academic life as a student of German Literature at the Universidad de Barcelona. Once he completed his studies, he attended a master for publishers. His entrance in the editorial world had started a year earlier, as translator of German and English spirituality and alternative therapy books.
Before finishing his postgraduate studies, he got hired as editor for a publishing house specializing in self-help books. There, he directed several collections, and he also wrote many different types of work under a pseudonym.
After leaving the publishing house, he promised to himself never to work again for a company. He decided to try his luck with a first youth novel. Since then, he basically dedicates himself to writing, and works as literary adviser for different publishing houses and an agency.
LOVE IN LOWERCASE (AMOR EN MINUSCULA), already translated into twenty languages, is getting published in 2016 by Penguin USA. This book also has its second part, eight years later, in the WABI-SABI novel, about the beauty of imperfection, which will be published in UK this may.
Nowadays he combines literature and journalism, and on a monthly basis publishes articles in EL PAÍS SEMANAL, and in the magazines CUERPOMENTE and MENTESANA. Beyond this, he also works for the radio and offers literary Sherpa services and art therapies.
Hijo de una modista y de un administrativo ilustrado, nació en Barcelona el 27 de agosto de 1968. Tras pasar ocho años en una escuela de curas de la Ribera —al lado del Palau de la Música—, cursó bachillerato entre la desaparecida academia ALMI y el IES MONTSERRAT.
Pese a su mal expediente consiguió ingresar en la facultad de Periodismo de la UAB, carrera que abandonó al cabo de cuatro meses. Aquel mismo año entró a trabajar de camarero en LES PUCES DEL BARRI GÒTIC, una taberna de la calle Montsió donde aprendió a tocar el piano.
Nuevamente en la Autónoma, el año siguiente inició la carrera de Filología Inglesa, que combinaría con empleos precarios de profesor de idiomas. Tras cinco años de desidia, se estancó en tercer curso de carrera y volvió a abandonar los estudios.
Atacado desde los 17 años por la fiebre del viajero, decidió dejarlo todo para vagar por el mundo. Un cúmulo de casualidades le llevaron a vivir en Croacia y Eslovenia durante los conflictos bélicos, peripecia que relataría muchos años después en su libro CAFÈ BALCÀNIC.
De regreso a Barcelona, se reenganchó a la vida académica como estudiante de Filología Alemana en la Central. Completada la carrera, hizo un postgrado para editores. Su ingreso en el mundo editorial había empezado ya un año antes, como traductor de alemán e inglés de libros de espiritualidad y terapias alternativas.
Inmediatamente después fue contratado como editor por un sello de autoayuda. Allí dirigió diversa
Un Haiku para Alicia nos cuenta la historia de Genís Gracia, un joven de 17 años que está pasando por un mal momento en su vida: situación sentimental nula, problemas familiares, los estudios no le van nada bien... Pero Genís encuentra un escape a todo eso gracias a Alicia, una chica que ha fundado una sociedad secreta que le ayuda a seguir adelante.
"En la vida diaria ya acumulamos suficiente negatividad. La Asociación de las Buenas Sensaciones debe ser nuestra reserva de aire puro, un lugar para llenarnos de belleza y volver al mundo con los ojos limpios."
Cuando me llegó el libro, no tenía mucha idea de qué me iba a encontrar, y el resultado ha sido francamente grato.
Un libro que te engancha, fácil de leer, de capítulos cortitos que no agobian para nada y que es, cuanto poco, y en mi humilde opinión, muy inteligente. Digo inteligente porque, Francesc Miralles es un genio a la hora de escribir y en esta historia te introduce en la poseía haiku de una manera ejemplar y que atrae mucho al lector.
Podemos ver la evolución que se produce en el personaje de Genís desde el inicio del libro hasta el final de una manera que me ha encantado, y tratando temas muy transcendentales de la vida: el amor, la muerte, la existencia, drogas... ¡No te lo puedes perder!
Llibre força entretingut, filosòfic i que fa pensar especialment al públic més adolescent. Jo l'he fet llegir a 3r ESO i m'ha semblat un llibre amb capítols curts que fan generar ganes de llegir més. Permet parlar sobre les relacions pares/fills així com els primers amors i les relacions amb l'escola. L'Alícia és un personatge força ben detallat.
"TIGRE CAUTIVO ¿Los latigazos te han rayado la piel, o es tal vez la sombra de la reja?"
Opinión:
Un haiku para Alicia me había llamado la atención desde su publicación por su título y sinopsis y tuve la suerte de que me lo regalaran en la Blogger Lit Con 2012.
Los haikus son poemas breves de tres versos tradicionales de Japón. Y es que la poesía tiene mucha importancia en esta breve, pero intensa obra de Francesc Miralles en la que nos narra la historia de Genís Gracia, un adolescente que está pasando por un mal momento en su vida (el abandono de su padre, la depresión de su madre, el fracaso escolar y en general). Una serie de acontecimientos, entre los que se destaca su encuentro con Alicia, le llevarán a replantearse su vida.
"Un viejo estanque. Se zambulle una rana: ruido del agua."
Francesc Miralles A pesar de su sencillez y brevedad, Un haiku para Alicia consiguió engancharme desde el principio y hacer que me plantease diversas cuestiones. Es una sensación que describe perfectamente la cita de El Templo de las Mil Puertas incluída en la contraportada del libro: "Un haiku para Alicia nos invita a mirar la vida desde otra perspectiva, mientras nos atrapa con su narración ágil e inteligente." Y así es, ya que unido al desarrollo emocional del protagonista se vislumbran numerosas cuestiones intrínsecas al ser humano como las preguntas acerca de la muerte, la vejez, la libertad, el arte y en concreto la poesía, que son planteadas de manera general para dejar que el razonamiento del lector las siga desarrollando.
En definitiva, Un haiku para Alicia es un libro sencillo, pero con una gran carga poética y, en mi opinión, la perfecta lectura en colegios e institutos para adolescentes de entre 16 y 18 años.
Me lo encontré de casualidad en la librería y aunque no está lo que se dice muy barato, decidí probar suerte con él, porque es de Francesc Miralles y a mí el autor me fascina su modo de escribir y sus siempre filosóficos comentarios.
Un Haiku para Alicia me ha gustado por la sencillez con la que se nos narra la historia de unos chicos en una edad complicada, que buscan encontrar su lugar en el mundo y hallar sentido a su existencia. La incorporación de haikus es fenomenal porque a mí siempre me habían parecido tan sinsentido pero ahora con esta novela, he comprendido el verdadero significado de un haiku y no puedo más que decir que son hermosos, complicados y que guardan una tremenda carga emocional y espiritual en su aparente simpleza...
Lo que no me ha terminado de gustar es que Alicia, que sentí era un personaje importante en la historia, queda demasiado desdibujada y al final no tenemos nada de ella. Por otro lado, la depresión de la mamá de Genís se resolvió sin que me diera cuenta y quizá no era ese el fin real del libro pero me habría gustado ver cómo se fue dando esa mejora. Sé que el libro está dirigido a un público español, a fin de cuentas fue publicado por primera vez en catalán, pero algunas palabras me cortaban la idea de lo que hablaba el autor y ni qué decir de la falta de descripciones de los sitios donde estaba Genís. No tengo duda de que muchos españoles conocen Barcelona, pero hay otros tantos que no y hay muchos otros que hemos leído el libro que no hemos pisado suelo español jamás y eso, desde mi punto de vista, me dejaba vacía en cuanto al ambiente donde se va desarrollando la historia.
En fin, es una novela bonita, llena de significados, pero le faltó un algo para terminar de enamorarme...
Me llamó mucho la atención de este libro por el simple titulo: Un haiku para Alicia. Conocía el nombre de Francesc Miralles por sus últimas novelas publicadas y que, hasta ahora, no había tenido oportunidad de leerlas hasta que me encontré con esta. Reconozco que para ser la primera novela que leo de él no estuvo nada mal. Es más, me gusto y es sorprendente ver lo que uno logra al escribir una historia de menos de 200 páginas y, para variar, todos los capitulos sean tan cortos. La novela es filosófica en parte pero por lo menos no de mala manera como para que quieras romperte la cabeza. Hay una variedad de personajes de las cuales lamento que unos pocos hayan quedado en el camino y sin darse conocer un poco más de ellos. Pero bueno, a veces eso pasa cuando lees un libro desde el punto de vista de un personaje, el de este caso es de un chico como Genís. Y el final... Bueno, no me quejo. Es adecuado el final que dio el autor al conocluir la novela pero al mismo tiempo no dejo de pensar que no me convence del todo. Pero bueno, así es como concluyó todo y así se queda. Asi que en conclusión general: empecé con el pie derecho con Miralles.
Como ya le dije al propio Francesc, sus obras son distintas a las de cualquier otro autor, te llegan tan adentro que te dejan reflexionando sobre tu propia vida y tus experiencias durante días, al menos a mí así me sucede.
La teoría sobre que somos ángeles que han perdido las alas de Platon me recordó a Oblivion y me hizo sentir una nostalgia enorme... :')
En fin, un libro que se lee super super deprisa, de hecho en una día con mucha facilidad puedes devorarlo (yo he tardado porque lo empecé en medio de los examenes pero en un par de horitas he terminado la mitad del libro ahora que ya estoy de vacaciones).
Voy a subir tan pronto como pueda la reseña al blog así que estad atentos: diaryofthewitch.blogspot.com
Este libro es un "Miralles" 100% De capítulos cortos y repleto de frases que te llegan al corazón y te hacen pensar varios instantes. Detrás de una trama aparentemente sencilla se esconden grandes reflexiones sobre la vida y sobre cómo malgastamos el tiempo preocupándonos sobre el futuro y el pasado sin saber vivir el presente.
Recomendable como todo lo que escribe Francesc Miralles.
3.5 en realidad. La verdad es que tengo sentimientos encontrados con este libro. Por un lado, adoro el estilo del autor, y sé que en eso tiene gran importancia su sencillez. Sin embargo, por otro he echado de menos algo más de desarrollo en todos los sentidos.
Al principio me costó compenetrarme con la lectura, pero cuando nos hablan de la condición de Genís y uno se da cuenta (según yo) que cada capítulo está escrito estilo haiku, todo comienza a tener sentido. Además es uno de esos libros que va mejorando conforme se avanza.
A su favor he de decir que tiene frases y reflexiones muy bonitas, también trata temas serios como la migración ilegal y cuando uno de los padres abandona a la familia.
Los peros que le pongo son estos: .
Y que es un libro MUY eurocentrista, ya que varios protagonistas se expresan con tonos bastante condescendientes sobre el "tercer mundo"; ¿Qué es para ellos el tercer mundo? Quien sabe, pero pobrecitos los que tienen que vivir ahí.
Un Haiku para Alicia nos relata la historia de Genís, un adolescente en cuya vida están sucediendo todas esas típicas cosas que le suceden a un típico adolescente: sus padres se separaron, la escuela no va como esperaba, y se ve obligado a conseguir un trabajo si quiere tener algo dinero para gastar por su cuenta. Luego de un extraño encuentro con un chico al que apenas conoce, Genís es invitado a formar parte de una especie de sociedad secreta, liderada por una misteriosa chica llamada Alicia. Sus charlas y reflexiones ayudarán a Genís a transitar por esta etapa llena de cambios y nuevas aventuras...
Muy recomendable. Es una novela con un estilo fresco, sencillo, que pasa por muchos temas con un aire verdaderamente joven. En ciertos momentos me recordaba a la voz narrativa de El guardián en el centeno. Es difícil hablar de sus virtudes sin destripar la historia, así que no voy a decir nada, sencillamente la recomiendo.
Las primeras 100 páginas me parecieron normales, no muy interesantes sin embargo luego,cuando empiezan las reuniones en grupo me agradan mucho los temas de los cuales se habla, la manera de pensar de Alicia me fascina, ella hizo la historia más interesante.
Només em va agradar una part; la part en la que l'Alícia agafa el mite del carruatge de Plató i li dona la seva pròpia interpretació. Tota la resta del llibre és una merda i el prota és un xarrupaescrots.
Un libro hermoso, fácil de leer. Me gusta que sea sencillo y poco pretencioso. Tiene una magia poética que no sé poner en palabras. Es como algo frágil y bello que querés que siga sucediendo, pero que cuando llega a su fin, estás conforme porque pasó y fuiste parte.
Ginés Gracia es un joven de 17 años que está pasando por uno de esos baches de la vida, a los que todos nos enfrentamos tarde o temprano, y su vida da un giro de 180º cuando conoce a enigmática Alicia, una joven que le enseña a vivir el momento, a no preocuparse por el pasado ni el futuro y disfrutar de la vida, del aquí y el ahora.
¿Qué os puedo decir de este libro? me ha dejado helada, la verdad. No había leído nada de este autor, a pesar de que es bastante conocido y hay reseñas de sus obras por doquier en la bloggosfera, y la verdad es que no me arrepiento en absoluto, después de leerme este libro pienso leerme otras obras de Miralles, eso os lo aseguro.
Pero empecemos con el asunto,Un Haiku para Alicia es una obra de argumento sencillo, bastante predecible, pero escrita magistralmente. Lleno de sentimientos y reflexiones, escrito en primera persona desde la voz de Ginés, con un tono informal y ácido, con un ritmo ágil, complementado con la brevedad de los capítulos, y todo ello aderezado con un tour por los principales barrios de Barcelona, este libro me ha atrapado desde la primera página y se me ha escurrido el tiempo entre los dedos sin apenas percatarme. Para ser una historia sencilla me han sorprendido algunas reflexiones muy profundas sobre aspectos de nuestra sociedad como el amor, el dinero, las drogas, ... que me he topado entre sus hojas. Nunca 190 sencillas páginas me habían hecho pensar sobre tantos temas distintos y estar tan absolutamente de acuerdo con todos.
En cuanto a los personajes no son muchos, y puede que no estén todos muy bien perfilados, pero no es necesario ni importante, puesto que los principales sí lo están. El protagonista indiscutible es Ginés, un adolescente cuyo mundo se está desmoronando y se siente frustrado y atrapado. Siente que no puede escapar a la, cada vez peor, situación familiar que está influyendo en su forma de comportarse, en sus estudios y en su vida social. Vemos que lo que les ocurre a él y a su madre, Nora, (que está girando en un pozo de dolor y autocompasión), le hace madurar antes que los demás chicos de su edad, y esto hace que se plantee muchos porqués de muchas costumbres y actividades que hasta ahora parecían esenciales y normales en su vida. El profesor Haiku es genial, me recuerda a un par de profesores que tuve que estaban emperrados en hacernos abrir los ojos al mundo en vez de estar chapando cosas inútiles. Me ha resultado muy entrañable y simpático. Alicia, la misteriosa chica que irrumpe en la vida de Ginés por casualidad y sirve como bálsamo para todas sus heridas y frustraciones. Para complementar este elenco tenemos a Raquel, Lucien y Quart, que conforman junto con Alicia "La asociación de las buenas sensaciones", a Pablo y Joan-Marc, los amigos de clase de Ginés, y a Miquel, el padre del mismo.
Resumiendo navegantes, Un Haiku para Alicia ha sido una sorpresa refrescante y profundamente reflexiva a la par que sencilla y bonita que se ha hecho un huequecito en mi estantería de pequeños tesoros. Se lee en un suspiro y Francesc tiene un don por el que te mantiene pegado a las hojas como la miel a las moscas. Totalmente recomendable independientemente de la edad.
Un haiku para Alicia es de esas novelas que ya solo con oír el título captan tu atención, si van además unidas a un autor que conocer y ya has probado antes (como es mi caso) o que por lo menos es reconocido. Hacía mucho que ni cataba nada de Francesc Miralles (escrito por él mismo y no acompañado, como podría decirse). Me atrevería a apostar que no leía nada solo del autor desde Oblivion. El caso es que en la biblioteca me hice con dos novelas suyas a las que tenía ganas y de las que iba atrasando cada vez más la lectura. Una, Un haiku para Alicia y la otra, Los mundos perdidos de Alison Blix, del que tendréis pronto la reseña. Antes de que me siga yendo por las ramas vamos al meollo de la cuestión. Genís Gracia es un chico de diecisiete años al que ni en la familia ni en la escuela le va demasiado bien. Sus padres viven separados tras el abandono de la figura paterna y su madre vive sumida en una depresión de la que veremos va librándose poco a poco a lo largo de la novela. Genís encima tiene que enfrentarse a las recuperaciones para poder aprobar el bachiller y buscar universidad y encontrar un trabajo con el que poder hacerse cargo de sus caprichos, pues el sueldo de una sola figura paterna no da para todo. Cuando Genís pierde toda esperanza se encuentra con un antiguo compañero que le intercepta a la salida del instituto y que, tras intercambios de e-mails, a falta de teléfono del protagonista, le invita al club de las Buenas sensaciones, precedido por Alicia, una chica extranjera y peculiar como pocas. Junto a ellos se le pasará el verano, pero también, aprenderá para su futuro. La novela de Un haiku para Alicia no es una novela al uso. Es una novela que esconde tras capas de una historia sencilla, algo más. Es un libro ágil, que se lee apenas de una sentada no solo por las pocas páginas, sino por esa forma tan característica del autor de no irse de las ramas, además de la brevedad de los capítulos de apenas tres o cuatro páginas, como mucho. Puedo decir que me ha gustado el libro, si, pero me esperaba mucho más de él. Me han faltado descripciones de los lugares, pues claro, yo apenas conozca Barcelona (he ido una vez, y como que no me quedé con todo. Con Las Ramblas y para de contar más bien). Me ha faltado también profundizar un poco más en el personaje tan curioso que es Alicia. Aun así lo he disfrutado, por muchas cosas además, no solo por la rapidez con la que de devora. He aprendido con ella, he leído unos haikus preciosos, poemas que a mí ya por lo menos en su día me llamaron la atención. Os voy a dejar el de la novela porque me parece una maravilla a pesar de su sencillez.
"El viejo estanque. Salta una rana. El sonido del agua."
A la par que esto me ha encantado el personaje del profesor de literatura de Genís. Me ha parecido un hombre encantador y me ha corroído algo la envidia, pues a la par que les enseña la materia les ayuda a que esta se les haga más llevadera y amena, algo que por desgracia, pocos profesores hacen. Sé que este personaje no destaca demasiado, pues toda la obra gira en torno a Genís Gracia, pero oye, le he cogido cariño al señor rodeado de haikus. En resumen, una novela de un gran autor, rápida, amena, con aprendizaje, pero que me ha sabido poco y de la que me hubiera gustado catar unas pocas páginas más.
Gracias a un sorteo, gané el libro Un haiku para Alicia en catalán. Al ser de Barcelona - no sé si todos sabéis que lo soy- podía leerlo en catalán y disfrutar igual que cuando leo en castellano, así que me hice con él, y en menos de un día, en concreto en una tarde ya lo tenía acabado. Al ser una lectura muy ágil, amena y realmente fácil, en ningún momento se me hizo pesado y menos aburrido ya que es una buena lectura. Un haiku para Alicia es una novela que aunque no llega a generar adición -por lo menos en mi caso-, es una lectura que está genial para pasar el tiempo, para una tarde en la que no tenemos nada que hacer o simplemente para disfrutar de una lectura fresca y amena. Sin embargo eso no quiere decir que no sea un buen libro, que lo es y mucho.
Nos abarcamos ante una novela con poca acción y muy breve, en el que el amor y la amistad son el elemento principal. Con tan pocas páginas -alrededor 200 páginas- ha podido transmitir muchos sentimientos y emociones buenos que otros no han podido crear, además también nos da muchas lecciones de la vida que logran calar muy hondo en el lector. Al ser muy breve, no le podemos sacar mucho partido, sin embargo es una novela que guarda magia en su interior.
A medida que nos adentramos en la novela, vemos realmente como es la vida de Genís. Una existencia que ningún adolescente quisiera tener, pues además de que tiene que asistir en las clases -sabiendo que no le van nada bien- tiene que trabajar para mantener a su madre, ya que su padre los dejó. Muchas veces la vida misma nos puede sorprender y en el caso de Genís era al unirse en "Buenas sensaciones", un grupo que más tarde será mucho mejor de lo que él pensaba y en el que conocerá cosas que harán cambiar su forma de vivir y pensar.
Aparte de Genís, me gustaría destacar a dos personas que son las causas por las que Genís cambia radicalmente, siempre por un camino mejor; El profesor Haiku, que enseña a Genís - y a los demás alumnos de la clase- unos poemas llamados haikus que son poemas que entre tres y cinco líneas consta de explicar el asombro y el arrobo que produce la naturaleza en el poeta.
Genís es un chico de diecisiete años que se encuentra perdido en cuanto a su vida se refiere. Un buen día su forma de ver lo que le rodea cambia gracias a un amigo que le presenta a una misteriosa chica llamada Alicia y a los miembros de "Buenas sensaciones".
Gracias al ágil estilo de escritura de Francesc Miralles podemos disfrutar de una historia que pese a estar contenida en un número pequeño de páginas, es amena, entretenida y presenta una trama y estructura con sentido.
El autor ha sabido construir una historia emotiva y sencilla que podría ocurrir sin ningún problema en nuestro entorno y todo sería perfecto desde un punto crítico de no haberme sentido un poco desconectada de los personajes principales.
Entiendo que sentarse a escribir una historia es un proceso bastante difícil y mucho más aún si es corta ya que es esencial saber introducir todo en el momento exacto y mostrar unos personajes que conecten con el lector al que vaya a parar el libro pero desde mi punto de vista me gustaría haber conocido un poco más a Alicia ya que es un punto clave en el libro.
Por otro lado también te encuentras con los haikus, poemas breves procedentes de Japón y que protagonizan alguno de los momentos de más emoción del libro.
En resumen, Un haiku para Alicia es una bonita historia, con pocos personajes y bastante entretenida que hace que pienses un poco más en tu día a día para que valores lo que te rodea. Pese a ser un género que no me llama lo suficiente, he pasado un buen rato leyendo el libro y me encantaría haber disfrutado más de él pero la falta de acción y la desconexión con los personajes ha hecho que eso no fuese posible.
Genís es un chaval de 17 años que sin comerlo ni beberlo se encuentra dentro del grupo de 'Buenas Sensaciones' donde conoce a Alicia, una joven extranjera muy misteriosa de la que tarda poco en enamorarse. Alicia es, a vista de Genís, la chica perfecta. Pero tampoco es que él haga mucho para conquistarla. La cosa en casa de los Gracia tampoco está para tirar cohetes ya que el padre de Genís hace tiempo que se ha ido y su madre ha vuelto a fumar cayendo en una depresión constante. El dinero en su casa escasea y las notas van de mal en peor. El grupo que ha formado Alicia es lo único que le salva del aburrimiento y de su vida diaria, o mejor dicho, es Alicia quien le salva.
No puedo decir que el libro no me haya gustado, porque me ha encantado. Pero no le encuentro una trama solida. Simplemente pasamos a lo largo de un tramo de la vida de Genís. Que pasa sin pena ni gloria por la historia. Digamos que es un mero personaje más. Para mi, el personaje principal de este libro será Alicia. Es la que más vida ha dado a la historia. La poesía y los haikus están presentes en todo el libro, y es algo que me ha encantado. Los capítulos son cortos y ayudan muy bien a leerse la historia en una tarde.
Para mi, ha sido una historia perfecta, aunque le faltaban algunas cosas que podrían haberse solventado pero que no comentaré por posibles spoilers. Pero en si mismo, el libro ha sido perfecto con una fuerte carga emocional y lecciones de la vida que no se pueden desperdiciar.
"- ¿Qué pensarías de alguien que viene a una fiesta y no se quita el abrigo? - Que no tardará en marcharse."
Es la segunda vez que leo este libro y recuerdo que la primera vez no me gustó tanto. O tal vez no lo entendí. El caso es que es un libro perfecto para esta época veraniega y de exámenes: corto, fácil de leer; pero con significado.
Es un libro que te deja pensando un poco en las personas. En por qué hacemos lo que hacemos. En si sabemos por qué hacemos lo que hacemos, o simplemente vamos un poco a la deriva, siguiendo la corriente. Me ha gustado mucho porque te da que pensar en este sentido.
La protagonista - Alicia - también me ha gustado mucho aunque, obviamente tampoco estaba de acuerdo en todo lo que decía. Muchas veces sus opiniones me parecían un poco... idealistas e infantiles. Como si todo fuera blanco o negro. Pero la verdad es que me he quedado con muchas ganas de saber más de ella.
He de decir que sé quién es el autor, pero nunca tuve el placer de leer alguna de sus novelas. Desconocía Un haiku para Alicia sinceramente así que no sabía realmente que esperar, simplemente tenía en mi cabeza que era un libro muy atrayente por el título y la portada. En el colegio, en Lengua y Literatura, hablamos varias clases sobre los haikus. Para los que no saben, un haiku es una poesía japonesa (generalmente que habla de la naturaleza) que consta simplemente de tres versos. No tiene la necesidad de rimar, solamente es la apreciación de la persona. No les miento cuando les digo que me gustó mucho hablar de eso y me divertí mucho creando mis propios haikus. Así que estaba muy ansioso por comenzar esta novela.