La presente antología recoge poemas de todos los libros de Leopoldo María Panero. No pretende explicar la condición de malditismo de su poesía ni cuestiones autobiográficas, sino que busca dejar hablar por sí misma a su poesía, con la descarnada lucidez que le es propia, asumiendo el horror de lo cotidiano.
Leopoldo María Panero es un poeta desarraigado, un hombre desclasado que trabaja con sus versos contra la sociedad y contra él mismo, un ser que sufre del complejo de autodestrucción y que transforma ese complejo, esa autodestrucción, en obra de arte. Un maldito, en definitiva. Leopoldo María Panero, aquejado de malditismo, se suicida a cámara lenta y, de esta manera, es capaz de hacer su obra con prisas, iluminada con destellos e impulsada, paradójicamente, por ese descenso hacia el fondo del abismo que, en realidad, busca truncar con violencia, dejar inacabada, esa misma obra. Panero, que busca la poesía en la abominación, reivindica como clave poética la máxima de Mallarmé: «La destruction fut ma Beatrice».
Rezo - pues las palabras vacías se marcharon sin ser oídas y sólo la plegaria queda en pie - para que aun cuando tarde mucho en morir y en escribir mi nombre al fin sobre la lápida puedan un día decir sobre ese frío que no estuve loco
Es de los primeros libros de poesía que leo por mi cuenta y me ha encantado. Llegué a él a partir de la pelicula El Desencanto y con unas ciertas expectativas por la recomendación de una amiga, y muy contento con haber podido leerlo, guardo en el marcapaginas (un trozo de papel cortado a mano) las páginas en la que estan aquellos poemas que más me gustaron. Hola
La poesía de Panero es dolorosa, trágica, cruenta y hermosa a la vez. Leerlo es iniciar un viaje extraño, oscuro y maravilloso. Podría estar loco pero era más poeta que muchos que se proclaman como tal estando muy cuerdos.