Aricia está recuperándose de una cesárea. Tiene la sensación de que su cuerpo ha cambiado, pero también su manera de percibir el mundo y la relación con Mauro, su esposo. Al volverse madre, siente que su cabeza se aleja cada vez más de su cuerpo y se da cuenta de que es parte de un linaje de mujeres de cabezas flotantes que se reúnen periódicamente desde hace varias generaciones. Paralelamente, en su día a día, Aricia no puede evitar escudriñar minuciosamente su entorno y, a través de una serie de sensaciones nuevas, se adentra en experiencias eróticas que oscilan entre el sueño y la realidad, el pasado y el presente, mientras intenta entender su herencia y la historia de las mujeres de su familia.
Últimamente he leído mucho sobre maternidad, cuidado, depresión post parto etc… Pensé que no habría nada mejor que Fruto de Daniela Rea y este libro se equipara, a pesar de ser tan distintos.
La metáfora de las cabezas me incomodó mucho. A pesar de no ser mamá entiendo esa pérdida de “cuerpo” que experimentan las mujeres que maternan o están destinadas a vivir para otres.
Un libro muy metafórico, lleno de realismo mágico, si es que se puede usar ese término para un libro así.
Me encantó lo que construyó la autora. Seguiré leyéndola.
Porque a veces así se siente la maternidad, que eres una cabeza flotante, errante.
En esta racha de lectura sobre maternidades, “las cavidades” es una historia nada convencional que al final nos hace ver que la vida no es solo colo nuestra madre nos lo ha enseñado.
"...se había empeñado en construir un hogar, tener un hijo, seguir los pasos de la naturaleza, que, según dicen por ahí, hace siempre tictac bajo la forma de reloj biológico; un reloj cuyas campanadas, con honestidad, Aricia nunca había sentido. Era preciso seguir la norma social y, sobre todo, alejarse de esa probabilidad genética que se cernía sobre ella: ser una más en la línea de mujeres de cabeza errante de su familia."
Muy mágico, metáforico, crítico, muy "sin pelos en la lengua". Me encanta la sensación de incomodidad y complicidad que me dejan los libros de Elaine (:
Este libro me acercó a otra cara de la complejidad de la maternidad. Me gusta que su personaje es una mujer sin tapujos que permite poner en evidencia problemáticas tabú y, si bien es cierto que ha sido un tema últimamente muy manoseado, eso no significa que se ha escrito todo al respecto, por el contrario, qué bueno que se escriba desde otras miradas sobre una condición humana tan romantizada. Un plus es el realismo mágico que envuelve la novela. La volvería a leer.
Últimamente he estado leyendo y escuchando mucho sobre maternidades, y creo que este es el libro con el que menos he conectado.
Disfruté varios fragmentos. Me encantó la metáfora que hace sobre cómo la maternidad te hace perder tu propio cuerpo. Sin embargo, siento que me faltó algo. Tal vez le dé otra oportunidad más adelante, pero ya no en audiolibro.
Supongamos que dividimos este libro en 3 partes. Pues bien durante la primera parte sí que estaba entre pérdida y desinteresada y justo cuando pensé que lo iba a dejar es que se puso buena la historia. A veces misteriosa a veces dark, como spooky como crítica maternal, muchas verdades sobre el posparto y mucha mucha Elaine y su estilo.
Muy metafórico (bien logrado) y desarrollo de temas muy interesantes y centrales al rededor de un embarazo como: el deseo, el matrimonio y sus crisis, maternidad, ancestras y las mil formas que el cuerpo de una mujer puede habitar el imaginario colectivo y personal, contado desde la perspectiva de Aricia, personaje principal.
Sin duda lo volvería a leer. Aún no se ostenta el título de madre, más la autora sabe cómo conectar con lo que se siente serlo, sin agrado de embellecer el panorama, muestra los estragos físicos y reales de la maternidad, al igual que las dificultades de una mujer lograr esa identidad propia.