Hay cosas que nadie sabe de Jake Becker, por ejemplo, que fingió una relación con Bethany Harris al empezar la universidad o que no se presentó a las pruebas para un buen equipo de la NCAA. Lo que sí sabe todo el mundo es que atrae los problemas como un imán.
Durante su segundo año en la VSU, Jake tendrá que lidiar con un montón de reproches familiares, deportivos y académicos mientras se esfuerza por ser titular en el equipo de fútbol y por mantener separadas sus dos vidas: la de dentro y la de fuera de la universidad. Parece una tarea bastante sencilla, pero la llegada de Emma, los encontronazos con Arabia y la música de Beth harán que todo cambie.
Sobre todo, esto último.
Y, al acabar el curso, todo eso que nadie sabía de Jake Becker ya no será ningún secreto. Ni siquiera lo que él desconocía de sí mismo.
Empezó a publicar en 2015 mientras compaginaba la escritura con la hostelería y otros trabajos poco aesthetic que la obligaron a desarrollar unas habilidades sociales de las que está muy orgullosa. Su trilogía Amor y virtud fue reeditada en 2019 por Munyx Editorial, con quien publicó también «La extinción de los elfos» en 2021 y «Jake Becker, el chico de siempre» en 2024. Cursó tres años en la Universidad Politécnica y otros tres en la Escuela de Arte Superior de Diseño de Valencia, pero no concluyó ninguno de sus estudios por falta de vocación.
Se define a sí misma como una escritora poco preciosista y algunos de sus libros favoritos son «Loveless», «Canciones de amor a quemarropa» y «Todos quieren a Daisy Jones».
Ay, cuánto echaba de menos a los Becker!!! Leer a Rolly siempre es una delicia, me ha encantado la ambientación y lo reales que son los personajes. Además, como persona que ha vivido en USA, ha sido un regalo poder recordar tantas cosas que he vivido acompañada de Jake y de Beth💙
Aunque este libro salió después de la trilogía Amor y virtud, creo que es mejor leerlo antes. En mi caso, lo he disfrutado mucho y me he emocionado porque sabía lo que iba a pasar en la trilogía, pero creo que si no sabes lo que viene, esta historia se disfruta mucho más. También se puede leer de forma independiente pero os recomiendo mucho leerlos todos.
Jake es mi personaje favorito sin duda, y tener este libro es una auténtica maravilla.
Esta vez acompañamos a Jake a la universidad, a los partidos, entrenamientos y fiestas y, por supuesto, veremos la relación con su familia, compañeros de equipo y más personajes que formaran parte de la vida y la personalidad de Jake.
Como siempre la autora transmite mucho y consigue meterte dentro de la historia y te deja con ganas de más de está familia. Ojalá más libros de los Becker.
Le voy a poner 5 ESTRELLAZAS por un simple motivo: he visto vivir a Jake de verdad. Vengo a leer este libro después de haber leído la trilogía original de los Becker. En ella, a pesar de que me gustaron muchísimo los personajes y sus historias, siempre tenía la sensación de que iban todos a medias tintas (incluso aunque el prota indiscutible para mí era Jake). Sin embargo, este era el libro que necesitaba para conectar al 200% con un personaje que es muy real y del que ahora entendemos muchísimo más que antes: por qué es como es, por qué le cuesta tanto hablar de algunas cosas, ser tan reservado y, bueno, todo su mundo interior. Creo que Rolly ha hecho un trabajo estupendo con la ambientación y que esto era justo lo que necesitábamos todos los que hemos aprendido a querer a los Becker como si fueran nuestra propia familia (menos a Paul, a él no lo soporto, lo siento).
Gracias por regalarnos la historia de Jake, Rolly.
bueno pues ahora voy a tener que leer la otra tilogía de la autora para ver qué le pasa a esta familia porque les quiero mucho (bueno al padre no) he adorado la ambientación en los años 80 y lo reales que eran todos los personajes. El final me ha dejado rotísima pero es real como la vida misma <3
Es la primera vez que leo a Rolly y me ha sorprendido para bien. La pluma de la autora es muy ligera y te lleva de la mano por la historia sin ningún problema.
Además, ¡la ambientación! Aquí, el fútbol americano tiene muchísimo peso y se nota que Rolly sabe de lo que habla. Es el telón de fondo para contarnos las desventuras de Jake, un chico muy de su edad y muy realista que la caga a veces y que, a pesar de todo, intenta ser la mejor versión de sí mismo. Pero, como digo, me gustaría recalcar que el deporte tiene un peso importante y que se nota la labor de investigación de la autora. Quizás, si lo que buscáis es un romance y ya está, esta no sea vuestra novela. Si os interesa indagar más en el mundo que suele rodear a los sport romances, os invito a entrar.
El personaje de Arabia me ha gustado mucho. También el hecho de que, a pesar de que el libro sea una precuela de una saga que la autora ya publicó hace tiempo (pero que está disponible: Amor y virtud), no sea necesario saber nada de antemano para leerlo. Sé que suena raro, porque es precuela, pero este mundo ya estaba antes de Jake y no he tenido problemas en meterme en él.
Lo que me ha faltado ha sido llegar a conocer más a nuestro protagonista. En ocasiones, he echado de menos profundizar más en sus sentimientos, en lo que cada momento le despertaba. Algunas escenas que creo que podrían acercarnos más a Jake han pasado demasiado rápido para mi gusto.
Ha sido mi primera vez leyendo a Rolly y ciertos aspectos de la novela me han sorprendido bastante.
¿Qué vais a encontrar entre sus páginas?
✨Un libro narrado en tercera persona (pero con varios puntos de vista). ✨Mucho más que un mero sports romance y es que se tratan temas como las relaciones tóxicas, las familias disfuncionales, las peleas… La dosis de drama está asegurada. ✨Una ambientación de diez. No estoy acostumbrada a leer libros ambientados en los años ochenta y Rolly ha hecho un trabajo increíble con las referencias a la cultura yanqui y la música (que también juega un papel fundamental en la historia). ✨El deporte en esta historia no está para hacer bonito. La autora sabe de lo que habla y aunque, a veces, las escenas en las que se narran jugadas y entrenos pueden resultar algo abrumadoras si no se está familiarizado con el tema, me parece importante destacar este aspecto ya que en la mayoría de sports romance el deporte es un mero decorado para la historia y no es el caso de este libro. ✨Jake es uno de los personajes más reales que he leído jamás. Para él no todo es blanco o negro. Es dual. Se debate entre sus dos lados y eso lo hace bastante complejo. ¿Qué puedo decir? Tengo debilidad por los personajes grises.
🔙 Este libro es una precuela de la trilogía “Amor y virtud”.
Quiero destacar que he jugado mucho tiempo a fútbol americano y soy actualmente árbitro, bueno… y aficionada y me he sentido ARROPADA con la gran inmersión a este deporte. GRACIAS a la autora por haberse empapado tanto de esta magia.
Bien. Hay personajes que odio profundamente. Empezando por PAUL. Oh dios mío pero ese hombre debería no se, caer un meteorito… no hay nadie que haya shipeado también a Sara y el entrenador? Yo rezaba por que tuvieran un affaire y ella se diera cuenta del error de estar con un imbecil como Paul.
Bueno, después de sacar mi rabia.
ODIO EL FINAL. Entiendo la moraleja pero me parte el alma este final para Jake. Es que entiendo tanto el sentimiento de haberlo dado todo por un deporte, de amar tanto a ese deporte y que de un día para otro… desaparezca.
Necesito no se, un spinoff o algo o un final alternativo.
Me ha encantado esta historia, sus personajes, todo lo relacionado con los entrenos y partidos… me ha encantado ❤️
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Libro precuela de la famosa trilogía de la autora. Me ha encantado más saber de Jake y de porque fue como fue en la trilogía. Me ha fascinado y me ha encantado
"Jake Becker. El chico" de siempre narra la historia de un Jake universitario anterior al de la trilogía Amor y Virtud. Así que estamos en Utah en 1984. Becker cursa una carrera con una beca de fútbol americano. A pesar de estar rodeado de gente, el joven posee un carácter reservado, taciturno, por lo que no se relaciona demasiado con el resto del alumnado o jugadores. Esto de debe a su esfuerzo activo de separar su vida personal y académica con una fuerza titánica la Hannah Montana de los 80. Por supuesto, todo en la vida de Jake ―porque ya era así mucho antes de 1986― está definido tanto por la mala suerte como por las malas decisiones. De este modo, los problemas familiares repercuten en su concentración en la universidad, sus dilemas universitarios con el fútbol, el fútbol con la familia. De este modo, entra en un círculo vicioso. Sosteniendo a este Becker vapuleado por la vida se encuentra su amiga Beth. Una chica con un sueño demasiado intangible, un novio de mierda un poco cuestionable y una amistad inusual con Jake ―primero, porque no es algo sencilla en sí mismo; y segundo, bueno, en determinado momento fingió salir con él―. No será la única persona que se preocupa por el joven. Esta novela, quizá, se podría resumir en que es el viaje a la tierra prometida, el roce del cielo y la caída al infierno de Jake Becker. Un chico tan corriente como su concepción de la vida.
Te cuento un poco qué he encontrado en esta historia.
Estaba pensando en Estados Unidos, la ambientación de Jake Becker, y de algún modo me he ido a pensar en el sueño americano. Creo que es uno de los tópicos que más se venden del país. Ya lo dijo Walt Disney: «Si puedes soñarlo, puedes hacerlo». Tal vez este sea el eje sobre el que gira la novela. Es un drama costumbrista, así que, tal vez, no sea estrictamente una historia de superación, pero no será porque Jake no lo intenta. Y esto es porque casi esta recogida en una enmienda eso de esforzarse, de estar, de tratar de llegar a todo, aunque implique dejarte por el camino la salud mental. Así que sí, diría que Jake Becker va del sueño americano, de uno que se tuerce. También trata de familia, del miedo a perderse, de la angustia por no ser suficiente ―o, simplemente, no ser en toda su magnitud― o el dolor de caerse y no llegar a levantarse. También va de otra cosa muy yanqui, de las celebraciones, individuales de ese logro minúsculo o de esa victoria de tu equipo. Estas son las estrellas que se ven en la noche oscura.
El caso es que Jake Becker, para mí, fue un viaje emocional. Pasan muchas cosas, tiene un ritmo muy similar al de la trilogía y cada evento es relevante. No obstante, no quiero quedarme con esto o no solo. Hay una cosa que me gusta mucho de cómo escribe Rolly Haatch y es que las escenas cotidianas, esos momentos pequeños de reunión familiar, de ceño fruncido, de pizza en la mano se llenan con algo intrínsecamente fascinante. A ver si me explico, resulta similar a cuando rebuscas en una caja de fotos antiguas y tomas una donde la luz ha comenzado a conquistar las formas de los sujetos que posan en ellas, el flash, que se marcó en la esquina superior gracias a un dedo, contrasta de un rojo intenso con esa sonrisa cálida de le protagonista. No me olvido de esos bordes desgastados por sacarla y manosearla. Eso es lo que tiene el costumbrismo de la autora
Ya que hablamos de esa nostalgia, de echar la vista atrás, también me gustaría hablarte de cómo ha ido cambiando y madurando el estilo de Rolly Haatch. Esta historia ha crecido, se ha llenado de experiencia como la historia de Jake con esta precuela. Con su ya típica narradora que se acerca a los personajes para darle una palmadita en la espalda, contemplarlos con mimo ―pese a sus errores o aciertos― o se aleja para ver una panorámica de un contexto detallado. El contexto, por favor, no dejes que esta charla termine sin que te cuente que más sobre esto, pues en Jake Becker te puedes encontrar: comida, supermercados, música, peinados, movidas adolescentes yaquis... Hay un trabajo para que te sitúes y te recrees en los años ochenta. Se hace a través de la narración, con pequeños y grandes detalles, con los gustos de los propios personajes, con situaciones diarias o la música.
Música que nos lleva a hablar de Beth. Un personaje que aparece tímidamente en un momento dado y que luego se hace la reina de la novela. No es la protagonista, no es únicamente su historia. Se podría decir que no es la parte fundamental de la trama de Jake, pero sí lo hace de una manera intrínseca. Cada personaje tiene su pequeña parcela, sus propios problemas que se enlazan a Jake. (Jake es un poco como la mosca que no puede evitar ir a la miel ―la «miel» son los problemas―). Me gusta mucho cómo siempre termina siendo el centro, pese a que hay varios focos narrativos.
Si has leído la trilogía te reencontrarás con varios personajes: Zane, Ari, Emma, Sara... Es un momento increíble. No voy a decir nada más, por si hay alguien que no ha leído el resto de libros. Creo que es conveniente decir que no es necesario leer Amor y Virtud para poder disfrutar de esta lectura. Son independientes, pues conocer aquí a los Becker y enamorarte de ellos, de sus dinámicas, de sus maneras de entender el mundo.
¡Por favor no entiendo cómo se me ha podido olvidar esto! Es una novela costumbrista, con drama, música y ¡fútbol americano! Ya sé que te he dicho que Jake tiene una beca deportiva. Lo que se me olvidaba decirte es que el fútbol tiene su propia trama, con partidos, conversaciones, un glosario con palabras y mucho curro por parte de Rolly ―ella es muy fan―. Así que si eres de esas personas que les encanta leer este tipo de historias, esto no te defraudará. De hecho, a mí me flipa ―creo que esto ya te lo he contado muchas veces― y gocé muchísimo esta parte. ¡Vamos, Ice Falcon!
Creo que ya me he enrollado suficiente, o, por lo menos, creo que no me olvido de nada importante. Bueno, sí se me olvida. Jake es un personaje demirromántico. Tal vez parezca algo sutil en la lectura, pues es verdad que son los ochenta, y de estas cosas no hablaba, no había información y estaba todo aislado, pero quiero resaltar que hay un momento en el cual yo dije: "yo he pensado lo mismo". Así que si estás en el espectro o lo conoces, te darás cuenta de los detalles. Yyyy, no me quiero ir sin mencionar brevemente que Jake es un personaje alosexual, pero que su posición con respecto al sexo es, más bien, indiferente. Esto me ha gustado mucho, porque se ve en determinados instantes ese trasfondo o cómo lo vive; ese pequeño matiz, que generalmente no se suele ven en personajes alo, le da cuerpo a su manera de entender el mundo.
Y ahora sí, voy a hacer un pequeño resumen de lo que es esta novela. Jake Becker se trata de una historia autoconclusiva, que navega por la vida de una familia estadounidense de clase trabajadora con sus problemas para mostrar las dificultades a las que se pueden enfrentar o la tensión del día a día. Las relaciones interpersonales poseen un gran peso. Por ello, podemos encontrar relaciones maternofiliales, amistades, enemistades... tan intrínsecamente atadas a la cotidianeidad que cada acto tiene una consecuencia.
Ya solo me queda recomendártela si te gustan este tipo de historias. Yo la disfruté muchísimo y espero que tú también lo hagas si te animas.
Leer sobre Jake es algo que me encanta así que tener un libro entero sobre él (aunque también salen más personajes conocidos) es una gozada.
A Jake le pasa de todo y no siempre pone de su lado para que la situación mejore. Pero todo lo que le pasa, bueno y malo, te va a mantener pegada al libro.
Muchas lo conocemos de la trilogía Amor y virtud, pero este libro puede leerse de forma totalmente independiente.
Esta vez acompañamos a Jake a la universidad y a los partidos y entrenamos de fútbol americano. Pero también lo acompañamos a fiestas (y que peligro tienen estas!!). Seguiremos viendo la relación con su familia y nos introducirá a personas que no conocíamos y que han sido importantes para Jake de una forma u otra.
Como todos los libros de la autora, este me ha gustado muchísimo. La forma de contar todo lo que pasa te mete dentrísimo de la historia y te deja con ganas de conocer más cosas de todos los personajes.
Estoy deseando que entre todos sus nuevos proyectos le haga hueco a más libros del universo Becker. Yo voy a ir ahorrando para cuando lo haga.
Cuando oí hablar de este libro me atrajo mucho porque siempre he sido muy fan de las series americanas sobre la vida estudiantil, pero no sabía qué me iba a encontrar: no es romántica, ni es deporte, ni la combinación de ambos (sportromance). Supongo que sería contemporánea. Es una novela que, en general, se lee muy rápido. Refleja bien cómo podría ser la típica experiencia universitaria americana de un jugador de fútbol, y me gusta que Jake no sea ni perfecto ni un completo desastre. Eso sí, hay varias cosas que no han hecho que no me entusiasme, pese a su ritmo ágil.
Mi gran problema con este libro es que no sé qué quiere contar la historia. Va de un chico, Jake, que juega al fútbol americano en la universidad y a medida que avanza la trama le suceden cosas mundanas que podrían pasarle a cualquier universitario americano de los años ochenta, sin mayor trascendencia. Tiene conflictos con compañeros de equipo, ligues, problemas familiares, va a fiestas y se enamora de su mejor amiga (pero sin que haya trama romántica como tal). Pero a él no se le ve que tenga ninguna aspiración y, por lo tanto, su evolución como personaje es nula. Eso sí, al pobre Jake le pasan tantas desgracias que le coges cariño y solo quieres abrazarle y decirle que todo va a salir bien, que la vida a veces es dura y que siga adelante.
Respecto a la trama, no entiendo la inclusión de algunos temas (salvo para que pasen cosas porque sí, SPOILER, como lo de los secuestros de niños, el profesor universitario que se sobrepasa sexualmente con sus alumnos y la drogadicta) y da la sensación de que es una batidora de cosas para que Jake se meta en más problemas. Tampoco entiendo por qué hay varios puntos de vista (demasiados) en una historia que se centra solo en Jake. No creo que aporten demasiado y, además, hay varios POV en un mismo capítulo, lo que, estructuralmente, no tiene mucho sentido.
En cuanto al fútbol americano, he tenido la suerte de conocerlo de antes, pero puedo entender que si alguien lee esta novela y no sabe de qué va este deporte, se pierda. Es cierto que en el libro se incluye un glosario de términos; sin embargo, en la historia no están lo suficientemente bien integrados como para que alguien que no quiera acudir a ese glosario entienda de lo que se está hablando. Comprendo que se haya optado por esta opción para no caer en el infodumping.
En definitiva, no ha sido para mí, pero si buscas una lectura entretenida, de lectura ágil, sencilla y con deporte, puede que te guste.
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El protagonista es Jake Becker, segundo hermano de una familia de siete. Es un estudiante de segundo año de la universidad VSU con una beca deportiva de fútbol americano. Su hermano mayor está en una universidad en la otra punta del país, los dos pequeños, Zane y Louis, en el instituto y vive con ellos su primita Rachel, que es apenas un bebé. También pasa mucho tiempo en su casa Arabia, la mejor amiga de Zane. Es una familia con pocos recursos económicos, donde Jake tiene que trabajar cuando puede con su padre para poder ayudar a su familia. Además, parece que los problemas persiguen a Jake, y si no se está metiendo en una pelea, le están metiendo en otro conflicto.
Desde el principio, Jake es un protagonista gruñón, solitario e incomprendido, que poco a poco se va conociendo más y comprendiendo su actitud. Y, como siempre, adoro y mucho a los protagonistas así. Conseguí empatizar desde el principio con él, con sus circunstancias y con la situación familiar. Realmente se me encogía el alma en algunas escenas y me daban ganas de entrar en la historia para poder dar un abrazo y enseñar educación emocional a más de uno.
No quiero hacer ningún spoiler, así que solo voy a decir que es un libro que atrapa, que tiene una ambientación en los Estados Unidos de los 80 alucinante, con una representación de la sociedad de la época muy buena. También es especialmente notable todo el conocimiento que se muestra en el libro sobre el fútbol americano.
Cuando terminé de leerlo, casi lo primero que hice fue preguntarle a la autora si hay continuación. Por suerte, tenemos la trilogía para poder avanzar en el tiempo con Jake y su familia. Recomiendo muchísimo esta novela, tanto, que me acabo de terminar la trilogía y pronto haré la reseña.
"Jake Becker. El chico de siempre" nos relata la vida de un joven jugador de fútbol americano de la liga universitaria. Este protagonista, que no tiene una vida sencilla, con una familia demasiado caótica y un padre que no lo comprende, tampoco lo pone fácil, ya que a menudo se comporta de forma maleducada o egoísta con quienes lo rodean. También parece que tiene un imán para los problemas; Jake siempre parece estar metido en algún lío, incluso en algunos que no deberían ser de su incumbencia.
Precisamente esta personalidad tan llena de sombras y las continuas "desgracias" a las que se tiene que enfrentar es lo que hace que la novela enganche bastante. Aunque algunos de los capítulos son bastante largos (para mi gusto, que tiro más a los cortitos) y a que hay narradores que no aportan demasiado a la trama, es un libro que se lee relativamente rápido y con el que es fácil avanzar.
Lo que más cuesta arriba se me ha hecho fue todo lo relacionado con el fútbol americano, ya que se asume que el lector está familiarizado con este deporte y, en España, no es el caso de la mayoría. Esto hizo que se me hicieran bastante técnicas y que no entendiese la mayoría de las escenas en las que se narran jugadas o entrenamientos (y algunas cosas de Física las entendí solo porque tengo la carrera, pero también las considero demasiado complejas para un lector no familiarizado con ellas). También decir que al texto le haría falta una revisión, ya te tiene bastantes erratas y errores de corrección que a mí personalmente me dificultaban la lectura.
En resumen, si os gustan las novelas sobre deportes con personajes grises y complejos que siempre están metidos en líos, esta novela podría ser una buena elección.
Como nos tiene acostumbradas Rolly en sus historias contemporáneas, es una novela de personajes; en este caso, el centro es el segundo hermano de los Becker, vemos su día a día, sus problemas y cómo se relaciona a nivel familiar, amoroso y amistoso. Me ha gustado mucho descubrir los inicios de Jake, al que conocí en la trilogía «Amor y virtud» (esta es una precuela). Es un personaje muy complejo al que, a mi parecer, es muy difícil no cogerle cariño y querer con todas tus fuerzas que la vida le vaya bien —el pobre tiene muy mala suerte—. Entre las personas que lo acompañan en sus andanzas tenemos un poco de todo, desde la adorable Rachel y la maravillosa (y muy querida por mi parte) Arabia hasta el odioso Derek. Pero, sin duda, la que más presencia tiene es Beth, una animadora que quiere ser cantante y con la que comparte una pequeña trama amorosa.
Una novela costumbrista con su buena ambientación en una universidad deportiva de Estados Unidos de principios de los 80, su parte de drama y mucha música que he disfrutado enormemente.
Comparto al 100% la opinión de Maz. E. Castillo que se encuentra en la cubierta: «Rolly consigue convertir lo cotidiano en una novela veraz sobre el crecimiento personal».
No es necesario haber leído la trilogía para leer esta historia (y viceversa), pero ya adelanto que una te llevará a la otra porque querrás saber más de esta gente.
Este libro se puede leer independientemente de la trilogía Amor y virtud, sucede antes.
Jake Becker es el chico de siempre, el que poca gente comprende y muchos prejuicios hacen de él. El chico que tiene como segundo nombre problemas porque siempre acuden a él. Es un poco gruñón, en casa las cosas están como están y lo mejor de casa es su prima Rachel.
Es un libro sobre personajes y lo que ocurre en sus vidas, tendremos una trama romántica y una trama familiar, hay varias voces narradoras, pero el peso de la historia la lleva Jake.
Jake está estudiando, juega en el equipo de fútbol americano, en casa ayuda todo lo que puede y cuida de su prima Rachel siempre que está en casa. Para mí Jake es el gran incomprendido, vale que es gruñón y no muy hablador, pero eso no quita al gran corazón que tienen, nadie se para un segundo de más a hablar con él o entender qué le pasa o porque ocurren ciertas cosas.
Nos encontramos con viejos conocidos, en este caso he seguido con los mismos sentimientos con Emma que es un personaje que no me gusta y, tal vez, solo tal vez, con esa última conversación entre Jake y Derek con este último me haya reconciliado un poco.
Vamos a tener una pequeña trama romántica, como hay amores que marcan, amores que se llevan debajo de la piel y amores que uno hace lo que haga falta para que esa persona consiga su sueño, aunque tú tengas que sufrir.
Nos vamos a adentrar en lo exigente que es el fútbol americano, la preparación, los partidos y lo que se les exigen, veremos como Jake se lleva con sus compañeros, como asume culpas que no son suyas y también todas las consecuencias son para él. Aunque algún amigo encuentra entre sus compañeros.
Me ha gustado conocer a Beth, como ama la música, como llega a ser la cantante que será, de donde viene su inspiración y como todo está relacionado con Jake. l
Es el primer libro que leo de esta autora y el primer libro que se ambienta en el área del deporte. Tengo que decir que me ha gustado bastante.
Si es cierto que de fútbol americano no entiendo casi nada, me ha resultado bastante fácil e interesante seguir la historia, sin aburrirme o sentirme estancada. Es decir la autora ha usado un lenguaje bastante fácil de seguir, que te hace enganchar a los protagonistas y querer seguir leyendo sin parar.
Me han gustado los personajes, los he sentido muy cercanos, y muy reales. Jake es sin duda un personaje que te gana el corazón fácilmente.
Recomendaría el libro seguro, y además me gustaría leer otras obras de la autora.
Si te gusta el deporte: debes leerlo. Si te gusta la cultura EEUU de los 80: debes leerlo. Si ninguno de los dos son tus temas favoritos: debes leerlo y empezarán a serlo. Es el momento. Eso sí: al acabar querrás adoptar a Jake para siempre.
🏉 Libro narrado en tercera persona desde diferentes puntos de vistas. 🏉 Creía que el libro se me iba a hacer súper pesado y largo debido a la longitud del mismo y lo he devorado, he estado super metida en la historia.
🏉 Este libro nos narra principalmente la vida de Jack Becker, un chico que tiene como sueño principal ser jugador profesional de fútbol americano pero es un chico bastante problemático y agresivo y tiene que lidiar con esos impulsos que tiene para conseguirlo.
🏉 Me ha costado seguir un poco la trama de las jugadas deportivas que nos van narrando, ya que es uno de los temas principales del libro, pero al final del libro nos trae un glosario explicando algunas definiciones con más exactitud. 🏉 Hay muchos temas delicados que se tratan como el consumo de drogas, peleas, relaciones tóxicas, etc. 🏉 Contamos con referencias a canciones y películas de los años 80, en la década en la que nos sitúa esta historia. 🏉 Me ha gustado mucho algunas comparaciones que se hace de las relaciones personales/amorosas con teorías físicas o matemáticas.
🏉 A medida que va llegando el final de esta historia, nos van revelando cosas que le han pasado a Jake y porque ha tomado algunas decisiones, así como ese desacuerdo que tiene con su padre (aunque no lo llegué a entender del todos) 🏉 El final del libro me ha decepcionado un poco ya que esperaba un final más romántico.
No entiendo como este libro es tan poco conocido!! Un sport romance con deporte POR FIN y unos personajes con los que es fácil empatizar. ¡Enhorabuena a la autora!
No sabéis bien las ganas que tenía de leer este libro. Salió en marzo y he tenido que esperar hasta JULIO para leerlo (que diréis: «es poco, impaciente». ¡Sí soy!). Jake Becker fue, es y será uno de mis personajes favoritos, tanto de la trilogía de Rolly como de los libros que he leído a nivel nacional, y de ahí no me baja nadie.
El otro día leía a la autora diciendo que la trilogía no es de esas que marca a la gente… y mira, por ahí no paso. Entre 2016 y 2019 perdí la cuenta de las veces que releí los libros, las veces que lloré, que me frustré porque nadie entendía a Jake, que me dolía el daño que le hacían y que SE hacía. Es un personaje muy especial que creo que, a nivel mental, tiene muchísimo que enseñarnos, sobre todo en la etapa adolescente que es cuando más nos cuesta entendernos y hacernos entender para con los demás.
Pero centrémonos en este libro en concreto. Es autoconclusivo, lo puedes leer antes, después, en medio… da igual. Como si no quieres leer la trilogía (aunque la verdad, no entiendo qué motivo podrías encontrar para no querer hacerlo). En esta historia vamos a centrarnos en el propio Jake y aprenderemos a entender mejor su comportamiento en los siguientes libros. Su relación con sus padres y con su familia en general es difícil, él tiene mucha frustración y rabia dentro que no sabe gestionar y, encima, en la universidad y en el equipo de fútbol americano, sus lugares seguros, parece que la cosa tampoco le va a pedir de boca.
Es una cosa que me da rabia… este muchacho solo sabe sufrir T_T. No tiene rayitos de esperanza nada más que cuando está con Rachel, su prima pequeña (y mi peronaje favoritísimo de la historia).
También vamos a conocer a Beth, un personaje al que ya le tenía ganas, porque se la menciona alguna vez en la trilogía y era como… ¿quién es y por qué, por qué POR QUÉ?
No quiero dejar la reseña sin mencionar que Rolly ha hecho un trabajazo de documentación, con el deporte, con la estética de la época, con cómo funcionaba el tema de las universidades, becas, mundo de la música… una pasada. Si queréis enteraros de cómo se va documentando, seguidla en redes, que aprenderéis también mucho ^^