Cuando el dolor es lo que te mantiene en pie, el amor es lo único que puede salvarte.
Casandra Butler no tiene las preocupaciones típicas de una chica de su edad. A sus veinticinco años vive volcada en cuidar a su familia y ayudar a su padre en su consulta médica. La medicina es su pasión pero para una mujer de un pequeño pueblo inglés es una meta casi inalcanzable con la que no se atreve a soñar. Cassie es positiva y vivaz y suele encontrar el lado bueno en todas las cosas. Excepto en una con nombre propio, pelo rubio y los ojos del color de una tormenta de Leonard Craven. Y no es para menos, ya que la tragedia sacudió a ambas familias con un duro golpe que las separaría para siempre y a la vez las mantenía unidas.
Leonard Craven se sintió traicionado cuando descubrió que su mejor amigo, Charles Butler, pretendía fugarse con su hermana Allison, saltándose así sus propios códigos de honor. Tras esa nefasta noche las vidas de todos cambiaron para siempre, Charles falleció y Allison quedó marcada con dolorosas secuelas. Leonard también murió un poco por dentro. Desde entonces intenta olvidarse de la culpabilidad que arrastra dedicando su tiempo a cualquier vicio que le ayude a no pensar en lo que sucedió, cada vez más inmerso en una espiral de autodestrucción.
Casandra y Leonard se odian, y ninguno se molesta en disimularlo. Pero el destino se empeña en unirlos, especialmente cuando Casandra se ve obligada a ayudar a Allison en su recuperación, lo cual implica tener que encontrarse con Leonard más tiempo del que se ve capaz de soportar.
¿Serán capaces de curar las heridas que los atormentan y dar rienda suelta a los sentimientos que comienzan a surgir entre ellos o estarán condenados a odiarse eternamente?
Los lectores han
«Si os gustan los Bridgerton vais a devorar los libros de Noa Alférez. Además de saber crear mucha tensión entre los protagonistas, la autora sabe perfectamente cómo crear a unos personajes secundarios a los que amas perdidamente». @natii.books (vía Instagram)
«Es una novela muy bien escrita, con una historia de amor hermosa con escenas emotivas y momentos inolvidables entre ellos». @pinceladasdelibros (vía Instagram)
Noa Alférez es una almeriense enamorada de su tierra y de la vida sencilla. Siempre le ha gustado la pintura, las manualidades, el cine, leer... y un poco todo lo que sea crear e imaginar.
Nunca se había atrevido a escribir aunque los personajes y las historias siempre habían rondado por su cabeza. Tiene el firme convencimiento de que todas las situaciones de la vida, incluso las que a priori parecen no ser las mejores te conducen a nuevos caminos y nuevas oportunidades. Y sobre todo la creencia de que nunca es tarde para perseguir los sueños.
3.5 Ha empezado muy bien, la verdad. No he leído mucho a esta autora, pero me gusta su estilo, me han gustado los personajes, la fortaleza de ella y la ternura y temperamento de él. Más mitad de la novela transcurre de una forma que he disfrutado mucho, pero llega un momento que todo da un giro, sobre todo los personajes, que cambian inexplicablemente de forma de actuar y me he quedado muy sorprendida, no para bien. No sé si he sido yo que me he saltado algo o que esa evolución no se ha llevado de forma correcta. El caso es que, dejando de lado un tema bien llevado que se veía venir, pero me ha convencido, el giro de sentimientos me ha parecido muy forzado... ¿es posible que atendiendo alguna exigencia? Seguramente leeré algo más de ella, ya veremos
Me ha gustado mucho. Casandra y Leonard se dan a querer. Es inevitable. Pero ellos se odian y no lo disimulan. Cuando te sumerges en esta novela y vas conociendo a los personajes y la historia vivida de todos ellos, ufff te toca el corazón, y empatizas con los protas. Me encanta la forma de escribir de Noa, en mi opinión tiene un lugar destacado en la novela histórica. Muy recomendable 💙💙💙💙💙
Es una historia de te odio pero en el fondo te quiero. Es uno de mis temas preferidos y además me gusta que se vea la evolución de cómo llegan del odio al amor, aunque aquí no ha sido del todo así.
Casandra y Leonard se conocen desde la infancia ya que él es el mejor amigo de su difunto hermano Charles y su muerte es precisamente la que desencadena ese odio visceral y mutuo que se profesan.
Leonard es el típico calavera, su hermano es el heredero y él se dedica a pasar las horas bebiendo y con sus amigos. Casandra al contrario, lleva una vida ordenada y ayuda a su padre en la consulta médica, aunque ella lo hace casi todo porque su padre cada vez está más enfermo.
Lo que desencadena el acercamiento de la pareja me ha mantenido muy expectante y ha resultado muy natural, sin estar forzado. Sin embargo cuando empiezan a mostrar otro tipo de sentimientos sí que me ha faltado algo intermedio que explique ese cambio en los dos. Es verdad que más adelante sí que queda claro pero me habría ayudado a entender mejor la evolución de su historia si se hubiese mencionado antes.
Salvo ese detalle me ha resultado una historia bastante conmovedora con la que me he emocionado en muchos momentos, además de que me han gustado los personajes, ella por ser fuerte y a la vez vulnerable y él por su nobleza y a veces su indolencia, contradictorios y por eso más reales. Su historia de amor es bonita, tierna y con momentos pasionales, aunque como apunto antes me ha faltado una evolución más marcada y que no resulte tan brusco el cambio del odio al amor.
Una buena lectura que me deja con ganas de conocer las historias de los hermanos de Leonard, sobre todo de la hermana menor que ha sido aquí un gran personaje y laxo de unión de los protagonistas. Como siempre el estilo narrativo de la autora es agradable, ágil y mantiene la expectación. Muy recomendable 🤩.
Casandra es una joven que se encarga de cuidar a su padre y llevar la responsabilidad de su consulta médica porque él perdió facultades. Leonard le propone un trabajo, cuidar a su hermana y conseguir que vaya saliendo de su estado de apatía. Es una novela maravillosamente bien escrita con una historia de amor hermosa con escenas emotivas. Deseando leer el siguiente libro de la serie.
Me ha parecido estar leyendo a una de esas autoras de antes, como si hubiese puesto el reloj hacia atrás. De modo y manera que la lectura de esta novela me ha hecho pasar unas horas estupendas.
Casandra es una mujer de fuerte carácter que, a pesar de sentirse agobiada por la enfermedad de su padre, cada vez más senil y despistado, y de no tener vida social como cualquier muchacha, ha centrado todos sus esfuerzos en que la consulta de su progenitor siga funcionando. Es una maestra en ocultar que quien realmente lleva la consulta es ella, y no para de querer aprender medicina a pesar de saber que nunca podrá ingresar en la universidad, vedada en aquellos tiempos a las mujeres. También es la rabia y el desprecio por la familia Craven, a quienes culpa de la muerte de su hermano Charles, lo que la mantiene al pie del cañón. Me ha gustado su fe, su determinación y sus arrestos, y es un personaje al que se admira apenas conocerlo.
Leonard es el típico vividor que se emborracha cada noche, que no respeta nada, que se burla de todos y de todo. Cínico hasta la exasperación, lo único por lo que parece sentir apego es por su hermana Allison, lisiada y encerrada en vida, por propia voluntad, desde la muerte de Charles, el hombre al que amaba. Pero su modo de comportarse ante todos no nos engaña a las lectoras, sabemos que hay algo bueno detrás de esa fachada disoluta tras la que se esconde. Y es que la culpa y el dolor no le dejan ni dormir.
Allison no quiere vivir, pero Leonard está decidido a salvarla y no duda en humillarse incluso para pedir ayuda a Casandra, sabedor de que ella mejor que nadie puede conseguir devolverle el ánimo. Es una historia de amistad más allá de la muerte. Una historia de superación, de amor fraternal y de tesón. Los tres personajes se vistan con ellos y ha sido una gozada ver cómo se van desarrollando dentro de la novela. Una vez más, lo que parece odio se va caldeando hasta convertirse en amor.
Primera novela que leo de esta autora y la verdad es que me ha sorprendido mucho. Me gusta su forma de escribir y cómo ha creado y descrito a los personajes. Ha sido una alegría descubrir a otra autora que seguiré leyendo en el futuro. Cassandra vive en un pequeño pueblo inglés, ayuda a su padre, el médico local y está muy implicada en la comunidad. Solo hay una familia que ya no se nombra en su casa. Los nobles de la zona, los Craven, han dejado de existir para ellos. Charles, el hermano de Cassie, falleció hace unos años en un accidente y a la joven aún cree que los Craven tuvieron algo que ver. Aunque Cassandra tiene mayores problemas ahora mismo, su padre no está bien y ella lo sabe. Y lo peor es que la gente no tardará en darse cuenta. Leonard Craven, además de dirigir la finca familiar, se dedica a disfrutar de la vida. O esa es la imagen que da al mundo. Tras un enfrentamiento con Cassandra le ofrece una oportunidad única. Lo peor es que ambos tendrán que enfrentarse a sus propios demonios. Cassandra tendrá que decidir entre pagar las facturas o que se imponga su orgullo. Leo haría cualquier cosa por su hermana Allison. La muerte de Charles no solo afectó a su familia, Allison quedó impedida para siempre. Me ha gustado mucho la historia de amor entre Cassandra y Leonard. La única pega que tendría que hacerle es que la autora debería adaptar mejor el vocabulario a la época. En muchos momentos parecía que estaba leyendo más una novela casi actual o en otro país que la típica novela campestre inglesa. No me he imaginado la campiña en ningún momento. A parte de eso la novela merece mucho la pena.
No ha estado mal, pero se me ha hecho muy pesada, sobre todo al principio. Es una historia bonita, de superación, con una protagonista muy fuerte y un hombre traumatizado por un hecho que lo aleja de ella. La idea es preciosa, pero me ha faltado profundidad. La primera parte es demasiado repetitiva, con demasiada explicación de lo mismo, pero sin darnos una visión más detallada de sus traumas y eso se me ha hecho pesado. Después, hay un momento en el que despega y ahí ya me he enganchado. Aunque sigue faltándole largada en algunas partes y rebajar en otras. Casandra me ha encantado. Cómo es, cómo piensa, cómo lucha. Es una campeona. Leonard... Me ha faltado conocerlo más a fondo. No me ha acabado de convencer tal como está.
Primera vez qaue leo la escritora, me encantó la historia, y la forma de narrar de la autora, me mantuvo atrapada quieriendo saber que iba a pasar con Casandra y Leonard Craven. YO soy fan del romance histórico y he leido muchos libros del género y ella escribe muy bien. Ahora estoy esperando el libro 2 y 3 para comprarlos en mi kindle. Por cierto busqué en amazon y no encontré.
This author has the hability to make me sick of the stomach... Poor the main female character, she felt in love with a rapist? I’ll try one more, if she fails... She's out!
Ésta autora tiene la habilidad de hacer enfermar del estómago... Pobre el personaje principal femenino, ¿se enamoró de un violador? Trataré uno más, si falla... ¡Está fuera!
Como todos los libros de Noa, está bien escrito. No necesita rellenar inútilmente una historia. Los personajes de hacen querer, sus protagonistas femeninas son fuertes y tenaces. Novela entretenida y recomendable. Gracias Noa
Me gustó mucho, siento que fue un avance de escritura y desarrollo de personajes mejor que otros libros de la autora. La trama romántica y la sensibilidad de los personajes se vuelve súper intensa y fluida, perfecto para leer de una sola sentada.
Es una novela muy bien escrita que atrapa desde la primera página. El romance es precioso con momentos inolvidables entre ellos. Una delicia de lectura
Una novela deliciosa donde el amor sabrá ganarle la partida al dolor.
Cada vez que te amo de Noa Alférez es una novela deliciosa que supone un comienzo de trilogía perfecto, ya que la historia de Casandra y Leonard nos deja un amor nacido de la culpa y el rencor, dos seres que dejaron de vivir cuando la existencia los puso a prueba y el dolor inundó sus almas, ahora que el tiempo ha pasado, creen que no olvidar es lo que deben hacer, pero sólo necesitarán que el destino los ponga en la senda adecuada para darse cuenta de que lo que sienten es mucho más fuerte que la pena o los remordimientos, siendo capaces de perdonar y admitir aquello que ha estado ahí durante tanto tiempo.