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Los enanos
Los cuartos y pasillos de una pensión de Barcelona en los años cincuenta son los protagonistas de esta novela calificada por muchos como una de las más importantes de la literatura española del pasado siglo. En ese espacio, a veces claustrofóbico y otras mundano, coinciden huéspedes que muestran la diversidad de la España de la posguerra y las miserias y luchas de los que fueron olvidados por el bando de los vencedores. Entre todas las voces presentes en ese crisol, sobresale la de una joven, María, quien narra a través de su diario una realidad alternativa que la aleja de la colmena asfixiante en la que conviven solidaridad y envidias.
Los enanos, obra cumbre en la narrativa de Concha Alós, por la que le fue concedido el Premio Planeta en 1962, al que hubo de renunciar por haber firmado previamente con Plaza & Janés, es el espejo en el que todavía puede reflejarse la sociedad de hoy en día y que demuestra la maestría narrativa de esta autora que vivió con absoluta libertad tanto su vida como su literatura.
Los enanos, obra cumbre en la narrativa de Concha Alós, por la que le fue concedido el Premio Planeta en 1962, al que hubo de renunciar por haber firmado previamente con Plaza & Janés, es el espejo en el que todavía puede reflejarse la sociedad de hoy en día y que demuestra la maestría narrativa de esta autora que vivió con absoluta libertad tanto su vida como su literatura.
235 pages, Kindle Edition
First published January 1, 1963
6 people are currently reading
393 people want to read
About the author
Concha Alós
9 books9 followersMaría Concepción «Concha» Alós Domingo
Si bien nació en Valencia, vivió gran parte de su vida en Barcelona. En 1962 se dio a conocer con la novela Los Enanos, y a continuación con Los cien pájaros en 1963. El éxito que alcanzó con sus primeros trabajos se consolidó con la obtención en 1964 del XIII Premio Planeta por su novela Las Hogueras. Su última novela publicada, El asesino de los sueños, es de 1986.
Parte de su infancia transcurrió en Castellón de la Plana, en la actual Comunidad Valenciana, en el seno de una familia obrera republicana. Debido a los bombardeos de las fuerzas nacionalistas durante la Guerra Civil la familia se trasladó a Lorca, Murcia. Dicha huida y el retorno al final de la guerra son el tema central de su novela El caballo rojo.
Fue esposa y difusora de la obra del escritor, periodista y crítico literario español Baltasar Porcel, de quien tradujo parte de su obra del catalán al español. Se conocieron mientras Porcel trabajaba como tipógrafo en el diario franquista mallorquín Baleares, propiedad del primer esposo de Alós. Años después, ambos escritores también se divorciaron.
Su obra se enmarcó dentro del realismo y del testimonio social. Trató con un lenguaje directo temas poco habituales en la literatura española de entonces, como el sexo, la homosexualidad y la prostitución. Debido a ello, tuvo inconvenientes con la censura franquista, pese a lo cual varias de sus obras fueron éxitos de venta en los años 60 y 70.
Si bien nació en Valencia, vivió gran parte de su vida en Barcelona. En 1962 se dio a conocer con la novela Los Enanos, y a continuación con Los cien pájaros en 1963. El éxito que alcanzó con sus primeros trabajos se consolidó con la obtención en 1964 del XIII Premio Planeta por su novela Las Hogueras. Su última novela publicada, El asesino de los sueños, es de 1986.
Parte de su infancia transcurrió en Castellón de la Plana, en la actual Comunidad Valenciana, en el seno de una familia obrera republicana. Debido a los bombardeos de las fuerzas nacionalistas durante la Guerra Civil la familia se trasladó a Lorca, Murcia. Dicha huida y el retorno al final de la guerra son el tema central de su novela El caballo rojo.
Fue esposa y difusora de la obra del escritor, periodista y crítico literario español Baltasar Porcel, de quien tradujo parte de su obra del catalán al español. Se conocieron mientras Porcel trabajaba como tipógrafo en el diario franquista mallorquín Baleares, propiedad del primer esposo de Alós. Años después, ambos escritores también se divorciaron.
Su obra se enmarcó dentro del realismo y del testimonio social. Trató con un lenguaje directo temas poco habituales en la literatura española de entonces, como el sexo, la homosexualidad y la prostitución. Debido a ello, tuvo inconvenientes con la censura franquista, pese a lo cual varias de sus obras fueron éxitos de venta en los años 60 y 70.
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Community Reviews
Displaying 1 - 30 of 31 reviews
January 20, 2022
Una p. maravilla del realismo sucio español. Y lo de “sucio” es en el sentido más literal del término: si hay algo que masticas durante toda la novela es la suciedad (o la miseria más bien, esa miseria triste y avariciosa de posguerra que todo lo amarga) incrustada en el entorno y el alma de los personajes. Aquí no hay romanticismo empalagoso por ningún lado, el amor duele, desgarra, es interesado o te quita las ganas de vivir cuando lo pierdes.. Las alegrias son igual de intensas, pero llegan con cuentagotas y duran poco.
La alternancia de puntos de vista en la narración no es ninguna novedad, pero está tan bien administrada, y los personajes son taaaaaan ellos mismos, sin adornos, pero tampoco sin fealdades añadidas, que acabas sufriendo con ellos cada dolorosa página.
No hay estereotipos, pero a cada cual lo puedes reconocer en alguien vivo. O muerto, porque también es cierto que el tufillo de la pensión está un poco pasado, por suerte, aunque eso no le quita ni verosimilitud ni actualidad.
Toca todos los palos: maternidad, pareja, feminismo, infancia, desigualdad social, vejez, y todos con un toque de amargura realista que a mi me ha dejado muchas veces para el arrastre. Me ha costado avanzar en la lectura, he necesitado mucha calma, pero me ha gustado mucho.
La alternancia de puntos de vista en la narración no es ninguna novedad, pero está tan bien administrada, y los personajes son taaaaaan ellos mismos, sin adornos, pero tampoco sin fealdades añadidas, que acabas sufriendo con ellos cada dolorosa página.
No hay estereotipos, pero a cada cual lo puedes reconocer en alguien vivo. O muerto, porque también es cierto que el tufillo de la pensión está un poco pasado, por suerte, aunque eso no le quita ni verosimilitud ni actualidad.
Toca todos los palos: maternidad, pareja, feminismo, infancia, desigualdad social, vejez, y todos con un toque de amargura realista que a mi me ha dejado muchas veces para el arrastre. Me ha costado avanzar en la lectura, he necesitado mucha calma, pero me ha gustado mucho.
September 30, 2025
quién sufre más: unas familias pobres luchando por sobrevivir y mejorar su vida en una pensión de la Barcelona de los años 50 o yo que hoy me ha bajado la regla y encima me ha tocado llevar al de religión???
November 2, 2022
«En una caja tengo tus cartas. Es una caja de cartón amarillo. Me la dio una mujer que vive aquí, su marido es vendedor ambulante. Cuando saco las cartas de la caja, las letras verdes huelen a madera y a tabaco, y también huelen a pino lejano de agujas brillantes y movedizas. La tinta verde de tus cartas es, en esta habitación, una música tristísima que habla de cosas lejanas que nunca existirán ya.»
Tengo que decir que he luchado bastante leyendo Los enanos. Había momentos en los que quería seguir leyendo, y otros en los que la lectura se me hacía larga, pero al final tengo que decir que esta novela me ha sorprendido para bien.
Me gusta el tono que utiliza la autora para introducir las situaciones que envuelven a los tantos personajes que aparecen en la historia, pero sobre todo la crítica social que se encuentra en cada una de las páginas. Al final, Concha Alós muestra la cruda realidad vivida por muchas personas durante la posguerra española, y en Los enanos, encontramos a personas que, contra viento y marea, intentan escapar de la miseria que los ahoga.
Esta novela, que no está dividida en capítulos, sino que se separan las diferentes «historias» mediante líneas en blanco (cosa que nunca ha acabado de gustarme), alterna las distintas vivencias de los inquilinos de la «Pensión Eloísa» con la narración en primera persona de María, una de las alquiladas. El diseño del argumento enhebrando estos dos puntos de vista me ha llamado mucho la atención, sobre todo tratándose de una novela publicada en 1962 en España.
Los personajes (inquilinos) son muy interesantes y sus ambiciones, sus sueños y sus sombras hacen de ellos personas atormentadas, oscuras y sufridoras —en definitiva, verdaderamente humanas—, sobre todo ante una casera implacable como la que tienen. Aun así, hay personajes que no tienen tanto peso como otros, y sí me hubiera gustado que se les diera un poco más de atención.
Los personajes vienen y van, pero, sin duda, la sensación de desesperación, de miseria y de crudeza no dejan de contaminar el relato desde el principio hasta el final, haciendo de estos elementos un posible personaje principal de Los enanos.
Tengo que decir que he luchado bastante leyendo Los enanos. Había momentos en los que quería seguir leyendo, y otros en los que la lectura se me hacía larga, pero al final tengo que decir que esta novela me ha sorprendido para bien.
Me gusta el tono que utiliza la autora para introducir las situaciones que envuelven a los tantos personajes que aparecen en la historia, pero sobre todo la crítica social que se encuentra en cada una de las páginas. Al final, Concha Alós muestra la cruda realidad vivida por muchas personas durante la posguerra española, y en Los enanos, encontramos a personas que, contra viento y marea, intentan escapar de la miseria que los ahoga.
Esta novela, que no está dividida en capítulos, sino que se separan las diferentes «historias» mediante líneas en blanco (cosa que nunca ha acabado de gustarme), alterna las distintas vivencias de los inquilinos de la «Pensión Eloísa» con la narración en primera persona de María, una de las alquiladas. El diseño del argumento enhebrando estos dos puntos de vista me ha llamado mucho la atención, sobre todo tratándose de una novela publicada en 1962 en España.
Los personajes (inquilinos) son muy interesantes y sus ambiciones, sus sueños y sus sombras hacen de ellos personas atormentadas, oscuras y sufridoras —en definitiva, verdaderamente humanas—, sobre todo ante una casera implacable como la que tienen. Aun así, hay personajes que no tienen tanto peso como otros, y sí me hubiera gustado que se les diera un poco más de atención.
Los personajes vienen y van, pero, sin duda, la sensación de desesperación, de miseria y de crudeza no dejan de contaminar el relato desde el principio hasta el final, haciendo de estos elementos un posible personaje principal de Los enanos.
September 16, 2022
Recuperando escritoras y lecturas de la posguerra. Concha Alós nos envuelve en un ambiente marginal de pobreza y resignación en Barcelona. Es significante la prosa cercana y valiente, ya que escribe durante el franquismo, a través de un diario para acercarnos a las personas que viven en un hostal. Muy recomendable
November 12, 2022
Terminada "Los enanos", de Concha Alós, autora injustamente olvidada a pesar de ser una de las principales representantes del Realismo sucio de la narrativa española. La obra retrata las condiciones de vida de gran parte de la sociedad de la posguerra a través de los huéspedes de una pensión de Barcelona. La novela se desarrolla a través de los diálogos, ágiles, coloquiales y directos, que se alternan con la voz intimista de María. El ambiente, en apariencia familiar, resulta asfixiante y nos muestra la existencia humana desde su ángulo más turbio: el absurdo de la muerte, la infelicidad matrimonial, las esperanzas frustradas y, en definitiva, la miseria moral y material que se extiende más allá de ese edificio. "Somos enanos rodeados de enanos, y los gigantes se esconden para reírse".
July 6, 2022
Hasta hace muy poco desconocía la existencia de Concha Alós, una escritora española de la misma generación que Juan Benet, así que el descubrimiento de esta novela ha sido todo un hallazgo para mí.
En el libro, Alós nos sumerge en la sociedad de la posguerra española a través de las vivencias y desgracias de los habitantes de una pensión más que humilde de Barcelona.
La descripción de ese mundo gris, terrible y con pocas opciones carcome a todos los personajes que entran y salen de la pensión, al igual que ocurre con las ratas con las que tienen que cohabitar.
Duro, terrible, pero totalmente recomendable.
En el libro, Alós nos sumerge en la sociedad de la posguerra española a través de las vivencias y desgracias de los habitantes de una pensión más que humilde de Barcelona.
La descripción de ese mundo gris, terrible y con pocas opciones carcome a todos los personajes que entran y salen de la pensión, al igual que ocurre con las ratas con las que tienen que cohabitar.
Duro, terrible, pero totalmente recomendable.
April 12, 2022
Tu vida. Mi vida. Un camino hermoso que, de pronto, se hunde en una pesadilla. Algo roto e inútil. ¡Si al menos pudiera luchar! Si pudiéramos romper a mordiscos estas ataduras y así, libres, escapar hacia los caminos claros. Volver atrás en el tiempo. Huir, locamente, alegremente, de ese gigante que nos fuerza a ser lo que somos y nos obliga a andar por donde él quiere. Somos enanos rodeados de enanos, y los gigantes se esconden para reírse.
March 26, 2023
"Me he escapado de mi vida. Soy una figura pàlida que no tiene futuro ni presente, solo pasado. Es lo que me une con estas gentes que viven en la pensión: ninguno vivimos el presente. Todos vivimos un pasado. Somos ratas que no pueden escapar de la negra cloaca para mirar la luz. "
October 25, 2021
«Me he escapado de mi vida. Soy una figura pálida que no tiene futuro ni presente, solo pasado. Es lo que me une con estas gentes que viven en la pensión: ninguno vivimos el presente. Todos vivimos un pasado. Somos ratas que no pueden escapar de la negra cloaca para mirar la luz».
March 12, 2024
Un viaje en el tiempo. Una parte de la sociedad de la España de la postguerra y el día a día de la vida de algunos de sus personajes.
August 4, 2022
Un libro que remueve. Duro en el tema, esa pensión llena de perdedores, sucia, oscura, triste. A la vez moderno en la forma, mezclando escenas, tiempos y personajes. A veces cuesta un poco distinguirlos.
February 1, 2022
4.5 estrellas:
No recuerdo cómo he llegado a Concha Alós y a esta novela. Lo que sé es que a partir de ahora, estaré con los ojos mucho más abiertos. Nunca había oído hablar de Concha Alós y me avergüenzo al escribirlo en esta reseña. Es una autora que escribe con el realismo de posguerra más abrumador que he leído en mucho tiempo.
Cuando empiezas a leer, cuesta tener claro quién es quién; pero pronto te conviertes en uno más de aquella pensión, sufres como ellos, tienes hambre como ellos, estás sucio como ellos. Y en seguida aprendes a decirles adiós, sea porque mueren o porque acaban en la cárcel o porque tienen que marcharse a Madrid; y recibes a los nuevos, a los que llegan, otros enanos como los personajes y como tú, lector.
“Somos enanos rodeados de enanos, y los gigantes se esconden para reírse.
Eres enano tú.
Soy enano yo.”
Y tú como lector aspiras a la normalidad a la que aspiran ellos:
“Tendríamos una habitación con libros; cuadros colgados y una pequeña estufa de hierro sobre la cual, en un pucherito cocerían un puñado de hojas de eucalipto. No necesitaríamos palabras ni casi miradas para entendernos, y el trabajo, por duro que fuera, sería algo bueno, con una finalidad.”
Altamente recomendable.
No recuerdo cómo he llegado a Concha Alós y a esta novela. Lo que sé es que a partir de ahora, estaré con los ojos mucho más abiertos. Nunca había oído hablar de Concha Alós y me avergüenzo al escribirlo en esta reseña. Es una autora que escribe con el realismo de posguerra más abrumador que he leído en mucho tiempo.
Cuando empiezas a leer, cuesta tener claro quién es quién; pero pronto te conviertes en uno más de aquella pensión, sufres como ellos, tienes hambre como ellos, estás sucio como ellos. Y en seguida aprendes a decirles adiós, sea porque mueren o porque acaban en la cárcel o porque tienen que marcharse a Madrid; y recibes a los nuevos, a los que llegan, otros enanos como los personajes y como tú, lector.
“Somos enanos rodeados de enanos, y los gigantes se esconden para reírse.
Eres enano tú.
Soy enano yo.”
Y tú como lector aspiras a la normalidad a la que aspiran ellos:
“Tendríamos una habitación con libros; cuadros colgados y una pequeña estufa de hierro sobre la cual, en un pucherito cocerían un puñado de hojas de eucalipto. No necesitaríamos palabras ni casi miradas para entendernos, y el trabajo, por duro que fuera, sería algo bueno, con una finalidad.”
Altamente recomendable.
November 13, 2022
«Solo me queda el dolor y esta desgana de vivir. El mundo
puede ser hermoso, pero el mundo está vacío. Solo me calman estas lágrimas que a veces me escuecen los ojos. Y, ahora, no siempre es posible llorar»
puede ser hermoso, pero el mundo está vacío. Solo me calman estas lágrimas que a veces me escuecen los ojos. Y, ahora, no siempre es posible llorar»
August 23, 2024
Hace unas semanas, bicheando por el 'Rastro' madrileño, me topé con este libro. Me sonaba vagamente haber leído alguna referencia sobre él y, por un euro, no perdía nada si al final era infumable. Se llamaba 'Los enanos' y la autora era Concha Alós. Su historia merece ser contada.
Alós ganó con esta novela el Premio Planeta de 1962 a los 35 años y la prensa de la época mencionaba que era maestra. Pero no solo eso. La escritora había vivido la Guerra Civil, refugiada en Lorca y Castellón y con solo 17 años se había casado con el poeta y periodista Eliseo Feijóo, 13 años mayor que ella. Tras la boda, la esposa adolescente emprende una nueva etapa en Mallorca donde su marido es designado subdirector del Diario Baleares (puesto que ocupó 25 años). En Palma, Concha estudia Magisterio y llega a ejercer de maestra rural.
Es en la redacción del periódico de su marido donde la autora conoce a un joven autor en ciernes que trabaja de tipógrafo para el periódico. Se trata de Baltasar Porcel, autor que alcanzaría la fama años más tarde. Porcel y Alós inician una relación y la escritora abandona a su marido yéndose a vivir a Barcelona con Porcel. Ya instalados en la Ciudad Condal, ambos intentan ganarse la vida con la literatura. Por fin en 1962, Concha Alós, consigue el gran triunfo de ser galardonada con el Premio Planeta, pero había un problema: Alós había presentado la novela a otras editoriales y Plaza y Janés había optado a su compra. Tras anunciarse el premio, Plaza y Janés -competencia directa de Planeta- estima que la obra les pertenece e impide que la autora reclame el premio. El escándalo es mayúsculo.
Plaza y Janés no había editado la novela, pese a haberla adquirido, aduciendo que era demasiado brutal, demasiado tremendista y contundente. ¿Era esto cierto? Pues bien, leída 60 años después puedo afirmar que sí, que efectivamente se trata de una novela bastante impactante. Teniendo en cuenta que fue editada (al final Plaza y Janés la imprimió aprovechando la polémica) en pleno franquismo, en una época en la que la censura era evidente, 'Los enanos' sorprende por su crudeza.
El libro toca temas poco habituales en la novela española de la época. Prostitución, adulterio, aborto, homosexualidad... hasta hay alusiones a la pedofilia o el incesto. Pero lo que más impacta ede sus páginas es la calidad con la que está escrita, alternando diálogos naturalistas con reflexiones cargadas de poética amargura. 'Los enanos' es un ejemplo claro de realismo social sucio, muy sucio, cuya trama coral cuenta la vida mísera de la españa empobrecida y embrutecida de finales de los 50 y principios de los 60 de una serie de personajes que malvive en una pension barcelonesa de mala muerte. Vidas basadas en el rencor, la envidia, la miseria y las esperanzas truncadas. Hombres y mujeres que guardan bajo llave la comida en maletas, que aguantan el tufo del sudor y la coliflor hervida, que contemplan las ratas del patio y las humedades de las paredes. Vidas a la deriva.
Una novela potente y descarnada que pone voz e imágenes a esa España entre la posguerra y el desarrollismo. Un título nada complaciente, a veces tendente, cierto, a exagerar la fealdad y la crudeza de la época; pero tambien una novela necesaria para analizar el pasado reciente.
Dos años después de 'Los enanos', Concha Alós violvió a ganar el Premio Planeta con 'Las hogueras'. En los 60 y principios de los 70, la autora siguió publicando con éxito, pero luego su estela se fue apagando. Creo sinceramente que 'Los enanos' está a la altura de otros ejemplos de realismo social urbano como 'La Colmena', 'Historia de una escalera' o 'Tiempo de silencio' y que podría ser lectura de bachillerato para tener una visión de la época desde un punto de vista femenino.
Alós ganó con esta novela el Premio Planeta de 1962 a los 35 años y la prensa de la época mencionaba que era maestra. Pero no solo eso. La escritora había vivido la Guerra Civil, refugiada en Lorca y Castellón y con solo 17 años se había casado con el poeta y periodista Eliseo Feijóo, 13 años mayor que ella. Tras la boda, la esposa adolescente emprende una nueva etapa en Mallorca donde su marido es designado subdirector del Diario Baleares (puesto que ocupó 25 años). En Palma, Concha estudia Magisterio y llega a ejercer de maestra rural.
Es en la redacción del periódico de su marido donde la autora conoce a un joven autor en ciernes que trabaja de tipógrafo para el periódico. Se trata de Baltasar Porcel, autor que alcanzaría la fama años más tarde. Porcel y Alós inician una relación y la escritora abandona a su marido yéndose a vivir a Barcelona con Porcel. Ya instalados en la Ciudad Condal, ambos intentan ganarse la vida con la literatura. Por fin en 1962, Concha Alós, consigue el gran triunfo de ser galardonada con el Premio Planeta, pero había un problema: Alós había presentado la novela a otras editoriales y Plaza y Janés había optado a su compra. Tras anunciarse el premio, Plaza y Janés -competencia directa de Planeta- estima que la obra les pertenece e impide que la autora reclame el premio. El escándalo es mayúsculo.
Plaza y Janés no había editado la novela, pese a haberla adquirido, aduciendo que era demasiado brutal, demasiado tremendista y contundente. ¿Era esto cierto? Pues bien, leída 60 años después puedo afirmar que sí, que efectivamente se trata de una novela bastante impactante. Teniendo en cuenta que fue editada (al final Plaza y Janés la imprimió aprovechando la polémica) en pleno franquismo, en una época en la que la censura era evidente, 'Los enanos' sorprende por su crudeza.
El libro toca temas poco habituales en la novela española de la época. Prostitución, adulterio, aborto, homosexualidad... hasta hay alusiones a la pedofilia o el incesto. Pero lo que más impacta ede sus páginas es la calidad con la que está escrita, alternando diálogos naturalistas con reflexiones cargadas de poética amargura. 'Los enanos' es un ejemplo claro de realismo social sucio, muy sucio, cuya trama coral cuenta la vida mísera de la españa empobrecida y embrutecida de finales de los 50 y principios de los 60 de una serie de personajes que malvive en una pension barcelonesa de mala muerte. Vidas basadas en el rencor, la envidia, la miseria y las esperanzas truncadas. Hombres y mujeres que guardan bajo llave la comida en maletas, que aguantan el tufo del sudor y la coliflor hervida, que contemplan las ratas del patio y las humedades de las paredes. Vidas a la deriva.
Una novela potente y descarnada que pone voz e imágenes a esa España entre la posguerra y el desarrollismo. Un título nada complaciente, a veces tendente, cierto, a exagerar la fealdad y la crudeza de la época; pero tambien una novela necesaria para analizar el pasado reciente.
Dos años después de 'Los enanos', Concha Alós violvió a ganar el Premio Planeta con 'Las hogueras'. En los 60 y principios de los 70, la autora siguió publicando con éxito, pero luego su estela se fue apagando. Creo sinceramente que 'Los enanos' está a la altura de otros ejemplos de realismo social urbano como 'La Colmena', 'Historia de una escalera' o 'Tiempo de silencio' y que podría ser lectura de bachillerato para tener una visión de la época desde un punto de vista femenino.
July 6, 2025
En Barcelona, en 2025, ha muerto bajo el sol una mujer de la limpieza. Hizo su turno, se fue a su casa, en la que vivía con su madre mayor, se sintió mal, tuvo que ser su madre la que se ocupara y de repente, mientras comía, se derrumbó.
Pero no existe la clase obrera.
Hay asalariados, con teletrabajo y con libertad horaria que se consideran clase obrera porque hay otro que manda más que ellos y que se pasan los convenios por donde consideran oportuno, como si la ley no fuera con ellos, como si la ley la inventaran ellos. Pero sus asalariados, esos pedazos de carne que no les preocupan, no son clase obrera.
Y hay quien trabaja horas y horas y para ir al médico tiene que esperar a que se acabe su jornada laboral o perderse un día de vacaciones y no se considera clase obrera.
Es raro (o no tanto) que entre Netflix, Glovo y Ryanair, no se hable de clase obrera. De las que trabajan en horarios estrictos, bajo la amenaza del despide, quienes se esconden cuando llega la revisión de Trabajo, para que no descubran que lo que hacen es ilegal, pero no pueden dejar de hacerlo.
Las que recogen los baños cuando dejas todo tirado, sucio, meas fuera y te ríes y te vas. Cuando protestas al camarero porque ha tardado mucho o porque se ha olvidado entre tantas mesas y no puede responderte y le regañas, como si fueras su padre.
Cuando pides a quien va a tu casa que cambie de hora y de día porque lo necesitas y le preguntas: “¿Te viene bien?”.
Y siempre le viene bien, porque siempre le viene mal y no tiene opción.
Porque te justificas diciendo: “Yo le pregunté, me podía haber dicho que le venía mal”.
Por lo menos, no te lo creas.
La clase obrera: la que vivía en una pensión en la España de la posguerra, sobre todo mujeres a las que tocan en los sitios públicos, que buscan un rico con el que casarse y tener una casa, que se quedan embarazadas ante el escarnio público y las miradas. La vida mísera de quien no tiene a quien agarrarse y hace cola en la cocina y se conforma viendo cómo juegan las ratas.
Cómo se pelean entre ellas, las pobres, a las que cazan y ahogan.
Y ver cómo se ahoga una rata es tan gracioso.
Pero no existe la clase obrera.
Hay asalariados, con teletrabajo y con libertad horaria que se consideran clase obrera porque hay otro que manda más que ellos y que se pasan los convenios por donde consideran oportuno, como si la ley no fuera con ellos, como si la ley la inventaran ellos. Pero sus asalariados, esos pedazos de carne que no les preocupan, no son clase obrera.
Y hay quien trabaja horas y horas y para ir al médico tiene que esperar a que se acabe su jornada laboral o perderse un día de vacaciones y no se considera clase obrera.
Es raro (o no tanto) que entre Netflix, Glovo y Ryanair, no se hable de clase obrera. De las que trabajan en horarios estrictos, bajo la amenaza del despide, quienes se esconden cuando llega la revisión de Trabajo, para que no descubran que lo que hacen es ilegal, pero no pueden dejar de hacerlo.
Las que recogen los baños cuando dejas todo tirado, sucio, meas fuera y te ríes y te vas. Cuando protestas al camarero porque ha tardado mucho o porque se ha olvidado entre tantas mesas y no puede responderte y le regañas, como si fueras su padre.
Cuando pides a quien va a tu casa que cambie de hora y de día porque lo necesitas y le preguntas: “¿Te viene bien?”.
Y siempre le viene bien, porque siempre le viene mal y no tiene opción.
Porque te justificas diciendo: “Yo le pregunté, me podía haber dicho que le venía mal”.
Por lo menos, no te lo creas.
La clase obrera: la que vivía en una pensión en la España de la posguerra, sobre todo mujeres a las que tocan en los sitios públicos, que buscan un rico con el que casarse y tener una casa, que se quedan embarazadas ante el escarnio público y las miradas. La vida mísera de quien no tiene a quien agarrarse y hace cola en la cocina y se conforma viendo cómo juegan las ratas.
Cómo se pelean entre ellas, las pobres, a las que cazan y ahogan.
Y ver cómo se ahoga una rata es tan gracioso.
May 4, 2025
"Los enanos" es una novela coral que se enmarca en el realismo social, en ella se refleja la realidad cotidiana de los huéspedes de una humilde pensión en Barcelona durante los años de la posguerra española. Además de los variopintos personajes, destaca la atmósfera de la “Pensión Eloísa”, sucia y descuidada, con ratas en el patio…, un lugar del que sus habitantes querrían escapar, pero cuyas difíciles vidas, y su lucha constante por salir de la miseria, se lo impiden. A pesar de sus anhelos y ambiciones, no es una historia de finales felices.
Narrada en tercera persona, en la novela se intercala una voz paralela en primera persona, la de María, una joven que cuida niños y que mientras escribe va recordando su vida pasada que, con algo de intriga, el lector descubre poco a poco. "He perdido. La vida, para mí, ha sido un juego al que se echan las únicas monedas y se pierden".
Al principio me costó un poco situar a cada personaje, y en algún momento temí que fuese una lectura demasiado monótona, pero justo ha sido todo lo contrario. Además de bien escrita, con una prosa clara y precisa, frases cortas, diálogos y algunos fragmentos muy bellos, la autora hace un retrato realista de la época, que abarca una interesante variedad de situaciones y temas, como las dificultades de encontrar vivienda o el miedo a regresar a los pueblos natales y ser considerados unos fracasados, lo que la hace bastante amena. En mi opinión, una novela muy recomendable.
"¡Si al menos pudiera luchar! Si pudiéramos romper a mordiscos estas ataduras y así, libres, escapar hacia los caminos claros. Volver atrás en el tiempo. Huir, locamente, alegremente, de ese gigante que nos fuerza a ser lo que somos y nos obligar a andar por donde él quiere. Somos enanos rodeados de enanos, y los gigantes se esconden para reírse".
Narrada en tercera persona, en la novela se intercala una voz paralela en primera persona, la de María, una joven que cuida niños y que mientras escribe va recordando su vida pasada que, con algo de intriga, el lector descubre poco a poco. "He perdido. La vida, para mí, ha sido un juego al que se echan las únicas monedas y se pierden".
Al principio me costó un poco situar a cada personaje, y en algún momento temí que fuese una lectura demasiado monótona, pero justo ha sido todo lo contrario. Además de bien escrita, con una prosa clara y precisa, frases cortas, diálogos y algunos fragmentos muy bellos, la autora hace un retrato realista de la época, que abarca una interesante variedad de situaciones y temas, como las dificultades de encontrar vivienda o el miedo a regresar a los pueblos natales y ser considerados unos fracasados, lo que la hace bastante amena. En mi opinión, una novela muy recomendable.
"¡Si al menos pudiera luchar! Si pudiéramos romper a mordiscos estas ataduras y así, libres, escapar hacia los caminos claros. Volver atrás en el tiempo. Huir, locamente, alegremente, de ese gigante que nos fuerza a ser lo que somos y nos obligar a andar por donde él quiere. Somos enanos rodeados de enanos, y los gigantes se esconden para reírse".
March 29, 2025
Se trata de un libro de personajes donde descubrimos la forma de vivir, en la posguerra, de la gente humilde que vivía en una pensión madrileña.
Hay una gran variedad de personajes, a cada cual más diferente que el anterior, y donde se nos muestra cómo las mujeres lograban sobrevivir a base de ingenio. Las solteras no valían nada, por lo que terminaban casándose con cualquiera para conseguir un techo bajo el que vivir.
A mi modo de ver, tenemos a Sabina y Eloísa que son como el punto de inicio y fin de una misma situación. La primera va sobreviviendo a base de sacar dinero a unos y otros con sus artimañas hasta que se casa con un anciano ricachón mientras que la segunda, casada y venida a menos, dirige con mano firme la pensión.
Está contado a dos voces, la del narrador, en tercera persona, que nos habla de cada uno de los personajes que viven en la pensión y luego en primera persona, a través de cartas de una mujer a su enamorado.
Disfruté más la primera voz que la segunda, que me desubicó y no logré saber quién era hasta el final. Además, la gran cantidad de personajes y que no leyera el libro de forma seguida hizo que me costara seguir el hilo de algunos de ellos al principio.
¿Es un libro que recomendaría? Sí. Porque me convenció más que el de Nada de Carmen Laforet. Tal vez por la variedad de personajes. ¿Me gustaría leer más cosas de la autora? No. Porque su forma de narrar no me convenció demasiado. Solo seguí leyendo porque quería saber el destino de los protagonistas.
Hay una gran variedad de personajes, a cada cual más diferente que el anterior, y donde se nos muestra cómo las mujeres lograban sobrevivir a base de ingenio. Las solteras no valían nada, por lo que terminaban casándose con cualquiera para conseguir un techo bajo el que vivir.
A mi modo de ver, tenemos a Sabina y Eloísa que son como el punto de inicio y fin de una misma situación. La primera va sobreviviendo a base de sacar dinero a unos y otros con sus artimañas hasta que se casa con un anciano ricachón mientras que la segunda, casada y venida a menos, dirige con mano firme la pensión.
Está contado a dos voces, la del narrador, en tercera persona, que nos habla de cada uno de los personajes que viven en la pensión y luego en primera persona, a través de cartas de una mujer a su enamorado.
Disfruté más la primera voz que la segunda, que me desubicó y no logré saber quién era hasta el final. Además, la gran cantidad de personajes y que no leyera el libro de forma seguida hizo que me costara seguir el hilo de algunos de ellos al principio.
¿Es un libro que recomendaría? Sí. Porque me convenció más que el de Nada de Carmen Laforet. Tal vez por la variedad de personajes. ¿Me gustaría leer más cosas de la autora? No. Porque su forma de narrar no me convenció demasiado. Solo seguí leyendo porque quería saber el destino de los protagonistas.
October 20, 2024
En una pensión barcelonesa en la década de los '60, varios personajes desenvuelven su miseria. Mujeres y hombres aplastados por la pobreza, la suciedad, la nostalgia y la muerte. Pero una de las mujeres, la señorita María, escribe un diario.
Durísima novela realista con protagonismo coral. Está la historia de una ex artista de variedades, ahora casada con un vendedor ambulante, que recuerda los tiempos de prosperidad. La de la propia dueña de la pensión, que podría (o no) tener un amante. La del boxeador marroquí que pierde todas las peleas. La de la joven que solo se acuesta con un hombre para sacarle algo, con un poco de suerte un matrimonio que la saque de allí. Y solo una contada en primera persona, la de la señorita María, que es testigo de todas las demás, porque la suya ya terminó.
En algunos puntos me ha parecido una novela extremadamente innovadora para su época, sobre todo en lo que hace al tratamiento del deseo y la sexualidad femeninos. En general es una novela protagonizada por mujeres, y todas tienen una personalidad tan marcada que casi parece que uno está ahí, en esa desoladora pensión llena de ratas.
Durísima novela realista con protagonismo coral. Está la historia de una ex artista de variedades, ahora casada con un vendedor ambulante, que recuerda los tiempos de prosperidad. La de la propia dueña de la pensión, que podría (o no) tener un amante. La del boxeador marroquí que pierde todas las peleas. La de la joven que solo se acuesta con un hombre para sacarle algo, con un poco de suerte un matrimonio que la saque de allí. Y solo una contada en primera persona, la de la señorita María, que es testigo de todas las demás, porque la suya ya terminó.
En algunos puntos me ha parecido una novela extremadamente innovadora para su época, sobre todo en lo que hace al tratamiento del deseo y la sexualidad femeninos. En general es una novela protagonizada por mujeres, y todas tienen una personalidad tan marcada que casi parece que uno está ahí, en esa desoladora pensión llena de ratas.
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February 2, 2022No me he enterado de nada, sin hilo, simplemente miserias narradas de una manera más bien confusa, con muchas veces el narrador metido en los párrafos que se supone que eran diálogo. Lectura super cuesta arriba, para mí infumable, que no me ha aportado nada PERO PERO PERO
1. Me ha pasado más veces que soy corto y un libro magnífico no me gusta. Este fue hasta Planeta en el 62
2. Veo que ha gustado a mucha gente, tanto en amazon como aquí, así que leeré reseñas porque a veces me han explicado un libro y lo he entendido y degustado pasado el tiempo.
3. Sosprendente que pasase la censura (recordemos que La Colmena de Cela no, se publicó en Buenos Aires).
Conclusión: no le doy nota porque creo que el problema soy yo, que no lo he sabido leer, y me ha pasado en otras ocasiones. Me espero a ver más opiniones o comentar con alguien que lo haya leído :) no siento que el libro sea malo, sino que no era para mí
1. Me ha pasado más veces que soy corto y un libro magnífico no me gusta. Este fue hasta Planeta en el 62
2. Veo que ha gustado a mucha gente, tanto en amazon como aquí, así que leeré reseñas porque a veces me han explicado un libro y lo he entendido y degustado pasado el tiempo.
3. Sosprendente que pasase la censura (recordemos que La Colmena de Cela no, se publicó en Buenos Aires).
Conclusión: no le doy nota porque creo que el problema soy yo, que no lo he sabido leer, y me ha pasado en otras ocasiones. Me espero a ver más opiniones o comentar con alguien que lo haya leído :) no siento que el libro sea malo, sino que no era para mí
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December 20, 2022qué vidas............. le dan a uno ganas de llorar de alegría de tristeza o de emoción al ver que a pesar de tantísima miseria simpre queda, aunque sea solo a veces, filtrándose como se filtra la luz por la persiana, espacio para la ternura
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una noche, después de leer cómo las mujeres de este libro se reúnen en el balcón para ver cómo pasa un coche fúnebre, como si fuera un espectáculo, y después de leer que luego hacen pan y chocolate para los hombres de la casa, como si solo ante la muerte fueran conscientes del milagro que supone estar vivo pese a todo, me puse un poco triste
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además se menciona mi ciudad, y tiene unos capítulos epistolares que son preciosos, preciosísimos, la cosa más preciosa que he leído en mucho tiempo <3
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una noche, después de leer cómo las mujeres de este libro se reúnen en el balcón para ver cómo pasa un coche fúnebre, como si fuera un espectáculo, y después de leer que luego hacen pan y chocolate para los hombres de la casa, como si solo ante la muerte fueran conscientes del milagro que supone estar vivo pese a todo, me puse un poco triste
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además se menciona mi ciudad, y tiene unos capítulos epistolares que son preciosos, preciosísimos, la cosa más preciosa que he leído en mucho tiempo <3
May 9, 2022
4.5 estrellas
Un magnífico descubrimiento, esta obra 'Los enanos' de Concha Alós, coetánea de Luis Martín Santos, cuyo estilo me ha evocado muchas veces esta fantástica novela. Retrata la vida de los habitantes de una pensión barcelonesa a primeros de los 60, en la España franquista del hambre y la miseria. La descripción de personajes es muy buena, así como su minuciosidad al retratar las necesidades y la desesperanza de la época. Me encantaría leer algo más de la autora.
Un magnífico descubrimiento, esta obra 'Los enanos' de Concha Alós, coetánea de Luis Martín Santos, cuyo estilo me ha evocado muchas veces esta fantástica novela. Retrata la vida de los habitantes de una pensión barcelonesa a primeros de los 60, en la España franquista del hambre y la miseria. La descripción de personajes es muy buena, así como su minuciosidad al retratar las necesidades y la desesperanza de la época. Me encantaría leer algo más de la autora.
March 13, 2024
Vemos cómo se desarrolla la vida en una pensión de Barcelona a finales de los 50,en plena posguerra.Se describe muy bien la podredumbre a la que estaban obligados a vivir la gente humilde.Novela de personajes cada uno con sus anhelos,destacan los personajes femeninos.Novela realista con toques poéticos en algunos momentos.
February 21, 2019
Realismo costumbrista, una narración cruda que retrata una sociedad víctima y victimaria, sin finales felices. Ofrece, sobre todo, un descarnado testimonio de la vida de las mujeres en la España de mitad del siglo XX.
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June 26, 2023
Alós debería ser leída y conocida por su capacidad de trasladar la crudeza de la posguerra y la sensibilidad de sus personajes a pesar de las circunstancias adversas que los rodean.
Una maravilla a nivel narratológico. Un lenguaje plagado de imágenes.
Una maravilla a nivel narratológico. Un lenguaje plagado de imágenes.
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November 26, 2021es fácil fracasar amando a alguien hasta el extremo de excluir a todos los demás. es fácil perder, amando como yo te amo a ti.
January 24, 2022
Faltan estrellas!!!
February 11, 2022
Novela costumbrista que retrata fielmente la posguerra española. Esconde también críticas a temas candentes de la época: pobreza, soledad, miseria, prostitución, aborto...
April 24, 2023
«Somos enanos rodeados de enanos, y los gigantes se esconden para reírse»
April 8, 2024
Extraordinario relato de los vencidos.
January 9, 2025
Realismo social (como La Colmena de Cela), además de una historia paralela en primera persona. Gran descubrimiento de esta escritora desconocida para mi
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