Por fin Éldonon disfruta de paz. Carlos, lejos de la maléfica Igua, descubre el mundo de la imaginación como nunca antes lo ha conocido. La alegría inunda todos los rincones, los eldonianos celebran su libertad y viven por fin sin ser esclavos del terror que los ha mantenido atenazados durante tantas generaciones. Carlos y sus compañeros se enfrentarán en este clima de paz a su último año como aprendices en la Sede de los Imaginatos. ¿Será este oficio eldoniano tal y como lo han imaginado? Todo parece marchar a la perfección hasta el cumpleaños de Carlos; entonces un extraño regalo aparece en su habitación llevando la firma de su vieja enemiga. ¿Amenazará esto la vida de los aprendices o será sólo un mensaje de otro tiempo? ¿Deben preocuparse en Éldonon o su victoria es definitiva? ¿Podrían vivir en la Tierra desligados de los mundos de la imaginación?
Tras el éxito del primer volumen de la saga, La Fábrica Creátor (en 2ª edición), y de sus continuaciones, Los Cines Somnios y La Última Musa, finalizan las aventuras en Éldonon, un mundo abierto a la imaginación.
Patricia García-Rojo Cantón (Jaén, 24 de septiembre de 1984) es una escritora española, licenciada en filología hispánica por la Universidad de Jaén es profesora de lengua española y literatura desde 2008. El año 2015 fue premiada con el Premio Gran Angular que concede anualmente la Fundación SM, por su novela El mar.
La sensación que se experimenta al terminar una buena historia, que en este caso estuvo compuesta por 4 libros espectaculares, es muy difícil de describir a aquellos que no la han experimentado. Pero es algo parecido a una mezcla de alegría, nostalgia y quizá un poco de inquietud. Debo decir que ha sido todo un reto conseguir este libro. Por lo menos a mi me tomó poco más de un año conseguirlo en México, pero sin duda, la espera ha merecido la pena. A pesar de que en el libro anterior (La última musa) se llega a una conclusión en la que la historia podría quizá haber finalizado, debo admitir que hubo demasiadas cosas que no me esperaba. Lo cual es un punto a favor del libro desde mi punto de vista.
Yo no soy ningún crítico ni nada parecido, así que generalmente doy puntuaciones acordes a los sentimientos y sensaciones que experimento al leer y al haber terminado de leer un libro, y esta saga ha sido de mis favoritas. Esta serie tiene algo especial, tomada desde el punto de vista de un adolescente, pero llena de imaginación y magia. En fin, lo recomendaría totalmente, ya que es una lectura bastante agradable a mi parecer.
Finalizado el cuarto y último libro de los Portales de Éldonon. Qué pena me da cerrar con este mundo tan original y que tanto me ha gustado "formar parte". La saga en general es de 10, personajes creíbles, diferentes, donde todos aportan y evolucionan; trama bien narrada; buenos diálogos; la idea es original y me ha encantado esa unión entre el mundo real y el mundo de las ideas. Lo único es que estos cuatro libros no tienen la acción muy equilibrada. Si me centro en este cuarto libro, entiendo el porqué esta desarrollado como está, pega mucho que aquí se investigue y se aclaren muchos de los conceptos del mundo de Éldonon; pero, a la hora de leerlo, se hace bastante repetitivo. Te llevas hasta la página 350, más o menos, sólo con explicaciones sobre como funciona una cosa u otra del mundo. Quizás podría haber metido algo en el tercer libro con las musas y así aligerar un poco este último libro. Es verdad, que aunque la mayor parte del libro estás esperando un poco de movimiento, todo lo que vas aprendiendo te prepara para entender e incluso adelantarte un poco al final. El final me ha gustado. Siempre espero más páginas de desarrollo cuando todo acaba pero, si soy objetiva, las palabras y el número de ellas están perfectamente escogidas.
Para terminar, una saga que he disfrutado muchísimo que recomiendo que la leáis. Merece muchísimo su lectura.
Nadie sabe con qué impaciencia esperaba el último libro de "Los portales de Éldonon", una de mis series de fantasía juvenil favoritas. Los libros de Patricia García-Rojo están hechos de pura magia e imaginación y es con La Sede de los Imaginatos donde lo muestra en todo su esplendor. Desde luego, y eso os lo digo ya, no podéis perderos esta serie si os gustan novelas como La historia interminable de Michael Ende, los libros de Harry Potter de J. K. Rowling, Las crónicas de Narnia de C. S. Lewis o cualquier historia de mi admiradísima Diana Wynne Jones. Si habéis llegado hasta aquí es porque sois unos eldonianos de tomo y lomo y lo de cruzar portales para viajar de la Tierra a Éldonon y viceversa no tiene secretos para vosotros. ¡Enhorabuena! Si no es así os haré un breve resumen libre de spoilers.
Debo decir que el libro final de una saga cuelga con aciertos y errores de sus libros precedentes, así que el primero es fabuloso, pero va bajando de intensidad poco a poco hasta éste en que la manera de resolver la trama es muy pobre. Tal vez la autora piensa en continuar porque no veo una conclusión definitiva.
En la tercera entrega no me gustó el hecho de no saber nada de Igua más que en el excelente capítulo uno donde se encuentra precisamente en México y en el día de muertos, y de ahí nada. En éste pasa algo parecido. Aún así es entretenido y fácil de leer.