I actually liked the main leads a lot, really. But the story didn’t feed me emotionally. Some moments called for real emotional depth, yet the author just laid things out to be “clear” and then jumped ahead, like untying knots just to get the job done, without smoothing the rope afterward. Maybe that’s partly because one of the leads is a genius with low emotional intelligence but he was still lovable, not rigid, just socially clueless in a charming way.
Still, I’m dropping this at 66%, right before the family arc. The story had potential and could have easily made it onto my “best of 2025” list, but… it is what it is. Pick it up—you might find something interesting in it.
3.5 ⭐️ It’s a good story, some things could have been explained further while others a bit less but I really liked the main couple-though I didn’t get why the author decided not to develop more their relationship after they finally got together.
Por favor, si tienes un poco de tiempo, lee esta novela. Es mi más sincera súplica, te lo pido. Gracias.
(tiene traducción, he)
De verdad no se me viene a la cabeza palabras para empezar esta reseña, ojalá tuviera el mismo talento de Wen Di para redactar algo bajo inspiración de su amado Shakespeare o la de Bian Cheng, que encuentra lo hermoso en los números (solo la forma en cómo admira, soy humanista al 100 e incompatible con los 2+2) pero bueno...
Empezaré diciendo que, esta novela tiene romance, comedia, uno que otro silencio, malentendidos (TE LO JURO, NO SON MOLESTOS JAJA) y giros que no te esperabas, haciendo que sea perfecta. Incluso si estudias humanidades o matemáticas, te maravillarás, porque aquí también aprendes.
Wen Di, es nuestro protagonista, estudia un doctorado, pero vive 24/7 bajo mucha presión, no tiene mucho dinero, vive en un sitio "ilegal", su asesor de universidad es molesto, ni hablar que tiene un ex que se acordó de él, y la mala suerte lo ha seguido desde que nació. PERO, amo que jamás se rindiera, jamás abandonó todo y aún cuando todo lo malo se interpusiera en su camino, lo superó con sus propias fuerzas y siempre buscando por si mismo una salida. Ni mencionar, que jamás soltó su amor por Shakespeare y lo defendía de todo mal, incluso, si se tratara de la persona que le gusta: Bian Cheng.
Bian Cheng, es el profesor de matemáticas más joven de la universidad, un tipo de prodigio. Su vida son los números, llenos de monotonia, pero con un anhelo escondido en el corazón. Es del tipo antisocial, dice lo que debe decir (ya que su mala forma de decir las cosas y su detonante sinceridad, no trae nada bueno), y varias veces se desconecta cuando habla con otros, pensando en su vida de números. Pero algo cambia, y ese anhelo rasguña su corazón, cuando se encuentra con Wen Di.
Estas dos personas aparentemente incompatibles (se demuestra jajaja) se encuentran en un momento de escape, de debilidad y en un lugar inimaginable, compartiendo algo de desenfreno, pero fue exactamente cuando las quisquillosas ruedas del corazón los sentenciaron a ambos. Adoré que se retrara una relación «real» que no todo le gustará del otro, pero aún así, dieron el paso de darse la mano y poder mejorar. Porque de verdad, se aman mucho, muchísimo. Tampoco diré que es una pareja cursi, que todo en esta historia es fluff, también hay un poco de angustia, aceptación y desarrollo de personajes.
Y Obviamente, no iba a dejar de lado a los secundarios. No, no, aquí los secundarios juegan papeles re importantes, en especial los mejores amigos de ambos (Dios, los quiero tanto)
De verdad, ESPERO MUCHO QUE LE DEN UNA OPORTUNIDAD A ESTA NOVELA 🥹 LLOSA SOLO ESCRIBIÓ POESÍA.