En la ciudad en la que vive Pablo estuvo nevando sin parar durante siete días y siete noches. La nieve llegaba ya más allá de los tejados de las casas. Por fin, se derritió y todos observaron, atónitos, que con la nieve se habían ido los colores de las cosas. Todo estaba en blanco y negro. El alcalde pidió a los niños que volvieran a pintarlo todo y éstos así lo hicieron; pero para ello eligieron los colores que más les apetecían y así la ciudad quedó preciosa. Los pinos, de color violeta; los tejados, verdes con rayas naranjas; los semáforos, con las tres luces pintadas de azul... Los mayores se enfadaron de verdad, pero la pintura se había secado y ya no hubo nada que hacer. Sólo esperar a la próxima nevada...
Es un libro sencillo y bastante musical, pero creo que no ha envejecido demasiado bien. De todas formas es gracioso y a mi hijo le ha gustado. *Lectura con mi hijo*
Al escuchar que puede que venga una nevada no he podido evitar sacar de la estantería uno de mis libros favoritos de la infancia y leerlo. Me remueve mis recuerdos leer estas páginas y ver sus ilustraciones.
Un racconto lungo per bambini, in cui un'insolita vicenda meteoreologica porta a delle conseguenze che solo i più piccoli, con la loro immaginazione, sembrano riparare. Il tutto si fonda su un'allegoria efficace per quanto modesta.
Bonitas ilustraciones. Los niños deben pintar la ciudad tras quedarse en blanco y negro. El resultado es colorido y problemático. Lectura rápida y entretenida. A los adultos nos pintan como unos amargados y enojones :(
Libro della mia infanzia, l'ho letto e riletto tante volte. Ho sempre amato questa storia, ho sempre sperato che una bella nevicata desse anche a me la possibilità di ricolorare il mondo. Ci si può leggere molto da una storia così semplice.
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