La ausencia es una novela que explora cómo los secretos pueden dejar una huella imborrable. Un relato inquietante sobre la escritura y la memoria, la identidad y las verdades que elegimos recordar… o enterrar.
En 1941, tres figuras icónicas de la literatura estadounidense coincidieron en una apartada casa victoriana que funcionaba como residencia artí Carson McCullers, Katherine Anne Porter y Eudora Welty. Un día, mientras nadaban en el lago de esta propiedad, se vieron envueltas en la misteriosa desaparición de una joven autora llamada Beth. Desde entonces, ninguna pudo dejar de pensar en su ausencia y, de muchas formas, ese enigma marcó sus vidas para siempre. En el presente, Lavinia Melín, una escritora que se ha quedado sin ideas, se sumerge en esta historia en busca de inspiración, sin vislumbrar que se adentra también en un universo indefinible, donde los límites entre la realidad y la ficción se difuminan hasta el punto de hacerla dudar quién es.
Como si fuera un tejido, la autora va entrelazando las historias y aventuras de unas mujeres escritoras muy especiales que se rescatan, se apoyan y se aman. Las palabras, gérmenes de cuento, las anécdotas y la complicidad, los años que no se pueden esconder, La inspiración y las vidas, una biografía novelada. Subrayé muchas frases. Me encantó, vale la pena leerlo.
La ausencia es una novela distinta a todo lo que Mónica Lavín había escrito antes. Es una lectura exigente, que pide atención y sensibilidad, pero que recompensa con una historia original y muy bien construida. Aquí, Mónica Lavín demuestra el dominio de su escritura y su capacidad para explorar nuevos caminos con gran soltura. Una novela que se siente fresca, honesta y poderosa.