En el Primer manifiesto surrealista (1924), André Breton propuso otorgar supremacía a la actividad onírica: sumergirse en sus laberintos, dejarse arremolinar por sus corrientes y navegar, mancos de remos, en sus aguas.
En esta antología, veinticinco escritoras y escritores que pertenecen a lo mejor de las letras uruguayas narran a partir de sus sueños. La inminencia de un desastre; el palpitar de una duda que desconoce lo conocido; un volcán que estalla por las noches; ladridos que son peces. Amir Hamed con un gabán viejo sobre una camisa brillosa. Marosa con lentes de gato frente a los focos del set. Preguntas como: ¿por qué a veces, al contemplar los árboles, piensas en candelabros?
Toda revolución produce ondas expansivas; sacude, despabila, provoca. Ese ímpetu disruptivo de la revolución surrealista es lo que viene a celebrar, un siglo después, este libro.
Una tarde en la escuela, mientras sufría las pruebas, pensó que cuando fuera grande iba a entender a los niños. Y no se olvidó. Durante su infancia se mudó muchas veces. Sus primeros libros fueron misteriosos tesoros abandonados por los inquilinos anteriores; quizá por eso cree que los libros son regalos que transportan hacia otros universos, y le encanta leérselos a su hija Luciana. Desde hace años trabaja y piensa como psicoanalista. También coordina talleres de escritura para niños y adolescentes; disfruta y aprende un montón con ellos. Es máster en Libros y Literatura Infantil y Juvenil por la Universidad Autónoma de Barcelona y docente de Literatura Infantil en la Universidad Católica. La ventana de papel es su primera novela.
Como esperaba, algunos textos me gustaron más que otros. Pero, más allá de eso, me parece espectacular leer diferentes estilos de escritura así, encadenados. Que sea un libro onírico ayuda a crear un ambiente mágico en el que, a pesar de sus diferencias, todas las historias conviven. Como si fuese un gran Cadáver Exquisito.
Definitivamente me gustaron más los textos que reflejan la estructura de los sueños, fragmentada, increíble, fantástica. Algunos se me hicieron bastante largos para lo que esperaba teniendo en cuenta el punto de partida, pero es una apreciación subjetiva de gusto, no de calidad.