"Me he querido mentir que no te amo", afirma Gilberto Owen. Nacido en El Rosario, Sinaloa, es uno de los poetas más destacados y singulares del panorama lírico mexicano. La presente selección recopila sus más celebres poemas que, junto con algunas cartas nos permiten asomarnos a la obra de un poeta difícil de asir, elusivo, cuya cifra se encuentra en cada uno de sus textos.
La mayor importancia de Gilberto Owen radica en su libro de 1948, Perseo vencido, el cual consta de tres partes: el "Madrigal por Medusa", que da título al volumen; la serie de poemas Simbad el varado, bitácora de febrero; y el breve Libro de Ruth. Se trata de un libro escrito durante aproximadamente 18 años, que ha sido interpretado de muy diversas maneras y que narra poéticamente la aventura espiritual de un enamorado, el intento de purificación y el fracaso del amor y de la poesía. Fuertemente influido por Rimbaud, T. S. Eliot y la estética vanguardista, Owen no dejó atrás su original formación barroca y construyó una obra llena de referencias cultas, cuyas claves esotéricas van siendo poco a poco descubiertas mientras se descubren también que muchos de los datos de su biografía son invenciones y metáforas del propio Gilberto Owen.
Me sorprende sobremanera que la editorial, el Fondo de Cultura Económica, habiendo editado las obras de Gilberto Owen, uno de los Contemporáneos más dignos de estudio desde el punto de vista lingüístico y personaje de múltiples y variadas contradicciones, haya decidido retirar de las estanterías dicho volumen para ¿popularizar?, ¿difundir?, ¿hacerle la corte al antologador?, al autor con esta nimia muestra de su trabajo poético y sus (impresentables) cartas.
No he abordado tanta poesía en mi vida, pero no me arrepiento ni un segundo de haberme echado un clavado en Gilberto Owen. Su estilo es desgarrador y ahogado. Abarca la penumbra, el dolor y desamor de una forma que nunca había visto antes (tampoco dice mucho, pues no conozco a tantos poetas) pero definitivamente hay que irlo conociendo poco a poco. Conforme iba leyendo más iba entendiendo su cosmogonía y sus cartas al final son una delicia. Tiempo bien invertido
Para ser un abrebocas a la obra del autor, me ha dejado un sin sabor. Solo rescato dos poemas que me parecieron buenos y el resto muy meh. ¿Y esas cartas, a ver? Nada puedo destacar de este libro. Dicen que el autor es un gran poeta, tocará leerlo más para redimirlo.
Una poesía muy bonita, con gran uso de figuras retóricas. El ritmo fue bueno también. Sin duda mi poema favorito fue el que le dio nombre al libro. Me gustó que esta edición añadiera las cartas del autor a su interés amoroso. Gracias a ello se puede tener un vistazo a la vida del autor y de las personas que lo rodeaban.
Leí por primera vez a este autor porque Roberto Bolaño lo recomendó en una entrevista que le hicieron antes de morir. Otra razón fue por el título de este libro aditado por Élmer Mendoza, su paisano sinaloense. En general los poemas me gustaron, especialmente los últimos. No fueron de mi agrado las cartas a Dionisia, que a mi parecer no venían tanto al caso, a pesar de que tienen un toque poético. Me encantaron los poemas: "Booz canta su amor", "La canción del tardío amor" y "Desamor". Supongo que ha de ser muy complicado escribir poemas de amor de tal modo que no se caiga en cursilerías y en lugares comunes. Gilberto Owen creo que salió bien librado de este riesgo, pero en su afán corrió el riesgo de ser hermético y frío. El libro se lee rápido, en una tarde o en dos días. Eso me gustó.
cortisímo. debido a que es más una probadita de la obra del autor y del autor mismo.
no estoy muy acostumbrada a la poesía, más me gustó casi todo. sólo un 10% no entendí nadita (poco en porcentaje pero tomando en cuenta que es corto, bueno).
me acerqué a owen por una sola frase y sin duda sales de aquí con muchas más.
fue muy buen aditivo la nota autobiográfica y las cartas, realmente quiero saber qué pasó entre owen y dionisia jajaja.
tal vez me adentré a leerle más, realmente no lo sé aún.
No exagero al decir que es Owen uno de los poetas más interesantes y herméticos que he leído este año. La complejidad de su obra no radica tanto en su sintaxis -que sí es complicada en muchas ocasiones- sino también por su contenido semántico e intertextual. El mayor ejemplo es en los poemas recogidos del poemario "Simbad el varado" (el cual no se reproduce en su totalidad en esta obra): hay alusiones a la mitología hindú, a la biblia y a las "Mil y una noches", todo en pequeños fragmentos llenos de versos libres que impresionan. Es simplemente maravilloso como este poeta hacer tanto en tan poco. Otro aspecto que me parece maravilloso es que, compartiendo este sentimiento nacionalista que tenían "Los contemporáneos", Owen describe paisajes maravillosos en apenas 8 versos: "Adán y Eva" es uno de los poemas más cortos, pero más descriptivos que he leído en mucho tiempo, simplemente es alguien a quien vale la pena leer.
Un buen material de la obra poética de Owen va inmerso en las presentes páginas. Si bien es cierto que no todo lo aquí vertido es de excelencia, también es importante aclarar las pequeñas joyas disponibles en la antología. Vale la pena leerla.
Poesía que desgarra el lenguaje, lo estira a tal punto de expresar con presión el amor. Bello, sublime y hermoso. Excelente edición para llevar a todos lados, además de que es elegante. De mi natal Toluca para los anales de la poesía mexicana.
Pensé en darle 4 estrellas más no puedo justificarlo. La realidad es que lo disfruté como lo disfruta alguien que se ha querido mentir que no ama. No fuí fanático de los textos finales que de amor no hablan pero aún así mantendré mi puntuación. Mi único problema fué que es notablemente efímero.
“Así que no le envidio esa supuesta ventaja, y no por vanidad ni por deseo de ella (ni siquiera porque me ame usted, ya que no lo deseo) me encantaría que fuera usted menos inteligente, o que al menos no lo ostentara tan ofensivamente.”
Pero esta noche el capitán, borracho de ron y de silencio, me deja la memoria a la deriva. Y este viento civil entre los árboles me sabe amar, me sabe a mar colérico en los mástiles, a memoria morosa en las heridas, a norte y sur de rosa de los tiempos.
Con una obra profunda y emocional, Owen es un digno representante de la Poesía Mexicana, esta breve antología seleccionada por Elmer Mendoza, ofrece una colección que abarca las diferentes etapas del poeta de Rosario Sinaloa.