La reconstrucción del enfrentamiento entre un psiquiatra y un paciente llevará a un escritor a cuestionar el sistema de salud mental de nuestro país
«Daniel Jiménez se alinea en una tradición literaria de santos fracasados que anticipan el declive de una sociedad y el malestar en la cultura, hombres (y mujeres) del subsuelo como Dostoievski, Hamsun o Castellanos Moya.» Carlos Pardo, Babelia «Escrita con sobriedad y belleza, al acabar esta pequeña pero punzante historia de perdedores miramos la foto de la portada y nos sentimos ahí: somos el adulto y el niño a un tiempo, podemos comprender nuestros errores como padres y como hijos.» Elvira Lindo «Honesta, valiente, íntima, bella. Una historia conmovedora y sorprendente. Un libro esencial.» Rodrigo Sorogoyen «Una historia de latrocinio en un universo televisivo sin escrúpulos, y también una gran historia de amor.» Berna González Harbour, El País «El plagio es un libro importante porque habla con ternura y con inteligencia de las cosas que mueven el mundo. Lo que heredamos de nuestros padres, lo que legamos a nuestros hijos. El dinero. La vocación. La dignidad. La resistencia.» Daniel Remón
Nadie tiene la culpa. Estas cosas pasan. Solo fue un «incidente». Esa es la palabra que más se repite a la hora de hablar del enfrentamiento entre Ricardo Montesinos, jefe de la planta de psiquiatría del hospital, y Manuel Alejandro, un joven paciente ingresado por tercera vez en la unidad de agudos. La versión oficial se empieza a desmoronar cuando un escritor en crisis, que estuvo ingresado hace veinte años en ese mismo lugar, se decide a investigar el caso y confronta los testimonios de todos los implicados. Basada en hechos y personajes reales, El incidente es una novela polifónica que aborda cuestiones fundamentales y contradictorias en torno a la enfermedad mental: la diversidad de causas que la inducen —biológicas y contextuales—, los intereses detrás del aumento del malestar en nuestra sociedad o la necesidad de acabar con el estigma que la rodea sin caer en el exhibicionismo al que conduce su permanente visibilización. Tras convencer a la crítica y a los lectores con El plagio, Daniel Jiménez combina magistralmente realidad y ficción para diseccionar de manera transversal y sin maniqueísmos la delicada salud mental de pacientes y profesionales, lo que le lleva, en última instancia, a afrontar sus propios miedos y vulnerabilidades.
“Mientras Lucía habla del autocuidado y la gestión de las emociones, me vienen a la mente todos esos libros que aseguran que el bienestar depende exclusivamente de nuestra voluntad, que el universo conspira para que cumplamos nuestros objetivos, y que si queremos que nos pasen cosas buenas solo hay que preocuparse por equilibrar los niveles de cortisol y rodearse de personas vitamina.”
“Solo digo que para los jóvenes de hoy tener problemas mentales se ha convertido en una tendencia más. Una moda. Me refiero, claro, a los problemas o trastornos leves, esos que se pueden exhibir en las redes sociales porque nadie te juzga por ello. Pero ¿qué pasa cuando alguien pierde realmente el juicio? Eso ya no es tan fácil de compartir y comprender.Porque volverse loco de verdad no es divertido. Volverse loco no te ayuda a mejorar tu autoestima o a estar más preparado para la crudeza de la vida. Volverse loco no es necesario para conocerse mejor a uno mismo. Volverse loco no es cool por muchos likes que tenga tu post. Además, claro, no es lo mismo volverse loco en un barrio pobre que en un barrio rico. “
“La ansiedad es una de esas sensaciones que quien no la haya sentido no puede llegar a entender sus mecanismos de acción ni su virulencia.”
“Se me ponen los pelos de punta porque me dicen: Tú eres la única persona a la que tengo. Y yo solo soy una persona contratada por el Estado para escucharla veinte minutos una vez cada dos meses, a veces cada tres. Yo no creo que los psiquiatras seamos la solución al malestar social, ni siquiera al sufrimiento psíquico. Somos gente que sabe de fármacos con los que aplacar los síntomas, pero son los entornos los que al final cuidan y salvan a las personas. Estamos sedando a la gente para que aguante su vida, cuando lo que deberíamos hacer es crear vínculos seguros para sostenernos mutuamente.”
Tiene algunas frases para enmarcar. Un libro sobre salud mental y todo lo que ello conlleva. Necesario en estos tiempos de “personas vitaminas”, autoayuda…
Se queda en la superficie. Le falta una buena correción por algún profesional que no sea el que le ha recomendado a Fernando Colina, Carmona, Laura Martin y cols.
Me gusta: La visión que intenta darle desde todos los puntos de vista y el esfuerzo que hay detrás.
No me gusta: - Madricentrismo. También hay chavales pasándolo mal en pueblos y también hay otros modelos de psiquiatría que no son los de la capi. - Fallos de bulto con fármacos o protocolos que le restan la pretendida precisión - La falsa autoficción para un libro de entrevistas que podría haber sido un buen ensayo. No me interesa en absoluto ni me llega la historia del paciente del que habla.
Evidencia en forma de novela la situació que vivim entorn a la salud mental en este pais. Mostra diverses visions sobre els problemes de salud mental, tan desde una visió piscosocial com desde una mirada més biomédica.
Deuria ser lectura obligatoria ja no tan sols a les persones que estan en contacte o treballen en persones dins de l’area de la salud mental, sinó també, a totes les persones per entendre la necesitat de tindre una visio psicosocial de la realitat, i com el contexto influeix tant en lo que som i en lo que fem.
Muy recomendable. Si que avisaría de algunos AVISO CONTENIDO:suicidio, drogas, sexo, ansiedad..
Se trata de una novela que engancha desde el principio, queriendo saber más sobre lo que ha pasado entre un psiquiatra y su paciente. Pero está movela va más allá y entre las entrevistas que va realizando el protagonista, se habla de salud mental, carencias que existen en España y en la sociedad, sobre consumo de drogas y sobre la visión que se tiene de los trastornos mentales y las personas que los tienen. También trata un poco los posicionamientos desde l@s profesionales de la salud , lo cual me parece muy interesante. Se lee con facilidad y engancha. Lo recomendaría.
Me ha sorprendido el libro. No me esperaba que el autor tratase tan claramente de los problemas y avatares de la salud mental. El autor se basa en un incidente, entre un paciente y su psiquiatra, para obtener testimonios de todos los profesionales y afectados relacionados con trastornos mentales. Duros testimonios en muchas partes del libro y reflexiones sobre lo que rodea a estos profesionales y los centros sanitarios. Nadie está libre de padecer algún trastorno o enfermedad mental. Muy recomendable.
Un libro muy ligero, se lee con mucha facilidad. A través de un incidente entre un psiquiatra y un paciente y recogiendo testimonios de muchas personas (profesionales, familiares…) cercanas a ellos, se tratan temas como la salud mental en España, el uso de fármacos, el consumo de alcohol y drogas, el suicidio…
Es un libro interesante porque muestra la precaria situación de la psiquiatría española. Por otro lado muestra el complejo mundo del enfermo mental y todos los problemas de relación entre los especialistas y los enfermos.
Se lee rapidísimo y va cambiando en su lectura, metamorfosea una premisa principal, entender qué ha pasado en "El incidente" entre un paciente y un psiquiatra donde este último lo agrede, para acabar siendo una búsqueda de respuestas que, como los buenos libros, devuelve principalmente preguntas, sobre la salud mental, las instituciones sanitarias, los internamientos y la contención forzosa, lo hereditario y la moda actual de etiquetas autoproclamadas que poco saben del padecimiento real de quien sufre una enfermedad mental y todo lo que eso conlleva.
Descrito desde mil voces además del protagonista, que es el escritor que se plantea todo esto para tratar de resolver su propia historia, permite entender mucho sobre el tema del que trata. Es una novela viva que habla sobre temas muy difíciles y pocas veces tratados en profundidad desde todas sus aristas. Una novela verídica, no tanto por estar basada en hechos reales, como por estar contada desde una verdad literaria que últimamente escasea, sin necesidad de fuegos artificiales u originalísimas y excéntricas propuestas, aunque sí es variado en la forma literaria que usa, lo hace a favor de la trama.
Quien haya tenido algún tipo de acercamiento personal con la institución y con los ingresos por salud mental se verá reflejado, pero no caricaturizado. Recomendable.
Da una visión muy amplia sobre salud y enfermedad mental, gracias a las muchas perspectivas a las que se da voz en cada capítulo. Esa parte está bien, aunque en mi reflexión final me quedo con la sensación de que el hilo conductor del libro son las experiencias de muchos hombres y muy pocas mujeres (por no decir ninguna). Qué casualidad que los dos mejores capítulos sean los basados en los testimonios de una psiquiatra y una enfermera, que dan un respiro de la lucha de egos de los hombres protagonistas.
Después de leer El plagio tenía muchas ganas de volver a leer lo nuevo de este autor, y tengo que decir que no me ha decepcionado ni un ápice. Daniel retrata perfectamente la situación de la salud mental en España, desde todos los enfoques y puntos de vista posibles. Te involucra de tal manera con los personajes que acabas empatizando con todos ellos. Combina magistralmente el ensayo con la novela y la autoficción, con una estructura de libro muy original. Un libro de obligada lectura.
Un incidente ocurrido entre un paciente y su psiquiatra es analizado por el autor, tomando en consideración la narración de los testigos y las aportaciones de diferentes profesionales (médicos, compañeros, familiares...) que conocen a ambos. La novela analiza el estado de la enfermedad mental en nuestro país.
Dani nos hace explorar y entender el mundo de la enfermedad mental. Impresionante reflexión, muy duro pero Daniel consigue transmitirlo de una forma bastante natural
me quedan 60 páginas me estoy pensando en dejarlo a medias. La premisa tenía buena pinta, pero la prosa es muy regulera, se acaba haciendo aburrido, los personajes son planos y paradójicamente, caen en los mismos lugares comunes que intenta criticar. Si consigo terminarlo y el final me depara algo genial, volveré y cambiaré la reseña