El idioma de los dragones es una antología de cuatro relatos de fantasía: una pequeña princesa se enfrenta a un dragón sin más armas que sus propias palabras; una joven muda y un joven introvertido encuentran en el arte la voz que tanto buscan; un niño común se hace amigo de otro que, según se dice, ha sido maldecido por las hadas; y un pastor de dragones junto a un escritor de fantasía viven una aventura que desafía al tiempo y a la imaginación para que la ficción sea digna de contener dragones en ella.
Estos cuentos son portales hacia el reino de las historias y la magia. También son una invitación para redescubrir el lenguaje escondido dentro de cada persona, de la manera de construirlo, para quienes son jóvenes, y de cómo interpretarlo y resignificarlo, para quienes, ya en cuerpos que han recorrido el camino de la vida, siguen siendo jóvenes de espíritu. Estas historias anidarán en ti y nunca dejarán de maravillarte.
Autora chilena y apasionada Fantasista. También estudiante de Doctorado en Literatura, Magíster en Literatura y Diplomada en Literatura Infantil y Juvenil. Consagrada a la escritura, investigación y celebración de la literatura de Fantasía.
He publicado la novela infantil La niña que salió en busca del mar (2013), las antologías El musgo en las ruinas (2018), El idioma de los dragones (2023) y Antaño (2023), así como los libros de ensayo Érase una vez siete estrellas: Super Mario RPG (2023) y La añoranza feérica: ensayos sobre literatura de fantasía (2024), y cuentos en algunas antologías colectivas.
El idioma de los dragones reúne cuatro cuentos ambientados en el mundo de Fabularia. Es un libro muy entretenido, con historias sencillas pero llenas de encanto y magia que evocan esas lecturas de la infancia que tanto quisimos.
1. La Princesa Valiente – ⭐⭐⭐⭐ Una princesa decide escapar de su castillo y termina encontrándose con un dragón muy particular. Es un cuento breve pero bien logrado, con un aire a cuento clásico.
2. La historia del Abuelo Árbol – ⭐⭐⭐⭐⭐ Mi favorito del conjunto. Dos jóvenes se ven envueltos en una historia donde un antiguo árbol negro marcará sus destinos. El ambiente es melancólico y el final, excelente.
3. Ojizarco – ⭐⭐⭐ En mi opinión, el más débil del libro. Comienza con una buena premisa, pero el desenlace resulta algo forzado y “sacado de la manga”.
4. El Pastor de Dragones y el Escritor Viajero – ⭐⭐⭐⭐⭐ Un cuento de ritmo pausado pero muy entretenido, que combina la fantasía con la metaliteratura. Es una historia sobre los dragones, los relatos y el propio acto de contar historias de dragones. Cierra el libro de forma brillante.
Una lectura encantadora, ideal para quienes disfrutan de los cuentos de fantasía con un toque poético y reflexivo.
Un regalo precioso para todos los que fuimos cada uno de los niños en estas historias; para aquellos a quienes nos fueron negados los umbrales. "¿Quién podría miar con ojos tranquilos a un dragón?"
Este es el segundo libro de cuentos qué leo de Paula y ambos me parecen una puerta extraordinaria a la fantasía. Sus cuentos maravillan y me dejaron con ganas de conocer más historias de fabulandia
No manchen todo este libro es precioso. Quiero hacerle una reseña más a fondo, pero de momento lo que puedo decir es que el cuento del pastor de dragones y el escritor viajero es una de las cosas más IMPRESIONANTES y hermosas qué he leído nunca. Me hizo muy feliz este libro ❤️
Cuesta pensar un mejor título que El idioma de los dragones para esta antología de cuentos en Fabularia, el mundo hecho de historias de Paula Rivera Donoso. Cada uno de los cuatro cuentos explora diferentes aspectos del lenguaje y la fantasía, con la ligereza que sólo la profundidad de la Verdad puede permitirse.
En ‘La princesa valiente’ la autora logra con sencillez jugar en distintos niveles narrativos, expandiendo de forma infinita su relato como si se tratase de una cinta de Moebius.
Prosigue explorando el rol del lenguaje en ‘La historia del Abuelo Árbol’, el cual conecta tanto con los verdaderos cuentos de hadas como con la parábola de los talentos, dando una vuelta original a relatos familiares, volviéndolos nuevos y abiertos a continuar. Tanto la música como el oficio del escritor son explorados en sus diferencias y similitudes, a través de metáforas frescas y al mismo tiempo eternas.
En el desdoblamiento entre un mundo cotidiano y otro, escondido en lo liminal del primero, se encuentra el tercer cuento, 'Ojizarco', que explora y profundiza las nociones de Otredad características de la verdadera fantasía, pero tan olvidadas en general en el género hoy en día. Paula R. D. al mismo tiempo lo hace haciéndonos volver a la infancia y a sus tristezas propias.
El cuarto y último cuento, 'El pastor de dragones y el escritor viajero', nos invita a explorar de forma más explícita la relación entre Fabularia y el lenguaje, a través de seres alados que crean kennings, de dragones que atraviesan a nuestro mundo en historias, aunque ello no nos permita conocer más que sus cáscaras. Así, el mismo libro que tenemos en las manos se vuelve un artefacto de otro mundo, y Paula R. D. se revela como nodriza, árbol, pastora, de Fabularia.
Espero ilusionado que en el futuro nos invite nuevamente a este maravilloso mundo y sus historias, que no son más que una y la misma cosa.
He leído muchos cuentos de Paula, pero creo que estos en particular son de lo mejor que ha escrito. Mis favoritos fueron Ojizarco y El Pastor de Dragones y el Escritor Viajero. Este último, de hecho, puede que sea uno de los mejores relatos sobre dragones que he tenido la fortuna de leer. Ojalá poder explayarme más en el futuro, aunque sea de manera directa con la autora, porque este libro lo merece.
Un hermoso libro. Y debo destacar que la fantasía no siempre es my cup of tea. La escritura es elegante, fluida, te arrulla o te oscurece según sea la necesidad. Muy buenas historias en ese fabuloso mundo de Fabularia, donde dragones, hadas, plebeyos y princesas se enfrentan en la palabra o en las ideas. Cuatro cuentos, cuatro pequeñas joyas. Es de esos libros que se te quedan pegados en las neuronas del recuerdo. ¿Puede ser literatura infantil? Sí. ¿Puede ser literatura juvenil? Sí. ¿Puede ser literatura adulta? Sí. Es decir, acá hay literatura y se nota. Hay oficio al escribir, hay oficio al narrar. Hic sunt dracones. Muy buena lectura.
🐉 Aunque los cuentos de "El Idioma de los Dragones" no están explícitamente conectados (con esto me refiero a que pueden ser leídos en cualquier orden) los cuatro nos presentan distintas formas de entender a FABULARIA, un mundo secundario donde podemos encontrar hadas, dragones y otros seres mágicos. Sin embargo, la particularidad aquí es que, aunque los humanos pueden entrar a Fabularia (ateniéndose a los riesgos), los seres mágicos solo pueden acceder al mundo de los humanos a través de las historias, haciendo del acto de "storytelling" una forma de conectar dos realidades diferentes.
🐉 Y, por supuesto, la lógica interna de Fabularia habilita la posibilidad de hacer mucho comentario meta-ficcional, de modo que estamos ante cuentos sobre cuentos, palabras sobre palabras, escritos sobre escritos, lo que sirve para reflexionar del efecto que las historias pueden tener en nuestra manera de concebir el mundo (efecto que, en muchos casos, parece debatirse entre ser catastrófico y maravilloso) y, en simultáneo, aspectos más concretos, como, por ejemplo, el mercado y las nociones del género.
🐉 Y, aunque pueda no parecerlo, en sí mismo esta es una apuesta bastante alta, pues tomar la decisión intelectual de escribir sobre el poder de las palabras te condiciona, precisamente, a escribir palabras que sean poderosas, y hacer una defensa de la importancia del lenguaje, precisamente, a darle mucha importancia al lenguaje, y si la historia fallase en alguno de estos aspectos, o si se quedase en un nivel tipo "ni bien, ni mal", el lector estaría en su derecho de señalar la incongruencia, debido a la lógica del "if you talk the talk, you should walk the walk". Por eso mismo, me alegra mucho escribir que el mayor mérito de este libro es que se encuentra a la altura de su propia premisa, no solo subiendo la vara de lo que se espera de un libro de fantasía, sino manteniéndola de principio a fin.
🐉 Y es que, dicho en pocas palabras, considero a la prosa inteligente en su reflexión, profunda en su sencillez, al punto que en más de una ocasión, a riesgo de sonar hiperbólico, sentí que leía prosa perfecta, en la que no había un solo detalle dejado el azar, nada que no haya sido tratado con amor.
🐉 Ahora, aquello no significa que no tenga reparos específicos con ciertos cuentos, pero, para ser más claro, de ahora en más trataré de proporcionar un comentario miniatura de cada uno.
"¿En qué idioma hablaban los dragones? En el lenguaje único de las historias, por supuesto".
LA PRINCESA VALIENTE
🐉 PREMISA: Este cuento relata la historia de "La Princesa Cobarde", una niña que sufre a causa de sentir que no puede cumplir con las expectativas de su rol. Sin embargo, son las historias de la misteriosa Fabularia las que la inspiran a buscar una aventura con la cual darle sentido a todos sus sufrimientos.
🐉 Este es un cuento bastante sencillo y disfrutable. A su modo, me parece el más deliberadamente "infantil" de los cuatro (lo que, por supuesto, es algo bueno). Desafortunadamente, al ser tan cortito no es mucho lo que puedo comentar sin caer en spoilers, pero debo decir que me gustó mucho el "antagonista" de la historia (a falta de mejor término). En mi opinión, creo que el cuento hace un buen trabajo a la hora de transportarte a esa época en la que somos niños y la única herramienta que tenemos para conceptualizar un mundo distinto al que nos presentan nuestros padres (sean buenos o malos) son las historias. En ese sentido, no diría que es nostálgico, pero sí evocativo de cierta vulnerabilidad inherente de la niñez.
"Cuando una historia nos habla a lo más profundo de lo que somos, se vuelve verdadera en nuestra alma. (...) No has llorado por tristeza, sino de alegría, porque te has encontrado a ti misma a través de mis palabras".
🐉 A nivel lectura, recomendaría no leer este cuento bajo la expectativa de que ocurra un twist o alguna subversión exagerada de los elementos clásicos de la Fantasía, pues considero que este cuento encuentra su identidad en homenajearlos, razón por la que me parece un inicio bastante apropiado para esta antología.
LA HISTORIA DEL ABUELO ÁRBOL
—¿Has visto un lápiz y un cuaderno? —pregunta él, el Escritor. —¿Has visto un violín? —pregunta ella, la Músico. Su respuesta entrelazada crea una Canción.
🐉 PREMISA: Un árbol anciano de Fabularia le confía a un narrador la historia de un escritor y de una músico, dos individuos que sufren el rechazo de sus pares y encuentran sentido y refugio de sus pesares en el acto mismo de la creación.
🐉 Aunque los cuatro cuentos tienen un nivel impecable en lo que respecta prosa, por alguna razón que no me sale identificar, diría que este es el que más me impresionó, en parte porque, a diferencia de La Princesa Valiente (que encontraba su identidad en cierta sencillez infantil) acá estamos ante una narración de tono más surreal, que se permite hondar más profundamente en distintas reflexiones sobre lo que significa crear, al punto que, siendo sincero, me tuvo en un estado de asombro ininterrumpido.
"Juntos volaron por los cielos de Fabularia y se hicieron los más íntimos amigos. En su largo viaje, el cuervo blanco le fue enseñando las diversas canciones que la naturaleza entregaba al mundo: la risa de la correntada del río, la impaciencia de los rastros de la lluvia tamborileando sobre las hojas, el crujido de los grillos mordisqueando la noche, la añoranza secreta de los lobos en sus aullidos a una luna siempre distante, la impertinencia de los silbidos del viento sobre las copas de los árboles, los zumbidos con los que los insectos hacían temblar el calor de las tardes y, desde luego, la bandada de pájaros perfumando el aire con sus trinos silvestres".
🐉 SIN EMBARGO, también debo reconocer que este terminó siendo el cuento que menos me gustó, en parte porque no entendí (o no supe entender) la estructura. En esencia, este cuento son dos historias en una (la del escritor y la de la músico), pero las encontré demasiado parecidas entre sí como para sentir que se complementaban de algún manera reveladora, y el hecho de que debiesen compartir espacio en la misma narración implicó que ninguno profundizó tanto como me hubiese gustado.
OJIZARCO
🐉 PREMISA: Un niño llamado Guván sufre el desprecio de sus pares cuando regresa de un bosque prohibido con los ojos totalmente transformados. Sin embargo, Asterio, otro niño del pueblo, pronto empieza a sentir la necesidad de comprender el origen del sufrimiento de Guván, a riesgo de iniciar el propio.
De modo que así se sentía comenzar a vivir de verdad, a morir de verdad. De modo que eso era existir, tener un destino.
🐉 Este cuento me gustó mucho, mucho, mucho. Para empezar, me pareció el más emocionalmente impactante, y es el único de los cuatro que juega un poco con la intriga y el suspenso, lo que siempre se aprecia, por supuesto. Además, me gustó conocer una dimensión de Fabularia que te hace recordar que, en definitiva, sigue siendo un "reino peligroso", presentando a los seres mágicos como entidades con una moralidad a veces incomprensible.
🐉 Por otro lado, me gustó leer sobre Asterio y su desarrollo psicológico, al que noté paulatino y coherente, sin mencionar que su amistad con Guván es súper conmovedora. Es un cuento lleno de pequeños secretos, así que es mejor no entrar en detalle.
EL PASTOR DE DRAGONES Y EL ESCRITOR VIAJERO
🐉 PREMISA: Mientras los tres primeros cuentos relatan a humanos conociendo Fabularia, este cuento muestra a Fabularia desde adentro al presentar a un pastor de dragones que relata el proceso de criar un dragón desde su nacimiento hasta su adultez. Sin embargo, como en Fabularia las criaturas solo pueden ir al mundo de los humanos a través de la imaginación y solo pueden existir a través de las historias, el problema inicia cuando el pastor descubre la manera en la que los humanos han estado representando a sus dragones.
"Todos terminaban descubriendo un camino propio para adentrarse en el vuelo. Tenía sentido, se decía el pastor: el mapa del viento era invisible; había que arrojarse a la fresca intemperie para poder percibir sus trazos sobre la piel y luego recorrer sus huellas con los dedos".
"Sin embargo, una cosa era saber que existían y otra, muy distinta, entender lo que esto significaba. Para él, este descubrimiento significó comprender de pronto que, a diferencia de los dinosaurios, los dragones nunca habían existido y nunca existirían en el mundo real, el suyo". Fue este un hallazgo terrible y al mismo tiempo maravilloso. Terrible porque eso quería decir que nunca tendría la oportunidad de contemplarlos, ni a ellos ni a los lugares o espacios en los que alguna vez pudieron haber volado o dormido. Maravilloso, porque eso quería decir también que pertenecían a una antigüedad más antigua que los propios dinosaurios y quizá más aún que su propio mundo. Si no, ¿de dónde habían surgido?"
🐉 En mi opinión, este es el mejor cuento de los cuatro, al punto que con facilidad habría podido leer al menos 100 páginas del proceso de criar un dragón y todos los pasos necesarios. Sin embargo, lo que más disfruté fue la combinación entre cuento arquetípico de Fantasía y el concepto de "novela de ideas" (aunque claro, bien entiendo que esto es un cuento, no una novela lol) por la manera en la que el cuento opina del estado de la Fantasía actual.
🐉 Y, aunque suene irónico, creo que la mejor forma de describir a este cuento sería dragonil, en el sentido de que estamos ante una historia que es mágica, desafiante y casi provocadora en su premisa, alejándonos un poco de las narraciones de tono más melancólico de los cuentos anteriores para desenvainar una espada literaria, en parte porque no existe cuento en esta antología que se exponga a la crítica más que este, por el simple hecho de que la misma premisa habilita a que el lector se pregunte: "¿...y esta historia, merece dragones? ¿merece que estén en el título incluso?" Y, al menos en mi opinión personal, la respuesta es un rotundo sí, porque la autora hace un trabajo excelente en presentar un desarrollo coherente con la premisa, y si bien no puedo decir que estoy de acuerdo con cada idea planteada (por ejemplo, no sé si mi imaginación sería la más apropiada para los dragones) 🤣 aprecio la audacia intelectual de la historia y creo que no existe mejor manera de cerrar un libro sobre el amor a las historias de Fantasía que, precisamente, haciendo un comentario sobre la Fantasía como literatura.
🐉 A modo de conclusión, considero que este libro, desde su lugar en el mundo, es un titán de la Fantasía, y no puedo negar que siento mucha intriga de leer sobre Fabularia en una posible novela.
Es increíble como es de sofisticada la narración de Paula en este libro. Las cuatro historias del mundo de Fabularia, son exquisitas, cálidas y tiernas; con personajes solitarios e inspiradores para el lector de esta compilación de cuatro cuentos, ya que este puede sentirse totalmente identificado con ellxs. Volver a reencontrarme con Paula en mi vida como lector me deja con la misma sensación que tuve cuando terminé de leer mi primer acercamiento a su escritura: un vacío enternecedor lleno de colores, nostalgia y ternura. Muy pocos autores (de fantasía en sí) han logrado cautivarme tanto como lo ha hecho la autora de este libro. El idioma de los dragones es un libro rico en fantasía pura, chilena y dulce, donde sentirás una mezcla de emociones al momento que avanzas página tras página; párrafo tras párrafo; palabra tras palabra. Sin duda alguna uno de los mejores libros que he leído en lo que va del año. Espero con ansias lo que Paula publique en el futuro, porque les aseguro que vale demasiado la pena leerlo y adentrarse en sus palabras que harán estallar tu imaginación y tu corazón.
Un bellísimo libro de Fantasía, fue un placer conocer Fabularia. Diría que Ojizarco me pateó en el suelo, fue el cuento que más me marcó, aunque mi favorito fue El Pastor de Dragones y el Escritor viajero, tanto por los palos que tira como por los dragones.
Qué libro más precioso, amé todos y cada uno de los cuentos y de cada palabra que contienen.
Es una oda a las historias, a la fantasía y al lengüaje, y lo importantes que son para darnos consuelo, alegría y esperanza. Y también cómo a través de las historias las ideas perduran y con ello podemos ser inmortales.
Todos los cuentos me emocionaron hasta las lágrimas, y ojo, no de tristeza, sino porque como bien le dice la nana a la princesa
Amé el concepto de Fabularia, tanto como este mundo féerico que existe en las profundidades del bosque y a la vez el mundo imaginario de las historias. Vamos, no es un concepto nuevo, pero me encantó que la autora le haya dado un nombre propio de su propio imaginario, y que además sea el hilo conductor de los cuentos de la antología.
El idioma de los dragones es una colección de cuentos muy bellos y al mismo tiempo melancólicos. Una representación muy fiel tanto de los cuentos de hada de antaño como las inquietudes y tristezas cotidianas. Me gustó mucho encontrarme en estas historias como esa individua extraña que no encaja en el mundo normal, estas historias me hicieron sentirme cerca de Fabularia <3. Mis cuentos favoritos fueron los dos últimos: Ojizarco y El pastor de dragones. El primero obviamente por el tema de encontrar amistad a pesar de las divergencias y el segundo por esa búsqueda de significado y fidelidad en nuestro trabajo creativo.
Probablemente con los años sea uno de los libros de referencia cuando se hable de Fantasía hispanoamericana. No sabría decirlo. De momento, estas palabras, más que evaluar la calidad literaria de estos cuentos, que sin duda tienen, sirven para organizar mi experiencia de lectura.
Las historias que nos acompañan a lo largo de la vida son aquellas que nos regalan un pequeño atisbo de consuelo en un mundo tan hostil; un pequeño fragmento de una película, un pasaje de un libro, un cuadro, una escultura; todas son parte del alivio, un pañito de agua fría ante el azote del mundo. Bajo estas premisa, El idioma de los dragones propone la elevación de estos consuelos; más que historias, estos cuentos son recordatorios, son chispazos al lector, sacudidas, que continuamente recuerdan que, en efecto, contra la soledad del mundo, existen las historias, existe la imaginación. En los tiempos antes del tiempo, y en los mundos detrás de los mundos, se aloja la Fantasía, la gran cualidad humana que permite preservar la cordura, que nos lleva -sin tomarnos mucho de la mano- a enfrentar los peligros de la realidad con mayor ceso y mayor astucia.
La idea de Fantasía que propone Paula aquí no es aquella que está imbuida de la rapidez, de la violencia, del dejo sardónico ni del espectáculo a la que está sometido el género contemporáneo. Quien venga buscando esto, más que apartarlo, yo lo invito a quedarse, a masticar lentamente esta vertiente más pausada; los cuentos de Paula son como largos suspiros melancólicos, un recuento infantil de reinos ya perdidos, y que sin embargo, se conservan en nosotros porque en algún momento de nuestras vidas hemos experimentado la angustia de la soledad, la indiferencia de nuestros seres queridos y el abandono de nuestra idea de hogar. La Fantasía de El idioma de los dragones reconstruye cuento por cuento estas ideas, ideas humanas, ideas de nuestro día a día. Es un libro de cuentos que ha sabido contactar desde su lengua, nuestra lengua, el influjo de la imaginación que aparentemente se ha apagado en nuestros días.
Esto, a mi modo de ver, es la Fantasía que nos merecemos aquellos que tengamos el alma rota. Esto es Fantasía para aquellos que no solo amen las historias, sino que las lleven consigo como una convicción de vida.
Mi acercamiento a la literatura de fantasía fue tardío, a mis treinta y poco. Se dio a través de escritoras y escritores, academic@s, estudios@s y apasionad@s en la materia que conocí poco a poco en Twitter, gracias a un algoritmo compasivo y misericordioso; distinto al de hoy.
Paula fue uno de mis primeros contactos. Gracias a su sensibilidad narrativa y su gran entrega con la fantasía, así como la de otros más, pude contagiarme por ese amor incondicional que nace más allá de lo círculos de las hadas, dentro del imaginario colectivo.
Me di cuenta del potencial inconmensurable de la escritora chilena gracias a su obra "El musgo en las ruinas". De los tres relatos que la componen, "Memoria" es quizá el que mas atesoro. Y por mucho tiempo pensé encontrar en sus páginas el significado de fantasía para la autora.
"El idioma de los dragones" es una muestra de como una escritora es capaz de entablar nuevos diálogos con los lectores partiendo de una visión clara, comprensiva y cálida. Los años de dedicación sobre el universo feérico se resumen en cuatro relatos llenos de un lenguaje precioso.
Es claro que su trabajo parte además de una visión neurodivergente, con un abanico de personajes incomprendidos, de corazón frágil pero decidido y una forma de ver el mundo muy particular, pero grandiosa en su totalidad: la princesa, los dos jóvenes artistas y el ojizarco.
Por sobre todas las cosas es quizá "El pastor de dragones y el escritor viajero" uno de lo cuentos mas impresionantes, conmovedores y bellamente escritos que he leído de la autora, quizá incluso de todos los que he tenido el gusto de leer dentro de la fantasía.
En este relato encontramos lo que la fantasía busca y la enfrenta contra la fantasía que predomina. Una fantasía violenta, simple y alejada de la riqueza del lenguaje y la melodía. A través del símbolo del dragón se nos brinda una espada con la que hemos de blandir y luchar o enfundar y escuchar.
No me alcanzaría el tiempo y no sería justo para nadie si fuera a detenerme a describir cada uno de los cuentos que componen esta obra. Merece sumergirse a oscuras, sin prisas; y detenerse a escuchar el murmullo del bosque.
Porque eso deseamos de la fantasía ¿no es así? Un espacio donde podemos prestar atención a los olores y sonidos, donde podemos alcanzar la libertad que la vida diaria nos arrebata.
4.5 en realidad. A lo mejor luego le subo la puntuación. En líneas generales, me ha encantado. El aire a fantasía clásica, a cuentos de Michael Ende y a magia féerica que impregna todos los cuentos me ha gustado mucho. Paula narra MUY bien. MUY MUY BIEN.
El primer cuento es bueno, tiene ciertos toques a la fantasía de Tolkien (esa más juvenil, con cierto aire de cuento infantil) y, sin duda, a la de Ende. Y es esta última la que impregna todos los relatos. Y tiene un par de frases lapidarias que son impresionantes y que no te esperas ver venir cuando están hablando de dragones, cuentos y buscar la vida.
El cuento de la violinista y el escritor me encantó, pero admito que quizá es el más flojo y que tiene un par de incoherencias que chirrían. Sin embargo, me funciona muy bien como historia de amor y fantasía, con los toques de los cuentos clásicos de tres hermanos en los cuales el menor tiene un talento diferente. El hecho de que haya un objeto mágico muy central que en realidad es super cotidiano es muy de los cuentos de Ende también (un lápiz y un cuaderno o un cazo y una sopera xD) y soy un romántico que le encantan estas historias así contadas, pero admito que le falta un buen repaso.
El cuento del Ojizarco, en cambio, es chefkiss. 10/10. Cuento de hadas muy tradicional, con estas muy bien retratadas, la magia de lo desconocido, la unión de dos mundos, el final un tanto desesperanzado y optimista al mismo tiempo, la crueldad féerica... Creo que ha sido mi favorito del mundo mundial. Asterio y Guván son preciosos y me encantan.
Y el último cuento, el que da título a la antología, es PRECIOSO. Personalmente creo que pierde un poquitito el ritmo en el último tercio, aunque el final es genial y muy bonito. Creo que, de los cuatro, este es el más respira a Ende (podría parecer que estoy comparándolos constantemente, pero en realidad es un piropazo decir que alguien respira a Ende en sus historias). Concretamente a esa frontera entre Fantasia/Fabularia y el mundo, esa forma en la que los seres que viven en Fantasia/Fabularia y entran al mundo como historias. Y es algo que vertebra los cuatro cuentos, cómo Fabularia retroalimenta de historias el mundo, que a su vez hacen vivir a Fabularia en sus cuentos, relatados una y otra vez.
En fin, me ha gustado mucho. Esa media estrellita es por eso, porque parece como si hubiese dos cuentos que no terminan de estar afinados del todo, que de pronto apresuran una parte cuando se han tomado con calma lo demás y que tienen un par de elipsis extrañas, pero son cosas subjetivas mías, por supuesto. Y de verdad, el cuento de Asterio y Guván es maravilloso, lo recomiendo mil y una veces.
Maravilloso, nítido y aun así envuelto en una melancolía tornasolada, que te devuelve a la infancia, cuando leíste por vez primera los cuentos de hadas y descubriste la capacidad del asombro. El idioma de los dragones se compone de 4 cuentos de considerable longitud, cuya lectura estiré lo más posible, buscando degustarla mejor.
"—Cuando una historia nos habla a lo más profundo de lo que somos, se vuelve verdadera en nuestra alma. Esto es lo que te ha pasado: esta historia le ha hablado a la persona que eres en realidad. No has llorado por tristeza, sino de alegría, porque te has encontrado a ti misma a través de mis palabras. Y eso es el regalo más grande que puede recibir una cuentacuentos como yo."
Estos cuentos poseen una sensibilidad reminiscente a la de Ursula K. Le Guin, y no digo esto a la ligera: Rivera tiene una lucidez y sofisticación llenas de ternura, de sabiduría, del respeto a la infancia y la memoria. No pierde de vista la inquietud que nace ante el encuentro con lo desconocido. Por supuesto, también tiene una reverencia -que comparto-, por los viejos cuentos, por lo universales que son.
Aquí hay princesas valientes que descubren su destino gracias a una cuentacuentos, violinistas mudas, niños robados por las hadas en busca de la amistad, pastores de dragones. Entes inmortales, hadas crueles pero misericordiosas también, árboles conscientes, dragones infantes, tres hermanos, niños ojizarcos. Todos ellos pululan por aquí. Ah, y los dragones. Ay, los dragones. Rivera se esfuerza por resaltar su estatus mítico, místico y digno, por volverlos el epítome de la magia pero también el más viejo símil de la humanidad. Son la representación de los misterios indescifrables que le dan sentido a la vida y a los cuentos.
"El niño nunca olvidaría la respuesta de Aquel: «Porque, de todos los habitantes de Fabularia, son los seres más parecidos a los humanos. Todas las virtudes y defectos de estos se expresan en su máximo potencial en los dragones. Es necesario, entonces, que para que un personaje humano pueda crecer y ser digno de pertenecer a una historia, pueda sobreponerse a lo mejor y a lo peor de su naturaleza»."
Leer este libro, para mí, fue redescubrir mi amor por las historias de fantasía y los cuentos de hadas, comprobar que son perennes porque guarecen toda la ilusión y el anhelo del mundo dentro. Cuando tenga hijos, querría leerles estas historias.
"Quería conocer dragones reales, amarlos más allá de las sombras de las palabras y de las siluetas de las imágenes. El entusiasmo que le aceleraba el pulso a medida que iba caminando le revelaba que eso era lo que siempre había buscado: dragones. Eso y nada más. El resto, los cuentos de hadas y los poemas medievales que leía, las historias de fantasía que escribía, no habían sido sino una consecuencia de esta necesidad de dragones."
Este es un libro de metafantasía. Es el libro que todo fantasista debería leer. ¿Cómo se crean las historias? ¿Cómo se cuentan las historias? ¿Quién cuenta las historias? Esas son las preguntas que intenta y se aproxima a responder. Cada cuento explora un pequeño aspecto de ese narrador de fantasía: un marginado, alguien que ve el mundo de otra manera, alguien a quien no entienden, alguien a quien las hadas lo han tocado, alguien que está en una eterna búsqueda. El fantasista no es de este mundo. Lo habita como humano, pero su espíritu nació en Fabularia. El espíritu de la autora nació en Fabularia y con cada una de sus historias intenta mostrarnos la belleza de este mundo y, además, enseñarnos a contar sus historias. En lo personal, los que más me gustaron fueron La historia del abuelo árbol y El pastor de dragones y el escritor viajero. Son casi dos caras de la misma hermosa moneda, una moneda de Faërie.
Este libro fue un gran viaje por uno de los tantos y vastos reinos de la Fantasía, conocido como Fabularia. Allí habitan tanto historias como dragones, porque ambos están hechos de magia, una magia muy antigua: la imaginación. Paula Rivera Donoso, por medio de 4 hermosos cuentos logra invitarnos a soñar, a comprender podemos sanar el daño del mundo y que podemos convertirnos en algo más por medio de imaginar y compartir la palabra de la Fantasía, de Fabularia al crear historias. Un libro al que volveré muchas, pero muchas veces.
Me sorprendió la prosa de este libro, su exploración del lenguaje como materia mutante. "Ojizarco" es un cuento excelente. Tiene algo de siniestro, pero vertido hacia una atmósfera de ensueño. Es un cuento maravilloso, pero también de terror, donde el bosque parece ocupar el lugar de lo sublime. Pienso en Fabularia precisamente como el espacio de la máxima alteridad. El límite que separa lo real de lo trascendente, o lo último que una mano toca antes de ser devorada.
Partiré diciendo que este libro me encantó y le encantará a todo amante de la fantasía ✨
Paula, nos invita a conocer el multiverso de ✨ fabularia ✨ en el cual transcurren diversas historias de personajes entrañables, que entremezclan la fantasía y profundidad propia de las moralejas aquí impresas.
El libro está separado por partes e historias: 1. La princesa valiente 2. La historia del abuela árbol 3. Ojizarco 4. El pastor de dragones y el escritor viajero
Lo pasé muy bien leyéndolo, es fácil de leer y cada vida de sus personajes deja una linda sensación en el corazón ❤️🩹 me confieso amante del mundo de ✨ fabularia ✨
Colección de cuentos enlazados en el mundo de Fabularia, donde hadas y dragones conviven con los pocos, los elegidos que conocen el Reino Peligroso. La Princesa Cobarde, la Muda, el Hacedor de Historias y el Rehabilitador de Dragones, hermosos personajes.
El idioma de los dragones me recordó a los viajes que tuve por los cuentos de hadas, Michael Ende, L. Frank Baum. Paula Rivera Donoso nos lleva a Fabularia para mostrarnos lo ilimitada que es la imaginación y regresarnos a la fantasía en su estado más puro y noble.
Fabularia se aleja de esos nuevos gurús que nos dicen que para escribir fantasía hay que seguir unas reglas, que se debe tener un worldbuilding, que debe ser claro su sistema de magia, cuál etiqueta tiene y a cuál "género" de fantasía pertenece, porque solo así se puede evaluar.
Que una buena fantasía debe tener más de 500 páginas porque necesitamos entender su mundo, y por eso debemos aguantarnos cientos de páginas de introducción, con la promesa de que ya en el tercer libro empieza la historia de verdad.
Aquí prevalece la importancia de la palabra como creadora, como esa única herramienta capaz de hacer magia, de crear un puente entre nuestro mundo y la fantasía. Este libro, más que cuatro relatos, tiene cuatro cartas de amor para la fantasía.
Una carta que todos pueden leer, porque no se limita a un tipo de lector, pues así es la fantasía: es de todos y para todos. Nosotros la alimentamos, tal como aprendió Bastian en Fantasía y tal como nos enseña Paula Rivera Donoso en Fabularia.
El idioma de los dragones es una hermosa antología escrita por Paula Rivera Donoso. Se trata de cuatro historias tan bellas como peculiares que nos adentraran al mágico mundo de Fabularia, en el que conoceremos a princesas, dragones, pastores, hadas pero también el poder oculto de las palabras y del autoconocimiento.
Con una prosa tan bonita llena de nostalgia su autora nos invita a soñar, sentir profundamente e imaginar otras posibilidades. Historias que nada tienen de común pero se sienten como cuentos de hadas clásicos.
Disfrute mucho el cuento de Ojizarco pero el cuento del Abuelo Árbol esta a otro nivel!
Cuatro hermosas historias de fantasía que giran no solo en torno al hecho fantástico en sí sino también en cuanto a cómo el acto de contar historias tiene el poder de formar la realidad. De hecho los cuatro relatos, si bien distintos entre sí, forman todos un conjunto del que se habla no solo de la narración como hecho sino de la forma en como esta se convierte en la principal forma de expresión de protagonistas marginados y diferentes que encuentran su identidad en un mundo fantástico que parece una idea más que un lugar concreto. El concepto del libro está muy claro y aunque a veces pareciera que el discurso predomina por encima incluso de la historia, los relatos en sí son de una ternura innegable, sobre todo los dos del medio, "La historia del Abuelo Árbol" y "Ojizarco", que fueron mis favoritos sin duda.
Cuatro cuentos de fantasía, que se enfocan no tanto en la trama misma, sino más bien en construir un mundo en donde la imaginación y la palabra tienen más peso que lo que se ve. En realidad, el libro es bastante bonito. Es para niños, eso sí (la parte de atrás como que lo sugiere, pero debo haberlo pasado por alto cuando lo compré…); son historias simples de seguir, lo que está bien, pero me habría gustado que fueran un poco más complejas. Estoy seguro que los niños podrían seguir eso también. Pero en serio, me gustó bastante la narración.