“Los tiempos se persiguen, todo valor tiene un desenlace, ahora las cigarras hacen coros seguidas de las hijas y las madres, pero también los valores se persiguen y todo tiene un desenlace.”
este poemario es todo lo que está bien. una luz pura que ilumina con belleza la experiencia de los vínculos, de las pequeñas cosas (que nunca lo son tanto), de las caídas y de los aprendizajes que nos elevan de nuevo. una invitación esperanzadora a revalorizar nuestro entorno y nuestro interior, después de abrazar con fervor nuestro paso por el subsuelo.