Aquest assaig petitó conté tots el temes que m'interessen que, així per resumir, seria un clam a favor del silenci, la vida tranquil·la i un discurs anticapitalista
pequeño librito que culpa al capitalismo de todos los males habidos y por haber y yo no podría estar más de acuerdo. cita muchas cosillas que dan ganas de leer.
“Lo normal ahora es patológico y lo raro es ser capaz de abstraerse de todo esto y mantener una relación sana con uno mismo y el entorno. Lo excepcional es estar callado, escuchar a los demás, no hablar siempre en primera persona”
“El ruido nos aísla ofreciéndonos una falsa sensación de conexión permanente. Nos aleja de las fuentes verdaderas de vínculo social (…) que están en lo cotidiano, en un alrededor al que cada vez hacemos menos caso”
“Contra el ruido, la inquietud y la prisa, hay que callar, observar, escuchar, hay que parar y callarse. Contra el ruido, la inquietud y la prisa, silencio.”
Libro corto y rápido de leer (para quien le interese este dato en este mundo de prisas). He subrayado mucho, y agradezco que haya un texto que refleje muchos pensamientos míos en contra de cosas como las prisas, la ansiedad que produce la vida actual y que además sufro en mis propias carnes desde hace años, el turbocapitalismo, la predominancia del ego… Es este un manifiesto (como su título bien indica) interesante y directo, aunque a veces los distintos capítulos me han parecido demasiado inconexos entre sí (algo que mejora en los capítulos finales). Hay aquí filosofía, política, historia, economía y, sobre todo, reflexión. Y quizá es casualidad o es que el mundo me empieza a llevar con su corriente hacia otro lado, pero me ha venido de perlas esta lectura para reforzar ciertos pensamientos que me vienen ocurriendo desde hace poco, cual crisis de la mediana edad, sobre simplemente dejar de preocuparse tanto: total, me voy a morir igual, así que ¿por qué no intentar no estar en todas partes a la vez, no querer hacerlo todo, no ver que no es que yo no sepa adaptarme al medio, sino que el medio es una absoluta aberración de productividad y “crecimiento exponencial”? ¿Por qué hace tanto tiempo que no me aburro, con lo bien que se me daba de pequeña? Esta lectura da para reflexión, y ojito con la paradoja de “estemos callados, pero publico un libro y tengo un podcast sobre el tema”. No es una crítica, es una observación. Me pregunto si hay otra manera…
He disfrutado de este pequeño libro en cada uno de sus capítulos. Me asombra la lucidez de Pedro y me ha hecho sentirme menos sola.
«[…] los medios de comunicación llevan siglos haciendo caja principalmente a base de malas noticias, es decir, de noticias que nos causan malestar. De un tiempo a esta parte, el deseo ha pasado a ser avidez y el malestar, una mezcla de miedo, angustia e ira».
«Los hombres cada vez más explican más cosas a las mujeres y a los niños y, por supuesto, a otros hombres; y algunas mujeres, bastantes, se han sumado al carro de convertir cualquier diálogo en una egocéntrica y aburrida demostración de conocimientos casi siempre superficiales en la que el emisor no calla ni escucha ni observa. Finalmente, todos somos eso de lo que tanto nos reímos: todos somos un poco cuñados; sobre todo cuando llamamos así a los otros, convencidos de que ellos no saben de lo que hablan y nosotros sí».
Pedro debería empezar a pagarme por todas las veces que estoy recomendado este libro. No puedo parar. Igual que no voy a poder parar de regalarlo a partir de ahora cada vez que tenga ocasión.
Qué necesario me ha parecido, qué trayecto tan enriquecedor y valioso ha sido leerlo. Ojalá no lo olvide nunca, pero por otro lado, ojalá volver a poder leerlo por primera vez.
molt a favor del silenci però que en cap moment es diga que el silenci es una qüestió de classe 😭 odia les ciutats odia el tràfic odia el soroll però anem a veure qui pot eixir del infern madrileny si no es la gent que viu a majadahona
Así con todo el ruido que emitimos y que nos emiten es imposible observar, escuchar, empatizar.
El silencio puede ser el camino. No hay vida en el silencio absoluto, pero tampoco la hay en el ruido permanente. Observar, escuchar, parar, estar, sentir, cuidar; ahora mismo todas ellas son acciones revolucionarias.
Tiene ideas muy interesantes y dignas de profundizar en ellas con uno mismo. Sin embargo, siento que derrapa en otras que tiene. Aún así es un buen ensayo sobre muchas problemáticas actuales.
Gracias Nelson por dejármelo :) Es que me recuerda a mí un poco este libro en algunas cosas a cuando Amaia dice “Y cuando el mundo se vaya a acabar, Lo observaré tomando algo” Es verdad lo típico de que “todo es culpa del capitalismo” pero me gusta que se ponga algo más de foco en el ruido y el silencio. Me gusta la reconciliación con el silencio, y lo paradójico que es hacer una review en esta plataforma estando tan de acuerdo con lo que se expone en el libro. Mucho sobre lo que pensar.
Durante la pandemia de COVID nos vendieron aquello de que "saldríamos mejores", que habíamos aprendido a parar y que podía suponer un cambio de paradigma en la forma de vida acelerada que sufríamos. Y no. Al final todo ha seguido igual...o peor. Nos hemos vuelto locos por viajar, por salir, por consumir. Hemos acelerado más, no sea que nos pille otra pandemia y no hayamos tenido tiempo de hacer o adquirir todo aquello que también nos han vendido que es necesario hacer o tener. Contra todo eso clama este libro. Contra el ruido como tal, pero también contra el ruido de las prisas, del consumismo, de la conexión contínua a través de las redes, de la desconexión de la naturaleza y de lo físico, de la falta de atención, del ruido del exceso de información. Del ruido ensordecedor de un capitalismo salvaje que todo lo devora y que aprovecha cualquier resquicio para sacar partido. El libro es una utopía de lectura necesaria. Porque nada podemos hacer desde nuestra individualidad pero como dijo Eduardo Galeano, la utopía nos sirve para caminar. Silencio.
Lo recomiendo muchísimo. Lo he disfrutado mucho porque me ha parecido muy interesante, pero a la vez no he podido evitar sentirme triste al darme cuenta de muchas cosas que ya sospechaba, pero que tienen más valor si te las confirma un libro publicado. Tiene una bibliografía muy amplia de la que estoy segura que echaré mano más adelante. Lo malo es que una vez lo acabas, te das cuenta de que el mundo sigue girando y nunca ha dejado de girar. Antes de este libro, ya sentía que necesitaba hacer un parón, callarme, escuchar con atención, ignorar las tendencias sociales y las noticias, bajar el ritmo y sobre todo concentrarme en la vida real, la que se puede tocar con las manos. Ahora, tengo 100 y algo páginas de argumentos para seguir haciéndolo. El mal sabor de boca siempre está porque hay cosas que nunca podremos cambiar si no es de forma colectiva y es agotador ir al ritmo de la economía. Veremos hasta dónde somos capaces de llegar antes de que todo se vuelva insoportable (ya lo es)
Me ha gustado mucho. Los temas que trata me han parecido muy actuales a interesantes. Hay cosas que no tenía ni idea y me quedaba boquiabierto. Imagina tú mi cara al enterarme de que “el ruido es un factor estresante que debilita el sistema inmune al provocar el aumento de cortisol en sangre y eso nos hace más vulnerables” Que por eso en zonas con mucho ruido la incidencia de la COVID-19 ha sido mayor. Hay una relación entre ambas cosas. Pues son cosas que he aprendido y ahora las llevo dentro. Esta y otras muchas más.
Todos los datos sacados de estudios, científicos, especialistas… Tiene un montón de referencias.
De todos los temas no todos me han gustado e interesado por igual. Ha habido capítulos algo menos interesantes (siempre en mi opinión).
El vocabulario diría que asequible. A ver, una persona con 12 años no creo que entienda mucho, la verdad. Pero a partir de 15/16 está bien. Yo las cosas o terminologías que no entendía las he buscado y he seguido con la lectura sin problemas.
maravillosa obra que recoge un análisis sobre la necesidad de volver al silencio, a lo slow, desde diferentes ámbitos (económico, social, psicológico). cada página un tesoro de ideas y recomendaciones que leer.
lo leí prestado por la biblioteca municipal. hubiera subrayado muchísimo, anotado...me quedo con ganas de volverlo a leer con mucha más calma y empapándome más aún en los comentarios, explorando. enhorabuena al autor.
Hablemos de la necesidad de parar. Y olvidemos la Ironía del ruido y la necesidad de hacerlo en una red social... Muy interesante, muy curioso y sobre todo, importante para intentar encontrar nuestro propio silencio particular.
Es corto pero contiene mucha información. Un ensayo perfecto para adentrarte en el mundo de los ensayos, con un montón de citas y recomendaciones de lectura. Me ha hecho reflexionar y ha conseguido llevarme de la mano por las ideas del autor.
Yo, que actualmente vivo en una gran ciudad, hago míos muchos de los planteamientos del autor y su apuesta por cambiar de raíz la concepción capitalista que nos domina casi en su totalidad.
Ensayo breve sobre el ruido, la furia y las prisas con las que vivimos el día a día. Un libro para pararse a pensar y reflexionar, algo que deberíamos hacer más a menudo.