Una novela contemporánea que dibuja la geografía del corazón humano en una historia sobresaliente.
Hay personas que cumplen el horrible papel de hacer palidecer el entorno, el pasado y el porvenir, porque su luz deslumbrante queda habitando en nuestras pupilas cegándolas para siempre. Antes de que se agote el día, Antonio Alvar deberá cumplir con los propósitos que se ha impuesto y que cambiarán definitivamente su vida, la de su hijo, la de su esposa, la de su mejor amigo y la de la mujer que lo ama. A medida que envejecía a Alvar le iba resultando más evidente la idea de que la sabiduría del universo escapa del todo a la mente humana y, por tanto, que la empresa de ordenarlo, clasificarlo, penetrarlo, resulta vanidosa, y patético el esfuerzo de traducir en palabras el saber.
Poeta, novelista, dramaturga y traductora colombiana nacida en Amalfi, Antioquia, en 1951. Es licenciada en Filosofía y Letras por la Universidad de los Andes, donde ocupa la cátedra de Literatura desde 1981. Tiene una maestría en Teoría del Arte, la Arquitectura y el Diseño por la Universidad Nacional de Colombia.
Este es el típico caso de esos en los que la historia no tiene nada de emocionante pero está tan bien escrita y tiene un contenido tan profundo y valioso que se convierte en una lectura muy recomendable.
Deben saber que es un libro muy melancólico y espinoso, así que si están pasando por un momento difícil en su vida no lo lean (😳) no sirve para subirle el ánimo a nadie.
Es una lectura corta pero muy sustanciosa y con una calidad literaria evidente. La historia empieza con el funeral de Antonio y una expareja suya es la encargada de contarnos lo que sucedió, empezando desde la niñez y la relación tan difícil que tuvo el protagonista con su madre, pasando por su matrimonio, hasta su cotidianidad y lo que lo llevó a decidir su final.
Sí me parece curioso que Bonnett haya decidido hacer un libro que toque el suicidio de esta forma, sabiendo que en su familia hay un episodio tan trágico. He pensado que es una forma de reconciliarse y de entender las razones por las que estas cosas pasan...pero si alguien la escuchado hablar de este libro cuénteme.
La soledad de los planetas. Si, este libro nos cuenta la soledad en la que viven aquellos planetas dedicados a girar sobre su propio eje, ejerciendo poca gravedad para que solo los satélites escogidos con rigurosos métodos puedan orbitarlos. Esa soledad en la que se ven envueltos los seres complejos, aquellos que se enfrentan al dilema de crecer intelectualmente o desarrollarse en sociedad. Es la historia de Alvar, contada con una prosa muy bella en la que el lector debe tener la delicadeza de probar cada párrafo como un postre exquisito porque no es fácil llegar a su centro, una vez ahí, en el corazón de la historia que no es propiamente el corazón más dulce ya que viene acompañado de sentimientos que agobian a nuestro personaje, se empieza a desenvolver la historia, bella y cruel, dulce y ácida que hace que no puedas soltar el libro hasta llegar al final. Y conocer ese cielo que es la tranquilidad para quien se libera de aquello que lo amarra al pasado o a la culpa.
Me encanto este libro, es el segundo que leo de Piedad Bonnet y me enamoro, muestra de ello es que casi quedó lleno de post its.... El libro inicia con la muerte de Alvar, su protagonista y a medida que se desarrolla el libro se hace una especie de balance de su vida, en el ambito laboral, social y de pareja. La forma de escribir de Piedad Bonnet es tan cercana, pero llena de hallazgos, de simples verdades, pero que pocos pueden contar como ella.
A continuación esta uno de mis apartes preferidos que habla de la vida en pareja:
"Son una cosa muy rara las relaciones matrimoniales. En los primeros años se ama, por lo general, al otro, o se cree que se lo ama, de una manera ciega, pensando en que ésa es la única y verdadera opción, hasta que llega el tedio o el desinterés o a menudo la repulsión y el odio; pero si en ese momento el hombre no deja a su mujer- y esto es lo que casi siempre ocurre, porque es difícil dejar a una esposa que al fin y al cabo es compañía y nos da hijos y piensa en pequeños detalles en los que uno no está dispuesto a pensar-entonces ya no se la puede dejar porque viene una dependencia atroz, una necesidad que sólo es mayor que la misma rabia impaciente que ella nos acusa.
Sólo podemos vivir con alguien de quien no estemos profundamente enamorados, al menos en la paz que necesitamos para poder trabajar y pensar, y descansar y levantarnos malhumorados sin saber muy bien por qué, oliendo nuestros cuerpos que han traspirado y expelido gases durante la noche."
Cuando un libro bien escrito no transmite nada. Un auténtico aburrimiento, con personajes vacíos y que nunca llega a enganchar, enamorar ni entretener.
Apenas dos o tres frases se salvan entre sus páginas.
"...que el pasado era mentira, que la memoria no tenía caminos de regreso, que toda primavera antigua era irrecuperable y que el amor más desatinado y tenaz era de todos modos una verdad efímera." GABRIEL GARCÍA MÁRQUEZ
"Cuando muere un ser muy próximo a nosotros, nos parece advertir en las transformaciones de los meses subsiguientes algo que, por mucho que hubiéramos deseado compartir con él, sólo podría haber cristalizado estando él ausente. Y al final lo saludamos en un idioma que él ya no entiende." WALTER BENJAMIN
"Su rostro se veía estragado y amargo, tal vez porque en su boca se marcaba ese rictus propio de las personas qe envejecen sin felicidad." 15
"Hay personas que cumplen el horrible papel de hacer palidecer el entorno, el pasado y el porvenir, porque su luz deslumbrante queda habitando en nuestras pupilas cegándolas para siempre. Después de esos amores definitivos todo lo demás puede suceder porque ya nada, salvo la propia soledad y la muerte, es importante. Otros pueden venir y habitarnos y hacernos relativamente felices, pero la normalidad monocorde que introducen en nuestras vidas sólo sirve para recordarnos que hay un cielo en alguna parte al cual ya jamás accederemos." 18
"Que la verdadera condición de los seres humanos es la soledad se había demorado bastante en saberlo, como casi todo el mundo..." 25
"Toda la vida se nos va, tratando de superar las desdichas de la infancia." 28
"Nada subyuga y domestica más que la belleza." 29
"Siempre le había impresionado y desagradado la capacidad de aguantar que tienen las mujeres, y siempre había envidiado su poder de confiarse a otros, de comunicarse, de sortear la soledad, 'aunque ahí reside su verdadera flaqueza y también su tendencia a la banalidad, a disolver en palabras todo asunto grave, pensó.'" 29
"Con ella le sucedía lo que con esos amigos de juventud con los que se han compartido momentos felices y confidencias, que se separan de nosotros para reaparecer, tiempo después, gordos y calvos o en todo caso casi irreconocibles, pero sobre todo convertidos en talegos vacíos, que saqueamos una y otra vez infructuosamente tratando de recuperar aunque sea fragmentos del pasado." 30
"'Los mediocres suelen ser afables, serviciales, entusiastas,' pensó Alvar, recordando que algo así decía Niestzche, pero sobre todo aburridos, se dijo, consciente de haber padecido desde siempre de aburrición con el prójimo, una aburrición que lo dominaba y lo vencía muy a menudo, que le hacía bostezar frente a su interlocutor mientras su mente vagaba en libertad lejos de él. (...)A menudo se esforzaba por seguir el hilo de la conversación de quien le hablaba y con ese fin se ponía tenso, se concentraba, pero cuando se daba cuenta estaba ya distante, divagando, o mirando cómo aquél contrae el labio mientras habla, cómo éste mueve, curiosamente, la ceja izquierda, o cómo pronuncia ésta o aquella palabra, 'y es que yo sin proponérmelo siempre he estado lejos, siempre, sin proponérmelo he hecho las veces de espectador, de modo que entre los otros y yo hay un espacio hueco, un túnel cuyas resonancias me vienen tardíamente, como en un sueño.'" 31
"...no era la banalidad del tema lo que molestaba, pues al fin y al cabo, pensaba, quizá la leche sea en verdad algo muy importante, y también la banalidad, sino la forma tan tonta en que las personas creen que sus opiniones significan algo para los demás, o, mejor aún, la forma tonta en que todos creemos que el mundo empieza y termina en nosotros." 31
"...ya no quedaban restos de ese cariño entrañable, pues casi ningún amor o amistad resiste los embates del tiempo. Se deja de ver a la madre o al padre o a la esposa o al amigo del alma, y el cariño va dando paso tan sólo al recuerdo del cariño, que brilla en la memoria como un resplandor moribundo que nos confirma que podríamos vivir solos, sin querer y sin ser queridos." 42
""Aquella experiencia le había hecho saber que nunca es más irreal el mundo que cuando amamos. Y que si el amor no es correspondido, si es un amor imposible, la consecuencia resultante es no sólo que un mundo de fantasías e imaginaciones suplanta al mundo real y lo desplaza, sino que el yo, cortando su nexo con el tiempo real, queda en un estado de suspensión perpetua, de flotación en un mar de deseos y frustraciones." 64
"La hermosura, cuando es extrema, crea un aura que espanta por inhumana." 73
"Cada paso, cada palabra gritada desde el fondo de las convicciones, les henchía el pecho, los hacía sentir hombres de verdad, mujeres de verdad, colombianos de verdad, en fin, y sobre todo, comprometidos con una causa, con un sueño, con una meta." 77
"A medida que envejecía le iba resultando más evidente la idea de que la sabiduría del universo escapa del todo a la mente humana, y por tanto, que la empresa de ordenarlo, clasificarlo, penetrarlo, resulta vanidosa, y patético el esfuerzo de traducir en palabras el saber." 83
"Los últimos diez años los he dedicado a aprender a prescindir de los demás y no me cabe duda de que esa prescindencia equivale a conquistar la libertad." 87
"Aprecio el poder de una voluntad por la cantidad de oposición, dolor, tortura que soporta y sabe convertir en su provecho." Niestzche 100
"Sabemos que el amor, como una droga alucinante, nos hace ver cosas que de otro modo jamás veríamos." 110
"El infierno, no debe ser otra cosa que la suma incontable de minúsculos hechos que nos violentan sin sentido mientras la cordura nos dice que debemos ser tolerantes y no exteriorizar nuestro disgusto." 122
"¿Por qué se había apartado de él? Aquel inventario de afectos que hacía sin proponérselo le mostraba el hombre que era, un ser arisco, alguien que se siente incómodo en compañía de más de dos, un mal guardador de amistades." 132
"Más tarde, cuando era un adolescente, aprendió el arte de aislar los momentos de felicidad y disfrutarlos, atesorándolos para revivirlos después, cuando lo agobiaba la soledad o el tedio. Muy pronto, también, se convirtió, sin proponérselo, en un espectador perpetuo de todo evento, en alguien que mira y se ve mirar, es decir, en alguien con una permanente sensación de extrañeza, de enajenamiento, capaz de ver a los otros como sordas marionetas en movimiento o como actores de una película a la que le han robado el sonido." 137
La historia esta contada a través de los ojos de una mujer que guarda mucha recordación por quien dice es el amor de su vida, un hombre que recién se suicida, a mi manera de ver egoísta, egocéntrico, cargado de apatía pero tremendamente brillante intelectualmente lo que despliega sobre él una estela cegadora, al exterior metódico, ordenado, pero al revisar sus espacios el desorden y caos es abrumador, muestra de su sentir en los últimos meses; sin desconocer sucesos de su niñez que marcan su vida.
Antonio Alvar hace un pacto con un amigo al cual le cumplió y que hace que su vida, la de su familia y pocas personas cercanas sufra un revés importante.
Entre filosófica, poética, reflexiva sobre el sentido de la vida, hay que tenerle paciencia para lograr disfrutarla.
Hay que tener valor para vivir y mucho más valor para decidir cuando ya no hacerlo. Así mismo hay que tener empeño para encontrar sentido a la vida.
En este libro, la autora nos muestra cómo alguien que pudo ser un gran académico, o un gran padre, o un gran esposo se fue consumiendo en su apatía, su desidia, su rutina, el sinsentido de sus días. Entre otras cosas no se permitía amar suficiente por temor a un posible dolor en el futuro.
Más que el libro, creo que el protagonista, su personalidad, demandan leerse y analizarse, escudriñar su mente y su corazón, porque que berraco tan simple y tan complejo.
Es la segunda vez que leo este libro, y la verdad es que no me canso de la prosa de Piedad Bonnett; Su ingeniosa (y humana) manera de contar la historia de vida de un hombre muerto, sus descripciones alargadas del mundo que estaba dentro y fuera de Alvar, el salto entre voces narrativas, en fin. Uno de mis libros favoritos.
(No entiendo por qué a la gente le parece confuso)
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Que desesperante este libro. No encuentro sentido a su historia, ni conexión alguna con sus personajes. Tiene buena prosa, pero tanta palabras rebuscadas que cortan la lectura.
Que manera de escribir! Piedad Bonnett me enamoro desde el momento en que leí las citas que uso para empezar el libro, bellas coherentes y llenas de significado. El libro lo leí por recomendación de @queleoyo y no pude haber tomado una mejor decisión. Bonnett es el claro ejemplo de que se puede escribir sobre cualquier cosa y hacerlo de manera espectacular! Ahora me muero por leer el libro que dedico a su hijo, que se suicidó en Nueva York, porque me preguntó si escribió algo tan bello en memoria a Antonio, pues el libro sobre su hijo debe coger tu corazón y arrugarlo con la realidad dura y amorosa de la pérdida de un hijo.
Siempre le había impresionado y desagradado la capacidad de aguantar que tienen las mujeres, y siempre había envidiado su poder de confiarse a otros, de comunicarse, de sortear la soledad, aunque ahí reside su verdadera flaqueza y también su tendencia a la banalidad, a disolver en palabras todo asunto grave.
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Pues casi ningun amor o amistad resiste los embates del tiempo, pensaba Alvar. Se deja ver a la madre o al padre o a la esposa o al amigo del alma, y el cariño va dando paso tan sólo al recuerdo del cariño, que brilla en la memoria como un resplandor moribundo que nos confirma que podríamos vivir solos, sin querer y sin ser queridos.
Aunque es el tipo de libro que suele gustarme, el de la introspección personal, se quedó muy corto en cuanto al desarrollo del personaje. La anécdota es buena un tipo que muere y que mediante la mirada de la mujer que fue su amante y una carta que le dejó va construyendo su biografía, explicando los motivos, así como los aspectos de su personalidad que lo llevaron hacia tal o cual dirección. Pero en resumen no llega a su climax como historia, y el final queda bastante bah.
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Definitivamente una novela que deja reflexiones sobre la vida, el amor, la amistad. Una lectura corta pero sustanciosa que nos permite conocer a un personaje muy interesante y a sus pensamientos, Alvar. No es una novela con hechos muy sorprendentes, es ese tipo de novela que se disfruta leyendo por la forma en que esta escrita, una forma poetica, con una prosa delicada que dejan ver una vez mas las habilidades Piedad al escribir.
Con este libro tengo un sabor agridulce. Me gustaban mucho las reflexiones de Alvar, incluso siento que de cierta forma somos parecidos, pero el desenlace no me gustó. No me gustaron las decisiones finales de Alvar y el final como tal.
No lo sé, tal vez este no es mi tipo de lectura. No es un libro mala, simplemente no fue para mí.
Un libro que se desarrolla en dos grandes monólogos, ambos, sobre una de estas personas, Alvar, un hombres, dedicado a la academia y que constantemente se pregunta y pone en duda el valor o el propósito de la vida.
Una historia en la que realmente no sucede nada, nada que no se sepa desde el principio, pero que se siente como la voz en la cabeza desbordando pensamientos intrusivos.
Historia corta, diferentes puntos de vista para una misma vida, el hecho de todo gire en torno a una sola persona…cosas que se entienden solo viviéndolas. Piedad Bonnet, de mis escritoras favoritas, nunca me decepciona con sus historias.
Te envuelve en un halo tan oprimente, que deseas terminar tan pronto sea posible la historia; porque es una condición humana muy familiar para quien ha sido muy consciente de sí mismo, y no desea dejarla progresar en su propia vida.
“Por primera vez en muchas horas sintió un bienestar verdadero, que nacía de esa soledad casi absoluta, de los dieciocho grados de temperatura, de una conciencia de estar vivo que se originaba, como quizá pase en los animales, en la pura sensación del cuerpo en reposo.”
No es una historia épica ni especialmente memorable, pero definitivamente está llena de sabiduría. La humanidad de los personajes de Bonnett es algo que siempre he de admirarle.
“El dolor, pensó entonces, es demasiado tentador para aceptarlo, equivale a la más fácil de las opciones”, y sin embargo, Alvar optó por dejarse llevar por el dolor, al punto de que se causó su propia muerte.
A cuantos no nos pasa que son muchos los sueños y poco lo que alcanzamos. Emprender nuevas acciones para hacer realidad los sueños no es tarea fácil, somos muy ligeros y la realidad a veces muy fuerte. Y como Alvar, nos parece todo tedioso y vacío.
Buena novela, para sentarse con tranquilidad y disfrutarla. Leerla despacio y dejarse llevar. No es la trama, ni los personajes, dueños de una humanidad cruda y real, es simplemente por la forma en que la autora lo enreda y embelesa a uno con sus palabras