Una infinidad de sombras atormenta a Georg Kahn. Una magia oscura habita sus ojos. A Hugo le han prohibido expresamente relacionarse con él. pero desde que lo conoció solo sabe escribirle palabras de amor. ¿Cómo olvidar a Georg Kahn? ¿Cómo conquistarlo? ¿Cómo despedirse de él para siempre? El camino de Hugo von Holbeinsberg, una joven promesa de las letras en el esplendor cultural y artístico de la Belle Époque vienesa, se cruza con el del enigmático Georg Kahn, un escritor que oculta un terrible pasado. Georg intenta proteger a Hugo de sí mismo y del resto de los «monstruos», a quienes la sociedad teme y rechaza por sus habilidades sobrenaturales. Pronto descubrirá que también él está en los hermanos mayores de Hugo trabajan para el emperador dando caza a los monstruos. y quieren ver muerto a Georg Kahn.
Bruno Puelles (Madrid, 1990) es escritor y profesor de teatro. Desde el lanzamiento de su primer libro en 2017 ha publicado más de una docena de novelas y novelas cortas, así como relatos en varias antologías y un guion de miniserie.
Escribe libros para jóvenes, como Los secretos del Hotel Jardín de Odette, Las tres despedidas de Georg Kahn o La ciudad de los mil ojos (Premio Kelvin 505 a Mejor novela juvenil en castellano 2023) y niños, como El ciclo de vida de la mariposa nocturna (Premio Ignotus a Mejor libro infantil y juvenil 2022) y la serie Kalambu (2024).
Entre su obra dirigida a adultos, destacan Simbiosis (finalista al Premio Minotauro 2020) y su debut en el género de ficción literaria, Lo frágil y lo eterno (2024).
Puedes encontrarle en Instagram (@bruno.en.serio) y en su web: www.brunopuelles.com.
A Hugo le han prohibido relacionarse con Kahn, pero desde que se conocieron, no es capaz de dejar de pensar en él, ni puede escribir sobre nada que no sea el amor. ¿Cómo podría conquistarlo? El camino de Hugo podría haber sido muy sencillo, pero el terrible pasado y el secreto que oculta Kahn harán que su vida cambie por completo, y aunque intente proteger a Hugo de sí mismo y del resto de monstruos a quienes la sociedad teme y rechaza por sus habilidades sobrenaturales, pronto descubrirá que él mismo también está en peligro, pues los hermanos mayores de Hugo trabajan para el emperador dando caza a esos mismos monstruos, y a él en concreto.
Ay, lo empecé con muchísimas ganas y con ilusión, pero está claro que la novela no ha sido exactamente lo que esperaba; no sé si ha sido en parte por la forma en que está narrado, como si se tratara del diario de Hugo, que se me ha hecho demasiado cuesta arriba, ya que en gran parte resultaba repetitivo: piensa en Kahn, escribe, o lo intenta, sigue pensando en Kahn; y así pasan los meses. Que me habría encantado que se desarrollara de otra manera, porque el tema de los amores prohibidos siento que está poco explotado, pero en este caso no ha logrado emocionarme apenas.
Por otro lado, la trama se me ha hecho bastante plana, y siento que se ha desaprovechado bastante todo el tema de los monstruos, o tal vez ha sido culpa mía por pensar que sería una novela con más aventura, más acción y giros argumentales, pero no es hasta el desenlace cuando por fin se anima un tanto en ese aspecto. Ahora, sí debo decir que he sentido que los personajes estaban muy bien construidos, tanto los protagonistas como el círculo en el que se mueve Kahn, aunque he echado en falta saber más de los hermanos de Hugo.
Este libro es un sneaky bastard. Empecé su lectura pensando "jaja menudo pringado Hugo" y la he acabado que estaría dispuesta a protegerle a él, y a los demás personajes, con mi vida.
Cuando empecé el libro creo que esperaba algo tipo "Cazadores de Sombras: Los orígenes", es decir, cazadores de monstruos con romance intenso y adolescente. Y podría haber sido eso, pero la forma de escribir de Bruno lo cambia todo.
La trama de fantasía queda siempre en segundo plano, y es casi más un libro de Dark Academia (centrado en el mundo de la escritura) pero, sobre todo, es un libro de drama, sátira, denuncia social y crecimiento personal.
Os cuento más: 🌙 El formato diario permite a narrador y lectores observar el crush de Hugo con distancia: en vez de validar la obsesión adolescente, es como un meme, y probablemente nos haga recordar nuestra propia adolescecia. A mí me hizo REÍR EN ALTO varias veces. 🌙 El formato diario también permite ver cómo evoluciona el pensamiento de Hugo, desde la superficialidad y las rayadas por tonterías, a la profundidad al ir comprendiendo las implicaciones de ser una minoría. Tristemente, con este viaje también podremos sentirnos identificadas. Es una representación muy guay de lo que implica caerse del guindo (=hacerte consciente de tu privilegio). 🌙 La discriminación a monstruos podría ser representación de cualquier minoría en la sociedad actual. Hay conversaciones que podrían haberse sacado de cualquier sobremesa española sobre el colectivo queer o la migración. 🌙 Si sois fans de la literatura lo disfrutaréis mucho porque hay muchos guiños a la historia y sus cafés literarios. Yo, como no soy fan, pues no he pillado ni la mitad de referencias, ¡pero sabía detectar que estaban! Las críticas a la industria editorial sí las he pillado (y me han gustado) 🌙 La representación de salud mental es una PASADA, en concreto, cómo querer o apoyar a alguien que está sufriendo por algo que no puedes ver ni comprender.
🏳️🌈 ¡IMPORTANTE! Bruno ha ambientado la historia en una sociedad donde la igualdad entre hombres y mujeres es una realidad y no existe la bi/homofobia (!!!) Y esto no es sólo algo que se diga, sino que lo inferimos por las conversaciones y comportamientos de los personajes: está completamente normalizado. Hay representación de MUCHOS tipos y, para mí, está muy bien integrada.
Cuando acabo un libro que me ha gustado mucho, suelo buscar reseñas negativas porque necesito discutir en mi cabeza con esos lectores y defender a mi Nuevo Protegido.
En este caso, lo que más se critica es que es un libro lento y repetitivo. Y es que es cierto. Pero ese formato es necesario para ver la evolución de Hugo. Y se disfruta mucho porque, de verdad, Bruno escribe muy muy bonito y con mimo en fragmento.
Como siempre, no es para todos; no lo leáis esperando una novela de fantasía, es un drama con toques de romance en una ambientación ligeramente fantástica. Sin duda volveré a leer a Bruno y recordaré este libro con muchísimo cariño.
Llevaba tiempo tras esta lectura, desde que vi el libro por primera vez en las estanterías de la Casa del Libro. Y tras muchas dudas, tras posponerlo un poco (porque una no se quería dejar el sueldo en libros), decidí darme el capricho y llevármelo a casa... y creo que ha sido mi mejor decisión de todo el verano.
Suelo tener reticencias con la narración en primera persona (prejuicios que debo trabajar con más lectura), pero en este caso no se me ocurría otra forma de descubrir esta historia que a través de las palabras de Hugo. Su ternura, su ilusión, recorrer todo este camino a su lado... ha sido una delicia, tan satisfactorio como doloroso en algunas ocasiones.
No quiero profundizar en la trama porque me gustaría mantener esta review libre de spoilers, pero ha sido una de mis lecturas favoritas del año. La narración no es enrevesada y te hace beber cada página y, a su vez, sabe cuándo usar las palabras para tocarte el corazón.
Estoy muy satisfecha y no dejaré de recomendarlo a mi entorno para que lo lean. Dos chicos que se quieren, escritores compartiendo sus sueños, magia, algo de política, mucho angst, personajes a los que abrazaría, personajes a los que daría una patada en el culo... tiene de todo y tendrá un lugar especial en mi corazoncito.
¡Muy recomendado, y sin duda voy a leer más de este autor!
La manera en la que me ha tenido enganchada este libro no tiene nombre, lo mejorcito que he leído en lo que llevamos de año. Los personajes, la ambientación, los libros y escritores increíbles que viven dentro de otro libro increíble. HUGO MI HIJÍSIMO I LOVE HIM SO MUCH!!
Es el primer libro que leo de Bruno Puelles y me ha encantado como escribe.
Nos traslada a Viena, año 1900, a una historia de amor imposible...... porque hay monstruos de por medio.
Hugo es un chico de buena posición que adora leer y su sueño es escribir. Por casualidad tiene un encuentro fortuito con un chico ojeroso y delgaducho.......sin adivinar que cambiará su vida para siempre, desde el minuto uno.
Georg Kahn lucha con sus propias sombras, intenta controlarlas y pasar desapercibido en una sociedad que persigue a los monstruos. Kahn abre las puertas de su vida a Hugo (pese a que tiene prohibido juntarse con él) a un mundo donde puede ser él mismo, rodeado de escritores, editores, artistas.........y secretos.
Narrado en primera persona estilo diario, sabemos de primera mano los sentimientos que atormentan a Hugo y su lucha por hacerse un hueco en la sociedad.
Repito que me ha encantado como escribe Bruno! Estoy deseando leer los otros dos libros que tengo esperando en la estantería. No es un amor empalagoso para nada, de esos que suben el azúcar y detesto. Es una historia de amor con sus secretos, sus despedidas y su amor puro, entre dos personas que se necesitan y se complementan. Tiene un par de giros que me han encantado! Y el primer monstruo.........la adoro!!! 🐀 (Si lo habéis leído, sabéis a quién me refiero?)
Podrá ese amor triunfar en una sociedad que persigue a los monstruos??
Lo conocíais? Habéis leído algo de Bruno?
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Hugo Holbein sueña con ser escritor en la Ciudad Blanca (ficticia Vienna) de 1900. Tras un pequeño altercado, provocado sin intención, en uno de los cafés, conoce a Georg Kahn. Él cambiará su vida para siempre, le abrirá el camino hacia la amistad de varios miembros de la sociedad literaria que tanto admira y también los ojos a la cruel realidad de algunos de los habitantes de la ciudad.
Creo que no tengo palabras para definir las muchas emociones que me ha despertado este libro. Me he emocionado, he sufrido, llorado... pero creo que por encima de todo, gana la ternura. Y es que la sensibilidad con la que Hugo, a través de este diario suyo que leemos, nos hace partícipe de todo cuanto le rodea es algo precioso, incluso cuando nos habla de la injusticia o maldad que presencia. Nos invita a sentir lo que él siente como poca gente lo consigue (en mi opinión).
Bruno Puelles, además, vuelve a crear (como ya hizo en La ciudad de los mil ojos) una realidad donde no existe la discriminación por género u orientación sexual, aunque la hay de otros tipos, siempre me parecerá un buen detalle, muy original además, que nos desancla de esa concepción de que todo lo histórico tiene que ser discriminatorio.
(No voy a negar que me hace cierta ilusión ser la primera reseña de este libro)
Buenísimo. Una novela escrita en formato diario con la voz de Hugo, al que vemos madurar, crecer y replantear un mundo lleno de desigualdades. La evolución está increíblemente bien llevada.
Aunque tiene un contexto fantástico, lo cierto es que la fantasía es muy digerible y más contextual que otra cosa. Me ha parecido de hecho una herramienta muy bien utilizada para abordar temas actuales como el rechado a las minorías o a lo desconocido.
La ambientación me ha parecido espectacular y no miento si digo que es lo que me atrapó. El ambiente bohemio donde autores nuevos se enzarzan en debates sobre cómo ven el mundo, sobre literatura y sobre el concepto de éxito, la cantidad de cafeterías en las que se reunen, el avance de sus obras... Supongo que me sentí muy identificada.
Los conflictos me parecen de lo más humanos, haciendo muy sencillo entender a todos los personajes, incluso al más secundario. Cada puntada está perfectamente escogida para construir un todo coherente.
El estilo del autor me ha fascinado. Menudas comparativas, menudo léxico, menudo todo, y eso que lo vivíamos a través de Hugo. Es una lectura deliciosa.
Lo que menos me ha gustado ha sido el ritmo. La primera mitad me absorbió por completo aunque la trama en sí misma tiene un arranque muy lento. La segunda mitad se espacia y estira, dándole a cada evento el tiempo que necesita y como solo contamos con un narrador la historia se difumina en varios valles.
Hay que tener en cuenta que no se trata de una historia de fantasía trepidante plagada de acción y giros, se trata de una historia de amor imposible. ❤
Tras acabarme el prólogo, pensé: «va a ser un cinco estrellas en Goodreads y uno de mis libros favoritos». No me equivocaba.
Con las Tres despedidas de Georg Khan, su autor Bruno Puelles nos introduce en una atmósfera completamente lograda de la Viena de principios del siglo XX. No solo tenemos un retrato muy claro de la sociedad de este mundo ficticio (pero no demasiado), sino que no podemos dejar de asombrarnos de la arquitectura tan fascinante de la Ciudad Blanca. Todo lo que se describe en las páginas de esta historia es enormemente elegante a la par que acogedor, y está cargado de un aire culto, enriquecedor, interesante, denso, si se quiere, pero no pesado, en el que da gusto, sencillamente, estar.
La historia no es menos buena. Uf, la trama. Tiene un ritmo perfectamente medido que no la hace ni demasiado rápida ni demasiado lenta. Los hechos se suceden de forma orgánica, siempre contados desde el punto de vista del protagonista, Hugo Holbein, con el filtro que ello implica, y las subtramas que conforman, que se asocian a los distintos círculos de los que participa Hugo, van progresando poco a poco sin estar exentas de giros de guion que me han levantado del asiento.
Pero, ¡ay!, los personajes. Los personajes que Bruno ha tallado para esta historia son todos formidables, personas llenas de carisma de las que es imposible no enamorarse. Desde los hermanos del joven protagonista hasta la familia de Georg Khan, todos los actores de esta obra están provistos de una voz propia y reconocible y de matices y complejidad psicológica. Si bien he sentido el impulso de darle un abrazo a un par de personajes del Remedio, sobre todo, me he visto del todo inundado de un sentimiento de calidez e integración el grupo de escritores del café Wagner, en el que, aunque no lo decía explícitamente Hugo en ninguna entrada de su diario, yo también era uno más. Hay momentos en la obra en la que determinados personajes se abren con el protagonista, y es entonces del todo imposible no empatizar con ellos. Porque hay tanto de mí en ellos. Tanto. Y estoy seguro de que también del autor, y de cualquiera que lea esta historia. No cabe en esta reseña todo el cariño que les he cogido, por mucho que lo describa. Cuánto he aprendido de ellos, y de los mensajes que abanderan en el escenario que es la historia.
Y, con todo, si algo me ha enamorado de esta historia por encima de lo demás, y es la misma razón por la que sabía que volvería (y volveré) a leer a este escritor. Bruno Puelles es un artesano, en el sentido de esmero y dedicación, de las palabras. Toma cada palabra del diccionario con sumo cuidado, como el joyero que aprisiona con unas pinzas un diamante del tamaño de un guisante (¡qué digo, de un grano de pimienta!), y lo examina con lupa por cada una de sus caras, para finalmente posarlo con suma delicadeza en el punto exacto del anillo en el que está trabajando, con un acabado limpio y cuidado propio de quien sabe muy bien lo que hace. La cadencia, la extensión, el ritmo de las frases del texto es magistral (en el sentido de «maestro», claro). El tono está cuidado, y tanto los diálogos como la narración (subjetiva) están tremendamente logrados. Entre sus palabras, Bruno deja frases lapidarias que no he podido resistir a incorporar a mi colección de citas y que me han dejado hecho polvo al leer. Ojalá que leyéndolo mucho aprenda un poco de su estilo.
No puedo puntuar menos esa forma de escribir que es realmente buena, que en muchos diálogos incluye el lenguaje que deberían tener los personajes que describe, escritores en su ambiente literario. La ambientación también es muy buena y, la sociedad que representa ha quedado bien plasmada. Sin embargo, el ritmo es increíblemente lento, se extiende en exceso en temas que deberían ser accesorios en la historia y, en los que debería haber profundizado, no lo hace. Quizás la forma de diario contribuye a ésto, en lugar de dinamizar, ha restado al conjunto.
En esta novela narrada en forma de diario y ambientada en la Viena de 1900, seguiremos la historia de Hugo, un joven universitario que sueña con ser escritor. Atraído por el arte y la poesía, se comienza a juntar con jóvenes promesas de la literatura, entre las que se encuentra Georg Kahn, del que se enamora a primera vista. Sin embargo, Kahn forma parte de un grupo de personas a las que la sociedad llama "monstruos", personas a las que el Imperio controla e incluso elimina cuando sus "poderes" se descontrolan.
A pesar de la ambientación victoriana (que ya dije varias veces que NO es lo mío), la sinopsis me pareció bastante potente para darle una oportunidad, pero lamentablemente me encontré con una de las lecturas más insulsas y aburridas que tuve en mucho tiempo. Me da pena decir esto, porque el libro está bien escrito y creo que a las personas que disfruten con tramas costumbristas y pausadas les podría llegar a gustar... Pero definitivamente este libro es todo lo contrario a lo que yo busco en una novela. El toque de fantasía es anecdótico y apenas se profundiza en el concepto de los monstruos. La trama es lenta, pesada y apenas pasa nada en las casi 450 páginas que tiene. Si al menos los personajes compensasen un poco esto no tendría problema... Me gustan mucho los libros pausados siempre y cuando sus personajes me interesen. Pero los dos protagonistas me han resultado bastante indiferentes y su relación tiene CERO chispa. Por no hablar de los secundarios, que son absolutamente olvidables. El hecho de que esté narrado en primera persona y a través de diarios creo que tampoco ayuda y no es mi forma de narración preferida... Toda la subtrama de los "monstruos", que podría haber sido una metáfora muy buena de como trata la sociedad al diferente, se queda cortísima porque se pasa muy por encima, y la relación romántica entre Georg y Kahn es tan rápida y sosa que no funciona como trama principal.
Si estáis buscando un libro tierno, cotidiano y muy pausado, y conectáis con el personaje principal quizá podáis disfrutarlo, incluso puede que os encante. Pero a mi personalmente no me ha gustado y me cuesta sacarle algún punto positivo salvo la ternura con la que el autor describe las interacciones entre los protagonistas. El resto... Tremendamente olvidable para mi por desgracia. Esperaba que me gustase mucho... Pero no ha podido ser. No todos los libros nos pueden gustar.
A pesar de ser un libro que se nota que está escrito con muchísimo cariño, la ambientación es espectacular y el nivel de detalle está muy cuidado este libro no es para mí. Lo dejo a medias. Llevo un mes intentando hacerme con su ritmo pero no soy capaz, me tiene bloqueada. No tiene trama ni giros de guión, solo más y más descripciones y las mismas escenas (al menos hasta donde he llegado yo que es la mitad).
Igualmente como añado siempre en mis reseñas que no sea para mí no quiere decir que para otra persona no puedes convertirse en una de sus obras favoritas o que el estilo del autor sea más o menos válido. Si te llama la atención dale una oportunidad, igual te sorprende y descubres una gran historia.
Le tenía mil ganas, y la ambientación me ha conquistado, pero con el resto de la historia... no he podido conectar con los personajes, y la trama se me ha hecho bastante repetitiva y cuesta arriba :(
Hugo, un aristócrata huérfano, hermano de los dos mellizos más letales de la Partida de Caza o Jauría, según de qué bando estés, tiene un sueño: formar parte de la flor y nata del mundo cultural vienés de principios de siglo veinte en una Viena que se parece a la nuestra, pero que es un poco más diferente, especialmente en cuanto a su población más extraordinaria: los llamados "monstruos". Algunos los ven como una desgracia, otros como una abominación y otros no pueden evitar encontrarle cierta utilidad a sus poderes para futuras guerras contra las potencias mundiales enemigas. No obstante, nuestro protagonista experimentará por uno de estos individuos algo que nadie de la población vienesa podría imaginarse jamás: un amor inocente a la par que intenso por Georg Kahn, un joven escritor que guarda un terrible secreto: de su cuerpo brotan jirones negros que con solo tocar a una persona pueden arrebatarle la vida. Si queréis saber cómo sigue, ya sabéis, os toca leer porque mis labios están sellados a partir de este momento.
¿Cuál ha sido mi impresión general? Muy positiva. Al principio me costó un poco seguir el ritmo de lectura, pero no lo achaco a la novela en sí, sino a problemas de conciliación con mi vida profesional y personal. A partir de la mitad del libro con cierto incidente con la Partida de caza ya terminó por engancharme. No obstante, hay un detalle que me gustaría resaltar y que me chirrió un poco y no me hizo disfrutar tanto de la historia como me hubiera gustado. No voy a dar detalles del argumento, descuidad, solo quiero detenerme un momento en cómo está contada esta historia: nos encontramos ante la narración en primera persona de unas vivencias que transcribe Hugo a lo que podríamos considerar un diario personal. Bien, la mayor parte de los hechos están narrados con las voces pasadas (pasado, perfecto, pluscuamperfecto e imperfecto), puesto que son vivencias ya transcurridas y, como es lógico, necesitan voces pasadas para que la narración resulte coherente.
Sin embargo, dentro de este relato pretérito, hay de vez en cuando frases en presente que no corresponden a hechos que aún acontecen en el tiempo, sino que ya han transcurrido dentro del hilo temporal, pero que, por alguna razón que no comprendo, el autor ha decidido mantenerlas en ese tiempo verbal.
Entendería que hubiera este tipo de oraciones en presente, si el protagonista estuviera relatando a otra persona, real o figurada, algún detalle o impresión de algo o alguien dentro de la narración que aún permaneciera activa en el tiempo. Esto ocurre por ejemplo en las epístolas o en los diarios donde la persona escribe a un personaje irreal, como ocurre en el diario de Anna Frank. Aquí, no obstante, no existe esa figura a la que el protagonista pueda dirigirse, sino que utiliza el diario para plasmar sus vivencias y sus pensamientos más íntimos sin que entre en juego una tercera persona. Por tanto, ¿cuál es el sentido de intercalar dos tiempos verbales dentro de una narración secuencial de hechos? ¿Es para mantener un ritmo frenético? ¿Es porque aún queda algún hecho que se mantiene en el tiempo y yo, como lectora imperfecta que a veces falla en su comprensión, no me he enterado? Sé que es un detalle pequeño, pero me descolocó mucho y no sé a que regla obedece.
Por todo lo demás, la narración es magistral y Bruno sabe llevarte por ciudades, parques, teatros y cafés como la finura y la delicadeza de una barcaza surcando las aguas del apacible Danubio.
Recomiendo esta lectura a los amantes del amor imposible y de la cultura como motor de cambio y de entendimiento hacia el otro.
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Un libro del que no esperaba mucho y que me ha sorprendido a más no poder.
Cuando empecé este libro iba con cero expectativas porque, aunque la premisa era super interesante, nunca había nada del autor y no quería pegarme el batacazo. Pues bueno, puedo decir que me he fundido este libro en menos de doce horas y que he acabado encantada no, lo siguiente.
Lo primero que me gustaría destacar es la manera en la que el autor ha plasmado la obra. No nos encontraremos con capítulos y divisiones normales, para nada. Estaremos leyendo la vida de Hugo a través de su propio diario. El libro se divide en varias partes que simbolizan momentos importantes en su vida y, dentro de estas secciones, veremos día a día las entradas que escribía Hugo sobre todo lo que vivía.
Es por esto mismo por lo que llegamos a sentir que conocemos al protagonista sin ningún tipo de duda. Conoceremos sus mejores y peores momentos, sus más íntimos deseos, sus fallos y sus virtudes... es una obra que transmite tanto que te deja el corazón el un puño.
Además, una parte que me ha parecido muy interesante y, a su vez, necesaria es el autodescubrimiento de su sexualidad ya que nos muestra cómo llega el amor a su vida sin esperarlo y, por otro lado, de la persona menos esperada. La belleza con la que el autor trata su enamoramiento y autoconocimiento de lo que quiere te deja con lágrimas en los ojos por cómo lo consigue transmitir.
Por otro lado, nos encontramos con un libro lleno de acción, suspense y con un toque de fantasía ya que en esta obra abundan los llamados "monstruos": personas que tienen poderes únicos. Con la existencia de estas personas, el autor nos muestra la crueldad humana y el miedo ante lo diferente, como, a lo largo de los siglos, la envidia y el miedo a lo desconocido provocan la desaparición de una raza entera y crímenes de odio. Este es un apartado que considero super importante en la trama porque, a través de estas personas, vemos una clara comparación con el mundo real.
Ahora sí, lo que mas me ha cautivado de esta historia es el amor por las letras y la importancia de esta. Poder leer el amor del protagonista y sus compañeros por las letras y como reverencian todos los modelos de arte te deja con el corazón calentito. Llegas a ser participe de sus obras y de su proceso de creación y por esto mismo llegas a sentir que sus escritos te llegan al corazón. Una total maravilla.
Podría tirarme horas hablando de este libro porque me ha dejado encantada no, lo siguiente pero no quiero porque me encantaría que leyeseis este libro a ciegas para que lo disfrutéis tanto como yo.
NUNCA UN LIBRO ME HIZO TEMBLAR LAS MANOS, Y ESTE LO CONSIGUIÓ
¿Cómo explicar todo lo que he sentido mientras leía este libro? No me alcanzan las palabras para describir toda la marea de sentimientos y ansiedad que me generó leerlo. En las ultimas diez páginas me temblaron las manos, tanto que fui incapaz de dar vuelta la página para seguir leyendo. Sentí mucha ansiedad en la recta final, además de que estaba sufriendo por la situación extrema en la que se encontraba Hugo.
Es un libro que con el que pude sentir de principio a fin. Me encantaba la forma en la que Hugo iba cayendo enamorado por Khan. Cada vez que se emocionaba yo lo hacía con él. Leer como se contestaban las cartas me enterneció un montón y lo inocente que era Hugo en cuanto a la relación con Kahn, tanto que un momento no entiende la indirecta que le tira Kahn de ir a un lugar juntos. Me hizo reír porque es un romance tan sano que te abruma y te hace pensar que nunca en tu vida vas a conseguir nada igual, porque el mundo está podrido. No hay personas como Hugo en el mundo, ya no quedan... pero que bueno que existen en la literatura ¿no? estaría perdida sin este libro. Y es gracias a este libro que conocí el amor.
El amor entre Kahn y Hugo es un amor tan puro y tan bello que hizo que todas las lecturas que yo haya hecho en mi vida se vieran opacadas por la forma en la que el autor reflejó un amor verdadero y creo que nunca podré encontrar otros libros en donde el amor se vea tan bien reflejado como se vio en este libro. Las palabras de Bruno Puelles hace que el romance se sienta real, cosa que no había encontrado nunca en otros libros. Tiene muchos matices que lo hacen perfecto y que lo diferencias del resto. A veces me preguntó de quién será reencarnación el alma de Bruno para tener tanta capacidad al transmitir las emociones...
Algo de lo que caí en cuenta al leerlo fue, gracias a una escena en donde Hugo confiesa nunca haber besado a nadie, que la inexperiencia se puede ver reflejada en lo que los autores escribimos. Yo jamás había tomado en cuenta esta cuestión, y como escritora estoy agradecida de que este libro, con una simple conversación entre los personajes, me haya abierto los ojos. Es algo que tendré muy presente a la hora de escribir mis relatos.
Amé esta lectura y es un libro que no dejaré de recomendar. Todos tienen que correr a leerlo!
Bruno Puelles ha creado una obra maravillosa escrita como los mejores clásicos del siglo XIX, respetando el lenguaje, dándole tiempo a la narración y no apresurando las escenas, estas no se sucedían unas a otras (y algunas muy inesperadas), sino que van con paciencia armándose durante todo el libro. La acción que tiene no es acción en sí misma, pero te hace delirar y poner ansioso por todo lo que transmite. Estás todo el tiempo deseando que no le sucede nada a Kahn y a su familia de monstruos porque te sentís parte de su grupo. Merece todo el reconocimiento del mundo.
Espero que "Las tres despedidas de Georg Kahn" perdure en el tiempo, porque es una obra que tiene calidad en cuanto a prosa, pero sobre todo en lo muy bien logrado que está el transmitir las emociones al lector. Tiene un final redondo que te deja el nudo en la garganta pero el corazón tibio y satisfecho. No le tengan miedo a esta lectura, sentirán mas de lo que alguna vez sintieron leyendo cualquier libro.
Calificación: 5 ☆ Yo leyendo Las tres despedidas de Georg Kahn: 😍💔🥺😡💕😥😀
Nota: lloré durante diez minutos y le mandé mil audios a mi amiga mientras intentaba recuperarme de la vorágine de sentimientos jajaja.
No sé por dónde empezar, porque este libro me sorprendió en muchos aspectos.
Los personajes están muy bien construidos, especialmente los protagonistas claro está. Pero a pesar de tener muchos personajes secundarios y, algunos de ellos con no muchos diálogos, todos tienen personalidades realistas y complejas. Además de Hugo y Georg (mis niños, mis bebés) me gustaron mucho Ster, Ernestine y Erwin ☺️.
La ambientación es simplemente increíble, me sentía en un mundo súper interesante y maravilloso.
Y los mensajes de la historia, del autor ufff. Simplemente me sorprendieron para bien. No solo se cuenta una historia de amor muy conmovedora, sino que también se critica el mundo de los libros y lo comercial, discriminativo e injusto de éste. Pero el mensaje que más me llegó fue la importancia de la empatía, la necesidad de pensar y ver más allá de nosotros mismos y nuestras propias realidades. También me gustó el desarrollo de personajes de Hugo y de Georg. Hugo, quién logra germinar su empatía a pesar de un entorno frío e indiferente. Y Georg, que intenta ser mejor a pesar de que sienta que no merece ni su propio perdón. Todo esto sin dejar de lado la importancia de respetar el dolor y la dignidad propia. Me gustó especialmente la siguiente frase: "No se debe permitir que el amor sea una suposición, pensé, sino asegurarse de que sea una certeza".
El final no ha sido lo que más me gustó pero no todo nos va a encantar, y eso está bien. 🤎
😊 Lo Bueno: 'Las Tres Despedidas' es un libro muy bonito con personajes entrañables que cautivan desde el primer momento. Destacan la historia creativa que nos presenta y la fascinante mezcla con el mundo literario, lo que despierta el deseo de ser parte de uno de ellos. Desde el inicio hasta el final, el libro te atrapa con sus dosis de literatura y escritores, ofreciendo una experiencia única y diferente. La trama envolvente despierta una variedad de emociones en el lector, desde el amor hasta la risa y, en algunos momentos, tristeza. La habilidad del autor para explorar estos temas y hacer que el lector se sumerja completamente en la historia es verdaderamente notable.
😔 Lo No Tan Bueno: Aunque 'Las Tres Despedidas' es una lectura excepcional, algunos lectores podrían encontrar que la trama se vuelve predecible en ciertos momentos. Además, la longitud del libro podría resultar un poco abrumadora para aquellos que prefieren historias más cortas.
🧐 Veredicto Final: En resumen, 'Las Tres Despedidas' es un libro que no se puede dejar de leer. Su capacidad para despertar una amplia gama de sentimientos y su narrativa cautivadora lo convierten en una lectura inolvidable. Recomendable al 100% para aquellos que buscan una experiencia literaria emocionante y enriquecedora.
En Ciudad Blanca, el lugar donde está ambientada está historia, hay personas a las que llaman Monstruos, por qué algunos tienen habilidades que les permiten cambiar su fisionomía, aunque no todos controlan sus poderes y resultan peligrosos para los demás.
Hugo es una monada, es tierno a más no poder. Un jóven que ha sido educado bajó la responsabilidad de sus hermanos mayores, que siendo mellizos tienen una conexión especial y bastante fuerte entre ellos, pero que a él no lo toman tan en serio o no se han dado cuenta de que ha crecido.
Georg Kahn, es un escritor bohemio y algo melancólico. De esos que llaman la atención incluso sin quererlo.
Me gusta que Hugo sea siempre persistente, incluso cuando Kahn es tan reticente.
El autor nos muestra el otro lado que no vemos de los escritores, cuán difícil es conseguir ser publicados y que es más raro aún que los manuscritos sean tal cual los concibieron los autores desde un inicio, lo apasionados que llegan a ser unos y lo fácil y difícil que se les hacen a unos u otros.
Parte del final me hizo sufrir momentáneamente y después quedé como payasa, pero fue un alivio que agradezco 🤫.
Llevaba mucho tiempo queriendo leer este libro y no ha decepcionado. He leído muchas reseñas que dicen que no les transmitió nada y no podría estar más en desacuerdo. ¿El estilo y lenguaje? Impecables, este libro tiene frases que son verdaderas joyas
La primera parte explora a los personajes y la relación de Georg y Hugo, pero el formato diario hace que todo se sienta muy íntimo.
La segunda parte me ha tenido con el alma en vilo y los pelos de punta hasta bien entrada la noche. Es cierto que al final el libro es ficción y tiene su toque de fantasía, pero una persecución muy parecida sucedió hace menos de un siglo en Europa y no he podido evitar pensar en eso.
Mi mayor queja es que la segunda parte se queda un poco corta, me hubiera gustado un final un poco más elaborado (soy una romántica, sorry) y siento que dedicarle tanto espacio a la intro de personajes y de la relación hace que parezca que la trama es algo secundario, pues la acción real no empieza hasta casi el 70%.
Escribir una reseña de este libro es complicado porque siento que cualquier comentario que pudiera hacer estaría muy alejado de la realidad, de los sentimientos que consigue evocar Bruno con cada palabra y, sobre todo, de la maravillosa historia que transmite a través de los capítulos que se suceden sin que uno pueda parar de leer. La historia de Hugo y Georg es fascinante, sublime. ¿Sabes esos libros que a veces te hacen pensar «Pues yo esto lo hubiera hecho diferente?», con este no pasa. Todo está bien medido. Todo encaja a la perfección. Es un puzle donde cada pieza ocupa el lugar correcto. Ha sido una de las lecturas que más he recomendado a mis amistades, no solo por la calidad de su historia, sino por el estilo de Bruno. El ritmo que ha conseguido en esta historia creo que es lo mejor que he leído en mucho tiempo. Las tres despedidas de Georg Kahn es, indudablemente, el libro que todo el mundo debería leer.
Empecé este libro con mucha ilusión Y para hablar de él lo voy a dividir en dos mitades 1.- la primera mitad: Me tomo un mundo leerla, aburrida, un poco repetitiva, algo plana. Todo el libro está narrado en primera persona por el protagonista a modo de diario que al principio se me hacía algo aburrido y denso. 2.- segunda mitad: Increíble, me tuvo al borde del asiento en todo momento, emocionante.. conmovedor.
Me atrevería a decir que lo que me más amo de la historia son los personajes, me encanta que sean complejos...con matices. Amo la crítica social, la forma en que se relaciona el protagonista con los personajes. Una idea muy buena que creo que se pudo desarrollar mejor...sobre todo el final.
Me pareció la mejor lectura de ésta primer parte del año. -0,5 ⭐ por los primeros dos capítulos que me costó un poco terminarlos y -0,5 ⭐ por ese final. En definitiva, me encantó. No tengo más para decir.
La pasión por las letras y por lo buenos que están Hugo y Georg puebla toda la historia y da vida a un mundo atractivo con sus toques experimentales y sus ambientes tirando a bohemios. Esta novela es una carta de amor a la diversidad y una injusta súplica de que se haga justicia contra el odio de quienes no aceptan lo diferente.