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Akelarre
Un émulo de Jack el Destripador asesina prostitutas en el barrio Santa Fe y la firma de sus crímenes es una auténtica orgía de sangre. La Policía no tiene pistas y le pide asesoría a Frank Molina, el detective perturbado que siempre tiene una respuesta insospechada para estos enigmas. La investigación lo llevará de un extremo a otro de Bogotá, a cruzarse con fantasmas de su pasado y con personajes que transitan por los bordes de la ciudad y de la un sacerdote que no termina de expiar sus pecados de juventud, una poderosa bruja herbolaria que profetiza el futuro y una joven artista que se revela como una médium conectada con poderes ancestrales. Molina se sumergirá en una vorágine, recordará que “los caminos que nos conducen al infierno son sinuosos, retorcidos y laberínticos”, y llegará al destino que vislumbró desde 2008, cuando conoció a Lady Masacre. Un imitador de Jack el Destripador está inmerso en una auténtica orgía de sangre y muerte.
400 pages, Paperback
First published January 1, 2019
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About the author
Mario Mendoza
81 books1,287 followersEscritor colombiano nacido en Bogotá en 1964, Mario Mendoza es uno de los autores latinoamericanos más influyentes de la actualidad.
Tras licenciarse en Letras, graduarse en Literatura Hispanoamericana y trabajar como pedagogo, Mendoza decidió iniciar su carrera literaria a partir de 1980, combinando la escritura con la docencia en literatura y la colaboración con diversos medios culturales.
Su primera novela, La ciudad de los umbrales, fue publicada en 1992. Tan sólo dos años más tarde fue galardonado con el Premio Nacional de Literatura de Colombia por La travesía del vidente. Con otra de sus obras, Satanás, se hizo con el Premio Biblioteca Breve de la editorial Seix Barral en 2002.
También destacan en su obra los libros dedicados al público infantil, en especial la saga El mensajero de Agartha.
Tras licenciarse en Letras, graduarse en Literatura Hispanoamericana y trabajar como pedagogo, Mendoza decidió iniciar su carrera literaria a partir de 1980, combinando la escritura con la docencia en literatura y la colaboración con diversos medios culturales.
Su primera novela, La ciudad de los umbrales, fue publicada en 1992. Tan sólo dos años más tarde fue galardonado con el Premio Nacional de Literatura de Colombia por La travesía del vidente. Con otra de sus obras, Satanás, se hizo con el Premio Biblioteca Breve de la editorial Seix Barral en 2002.
También destacan en su obra los libros dedicados al público infantil, en especial la saga El mensajero de Agartha.
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Displaying 1 - 30 of 701 reviews
October 19, 2021
Una visión pesimista de la vida.
En realidad 2,3
Cuando pienso en mi país, en Colombia, tengo que reconocer que muchas veces siento tristeza por la pobreza, falta de educación, delincuencia, y violencia con la que se vive en muchos lugares del territorio. Siento tristeza porque nací aquí, es mi casa, amo mi país, y sin importar lo que suceda Colombia siempre será especial para mí. Nadie elige el lugar en el que nace, pero personalmente, yo si me siento muy feliz del lugar donde la casualidad y el destino me invitaron a existir. Sí, me encantaría que Colombia fuera un lugar completamente seguro y que nunca se repitiera ningún caso de corrupción, brutalidad, o demás, pero el paso de los años me ha ayudado a comprender que la perfección es inalcanzable por lo que siempre, absolutamente siempre, cada invento, sociedad y ser humano tendrán miles de defectos, y que el paso de las generaciones y el tiempo no servirán para abolir todos los problemas completamente. Buscar la perfección es un camino masoquista, y lo único que nos genera es resentimiento, descontento e infelicidad constante por todo lo que nos rodea. Centrarnos exclusivamente en lo negativo sin llegar a destacar lo positivo es altamente tóxico, no solo para nosotros mismos sino también para el mundo en general. Desafortunadamente, es por esa razón por la que no me parece un buen libro Akelarre, y tampoco me parece un buen ejemplo el estilo pesimista y depresivo con el que Mario Mendoza escribe en cada página. Si eres un extranjero que te interesa Colombia, y quieres aprender un poco más de este país, te sugiero con mi corazón y buena voluntad que no leas a este autor. Mario Mendoza es un autor que no quiere a su país, se le nota en sus palabras, por lo que conocer su visión negativa y pesimista de la vida solo te creará una ilusión anormal de lo que según él, es toda Colombia. Aun no comprendo con claridad cuál es el objetivo principal de este libro, pero presiento que crear una mala imagen de Colombia puede ser posiblemente su objetivo principal.
Mi historia con Mario Mendoza es corta, pero comenzó en el año 2008. En ese tiempo —al igual que todos mis compañeros— mis hormonas estaban tan alborotadas que la lujuria era mi centro de atención cada día de mi vida. Cada falda levantada incitaba fantasías, cada video porno era morbo y mucho antojo, cada acercamiento a una mujer causaba ansiedad y tentación. Pues bien, en esa época de adicción y ansiedad por el placer, un compañero llevó al colegio un libro llamado Satanás, popular en aquel entonces, y empezó a leerlo en voz alta para todo el salón, centrándose naturalmente en la narración de las escenas eróticas porque al fin y al cabo, era lo que todos queríamos escuchar. En ese entonces me encantó la historia y el autor, sus historias eran erotismo puro, y eso era lo que mi mente me exigía: Era como agua para el sediento, ¿qué más podía pedir? Sin embargo, pasaron los años y cuando mis hormonas ya me dejaron pensar nuevamente con neutralidad, quise reconstruir una nueva imagen de este autor. No les miento, pero en este momento hubiera preferido conservar esa imagen de escritor erótico que produce morbo en sus lectores, y no la que ahora tengo de un escritor depresivo que está cansado de la vida en general.
Irónicamente, Mario Mendoza tiene una prosa genial. Me ha gustado mucho la forma como inmerge al lector en su mundo fatídico; las historias paralelas y su duración ayudan un montón a que leas decenas de páginas sin darte cuenta; sus frases y párrafos transmiten correctamente los sentimientos que pide la historia; las conversaciones están bien formadas y en ningún momento parecen irreales; y el ritmo de lectura es bastante alto por lo que su estilo no es de los que causa molestos bloqueos, o algo similar. Me gustaría leer otra obra de este autor, si y solo sí, el tema principal no estuviera centrado en alimentar esa visión despectiva hacia Colombia o sus habitantes, porque realmente su prosa es muy interesante. Si Mario Mendoza escribiera sobre un tema diferente, algo de más agrado y no tan negativo, probablemente me gustarían muchísimo sus libros, los disfrutaría, los repetiría y los recomendaría a cualquier lector: Eso no lo dudo ni un segundo.
Una anécdota curiosa que me sucedió con este libro es que antes de iniciar la lectura desconocía el significado de la palabra «Akelarre». Fue un detalle al que no le di mucha importancia porque muchos autores usan títulos extravagantes para sus novelas, y con el transcurso de nuestra lectura vamos comprendiendo fácilmente su significado. Sí, aquí ocurrió lo mismo y no hubo ningún problema, pero como la sinopsis me hizo pensar que encontraría una historia de detectives, un thriller, o algo por el estilo, descubrir más adelante que la palabra «Akelarre» significaba reunión de brujos —y que el argumento no se centraba en lo que yo esperaba sino en la vida esotérica, hechicería, presencias de espíritus, brujerías, demonios y demás— me provocó una decepción literaria tremenda. El libro inició bien, el misterio se mantuvo intacto hasta un tramo, pero entre más avancé, más entendí, que el libro no iba a ir a ninguna parte mientras se le diera más protagonismo a esos temas y no a lo que prometía realmente la sinopsis. Leer este libro se asemeja a cuando compramos comida que parece deliciosa, pero al saborear comprendemos que, literalmente, nos han robado el dinero. Siento que aquellos lectores que creen en auras, conexiones, y todo ese tipo de supuestas capacidades, pueden llegar a disfrutar este libro porque quizás se identificarán con las vivencias de los personajes, y se sentirán importantes, diferentes y con cualidades para transformar el mundo; pero, si todo eso te parece charlatanería, entonces te fastidiarán los personajes, te disgustará el rumbo de la historia, y posiblemente no te gustará prácticamente nada: Mi caso. Si desde el principio hubiera conocido el significado de la palabra Akelarre, muy, pero muy probablemente, habría descartado esta lectura sin siquiera pensarlo un minuto.
Los personajes han estado bien desarrollados gracias a la exposición de los problemas y complejos que no los dejaban vivir bien. Psicológicamente, son personajes solitarios que se sienten decepcionados por la maldad que habita en el mundo, y por ello tiene bastante lógica que con tantos pensamientos tristes y lúgubres que atormentaban su cerebro, ellos busquen en las ciencias ocultas soluciones y respuestas para cambiarlo todo. También tienen la particularidad de que se creen inteligentes, y con capacidades de observar el mundo desde una percepción muy diferente a las personas normales: Se creen superiores a todos. El problema, es que cuando crees tener habilidades trascendentales, pero no tienes salud mental, ni control emocional para manejar tus pensamientos y comportamientos, eso conlleva a que uses negativamente los «dones» con los que aparentemente fuiste premiado de nacimiento. Ese es el problema que sufren todos los personajes del libro, y por ello también son infelices. A pesar de no sentir aprecio por ninguno de ellos, pienso que han estado muy bien trabajados y que expresan correctamente el descontento por la vida que siente el propio autor. Ese era el rol que Mario Mendoza necesitaba darles a sus personajes, y en verdad lo ha hecho muy bien.
El final me ha parecido demasiado absurdo, y me ayudó a comprobar justamente mi teoría de que esta historia no tiene ningún objetivo, y que solo la creó Mario Mendoza para expresar esa insatisfacción que sienten todas las personas pesimistas y negativas. Ese final se asemeja a cuando estamos completamente cansados de hacer una tarea, trabajo, o labor, y preferimos proceder con la primera idea que se nos venga a la mente para darle una conclusión inmediata a nuestras actividades porque no queremos postergarla más. Fue un final malísimo, uno de los más malos que he leído en mi vida. Allí, todo se fue a la basura.
En resumen, Akelarre es una obra con una prosa y un desarrollo de personajes sobresaliente, pero con un argumento sin rumbo claro, y un pesimismo horrible que contamina cada aspecto del libro. La filosofía del autor sobre la vida me ha parecido completamente desagradable, no la comparto, y me es difícil incluso respetarla. Si el autor, en su vida real, realmente ve el mundo de la forma como la expresa en este libro, siento que debería buscar ayuda psicológica. Sé que podrán pensar que solo es ficción y que puedo estar exagerando, pero no es normal encontrar a alguien con ideas tan melancólicas. Detrás de cada gota de tristeza puede esconderse un océano de penas. Libro no recomendado.
En realidad 2,3
Cuando pienso en mi país, en Colombia, tengo que reconocer que muchas veces siento tristeza por la pobreza, falta de educación, delincuencia, y violencia con la que se vive en muchos lugares del territorio. Siento tristeza porque nací aquí, es mi casa, amo mi país, y sin importar lo que suceda Colombia siempre será especial para mí. Nadie elige el lugar en el que nace, pero personalmente, yo si me siento muy feliz del lugar donde la casualidad y el destino me invitaron a existir. Sí, me encantaría que Colombia fuera un lugar completamente seguro y que nunca se repitiera ningún caso de corrupción, brutalidad, o demás, pero el paso de los años me ha ayudado a comprender que la perfección es inalcanzable por lo que siempre, absolutamente siempre, cada invento, sociedad y ser humano tendrán miles de defectos, y que el paso de las generaciones y el tiempo no servirán para abolir todos los problemas completamente. Buscar la perfección es un camino masoquista, y lo único que nos genera es resentimiento, descontento e infelicidad constante por todo lo que nos rodea. Centrarnos exclusivamente en lo negativo sin llegar a destacar lo positivo es altamente tóxico, no solo para nosotros mismos sino también para el mundo en general. Desafortunadamente, es por esa razón por la que no me parece un buen libro Akelarre, y tampoco me parece un buen ejemplo el estilo pesimista y depresivo con el que Mario Mendoza escribe en cada página. Si eres un extranjero que te interesa Colombia, y quieres aprender un poco más de este país, te sugiero con mi corazón y buena voluntad que no leas a este autor. Mario Mendoza es un autor que no quiere a su país, se le nota en sus palabras, por lo que conocer su visión negativa y pesimista de la vida solo te creará una ilusión anormal de lo que según él, es toda Colombia. Aun no comprendo con claridad cuál es el objetivo principal de este libro, pero presiento que crear una mala imagen de Colombia puede ser posiblemente su objetivo principal.
Mi historia con Mario Mendoza es corta, pero comenzó en el año 2008. En ese tiempo —al igual que todos mis compañeros— mis hormonas estaban tan alborotadas que la lujuria era mi centro de atención cada día de mi vida. Cada falda levantada incitaba fantasías, cada video porno era morbo y mucho antojo, cada acercamiento a una mujer causaba ansiedad y tentación. Pues bien, en esa época de adicción y ansiedad por el placer, un compañero llevó al colegio un libro llamado Satanás, popular en aquel entonces, y empezó a leerlo en voz alta para todo el salón, centrándose naturalmente en la narración de las escenas eróticas porque al fin y al cabo, era lo que todos queríamos escuchar. En ese entonces me encantó la historia y el autor, sus historias eran erotismo puro, y eso era lo que mi mente me exigía: Era como agua para el sediento, ¿qué más podía pedir? Sin embargo, pasaron los años y cuando mis hormonas ya me dejaron pensar nuevamente con neutralidad, quise reconstruir una nueva imagen de este autor. No les miento, pero en este momento hubiera preferido conservar esa imagen de escritor erótico que produce morbo en sus lectores, y no la que ahora tengo de un escritor depresivo que está cansado de la vida en general.
Irónicamente, Mario Mendoza tiene una prosa genial. Me ha gustado mucho la forma como inmerge al lector en su mundo fatídico; las historias paralelas y su duración ayudan un montón a que leas decenas de páginas sin darte cuenta; sus frases y párrafos transmiten correctamente los sentimientos que pide la historia; las conversaciones están bien formadas y en ningún momento parecen irreales; y el ritmo de lectura es bastante alto por lo que su estilo no es de los que causa molestos bloqueos, o algo similar. Me gustaría leer otra obra de este autor, si y solo sí, el tema principal no estuviera centrado en alimentar esa visión despectiva hacia Colombia o sus habitantes, porque realmente su prosa es muy interesante. Si Mario Mendoza escribiera sobre un tema diferente, algo de más agrado y no tan negativo, probablemente me gustarían muchísimo sus libros, los disfrutaría, los repetiría y los recomendaría a cualquier lector: Eso no lo dudo ni un segundo.
Una anécdota curiosa que me sucedió con este libro es que antes de iniciar la lectura desconocía el significado de la palabra «Akelarre». Fue un detalle al que no le di mucha importancia porque muchos autores usan títulos extravagantes para sus novelas, y con el transcurso de nuestra lectura vamos comprendiendo fácilmente su significado. Sí, aquí ocurrió lo mismo y no hubo ningún problema, pero como la sinopsis me hizo pensar que encontraría una historia de detectives, un thriller, o algo por el estilo, descubrir más adelante que la palabra «Akelarre» significaba reunión de brujos —y que el argumento no se centraba en lo que yo esperaba sino en la vida esotérica, hechicería, presencias de espíritus, brujerías, demonios y demás— me provocó una decepción literaria tremenda. El libro inició bien, el misterio se mantuvo intacto hasta un tramo, pero entre más avancé, más entendí, que el libro no iba a ir a ninguna parte mientras se le diera más protagonismo a esos temas y no a lo que prometía realmente la sinopsis. Leer este libro se asemeja a cuando compramos comida que parece deliciosa, pero al saborear comprendemos que, literalmente, nos han robado el dinero. Siento que aquellos lectores que creen en auras, conexiones, y todo ese tipo de supuestas capacidades, pueden llegar a disfrutar este libro porque quizás se identificarán con las vivencias de los personajes, y se sentirán importantes, diferentes y con cualidades para transformar el mundo; pero, si todo eso te parece charlatanería, entonces te fastidiarán los personajes, te disgustará el rumbo de la historia, y posiblemente no te gustará prácticamente nada: Mi caso. Si desde el principio hubiera conocido el significado de la palabra Akelarre, muy, pero muy probablemente, habría descartado esta lectura sin siquiera pensarlo un minuto.
Los personajes han estado bien desarrollados gracias a la exposición de los problemas y complejos que no los dejaban vivir bien. Psicológicamente, son personajes solitarios que se sienten decepcionados por la maldad que habita en el mundo, y por ello tiene bastante lógica que con tantos pensamientos tristes y lúgubres que atormentaban su cerebro, ellos busquen en las ciencias ocultas soluciones y respuestas para cambiarlo todo. También tienen la particularidad de que se creen inteligentes, y con capacidades de observar el mundo desde una percepción muy diferente a las personas normales: Se creen superiores a todos. El problema, es que cuando crees tener habilidades trascendentales, pero no tienes salud mental, ni control emocional para manejar tus pensamientos y comportamientos, eso conlleva a que uses negativamente los «dones» con los que aparentemente fuiste premiado de nacimiento. Ese es el problema que sufren todos los personajes del libro, y por ello también son infelices. A pesar de no sentir aprecio por ninguno de ellos, pienso que han estado muy bien trabajados y que expresan correctamente el descontento por la vida que siente el propio autor. Ese era el rol que Mario Mendoza necesitaba darles a sus personajes, y en verdad lo ha hecho muy bien.
El final me ha parecido demasiado absurdo, y me ayudó a comprobar justamente mi teoría de que esta historia no tiene ningún objetivo, y que solo la creó Mario Mendoza para expresar esa insatisfacción que sienten todas las personas pesimistas y negativas. Ese final se asemeja a cuando estamos completamente cansados de hacer una tarea, trabajo, o labor, y preferimos proceder con la primera idea que se nos venga a la mente para darle una conclusión inmediata a nuestras actividades porque no queremos postergarla más. Fue un final malísimo, uno de los más malos que he leído en mi vida. Allí, todo se fue a la basura.
En resumen, Akelarre es una obra con una prosa y un desarrollo de personajes sobresaliente, pero con un argumento sin rumbo claro, y un pesimismo horrible que contamina cada aspecto del libro. La filosofía del autor sobre la vida me ha parecido completamente desagradable, no la comparto, y me es difícil incluso respetarla. Si el autor, en su vida real, realmente ve el mundo de la forma como la expresa en este libro, siento que debería buscar ayuda psicológica. Sé que podrán pensar que solo es ficción y que puedo estar exagerando, pero no es normal encontrar a alguien con ideas tan melancólicas. Detrás de cada gota de tristeza puede esconderse un océano de penas. Libro no recomendado.
July 3, 2019
Con el perdón de las damas, los caballeros y los puristas del lenguaje: ¡Qué libro tan hijueputa!
August 28, 2021
4.5
Hace poco escuché una entrevista del autor muy muy interesante sobre éste libro.
Novela negra muy negra que de tan negra es retorcida. Con 3 personajes principales y a tres voces:
1.- Frank Molina, detective bipolar narra en segunda persona ( lo que me hizo meterme en la piel de el personaje y hasta llegar a sentir miedo de mí misma).
2 - Leticia: artista vidente narrada en tercera persona.
3.- Lorenzo: médico y sacerdote de muy negro pasado.
Ésta polifonía narrativa te mantiene muy atento a la historia, personajes muy bien delineados , descripciones muy crudas (mucha sangre) pero muy bien hechas, me gusta como entrelazó las historias de los 3 personajes (excepto Leticia ).
Independientemente de creencias o supersticiones, el escritor está tremendamente bien documentado sobre el tema y resulta muy interesante .
Otro punto a favor: nunca sospeché del asesino. Y eso se agradece.
Punto en contra: final un tanto abrupto y algunas descripciones pueden llegar a dar verdadero asco.
Pero mira... la verdad es que... hubo partes que me puse muy nerviosa . Y a mi, cuando un libro me genera emociones (de cualquier tipo), me vale la pena👍🏼
Hace poco escuché una entrevista del autor muy muy interesante sobre éste libro.
Novela negra muy negra que de tan negra es retorcida. Con 3 personajes principales y a tres voces:
1.- Frank Molina, detective bipolar narra en segunda persona ( lo que me hizo meterme en la piel de el personaje y hasta llegar a sentir miedo de mí misma).
2 - Leticia: artista vidente narrada en tercera persona.
3.- Lorenzo: médico y sacerdote de muy negro pasado.
Ésta polifonía narrativa te mantiene muy atento a la historia, personajes muy bien delineados , descripciones muy crudas (mucha sangre) pero muy bien hechas, me gusta como entrelazó las historias de los 3 personajes (excepto Leticia ).
Independientemente de creencias o supersticiones, el escritor está tremendamente bien documentado sobre el tema y resulta muy interesante .
Otro punto a favor: nunca sospeché del asesino. Y eso se agradece.
Punto en contra: final un tanto abrupto y algunas descripciones pueden llegar a dar verdadero asco.
Pero mira... la verdad es que... hubo partes que me puse muy nerviosa . Y a mi, cuando un libro me genera emociones (de cualquier tipo), me vale la pena👍🏼
September 4, 2023
Akelarre nos narra en tres tiempos distintos tres historias diferentes dónde conocemos a Leticia una joven artista que no es una simple artista, al padre Franciscano Lazaro con un pasado oscuro y al detective de la ciudad gótica Frank Molina.
Desde la primera página uno sabe que está adentrándose en un mundo oscuro, bajo, dónde la pequeña luz de esperanza es muy escasa y realmente tienes que aferrarte a ella para salir sana y salva de esas páginas.
Jamás había leído a Mendoza pero sin duda he que quedado enamorada de su pluma. A pesar del sin sabor en la boca con el cuál he terminado este libro. Siento que he conectado mucho con el. No solo por sus historia oscura, que realmente me gusta, sino por cómo maneja conceptos que para mí siempre han sido reales y los convierte el ficción, permitiéndole a la gente conocerlos, mostrando otras realidades de una manera cruda , fuerte y de cierta manera iluminadora.
Las 3 historias te mantienen en vela, quieres saber más, sospechas de unos, haces teorías sobre otros, aprendes a no desconfiar de algunos. Pero todo lo que mi mente creo jamás me preparo para el final. Qué como ya he dicho no sé si odiar o amar.
Lo que si sé es que seguiré leyendo a Mendoza y me arrepiento de no haberlo conocido antes. Pero creo también que las cosas llegan en el momento justo.
Desde la primera página uno sabe que está adentrándose en un mundo oscuro, bajo, dónde la pequeña luz de esperanza es muy escasa y realmente tienes que aferrarte a ella para salir sana y salva de esas páginas.
Jamás había leído a Mendoza pero sin duda he que quedado enamorada de su pluma. A pesar del sin sabor en la boca con el cuál he terminado este libro. Siento que he conectado mucho con el. No solo por sus historia oscura, que realmente me gusta, sino por cómo maneja conceptos que para mí siempre han sido reales y los convierte el ficción, permitiéndole a la gente conocerlos, mostrando otras realidades de una manera cruda , fuerte y de cierta manera iluminadora.
Las 3 historias te mantienen en vela, quieres saber más, sospechas de unos, haces teorías sobre otros, aprendes a no desconfiar de algunos. Pero todo lo que mi mente creo jamás me preparo para el final. Qué como ya he dicho no sé si odiar o amar.
Lo que si sé es que seguiré leyendo a Mendoza y me arrepiento de no haberlo conocido antes. Pero creo también que las cosas llegan en el momento justo.
October 26, 2021
Puff, hay mucho que comentar de esta historia.
El hecho de que sea una combinación entre novela policiaca y fantástica me gusta mucho, sin embargo sentí que el tema de las brujas, akelarres y espíritus fue muy desaprovechada.
Se divide en tres narrativas (3 personajes) de las cuales disfruté todas, pero si algo me encantó, fue toparme con un narrador en segunda persona.
Ya mañana podrán encontrar una reseña completa en el blog... 📚🙌🏻
El hecho de que sea una combinación entre novela policiaca y fantástica me gusta mucho, sin embargo sentí que el tema de las brujas, akelarres y espíritus fue muy desaprovechada.
Se divide en tres narrativas (3 personajes) de las cuales disfruté todas, pero si algo me encantó, fue toparme con un narrador en segunda persona.
Ya mañana podrán encontrar una reseña completa en el blog... 📚🙌🏻
October 25, 2021
Cuando termino una lectura es casi automático que piense cómo valoraré la experiencia lectora que acabo de vivir; es básicamente instantáneo. Antes de estar en Goodreads llevaba un registro de mis lecturas y solía calificarlas del 1 al 10, y desde que tengo memoria soy muy obsesivo para calificar lo que me gusta y lo que no (quizá no demasiado).
En fin, con este libro ha sido, sin duda alguna, una ocasión muy particular, ya que lo que vino a mí fue desde darle 2 estrellas o hasta 3.5 estrellas y no tenía idea de por qué existía en mi mente una variación relativamente amplia entre una y otra, hasta que después de meditarlo durante estos últimos días, me he decantado por el 3, sin más, y con la minúscula posibilidad de no estar del todo seguro aún.
Quiero empezar diciendo que no soy muy afín a la novela negra, thriller o géneros semejantes; sin embargo, Akelarre fue una de esas lecturas que me atrapó en un principio; en primer lugar, por cómo está escrita: el uso de tres voces, tres narradores y tres posibles protagonistas que comparten cada capítulo dividido en tres partes: así es, una parte corresponde a cada personaje principal, lo cual me parece lo mejor logrado de la novela.
Por un lado tenemos al detective Frank Molina, quien inicia la historia investigando un crimen de asesinato a una mujer; por otro lado al sacerdote Lázaro, quien en primera persona nos irá relatando su historia nada común, y por último pero no menos importante, tenemos a Leticia, quien de alguna manera se verá involucrada con las autoridades al inicio de la historia, y cuyo destino la llevará a descubrir una parte de sí misma que desconocía.
Cada uno de ellos luchando contra sus propios demonios, mientras la novela avanza capítulo a capítulo y nos vamos enterando de todos los detalles en curso.
Mi problema empieza precisamente con ese curso que va siguiendo la historia, en especial las partes correspondientes al sacerdote y a Leticia, que de alguna manera se hacían difíciles de creer, sintiéndose como si todo encajara solo porque así tenía que suceder. Quizá haya sido esa falta de empatía que dejé de tener por los personajes que me hacía perder el interés, pero hubo un momento de quiebre donde mi atención se iba a otra parte, menos a la trama que debería interesarme.
Además, algunos diálogos, especialmente en la primera mitad del libro, los sentí muy forzados, vacíos, era como si los personajes estuvieran leyendo un guion planeado y todo tenía que ser dicho así y solo así; no me los estaba creyendo y de nuevo, mi interés se perdía.
Por otro lado, temas que aborda la historia, en especial los relacionados con la brujería y los exorcismos cautivaron mi atención prácticamente durante una buena parte de la novela y era de alguna manera lo que me hacía continuar. Pero aquí vamos otra vez: por mencionar un ejemplo —que hay más—, hay una escena casi a las tres cuartas partes del libro que tiene que ver con alguno de estos temas e involucra a uno de los personajes principales; todo parecía que sería la escena perfecta, que vendría un punto decisivo en la historia y tendría un desarrollo muy elaborado; cuando de pronto, ¡puff!, en un párrafo queda resuelto el problema y me hizo preguntarme: “¿eso es todo? ¿De verdad, tanto para esto?”
Ahora, viene lo que para mí fue lo que más me decepcionó: el final. Ojo, no voy a hablar del final para no hacer spoilers de ningún tipo, no obstante, solo diré que fue un final, que si bien esperaba, se termina quedando corto después de ver el rumbo que estaba llevando la historia desde su inicio. Sinceramente esperaba otra cosa, quizá no en el sentido de cómo acaba, sino en la ejecución, en la forma de terminarlo. Y no, no sufrí con el final, ni me emocioné, ni me enojé, todo fue un simple “¿y así acaba?”. Lo siento, pero no pude sentir ningún tipo de conexión con ese desenlace, más bien indiferencia.
Llego a este punto de mi reseña y me pongo a pensar que 3 estrellas quizá sea mucho para lo que llevo escrito, parece más una reseña negativa si lo analizo detenidamente; pero no, en realidad no la considero como tal.
Cuando reflexiono más profundamente acerca de toda la historia y lo que fue mi experiencia leyéndola, llego a la conclusión de que es lo que la obra me quiso trasmitir todo este tiempo, una sensación pesimista, depresiva incluso. Porque la realidad es que esta obra es absolutamente decadente, es más, es la decadencia en persona. No pude evitar pensar en Émile Zola cuando terminé de leer esta novela, y recordé que en un libro de Zola uno debe perder toda esperanza cuando inicias la lectura, evitar quizá encariñarte con algún personaje o dos, ya que nunca se sabe lo que podría venir más adelante. Tal vez, si no fuera por esos obstáculos que me fui encontrando a lo largo de Akelarre —los cuales mencioné anteriormente— la experiencia hubiera sido más enriquecedora.
Finalmente, quiero agregar que me dio mucho gusto haber leído este libro en un club de lectura en el que tuvimos la posibilidad de hablar con el autor al final, lo cual fortaleció la experiencia al máximo.
Pienso que, en resumen, esta novela no es fácil de recomendar, en principio por los temas que pueden no ser del interés o agrado de todos, y en segundo lugar, por la historia en sí misma; así que por ahora prefiero no decir más y me limitaré a solo dejar claras mis impresiones por si le son de utilidad a alguien.
“Sintió una tristeza inmensa al darse cuenta de que no le hacía falta a nadie, ninguna persona la extrañaba, ningún ser humano necesitaba verla o escuchar su voz. Estaba completamente sola en un mundo que le daba la impresión de no ser el suyo, una especie de planeta por el que tenía que caminar, y dormir, y comer solo para guardar las apariencias y fingir que era como ellos.”
En fin, con este libro ha sido, sin duda alguna, una ocasión muy particular, ya que lo que vino a mí fue desde darle 2 estrellas o hasta 3.5 estrellas y no tenía idea de por qué existía en mi mente una variación relativamente amplia entre una y otra, hasta que después de meditarlo durante estos últimos días, me he decantado por el 3, sin más, y con la minúscula posibilidad de no estar del todo seguro aún.
Quiero empezar diciendo que no soy muy afín a la novela negra, thriller o géneros semejantes; sin embargo, Akelarre fue una de esas lecturas que me atrapó en un principio; en primer lugar, por cómo está escrita: el uso de tres voces, tres narradores y tres posibles protagonistas que comparten cada capítulo dividido en tres partes: así es, una parte corresponde a cada personaje principal, lo cual me parece lo mejor logrado de la novela.
Por un lado tenemos al detective Frank Molina, quien inicia la historia investigando un crimen de asesinato a una mujer; por otro lado al sacerdote Lázaro, quien en primera persona nos irá relatando su historia nada común, y por último pero no menos importante, tenemos a Leticia, quien de alguna manera se verá involucrada con las autoridades al inicio de la historia, y cuyo destino la llevará a descubrir una parte de sí misma que desconocía.
Cada uno de ellos luchando contra sus propios demonios, mientras la novela avanza capítulo a capítulo y nos vamos enterando de todos los detalles en curso.
Mi problema empieza precisamente con ese curso que va siguiendo la historia, en especial las partes correspondientes al sacerdote y a Leticia, que de alguna manera se hacían difíciles de creer, sintiéndose como si todo encajara solo porque así tenía que suceder. Quizá haya sido esa falta de empatía que dejé de tener por los personajes que me hacía perder el interés, pero hubo un momento de quiebre donde mi atención se iba a otra parte, menos a la trama que debería interesarme.
Además, algunos diálogos, especialmente en la primera mitad del libro, los sentí muy forzados, vacíos, era como si los personajes estuvieran leyendo un guion planeado y todo tenía que ser dicho así y solo así; no me los estaba creyendo y de nuevo, mi interés se perdía.
Por otro lado, temas que aborda la historia, en especial los relacionados con la brujería y los exorcismos cautivaron mi atención prácticamente durante una buena parte de la novela y era de alguna manera lo que me hacía continuar. Pero aquí vamos otra vez: por mencionar un ejemplo —que hay más—, hay una escena casi a las tres cuartas partes del libro que tiene que ver con alguno de estos temas e involucra a uno de los personajes principales; todo parecía que sería la escena perfecta, que vendría un punto decisivo en la historia y tendría un desarrollo muy elaborado; cuando de pronto, ¡puff!, en un párrafo queda resuelto el problema y me hizo preguntarme: “¿eso es todo? ¿De verdad, tanto para esto?”
Ahora, viene lo que para mí fue lo que más me decepcionó: el final. Ojo, no voy a hablar del final para no hacer spoilers de ningún tipo, no obstante, solo diré que fue un final, que si bien esperaba, se termina quedando corto después de ver el rumbo que estaba llevando la historia desde su inicio. Sinceramente esperaba otra cosa, quizá no en el sentido de cómo acaba, sino en la ejecución, en la forma de terminarlo. Y no, no sufrí con el final, ni me emocioné, ni me enojé, todo fue un simple “¿y así acaba?”. Lo siento, pero no pude sentir ningún tipo de conexión con ese desenlace, más bien indiferencia.
Llego a este punto de mi reseña y me pongo a pensar que 3 estrellas quizá sea mucho para lo que llevo escrito, parece más una reseña negativa si lo analizo detenidamente; pero no, en realidad no la considero como tal.
Cuando reflexiono más profundamente acerca de toda la historia y lo que fue mi experiencia leyéndola, llego a la conclusión de que es lo que la obra me quiso trasmitir todo este tiempo, una sensación pesimista, depresiva incluso. Porque la realidad es que esta obra es absolutamente decadente, es más, es la decadencia en persona. No pude evitar pensar en Émile Zola cuando terminé de leer esta novela, y recordé que en un libro de Zola uno debe perder toda esperanza cuando inicias la lectura, evitar quizá encariñarte con algún personaje o dos, ya que nunca se sabe lo que podría venir más adelante. Tal vez, si no fuera por esos obstáculos que me fui encontrando a lo largo de Akelarre —los cuales mencioné anteriormente— la experiencia hubiera sido más enriquecedora.
Finalmente, quiero agregar que me dio mucho gusto haber leído este libro en un club de lectura en el que tuvimos la posibilidad de hablar con el autor al final, lo cual fortaleció la experiencia al máximo.
Pienso que, en resumen, esta novela no es fácil de recomendar, en principio por los temas que pueden no ser del interés o agrado de todos, y en segundo lugar, por la historia en sí misma; así que por ahora prefiero no decir más y me limitaré a solo dejar claras mis impresiones por si le son de utilidad a alguien.
“Sintió una tristeza inmensa al darse cuenta de que no le hacía falta a nadie, ninguna persona la extrañaba, ningún ser humano necesitaba verla o escuchar su voz. Estaba completamente sola en un mundo que le daba la impresión de no ser el suyo, una especie de planeta por el que tenía que caminar, y dormir, y comer solo para guardar las apariencias y fingir que era como ellos.”
July 5, 2022
Buen libro. No es lo mejor que he leído del autor, pero me entretuvo.
Es difícil explicar de qué va este libro, así que mejor voy a nombrar los personajes que lo componen y las situaciones a las que se enfrentan.
Por un lado Frank Molina, investigador privado que se enfrenta al caso de un asesino serial que está matando prostitutas en la ciudad de Bogotá.
Lázaro, Padre Bautista que se enfrenta a su pasado cuando era médico, y a casos de posesión demoniaca.
Leticia, estudiante de artes la cual se da cuenta de que posee un don, pero no entiende muy bien cómo manejarlo.
Lo primero a destacar es que la historia se nos cuenta desde tres personajes diferentes, eso le da un aire de frescura al libro, ya que le suceden situaciones particulares a dichos personajes, además el autor aplica la primera, o tercera persona a la narración dependiendo del personaje. Eso hace bastante ágil la lectura.
Otro aspecto que me gustó mucho, fue la historia de Frank Molina, este personaje ya había aparecido en otros libros del autor, pero no se había profundizado mucho en él. Acá está desarrollado excelentemente. Además de que mientras va persiguiendo el asesino, yo daba por sentado a cierto personaje como el culpable, pero al final no fue así, eso es algo a destacar, fue bastante inesperado.
Las historias de los otros dos personajes son interesantes en algunas partes, pero en otras siento que caían en repeticiones, y que no fueron tan bien desarrollados, incluso sentí que el autor se apresuró al final con sus historias.
El desenlace me ha gustado mucho, me ha dejado una sensación de desolación, me hizo sentir sin esperanza. Algo que se vino tejiendo desde el inicio, siempre tuve la sensación de que no había final feliz en este libro.
Otro aspecto que no me gustó, es que hubo situaciones que se sintieron muy forzadas para tratar de relacionar a los personajes, algo así como un as bajo la manga del autor para que la historia no se extendiera.
Este libro tiene muchas críticas a la religión católica, así que sí son demasiado creyentes no lean este libro, porque tiene escenas que pueden sentirse como ofensas muy directas.
También si son ligeros de estómago, no lo lean, tiene escenas grotescas, muy sangrientas y descriptivas, en lo personal he leído peores, pero no está de más advertir sobre esto. De los libros que he leído de este autor, este es el más sangriento.
La narrativa de Mendoza es simple, pero poderosa, si es cierto que este libro está lleno de una visión negativa sobre la vida, algo que es característico del autor en sus libros, pero que mejor que la literatura para expresar la inconformidad con la sociedad. Podemos decir que es una visión negativa, pero ¿Podemos decir que es una visión errada?
Si gustan pueden pasarse por este libro, o por el autor, no pierden de nada. Eso sí, me gustaría decirles que no se dejen llevar por algunos comentarios sobre este autor. He leído personas aquí en Goodreads que lo critican severamente, diciendo que su literatura es bastante pobre, que es peor que Paulo Cohelo, y que es uno de los peores escritores colombianos. De opiniones los colores, cada cual lo que piense está bien. Pero discrepo totalmente de estos comentarios. Desde mi labor como Licenciado, me he encontrado en colegios a estudiantes entre los 12 y 17 años que nunca se habían interesado por la lectura, y gracias a los libros de este autor han empezado el ejercicio de leer, algo muy similar me pasó a mí, y un autor que incite a la lectura, es un autor al cual se le debe apreciar, no todos los escritores logran cautivar a personas no lectoras a encaminarse en este ejercicio. ¿Su escritura es simple? sí, pero sus historias pueden llegar a ser entretenidas e incluso cautivadoras, y no está de más darle una oportunidad.
"Destrozamos el planeta entero, asesinamos a nuestras hermanas las aves, a nuestros hermanos los peces, a nuestros gemelos los mamíferos. Convertimos la Tierra en un basurero y dejamos el aire pintado de negro, de smog. El Siniestro logró apoderarse del planeta entero y cada uno de sus lacayos le sirvió de apoyo, fue su cómplice y su compinche. Armó guerras, bombardeó ciudades enteras, masacró poblaciones completas y convirtió un paraíso verde y florido en un infierno atiborrado de latas de gaseosa y plásticos que no son biodegradables. Y nadie se dio cuenta, nadie se quejó, nadie se indignó por ello"
Es difícil explicar de qué va este libro, así que mejor voy a nombrar los personajes que lo componen y las situaciones a las que se enfrentan.
Por un lado Frank Molina, investigador privado que se enfrenta al caso de un asesino serial que está matando prostitutas en la ciudad de Bogotá.
Lázaro, Padre Bautista que se enfrenta a su pasado cuando era médico, y a casos de posesión demoniaca.
Leticia, estudiante de artes la cual se da cuenta de que posee un don, pero no entiende muy bien cómo manejarlo.
Lo primero a destacar es que la historia se nos cuenta desde tres personajes diferentes, eso le da un aire de frescura al libro, ya que le suceden situaciones particulares a dichos personajes, además el autor aplica la primera, o tercera persona a la narración dependiendo del personaje. Eso hace bastante ágil la lectura.
Otro aspecto que me gustó mucho, fue la historia de Frank Molina, este personaje ya había aparecido en otros libros del autor, pero no se había profundizado mucho en él. Acá está desarrollado excelentemente. Además de que mientras va persiguiendo el asesino, yo daba por sentado a cierto personaje como el culpable, pero al final no fue así, eso es algo a destacar, fue bastante inesperado.
Las historias de los otros dos personajes son interesantes en algunas partes, pero en otras siento que caían en repeticiones, y que no fueron tan bien desarrollados, incluso sentí que el autor se apresuró al final con sus historias.
El desenlace me ha gustado mucho, me ha dejado una sensación de desolación, me hizo sentir sin esperanza. Algo que se vino tejiendo desde el inicio, siempre tuve la sensación de que no había final feliz en este libro.
Otro aspecto que no me gustó, es que hubo situaciones que se sintieron muy forzadas para tratar de relacionar a los personajes, algo así como un as bajo la manga del autor para que la historia no se extendiera.
"—Le pongo un ejemplo, padre: ¿dónde está Dios cuando venden a un niño o a una niña como esclavos? ¿Dónde está Dios cuando multitudes enteras perecen de hambre? ¿Dónde está Dios cuando un obrero llega a su casa sin un centavo porque su patrón le ha robado su sueldo?"
Este libro tiene muchas críticas a la religión católica, así que sí son demasiado creyentes no lean este libro, porque tiene escenas que pueden sentirse como ofensas muy directas.
También si son ligeros de estómago, no lo lean, tiene escenas grotescas, muy sangrientas y descriptivas, en lo personal he leído peores, pero no está de más advertir sobre esto. De los libros que he leído de este autor, este es el más sangriento.
La narrativa de Mendoza es simple, pero poderosa, si es cierto que este libro está lleno de una visión negativa sobre la vida, algo que es característico del autor en sus libros, pero que mejor que la literatura para expresar la inconformidad con la sociedad. Podemos decir que es una visión negativa, pero ¿Podemos decir que es una visión errada?
Si gustan pueden pasarse por este libro, o por el autor, no pierden de nada. Eso sí, me gustaría decirles que no se dejen llevar por algunos comentarios sobre este autor. He leído personas aquí en Goodreads que lo critican severamente, diciendo que su literatura es bastante pobre, que es peor que Paulo Cohelo, y que es uno de los peores escritores colombianos. De opiniones los colores, cada cual lo que piense está bien. Pero discrepo totalmente de estos comentarios. Desde mi labor como Licenciado, me he encontrado en colegios a estudiantes entre los 12 y 17 años que nunca se habían interesado por la lectura, y gracias a los libros de este autor han empezado el ejercicio de leer, algo muy similar me pasó a mí, y un autor que incite a la lectura, es un autor al cual se le debe apreciar, no todos los escritores logran cautivar a personas no lectoras a encaminarse en este ejercicio. ¿Su escritura es simple? sí, pero sus historias pueden llegar a ser entretenidas e incluso cautivadoras, y no está de más darle una oportunidad.
April 30, 2022
"El problema del mal es que siempre lo imaginamos allá, afuera, como si no tuviéramos nada que ver con él. El mal es una categoría que nos gusta analizar en los otros. ¿Por qué? Porque nos da terror enfrentar la dosis de maldad (mucha, por lo general) que llevamos dentro".
Se requiere de mucha valentía para hacer lo que Mendoza hizo aquí con sus personajes. Hace tiempo que no veía una destrucción tan impactante. Mendoza eliminó cualquier vestigio de esperanza y creó una obra sucia y triste, deprimente por su crueldad y su fiel retrato de nuestra más que posible perdición. Estamos al borde del abismo, y Mendoza lo sabe, esta es su manera de deshacerse de aquellas ideas positivas que, más que ayudar, solo nos cubren con un velo de mentiras. Mendoza sabe que todo está perdido, y por eso no tiene piedad con sus personajes y los destruye por completo.
Mario Mendoza es un autor de mucha importancia para la literatura colombiana actual, no por su calidad (que para muchos es cuestionable), sino por su gran influencia. Sus libros son una de las razones por las que muchos jóvenes leen, y eso se lo agradezco. Sí, su obra no es lo más elaborado del mundo, y suele caer en errores que encasillan a sus libros en la denominada "literatura comercial" (vista con malos ojos por los pseudointelectuales de internet), pero no puede negarse, por lo menos en Akelarre, la labor de investigación realizada. Mendoza despliega su cultura y crea una historia cargada de influencias que hacen a su libro un ente vivo. Destaco especialmente la influencia de Carlos Fuentes y su libro Aura. Mendoza utiliza en Akelarrea los tres narradores (primera, segunda y tercera persona), y consigue que funcione, lo cual es de admirar (sobre todo el uso de segunda persona, pues logra que encarnes a Frank Molina).
Es una obra que está muy lejos de ser perfecta, pero ya quisieran varias novelas juveniles tener la calidad de este libro. El principal error que le veo es su falta de atmósfera. Sí, estamos en la Bogotá sucia y desagradable, pero me hizo falta más ambientación para sentirme incómodo de verdad durante los exorcismos o las escenas más violentas del libro. Sin esta característica se siente más como una película de terror ligera que como un libro, pero puedo entender que el estilo de Mendoza no busca una complejidad como la que desearía leer, pues al final no deja de apuntar a una audiencia más joven (o menos experimentada en la lectura).
A pesar de sus errores, me parece un libro muy destacable, y probablemente uno de los mejores de Mendoza (aunque no he leído toda su obra). Eso sí, muy deprimente, para nada recomendado para personas que ven todo color de rosa. Este libro es una bofetada en seco.
Se requiere de mucha valentía para hacer lo que Mendoza hizo aquí con sus personajes. Hace tiempo que no veía una destrucción tan impactante. Mendoza eliminó cualquier vestigio de esperanza y creó una obra sucia y triste, deprimente por su crueldad y su fiel retrato de nuestra más que posible perdición. Estamos al borde del abismo, y Mendoza lo sabe, esta es su manera de deshacerse de aquellas ideas positivas que, más que ayudar, solo nos cubren con un velo de mentiras. Mendoza sabe que todo está perdido, y por eso no tiene piedad con sus personajes y los destruye por completo.
Mario Mendoza es un autor de mucha importancia para la literatura colombiana actual, no por su calidad (que para muchos es cuestionable), sino por su gran influencia. Sus libros son una de las razones por las que muchos jóvenes leen, y eso se lo agradezco. Sí, su obra no es lo más elaborado del mundo, y suele caer en errores que encasillan a sus libros en la denominada "literatura comercial" (vista con malos ojos por los pseudointelectuales de internet), pero no puede negarse, por lo menos en Akelarre, la labor de investigación realizada. Mendoza despliega su cultura y crea una historia cargada de influencias que hacen a su libro un ente vivo. Destaco especialmente la influencia de Carlos Fuentes y su libro Aura. Mendoza utiliza en Akelarrea los tres narradores (primera, segunda y tercera persona), y consigue que funcione, lo cual es de admirar (sobre todo el uso de segunda persona, pues logra que encarnes a Frank Molina).
Es una obra que está muy lejos de ser perfecta, pero ya quisieran varias novelas juveniles tener la calidad de este libro. El principal error que le veo es su falta de atmósfera. Sí, estamos en la Bogotá sucia y desagradable, pero me hizo falta más ambientación para sentirme incómodo de verdad durante los exorcismos o las escenas más violentas del libro. Sin esta característica se siente más como una película de terror ligera que como un libro, pero puedo entender que el estilo de Mendoza no busca una complejidad como la que desearía leer, pues al final no deja de apuntar a una audiencia más joven (o menos experimentada en la lectura).
A pesar de sus errores, me parece un libro muy destacable, y probablemente uno de los mejores de Mendoza (aunque no he leído toda su obra). Eso sí, muy deprimente, para nada recomendado para personas que ven todo color de rosa. Este libro es una bofetada en seco.
April 2, 2020
Una novela más de Mario Mendoza, una trama no muy alejada de lo que ha venido produciendo a lo largo de estos años. Si se siguen de cerca sus libros, es fácil identificar que los personajes no dejan de ser producidos bajo un perfil muy similar (y no se trata únicamente de Frank Molina, que directamente atraviesa varios de sus libros), en este caso se repite casi al pie de la letra la fórmula de Satanás: tres historias separadas que se entretejen conforme avanza el libro y terminan encontrándose en una escena final, un artista, un sacerdote y un individuo extraño, atormentado por los "demonios" y los trastornos mentales, se repiten los exorcismos, la descripción morbosa del homicidio, los pasajes de la biblia, las referencias extraídas de la religión y las disertaciones de la maldad humana y el final apocalíptico que se avecina; todo esto en el fondo de la ya tan descrita Bogotá: gótica, gris, maldita. De la misma manera, se hace una combinación casi forzada de conceptos rebuscados: referencias a leyendas urbanas, ideologías políticas, religiones, mitologías, personajes, figuras y teorías conspirativas, muchos de los cuales fueron ya incluidos en Diario del fin del mundo, Buda Blues, La melancolía de los feos, entre otros libros anteriores.
Para la construcción de la atmósfera oscura que desea crear en la novela, además de la premisa recurrente de un destino fatal que espera a los protagonistas y que se repite constantemente en cada capítulo, se acude a la narración de escenas en extremo fuertes, llevadas al límite de la crueldad, contando con exceso de detalles asesinatos y violaciones, esto puede no ser apto para muchas audiencias, pero es el recurso que busca hacer llamativo al libro y llevarlo finalmente a combinar con el diseño de la portada, el título y la reputación que se han creado las sucesivas novelas.
Por otro lado, desde el título se crea una expectativa respecto al papel de los personajes femeninos, la inclusión del tema de las brujas, reconocido por hacer alusión al empoderamiento femenino, termina siendo desperdiciado; el autor termina por seguir una vez más su fórmula, aquella en la que las mujeres son ubicadas en la trama, únicamente para terminar protagonizando escenas eróticas convenientemente ubicadas en momentos "clave" de la narración, demostrando la incapacidad del autor para crear los personajes femeninos originales y fuera de este ideal: mujeres mistificadas, envueltas en vidas marginales y circunstancias que siempre terminan llevándolas a ser parte de las mismas narrativas, sirviendo a los personajes masculinos para satisfacer sus deseos y fantasías, cumplir sus destinos o explorar una faceta oculta de la vida.
Sin embargo, la historia puede ser llamativa, y la recomiendo a aquellos que quieran acercarse a los libros de Mendoza, sin conocer de antemano lo predecible de sus narrativas.
Para la construcción de la atmósfera oscura que desea crear en la novela, además de la premisa recurrente de un destino fatal que espera a los protagonistas y que se repite constantemente en cada capítulo, se acude a la narración de escenas en extremo fuertes, llevadas al límite de la crueldad, contando con exceso de detalles asesinatos y violaciones, esto puede no ser apto para muchas audiencias, pero es el recurso que busca hacer llamativo al libro y llevarlo finalmente a combinar con el diseño de la portada, el título y la reputación que se han creado las sucesivas novelas.
Por otro lado, desde el título se crea una expectativa respecto al papel de los personajes femeninos, la inclusión del tema de las brujas, reconocido por hacer alusión al empoderamiento femenino, termina siendo desperdiciado; el autor termina por seguir una vez más su fórmula, aquella en la que las mujeres son ubicadas en la trama, únicamente para terminar protagonizando escenas eróticas convenientemente ubicadas en momentos "clave" de la narración, demostrando la incapacidad del autor para crear los personajes femeninos originales y fuera de este ideal: mujeres mistificadas, envueltas en vidas marginales y circunstancias que siempre terminan llevándolas a ser parte de las mismas narrativas, sirviendo a los personajes masculinos para satisfacer sus deseos y fantasías, cumplir sus destinos o explorar una faceta oculta de la vida.
Sin embargo, la historia puede ser llamativa, y la recomiendo a aquellos que quieran acercarse a los libros de Mendoza, sin conocer de antemano lo predecible de sus narrativas.
September 3, 2020
En Akelarre se juntan tres historias: un detective maniacodepresivo, un sacedote que lucha contra las fuerzas malignas de su pasado y una mujer que descubre tiene poderes y visiones. Mientras vamos escuchando y conociendo sus historias a través de recuerdos en primera y segunda persona, un asesino en serie, feminicida para ser concretos, asesina mujeres y trabajadoras sexuales de una manera aterradora casi que copiándole a Jack el destripador. Eso es Akelarre, una novela negra que se sitúa en una Bogotá que podría ser cualquier ciudad del mundo donde la violencia y el sinsentido que parece venir del mal es casi que idéntico a la realidad que vivimos.
February 10, 2023
Este libro ofrece mucho tema de conversación, se notó que el escritor estuvo muy bien documentado.
Es un libro donde a través de 3 historias que se van a cruzar nos lleva por temas escabrosos y ocultos, de esos que te dejan pensando, hubo detalles grotescos por los cuales le baje una estrella y un final que no me acabo de convencer.
Durante toda la trama el escritor nos mantiene atentos y a pesar de que es oscura la historia es muy entretenida.
Es un libro donde a través de 3 historias que se van a cruzar nos lleva por temas escabrosos y ocultos, de esos que te dejan pensando, hubo detalles grotescos por los cuales le baje una estrella y un final que no me acabo de convencer.
Durante toda la trama el escritor nos mantiene atentos y a pesar de que es oscura la historia es muy entretenida.
October 6, 2021
No sé si mi calificación se queda en 2 o en 1.5 y siento que tengo mil cosas que decir.
De entrada y muy específico: no me gustó.
Me parece que si eres alguien que quiere entrar al género de la novela negra, NO LO HAGAS CON ESTE LIBRO.
La idea de novela negra combinada con tintes "paranormales" me parecía muuuy atractiva porque, sinceramente, los temas de brujas, demonios, regresiones y todo eso ME ENCANTAN, son temas de los que podría hablar por horas; es por eso que me parece que no es ni novela negra ni paranormal, como que navega en el limbo de ambas sin ser una ni la otra, no profundiza en ningún tema y hay muchas cosas que se narran "de golpe" de que en un párrafo, la chica ya había descubierto que era bruja y tenía vidas pasadas (por poner un ejemplo).
Al final de la historia sólo pude decir "¡¿Qué?! ¡¿Y esto qué?!", bloqueé la Kindle y me puse a buscar otro libro que me quitara ese sabor de boca tan amargo jaja.
Además no puedo dejar de pensar en estas frasesitas "provida" en la que se refieren a las personas que abortaron como "asesinas" y ponen la "ironía" de "asesinas siendo asesinadas"... sólo podía pensar "no es él, es el personaje... no es él, es el personaje".
¿Lo rescatable? Mmmm el intento de mezclar lo paranormal con la novela negra, podría ser.
Es el primer libro que leo de este autor y la verdad me dejó sin ganas de leer otro.
De entrada y muy específico: no me gustó.
Me parece que si eres alguien que quiere entrar al género de la novela negra, NO LO HAGAS CON ESTE LIBRO.
La idea de novela negra combinada con tintes "paranormales" me parecía muuuy atractiva porque, sinceramente, los temas de brujas, demonios, regresiones y todo eso ME ENCANTAN, son temas de los que podría hablar por horas; es por eso que me parece que no es ni novela negra ni paranormal, como que navega en el limbo de ambas sin ser una ni la otra, no profundiza en ningún tema y hay muchas cosas que se narran "de golpe" de que en un párrafo, la chica ya había descubierto que era bruja y tenía vidas pasadas (por poner un ejemplo).
Al final de la historia sólo pude decir "¡¿Qué?! ¡¿Y esto qué?!", bloqueé la Kindle y me puse a buscar otro libro que me quitara ese sabor de boca tan amargo jaja.
Además no puedo dejar de pensar en estas frasesitas "provida" en la que se refieren a las personas que abortaron como "asesinas" y ponen la "ironía" de "asesinas siendo asesinadas"... sólo podía pensar "no es él, es el personaje... no es él, es el personaje".
¿Lo rescatable? Mmmm el intento de mezclar lo paranormal con la novela negra, podría ser.
Es el primer libro que leo de este autor y la verdad me dejó sin ganas de leer otro.
October 4, 2025
Yo llegué a este libro por la portada y el nombre. 🙃 Es la primera vez que leo algo del autor y no sé como definirlo. 😬 Es la primera novela negra que leo en general y definitivamente ha tenido un impacto en mi. Además que ya tenía tiempo que no leía a un autor latino.
Esta novela es narrada por 3 personajes un detective, un sacerdote y una bruja. Algunos en primera persona y otro en tercera. Son muchisimas cosas que estan pasando a la vez y las perspectivas ni sé diga. Estamos ante un imitador de Jack el Destripador perseguido por el detective Frank Molina. Un sacerdote con un pasado oscuro y la presencia de demonios. Y por último una chica artista con poderes proféticos. 🤯
De una vez les digo que no es apto para personas religiosas, si no estás dispuesto/a a leer cuestionamientos sobre tu religión y tu Dios entonces no lo leas. Esto te va a aparecer un sacrilegio total.
Cuando dicen akelarre a mi mente vienen imagenes de un grupo de mujeres brujas y unidas pero el akelarre de Mario Molina es otra cosa, aunque no sé deja de lado la imagen de las brujas medievalesy el misticismo occidental. Tenemos temas de teología (mucho cuestionamiento), brujería, demonología, incubos, sucubos, machismo, crímenes, corrupción y muchos temas.
Es una joyita, no tenía idea que el personaje del detective Frank Molina ya tenía presencia en otras novelas del autor lo cual me parece interesante porque aquí tenemos su desenlace. Las descripciones del autor son brutales, todo es tan explícito que terminaba toda asqueada porque había momentos donde no quería seguir. Hay desmembramientos de mujeres, violaciones, orgias, rituales, posesiones demoniacas y todo aquello que muy en el fondo que nos aterra.
No solamente son temas de seres sobrenaturales sino terrenales y la decadencia de nuestro planeta. Es un horror de manera espiritual pero lo que más me daba miedo era el terrenal.
Apenas vi una entrevista del autor y estoy gratamente sorprendida, me encantó como habló y los amplios conocimientos que tiene de la literatura gótica inglesa que es justo lo que me encanta. En verdad mis respetos es de los pocos autores masculinos que he admirado últimamente. Hay homenajes a distintas novelas góticas clásicas.
Claro que lo recomiendo, no es una lectura ligera pero tampoco es tediosa es buenisima y adictiva. Las 5 estrellas sé quedan cortas.
Esta novela es narrada por 3 personajes un detective, un sacerdote y una bruja. Algunos en primera persona y otro en tercera. Son muchisimas cosas que estan pasando a la vez y las perspectivas ni sé diga. Estamos ante un imitador de Jack el Destripador perseguido por el detective Frank Molina. Un sacerdote con un pasado oscuro y la presencia de demonios. Y por último una chica artista con poderes proféticos. 🤯
De una vez les digo que no es apto para personas religiosas, si no estás dispuesto/a a leer cuestionamientos sobre tu religión y tu Dios entonces no lo leas. Esto te va a aparecer un sacrilegio total.
Cuando dicen akelarre a mi mente vienen imagenes de un grupo de mujeres brujas y unidas pero el akelarre de Mario Molina es otra cosa, aunque no sé deja de lado la imagen de las brujas medievalesy el misticismo occidental. Tenemos temas de teología (mucho cuestionamiento), brujería, demonología, incubos, sucubos, machismo, crímenes, corrupción y muchos temas.
Es una joyita, no tenía idea que el personaje del detective Frank Molina ya tenía presencia en otras novelas del autor lo cual me parece interesante porque aquí tenemos su desenlace. Las descripciones del autor son brutales, todo es tan explícito que terminaba toda asqueada porque había momentos donde no quería seguir. Hay desmembramientos de mujeres, violaciones, orgias, rituales, posesiones demoniacas y todo aquello que muy en el fondo que nos aterra.
No solamente son temas de seres sobrenaturales sino terrenales y la decadencia de nuestro planeta. Es un horror de manera espiritual pero lo que más me daba miedo era el terrenal.
Apenas vi una entrevista del autor y estoy gratamente sorprendida, me encantó como habló y los amplios conocimientos que tiene de la literatura gótica inglesa que es justo lo que me encanta. En verdad mis respetos es de los pocos autores masculinos que he admirado últimamente. Hay homenajes a distintas novelas góticas clásicas.
Claro que lo recomiendo, no es una lectura ligera pero tampoco es tediosa es buenisima y adictiva. Las 5 estrellas sé quedan cortas.
October 4, 2021
«El amor de Miranda era una amor casero, de sopa caliente y chimenea encendida. Pero cuando estuvieras atrapado en medio de la estepa, entre la nieve, atravesado por la tormenta, ella te dejaría allí afuera para que te murieras de frío. Y ese descubrimiento te desilusionó profundamente»
Mario Mendoza no es mi escritor favorito, y de hecho, está lejos de serlo. Pero, sin duda alguna, cuando quiero un libro en el que me quiero sumergir para no soltarlo hasta terminar, ese debe ser, sin lugar a duda, uno de Mendoza. En Akelarre como en las obras anteriores que he leído del autor, uno queda completamente hipnotizado por la narración y ese vértigo por saber, línea a línea, cual será el desenlace que Mario Mendoza ofrecerá a sus lectores.
No voy a entrar a describir la temática del libro. Mucho de ello se ha hecho sobre esta obra en esta red. Más bien resaltaré la capacidad de Mendoza para suscribir su obra en una ciudad tan nuestra, tan del tercer mundo, que abrazamos como propia. Esa ciudad oscura, insegura, triste, ensimismada y tan escaza de oxígeno. Esa, contraria a la que nos venden los gobernantes de turno y el marketing, se constituye en la ciudad de Mendoza y por eso encuentra un acoplamiento con los lectores: Esa ciudad que parece apocalíptica, es realmente el entorno en el que crece la mayor parte de los ciudadanos de nuestros países, y como consecuencia de ello, el éxito de la trama narrativa de Mario Mendoza, está asegurada.
De igual manera, entre esas historias alucinantes, que nos parecen de una novela de terror, Encontramos la manera de encontrarnos con nuestra sociedad. La que heredamos de nuestros padres, la que pronto estará en nuestras manos para transformar (o claro, para terminar de destruir). La invitación de Mendoza con cada obra suya es a hacer un alto en el camino y destruir nuestras verdades, atacar las ideas que constituyen el andamiaje principal de la sociedad.
Lo anormal, lo que no se arropa sobre los paradigmas de la construcción de la sociedad occidental, lo hemos arrinconado en guetos. En clínicas psiquiátricas, en barrios periféricos, en el campo, en fosas comunes, y claro, en las cárceles. Hay todo un mundo que habita en una dimensión paralela a la que creemos habitar todos nosotros. Agradezco notablemente que al leer a Mario Mendoza, pueda recordar que esa dimensión existe, y que lo que yo considero como normal, no es más que un sesgo, una costra puesta en el cerebro, que juzga como verdad, algo que es una simple creencia.
April 1, 2021
Esta novela es un gran Sí y un gran No para mí. Creo que debí conocer antes a Frank para sentirla más, pero en general, vale la pena.
Aún así no puedo dejar pasar por alto el gran impacto que me ha causado como se trata el tema ecológico y de la sobrepoblación, que me parece un tema muy interesante. Además como bogotana, me encantó leer por una vez sobre lugares que en realidad conocía y palabras únicas que no suelo leer sobre papel.
Lamentablemente tampoco puedo dejar pasar por alto el sinsabor de las cosas que sobran o faltan, me habría encantado que la historia de Leticia se cruzara y complementara con las otras dos pero le faltó eso o de lo contrario sobró bastante; además que con ese final? Algunas cosas fueron muy sacadas de la manga y poco realistas para los personajes al punto que ni siquiera lo registré bien. Se que los finales tristes son cotidianos en la vida pero este era un final si sentido para que fuera así.
Aún así no puedo dejar pasar por alto el gran impacto que me ha causado como se trata el tema ecológico y de la sobrepoblación, que me parece un tema muy interesante. Además como bogotana, me encantó leer por una vez sobre lugares que en realidad conocía y palabras únicas que no suelo leer sobre papel.
Lamentablemente tampoco puedo dejar pasar por alto el sinsabor de las cosas que sobran o faltan, me habría encantado que la historia de Leticia se cruzara y complementara con las otras dos pero le faltó eso o de lo contrario sobró bastante; además que con ese final? Algunas cosas fueron muy sacadas de la manga y poco realistas para los personajes al punto que ni siquiera lo registré bien. Se que los finales tristes son cotidianos en la vida pero este era un final si sentido para que fuera así.
May 17, 2021
3,5⭐️
La verdad es que me gusto mucho, no me esperaba esa historia. Fue de esos libros incómodos de leer por los temas que trata sin embargo me tenia muy atrapada y no lo podía dejar de leer.
Lo Califique con 3,5 estrellas porque siento que a veces era repetitivo cuando hablaba de ciertos temas. Otro factor es que nunca había leído un libro que tratara de temas paranormales y no ha sido de mis temas favoritos, sin embargo le doy crédito al autor, ya que si me atrapo la historia.
La verdad es que me gusto mucho, no me esperaba esa historia. Fue de esos libros incómodos de leer por los temas que trata sin embargo me tenia muy atrapada y no lo podía dejar de leer.
Lo Califique con 3,5 estrellas porque siento que a veces era repetitivo cuando hablaba de ciertos temas. Otro factor es que nunca había leído un libro que tratara de temas paranormales y no ha sido de mis temas favoritos, sin embargo le doy crédito al autor, ya que si me atrapo la historia.
December 12, 2019
¡El libro de mi vida!
Mario Mendoza le da un fin al mundo que en tantos años le costó crear. Involucra todos mis temas favoritos: Religión, ocultismo, exorcismo, política, asesinatos. A este libro no le puedo reprochar nada; la inteligencia de este autor para enlazar a los tres personajes es algo increíble y se merece mis mayores respetos.
¡Aplausos y admiración para mí autor favorito!
Mario Mendoza le da un fin al mundo que en tantos años le costó crear. Involucra todos mis temas favoritos: Religión, ocultismo, exorcismo, política, asesinatos. A este libro no le puedo reprochar nada; la inteligencia de este autor para enlazar a los tres personajes es algo increíble y se merece mis mayores respetos.
¡Aplausos y admiración para mí autor favorito!
April 25, 2021
Dicen por ahí que este libro tiene un gran trasfondo del cual no se nada y creo es por eso no me terminó de explotar la cabeza. Para mi fue un libro sin más, me gustó la forma de contar la historia. El libro es entretenido. El final te puede gustar más o menos. Sin más.
October 6, 2024
Muy interesante.
Aunque Mario Mendoza no es de mis autores favoritos, siempre logra engancharme y entretenerme con sus libros.
De esta historia rescato su manera de contarla, el hacerlo a través de tres personas diferentes con un tipo de narrador distinto para cada uno, es un detalle que me agradó.
También rescato ese final desesperanzador pero necesario (muy al estilo de este autor).
Aunque Mario Mendoza no es de mis autores favoritos, siempre logra engancharme y entretenerme con sus libros.
De esta historia rescato su manera de contarla, el hacerlo a través de tres personas diferentes con un tipo de narrador distinto para cada uno, es un detalle que me agradó.
También rescato ese final desesperanzador pero necesario (muy al estilo de este autor).
December 27, 2020
JOYAAA.
Aquí les dejo la reseña:
https://www.youtube.com/watch?v=QMRf7...
Y aquí les dejo la entrevista con el autor:
https://www.youtube.com/watch?v=hkzCl...
Aquí les dejo la reseña:
https://www.youtube.com/watch?v=QMRf7...
Y aquí les dejo la entrevista con el autor:
https://www.youtube.com/watch?v=hkzCl...
November 11, 2022
Y aquí la primera reseña en la que incurro en aquello que denominan «opinión impopular»:
Comencemos por contar que jamás había leído a este escritor coterráneo, que es tan mencionado por lectoras y lectores de mi país. Dadas las maravillas que se hablan de él, asumí esta lectura con demasiadas expectativas, que al final no fueron satisfechas. Perdónenme, amantes de la escritura de Mario; quizá deba darle la oportunidad con otras novelas. Pero eso será más adelante.
Sinceramente, esperaba un poco más. Me topé con varias construcciones literarias que carecen de originalidad; también de algunos diálogos forzados, que no parecen provenir del carácter de uno u otro personaje; y pasajes muy predecibles. Me faltó profundidad de detalles en las escenas cumbre, y no me refiero a lo explícito de algunos hechos (que de esto sobra), sino a que pasaban demasiado rápido, así que permitían que se perdiera la tensión o se liberara muy pronto. Para acabar de ajustar, no voy con esas tramas donde explícitamente se predice la tragedia de los personajes, y al final esta termina cumpliéndose, como en las obras de teatro antiguas, donde todo dependía del designio de los dioses y el destino era invariable, preestablecido.
No obstante, tampoco puedo decir que me disgustó del todo. Hubo momentos en que sentí algo de intriga, especialmente al principio: me formé mil teorías en la mente. Y cabe resaltar el aspecto ancestral de la única protagonista mujer entre los tres personajes principales, que, supongo, da el nombre a la novela. Personalmente, me faltó más de ella, más de esa conexión con su pasado y más protagonismo en medio del caos; esto es, que fuese un personaje más activo, con mayor capacidad de decisión y de influir en el desenlace de la trama.
Comencemos por contar que jamás había leído a este escritor coterráneo, que es tan mencionado por lectoras y lectores de mi país. Dadas las maravillas que se hablan de él, asumí esta lectura con demasiadas expectativas, que al final no fueron satisfechas. Perdónenme, amantes de la escritura de Mario; quizá deba darle la oportunidad con otras novelas. Pero eso será más adelante.
Sinceramente, esperaba un poco más. Me topé con varias construcciones literarias que carecen de originalidad; también de algunos diálogos forzados, que no parecen provenir del carácter de uno u otro personaje; y pasajes muy predecibles. Me faltó profundidad de detalles en las escenas cumbre, y no me refiero a lo explícito de algunos hechos (que de esto sobra), sino a que pasaban demasiado rápido, así que permitían que se perdiera la tensión o se liberara muy pronto. Para acabar de ajustar, no voy con esas tramas donde explícitamente se predice la tragedia de los personajes, y al final esta termina cumpliéndose, como en las obras de teatro antiguas, donde todo dependía del designio de los dioses y el destino era invariable, preestablecido.
No obstante, tampoco puedo decir que me disgustó del todo. Hubo momentos en que sentí algo de intriga, especialmente al principio: me formé mil teorías en la mente. Y cabe resaltar el aspecto ancestral de la única protagonista mujer entre los tres personajes principales, que, supongo, da el nombre a la novela. Personalmente, me faltó más de ella, más de esa conexión con su pasado y más protagonismo en medio del caos; esto es, que fuese un personaje más activo, con mayor capacidad de decisión y de influir en el desenlace de la trama.
November 1, 2021
La historia se desarrolla en Bogota y nos presenta la vida de tres personajes, Frank Molina un detective con bipolaridad, me recordó mucho a Sherlock; Frank esta ayudando a resolver unos asesinatos brutales que han estado sucediendo en una zona específica de Bogota (un sería killer esta asesinando prostitutas) por otra parte tenemos a Lazaro , un sacerdote con un pasado muy inquietante y finalmente Leticia una joven artista, afrodescendiente que cuenta con poderes videntes y cuya vidas pasada fue una bruja. La historia de los tres personajes se entrelaza y el karma de sus actos pasados los persigue y ahora le pasa factura. El final en lo personal no me gusto para nada aunque la historia en general me engancho mucho, el final me decepcionó. 3 1/2 ⭐️
February 8, 2024
Tres historias de lo más perturbadoras que al final de cuentas vienen siendo una misma. 🤯
May 7, 2019
Reaparece Frank Molina, el investigador privado de la Bogotá oculta, de esa Bogotá desapercibida por casi todos, de la que nadie quiere saber: de ciudad Gótica.
Molina persigue a un imitador de Jack el destripador, a un asesino serial que se enfoca sólo en mujeres.
En la historia confluyen varias voces que son los distintos personajes de la novela: Frank Molina, que habla desde una segunda persona del singular; el sacerdote Lázaro, que nos habla desde el yo; y la vidente Leticia Almanza, que desde la tercera persona del singular nos cuenta su historia.
En sí, una narración llena de voces diversas, de una amplia polifonía.
Cada personaje sabiendo poco del otro, va intuyéndose; van soñándose a distancia, completando el triángulo de ese destino que tiene marcado.
Molina persigue a un imitador de Jack el destripador, a un asesino serial que se enfoca sólo en mujeres.
En la historia confluyen varias voces que son los distintos personajes de la novela: Frank Molina, que habla desde una segunda persona del singular; el sacerdote Lázaro, que nos habla desde el yo; y la vidente Leticia Almanza, que desde la tercera persona del singular nos cuenta su historia.
En sí, una narración llena de voces diversas, de una amplia polifonía.
Cada personaje sabiendo poco del otro, va intuyéndose; van soñándose a distancia, completando el triángulo de ese destino que tiene marcado.
November 8, 2020
Fue mi primer acercamiento con la novela negra y la primera vez que leo a Mario Mendoza.
Trata la historia de Frank, Leticia y Lázaro, que gracias a la investigación sobre asesinatos en serie, se unirán y se enfrentarán a sus propios demonios... literalmente 😰 Es una novela abundante en conocimientos psicológicos, lo que la hace mucho más que una historia, pues nos abrirá un canal hacia nuestra percepción de la realidad y de nosotros mismos, y nos hará cuestionarnos muchos aspectos importantes de la existencia.
Recomiendo mucho a este autor, que desde ya se ha vuelto uno de mis preferidos.
Reseña completa en https://www.instagram.com/p/CHUg4xHlr...
Trata la historia de Frank, Leticia y Lázaro, que gracias a la investigación sobre asesinatos en serie, se unirán y se enfrentarán a sus propios demonios... literalmente 😰 Es una novela abundante en conocimientos psicológicos, lo que la hace mucho más que una historia, pues nos abrirá un canal hacia nuestra percepción de la realidad y de nosotros mismos, y nos hará cuestionarnos muchos aspectos importantes de la existencia.
Recomiendo mucho a este autor, que desde ya se ha vuelto uno de mis preferidos.
Reseña completa en https://www.instagram.com/p/CHUg4xHlr...
December 22, 2020
Una novela intimista y peculiar contada a tres voces y a distintos tiempos narrativos. Aunque es cierto que tienes la sensación en algunos momentos que no te lleva a ninguna parte, consigue envolverte con una prosa sencilla y dura que hace que valores según asumes lo que quiere transmitir su autor. Un final real y sin giros épicos en consonancia con el desarrollo de la novela y unos personajes aunque en cierta manera previsibles totalmente humanos.
April 20, 2019
Un libro escrito como novela negra, trata unos temas muy fuertes que hacen que la lectura sea un poco estricta para construir los personajes. Un final no esperado, pero a su ves construido en un desarrollo de conflictos personales e influencias de un círculo de personas que permiten que suceda a su manera. Totalmente un drama y suspenso todo el tiempo, una novela que me parece que le vendría muy bien la edición en cómic. No puedo negar que termine agotado de leer el libro sobretodo por su temática y constantemente momentos de baja energía. Se me hace un escritor transmitiendo el bajo mundo de una ciudad, escritor que cae en el error de no acotar el tiempo en el que se desarrolla la historia. Me parece el Paulo Cohelo de los jóvenes en una versión de resistencia hacia un estado.
September 25, 2022
"Eres el olvido.
Eres la amnesia de un Dios que ya no te reconoce ni te reconocerá jamás."
Primer acercamiento que tengo con este autor y me ha dejado un sabor agridulce.
El inicio del libro y hasta poco más de la mitad del mismo, fue sumamente atrapante para mí, la novela es una mezcla entre policiaca, gótica y paranormal (géneros por los cuales yo tengo debilidad) sin embargo, siento que el escritor perdió un poco el rumbo del mismo y también dejo ciertos cabos sueltos con el "imitador" de Jack the ripper por lo mismo me sentí un poco decepcionada.
Por lo demás y ese final tan oscuro y desolador que escribió es que seguiré leyendo a Mario. Además por lo que he leído, este no es de sus mejores trabajos, lo cual me tiene emocionada por saber con que me encontraré.
Eres la amnesia de un Dios que ya no te reconoce ni te reconocerá jamás."
Primer acercamiento que tengo con este autor y me ha dejado un sabor agridulce.
El inicio del libro y hasta poco más de la mitad del mismo, fue sumamente atrapante para mí, la novela es una mezcla entre policiaca, gótica y paranormal (géneros por los cuales yo tengo debilidad) sin embargo, siento que el escritor perdió un poco el rumbo del mismo y también dejo ciertos cabos sueltos con el "imitador" de Jack the ripper por lo mismo me sentí un poco decepcionada.
Por lo demás y ese final tan oscuro y desolador que escribió es que seguiré leyendo a Mario. Además por lo que he leído, este no es de sus mejores trabajos, lo cual me tiene emocionada por saber con que me encontraré.
March 26, 2023
“El problema del mal es que siempre lo imaginamos allá, afuera, como si nosotros no tuviéramos nada que ver con él. El mal es una categoría que nos gusta analizar en los otros. ¿Por qué? Porque nos da terror enfrentar la dosis de maldad que llevamos dentro.”
“Los malignos nos acechan y se alimentan de nuestra desgracia. Y nadie nos advierte de su presencia”
La vida del detective Frank Molina, de la joven pintora Leticia y del padre Lázaro, se entrecruzan en torno a una serie de asesinatos de mujeres por un imitador de Jack el destripador.
Una historia adictiva, contada de manera muy ágil a tres voces, que nos habla de esas fuerzas de las que no se tiene control y que marcan nuestro devenir.
“Los malignos nos acechan y se alimentan de nuestra desgracia. Y nadie nos advierte de su presencia”
La vida del detective Frank Molina, de la joven pintora Leticia y del padre Lázaro, se entrecruzan en torno a una serie de asesinatos de mujeres por un imitador de Jack el destripador.
Una historia adictiva, contada de manera muy ágil a tres voces, que nos habla de esas fuerzas de las que no se tiene control y que marcan nuestro devenir.
November 3, 2020
Muy buen libro! Haciendo a un lado religiones, creencias, sectas, etc., tenemos simplemente a la vida/naturaleza haciendo un balance entre lo bueno y lo malo, y cada quien tendrá que hacer auto-análisis, auto-juicio para ver a qué lado quieres aportar.
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