La primera novela de Carolina Iglesias, guionista, cómica y presentadora ganadora del Ondas con el pódcast Estirando el chicle.
Paula tiene un trabajo estable, goza de buena salud y se da besos con gente cuando sale. A veces hasta folla. Es una adulta funcional y envidiable, de las que van al mercado a hacer la compra y se saben el nombre del frutero. Que paga su IRPF, aunque no sepa muy bien qué es porque usa siempre una plantilla que le hace los cálculos automáticamente. Que lleva quince años yendo a terapia porque no sabe gestionar el rechazo y la ausencia de responsabilidad afectiva y que cuando se encuentra en situaciones de este tipo se pone a llorar desconsolada. Igual no es una adulta tan envidiable, pero sí funcional.
Hasta que, sentada justo en frente de ella en el tren, se reencuentra con Claudia, su amor platónico de la adolescencia. Lo que siempre quiso, al alcance de la mano.
Carolina es una guionista y presentadora gallega. Comenzó haciendo monólogos y vídeos en youtube bajo el nombre Percebesygrelos.
Conocida como Percebes y Grelos en las redes sociales, es una cómica, guionista y youtuber española.
En 2021, fue reconocida con el Premio Marcela y Elisa por su trabajo a favor de los derechos LGTBI+, siendo la persona más joven en recibir este galardón.
Hacía tiempo que no sentía esa necesidad de devorar un libro y con este me acaba de pasar. Le tenía muchas ganas y posiblemente en mucho tiempo algo que tengo muchas ganas cumple las expectativas. Al principio leyéndome la sinopsis pensaba que me iba a encontrar con un libro de amor romántico, pero, aunque tiene sus pinceladas, lo que es en realidad es un libro de amor propio. Algo que ayuda también a conectar con la historia y a sentir abducida por el libro es la cotidianidad con la que está escrito y los símiles que utiliza. Vamos que parece que te lo está contando una amiga o directamente tú eres la amiga que lo cuenta.
“No me da miedo que el móvil me escuche, me da miedo que hable después y que me juzgue”
Conocida por su aguda mirada como cómica, guionista y presentadora, Carolina Iglesias da el salto a la literatura con su primera novela, ‘Para siempre es mucho tiempo’, una historia generacional contada con humor, ternura y, sobre todo, mucha honestidad acerca de lo que significa crecer, amar y enfrentarse a uno mismo.
Paula es una mujer funcional pero llena de inseguridades (¿y quién no?), que un día se reencuentra, casi por casualidad, con Claudia, su amor platónico de la adolescencia. Ese encuentro en un tren no solo remueve los recuerdos del pasado, sino que desencadenará una reflexión sobre el amor, el rechazo y la madurez emocional, que invita al lector a explorar lo que significa enfrentarse a la adultez cuando todavía hay heridas que no han terminado de sanar.
Uno de los grandes aciertos de la novela es su capacidad para hablar de temas complejos desde la cercanía y el humor. Identidad, bisexualidad, salud mental, terapia y amistad son solo algunos de los ejes que vertebran esta historia, que nunca cae en el dramatismo gratuito, pero tampoco esquiva la profundidad emocional. Iglesias maneja ese equilibrio con destreza haciendo que el lector se sientan reflejado en Paula, con sus miedos, contradicciones y logros. Además, la autora retrata con sensibilidad las inseguridades de una generación, los millenials, explorando cómo el pasado —marcado por la nostalgia y la idealización— sigue teniendo un peso en el presente.
Es especialmente destacable la forma en que la novela aborda la bisexualidad de la protagonista. Lejos de los clichés, Paula vive su identidad sexual como parte de un proceso de autodescubrimiento que no siempre es sencillo, pero sí real. Lo mismo ocurre con su paso por la terapia, tratada como una herramienta fundamental para comprenderse a sí misma y navegar sus relaciones.
También hay una interesante reflexión sobre la infancia, el bullying, y cómo esas experiencias nos marcan de formas que a veces ni siquiera comprendemos del todo. Iglesias pone palabras a ese tipo de heridas invisibles que arrastramos durante años, aunque racionalmente sepamos que ya no deberían doler. Es ese conocimiento emocional el que impregna la novela de autenticidad.
El estilo narrativo es ágil, directo y muy cercano, en una línea que recuerda al tono de Estirando el chicle. Hay frases desternillantes, diálogos que parecen salidos de una conversación con amigas y momentos cargados de una ternura tan genuina que es difícil que no te remuevan por dentro. El ritmo fluye con naturalidad, y eso hace que la lectura nunca se vuelva pesada.
Resulta difícil separar a Carolina Iglesias de Paula. Comparten edad, orientación sexual, sentido del humor y una forma muy particular de mirar el mundo. Sin embargo, lejos de ser un obstáculo, esta cercanía potencia la empatía con el personaje. Iglesias sabe conectar con su generación, hablarle al corazón sin caer en el sentimentalismo, y construir un relato que, si bien parte de lo personal, tiene una resonancia colectiva.
‘Para siempre es mucho tiempo’ es una novela sobre las cicatrices que no se ven, sobre el vértigo de crecer, sobre lo que cuesta hablar de los propios sentimientos, sobre las dudas que nos acompañan al amar y el miedo a dejar entrar a alguien en nuestra parte más vulnerable. Pero también es una historia de amistad, de reencuentros, de autodescubrimiento. De entender que madurar no es tener todas las respuestas, sino saber que no pasa nada por hacer las preguntas.
Una lectura necesaria, fresca y conmovedora para quienes alguna vez se sintieron raras, inseguras, diferentes, que nos recuerda que no hay una sola manera de ser adulto. Y que, a veces, lo más valiente que podemos hacer es mirar al pasado con ternura y decidir seguir adelante.
Le pondría 3,5 ⭐️ pero como esto no me deja se queda en 3. Fue bastante gracioso al principio y al final fue menos gracioso y más personal x así decirlo, pero en general no ha estado nada mal :)
no es la regla número 1 de la escritura crear una protagonista con el que el lector empatice, sufra por sus dolores, se alegre de que le salgan las cosas bien, etc? pues no sé cómo lo ha hecho la carolina iglesias que nunca antes había tenido tantas ganas de librarme de un personaje la protagonista es la típica persona que se victimiza y justifica por todo lo que hace pero en realidad es egoísta y tiene 0 responsabilidad emocional, IMPOSIBLE que te caiga bien lleno de clichés y metáforas manidas un rollo, vamos. que me lo he leído xq escasean las lecturas de bolleras pero si hubiera un poquito más de oferta lo habría dejado a medias
Un día. Un día es lo que me ha durado esta lectura que que me ha recordado que leer también es esto.
Permitidme este dato personal. Por profesión y/o vocación, tiendo a recopilar lecturas con la esperanza de que me «descubran» una nueva forma de ver la vida, de comunicarla. En esa búsqueda, conozco a autores (normalmente, autoras) increíbles, con grandes puntos de vista sobre la vida, sus temas universales e, incluso, de vez en cuando, sobre aspectos muy concretos y personales, tanto, que los entiendo como propios.
Pero, de vez en cuando, cae en mis manos un ejemplar «divertido», un libro de los que enseguida juzgo como lectura ágil, de una tarde, de sofá y manta, de verano, *añadir calificativo de ligereza*… como si se tratara de un género literario en sí mismo. Un libro equivalente a un helado en formato mini. Disfrutón, pero rozando lo imperceptible.
Cuánto necesitamos esos helados que apenas te duran un asalto. Como este libro. De verdad, cuantísima falta hacen. No sé si agradecérselo a Carolina Iglesias, a Temas de Hoy o, en última instancia (y por más que me pese) a Planeta, pero he aquí una lectura que merece la pena. Cada lector aportará sus motivos, y yo misma tengo más de uno y más de tres, pero sería bonito que tú descubrieras el tuyo.
Este libro es una zona de confort con referentes reales, un guiño a la generación de los noventa y un abrazo que alivia la soledad que muchos hemos sentido durante la adolescencia. Gracias.
Este libro es como estar en casa. Las descripciones, los personajes y el lenguaje resultan familiares y muy fáciles de leer. No obstante, esperaba más de la trama, la historia me ha parecido algo manida.
¿El libro está bien? Si ¿Se deja leer? También. De hecho, se deja leer muy bien. Está escrito de tal forma que, sin darte cuenta, llegas al final. ¿Te hace pensar? Podría mentir y decir que no, pero algo de comedero de cabeza da. ¿Es una novela romántica? Psé. A ver, romance hay. De hecho, el "amor" es un pilar importante en la novela. Pero, quizá, decir que pertenece al género romántico no es lo más acertado.
Si estás en un momento algo bajo en tu vida, yo no te la recomendaría. Qué la novela está bien; que se nota para el público para el que está escrita. Pero habla de muchas cosas, muchas heridas que te quedan de la infancia, de la adolescencia. Heridas que, aunque ahora seas una adulta funcional, a veces salen a flote y te bloquean, porque no están tan superadas como parecen. Te hace reflexionar. Te hace pensar.
Si buscas una novela de amor, lo lamento, pero no es para tí. Si buscas un lugar que te haga pensar, algo que te vuelva un poco bucólica y saque algunos miedos o dudas, entonces, es tu novela.
Lo que menos me ha gustado? Ese final sin final. Y quizá ahí está la cosa, en que no tiene final, porque no hay final...
Me encanta la cercanía que sientes con los personajes, sobre todo con la protagonista. Comete errores y no los admite, se victimiza, se da cuenta de que lo ha hecho mal y no quiere pedir perdón, no por maldad sino por mera humanidad.
Creo que en muchos aspectos me he identificado con Paula, tampoco me gusta volver a casa y tener un complejo de inferioridad que no admito, pero es que el tiempo ha pasado, y el mundo ha cambiado, y los roles aprisionantes que existían en la adolescencia y que parecían lo único que había en el mundo, en realidad, ya no importan, porque ya ni siquiera son.
Es un libro que además de hablarte te escucha.
(bonus points, se nota que lo ha escrito Carolina porque muchas veces me he reído en voz alta con él)
No puedo decir q me haya decepcionado ni q no me haya gustado pero muy sinceramente, no era lo q esperaba 🤷🏽♀️
He disfrutado muchísimo del proceso, porque ha sido una lectura muy ligera y divertida, con capítulos cortitos, lenguaje coloquial y unos nombres de capítulos... que no tienen desperdicio. Además, el contenido y los temas que se tratan me parecen enriquecedores.
Sin embargo, la resolucion de la trama me ha quedado un poco chafada, que le vamos a hacer si soy una romántica...
Me ha gustado mucho el libro de Carol. Cuesta no pensar que Paula en realidad es ella y que hay parte de su historia ahí, porque seguramente así sea, pero Paula también he sido un poco yo en muchos momentos y por eso le agradezco el libro y la sensibilidad.
Me parece un libro muy bonito, que muestra un amor al que no estamos acostumbradas en los libros enfocados a adolescentes. Quienes seguimos a Carolina desde hace muchos años, seguro que no podemos dejar de ponerle cara de “Pau”.
Pues mira la historia está guay, si te gusta Carolina Iglesias pues te va a gustar el estilo porque es ella 100%, pero me ha parecido bastante flojo, hay una mezcla de tiempos verbales que me ha dejado desquiciadita. No me refiero a los saltos temporales, eso super ok, pero es que dentro de la narración de una misma anécdota se mezclan presente y pasado continuamente y eso a mí me saca de la lectura. Not bad si buscas lectura ligerita y no pensar mucho, pero eso. (Perdón Carolina en general me gusta mucho lo que haces me siento fatal por ponerle 2 estrellas 😭)
Ha sido como estar escuchando a Carolina en mi cabeza relatando la historia todo el tiempo. Es muy fácil de leer. Capítulos muy muy cortitos que incitan a no parar y una historia ágil en la que todo el rato están pasando cosas.
Salvando las distancias, he tenido sensaciones que me han retrotraído al momento en el que leí “El descontento” de Beatriz Serrano. Una vista atrás a la infancia/adolescencia, un estilo sagaz, un lenguaje coloquial y sucesos con los que, en mayor o menor medida, no puedes no sentirte identificada.
No me pareció un mal libro, pero era como que no ocurría nada muy allá que me intrigase como para estar impaciente por leerlo (menos el final, que me dejó con bastante curiosidad, aunque creo que se puede entender que pasa, si no me equivoco claro🦐).
Otra cosa que me sorprendió para bien, es que me lo empecé esperando una novela romántica (que no es mi género favorito honestamente), y no fue así. Si bien es verdad que el amor romántico está presente, no es la temática principal de la novela, y en todo caso, podría ser más bien el amor propio, lo cual me parece bastante importante e innovador. (Esto último lo saqué de otra reseña del libro en goodreads y me parece que acertó mucho)
Básicamente, no me ha cambiado la vida pero pienso que puede ser un buen entretenimiento para matar las horas en un viaje por ejemplo.
Hacía tiempo que no sentía la necesidad de devorar un libro como me había pasado con este. Es como un abrazo tanto por la forma en la que está escrito como por lo que cuenta. Soy Pau y Pau es yo y me sentí en casa leyéndola. Por la sinopsis esperaba un libro de amor romántico y es lo que encontré, pero también amor de amigas, familia y, sobre todo, amor propio. Se lleva unas 5 estrellas muy muy merecidas 🫂
*spoilers* No esperes que este libro te cambie la vida, pero sí que es un libro súper fácil de leer y que te engancha por completo. La historia de Paula, una tía con sus alegrías y sus dramas y que tiene líos amorosos. También dedica mucha atención a las amigas (qué haríamos si ellas!). Me dolió un poquito el corazón cuando hablaba sobre el distanciamiento con su amigo Dani, pero todas hemos pasado por ello así que I felt it.
Lo único que no me quedó muy claro y que entiendo queda a opinión de cada lector… la madre de Pau al final se separa del padre?
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Si has escuchao a Carolina Iglesias te darás cuenta que este libro tiene un audiolibro incoporao 😂
Trata temitas mu de podé sentirte identificá con Pau si eres bollera y/o si has sío un poco parguela en el colegio e instituto. También si en algún momento de tu vida te ha tocao viví lejos de la familia pa buscarte las papitas.
Un libro mu entrete, pa devorar casi de una sentá 🫶🏾
Imposible no leerlo con la voz de Carolina. Me ha durado un día y medio, y ha sido una montaña rusa de emociones. He abrazado a la niña y la adolescente que fui, he reído y llorado con ella.
Gracias por escribir una historia para las niñas queer que nos tocó crecer en un pueblo, ha sido casi como leer mi propia vida en muchas de las páginas, doloroso y sanador para este intento de adulta funcional.
Mi primer audiolibro, narrado por la autora del mismo —a quien seguía a raíz de Estirando el chicle hace años—. No ha estado mal: a ratos su lucidez conectaba conmigo; pero he de decir que me parece que la narración le restaba un poco dada su monotonía tonal. Quitando eso, ha sido entretenido y siempre de agrado leer (escuchar) más vivencias LGBT.
Este libro me ha acompañado en un momento muy doloroso de mi vida y ha puesto en palabras muchos sentimientos, inseguridades y traumas que yo sola no he sido capaz de verbalizar. Pone en valor a la red de personas que nos acompañan en estos momentos tan duros y está escrito con una honestidad y belleza apabullante. Gracias Carolina por compartir tu historia. Ahora formas parte también de esta pequeña red de seguridad que me acompaña en mi duelo
No estuvo mal, al incio estuvo gracioso y se lee súper rápido, me daban ganas de saber qué iba a pasar en el siguiente capítulo. Pero.. como que los capítulos finales (y el final también) no me gustaron mucho, sentí que fue como que decayendo un poco :/ pero en general me gustó.
Moi recomendado para escoitar en audiolibro. Resultoume unha historia lixeira, entretida e sinxela que me fixo pasar un moi bo momento. Encantáronme o humor, tan creativo, e a acertada aura milenial. Un plus que estivese narrado pola autora.
Me lo he leído casi de un tirón. Hay algunas cositas que me han tocado la patatita, no lo voy a negar, y es que aunque nos creamos super únicos y especiales al final todos pasamos por determinadas vivencias muy similares...
"Nos han entrenado para rechazar el lápiz durante toda la etapa escolar. Lo importante va a boli, lo que se duda a lápiz. Y creo que necesito escribir mi vida a lápiz."
Aunque soy 6 años mayor que Carolina Iglesias siempre que la escucho me identifico mucho con lo que cuenta (fuimos pre y adolescentes en los 90). En esta novela no ha sido diferente, le he dedicado dos ratitos de este sábado, entretenida y fresca