La sfirsitul anilor 1950, in Chateauroux, Pierre si Rachel se trezesc prinsi intr-o legatura fugara, insa foarte intensa. El, tinar de familie buna, erudit, lucrind temporar in provincie, o cucereste pe Rachel, angajata la Casa de Contributii Sociale, o evreica fermecatoare, dar saraca. Si din acest motiv, si din pricina celibatului care-i asigura libertatea, Pierre ii spune de la bun inceput ca niciodata nu o va lua de sotie, desi isi doresc un copil impreuna. Chiar dinainte ca micuta Christine sa se nasca, Pierre paraseste Chateauroux si va fi doar o prezenta episodica in viata copilului, insa nu mai putin marcanta. Rachel afla abia dupa multi ani ca Pierre a profitat de propria fiica. Un sentiment de vinovatie o sfisie, caci inima ei adaposteste deopotriva iubirea fara margini pentru Christine si pasiunea pentru un barbat pe care de fapt nu-l cunoaste.
French novelist and playwright, she is perhaps best known for her 1999 novel L'Inceste (Incest) which recounts an incestuous relationship with her father. It is a subject which appears in several of her previous books, but it is unclear whether these works are autofiction and the events described true. Angot herself describes her work - a metafiction on society's fundamental prohibition of incest and her own writings on the subject - as a performative (cf Quitter la ville).
Angot is also literary director for French publishers Stock
J'ai été envoûtée par ce récit triste et troublant — il y a écrit "roman", mais je ne saurais pas le décrire comme tel (et c'est une qualité à mon sens). Angot ressasse, reprécise méticuleusement, revient sur les prémisses d'une vie gâchée, celle de sa mère avant la sienne. Tendre relation mère-fille comme j'en ai rarement imaginée. Résultat : je vais enchaîner sur "Une semaine de vacances" qui comblera les séquences manquantes ici.
(Je continue de me demander si je suis accro par voyeurisme, par empathie ou par sensibilité littéraire (je reste décontenancée par ce "non-style"). Impossible de trancher.)
This is probably best read in conjunction with Angot's L'Inceste/Incest (which I haven't read - yet) as it takes that story partly for granted and is in conversation with the prior book.
There's that indefinable air of French intellectualism about this combined with a raw intensity. Angot takes an unexpected perspective going back to explore the relationship between her mother and father, one that starts off as radiant with desire and love but which gradually shades off into something far more disquieting and disturbing as issues of power, class, race and other forms of asymmetry emerge. With 'Christine', the narrator, as a split consciousness that is both within and part of, as well as external to, the story being recounted, this becomes more sophisticated as its trajectory develops, and emotions and alliances fade and realign.
This is quite short but a book deserving of a re-read.
Many thanks to Archipelago for an ARC via NetGalley
Tipica pentru literatura franceza contemporana: rememorare bazata pe autenticitate. Dar, data fiind amploarea subiectului, scriitura este mult prea simplista, chiar daca Angot incearca sa imprime naratiunii patina de verosimilitate. Tocmai aceasta tentativa hazardata si exagerata creeaza impresia unor dialoguri stupide, lipsite de substanta. Si ar mai fi ceva: catre final, unul dintre personaje insereaza in dialog o fraza apartinandu-i lui Proust. Iar maiestria fina a romancierului reuseste sa eclipseze, in cateva randuri, un intreg - si de altfel mediocru - roman. 2,2/5
This short “autobiographical novel” packs a punch and one that I wasn’t prepared for. If I had read the description a bit more closely perhaps it wouldn’t have hit me so hard, halfway through the book.
It tells the story of the love between Rachel and Pierre in the French town of Chateauroux mid-1950s. Rachel is poor and Jewish and Pierre is quite possibly the most horrible character I have encountered in over 100 novels this year. The way he treats Rachel and the way he treats their daughter Christine has such an impact on their lives that it also threatens to destroy the strong love and bond between mother and daughter.
The first part of the book is an interesting love story, but the second part makes this a very special book even if not particularly pleasant to read. But if you want literature to shock and move you I would still very highly recommend.
Uffff , hacía años que una novela no me causaba sensaciones tan potentes, de principio a fin, hasta he llorado un poco. Por suerte no leí la reseña de la contratapa porque me spoileaba el libro así que lo he disfrutado aún más. Es el primer libro de la autora que he leído y me ha golpeado. No hay una prosa muy magistral pero sí una construcción inteligente y un excelente dominio de los diálogos (o su ausencia utilizando otras herramientas lo que da nuevas muestras de inteligencia para resolverlo). No diré nada más, quizá las reflexiones discursivas de los diálogos finales estuvieron demás para una novela (parecían extractos más bien propios de un ensayo camuflado), pero fuera de eso solo me queda decir ufffff y acostarme a dormir con el corazón estrujado. Se lee de un tirón, imposible parar.
je ne veux pas noter ce livre sur 5 parce qu’il me semble inapproprié de « noter » l’histoire traumatisante de christine angot et sa mère, mais je voudrais dire que la narration était tout à fait captivante et j’ai eu des larmes aux yeux plusieurs fois pendant la deuxième moitié du roman. ses références continuelles à la classe sociale et à la judéité fournissent un contexte important et j’étais particulièrement frappée par sa capacité - et sa volonté - de mettre en évidence les implications politiques de l’abus perpétué par son père, surtout à la fin du texte. c’est vraiment un don de pouvoir raconter une telle histoire d’une façon si lucide et honnête - angot est évidemment tellement douée, mais elle est aussi évidemment traumatisée, et j’espère que le processus d’écrire ce livre (et « l’inceste » aussi bien sûr) était un expérience cathartique pour elle.
Très bon. L'histoire d'un inceste et d'une domination. Un style très simple qui rappelle le milieu modeste de Rachel et le point de vue de l'enfant. La narratrice évoque les étapes de son histoire en effleurant la question de l'inceste jusqu'à l'explication et la réconciliation finale avec sa mère.
Une histoire moche écrite mochement. Comment peut-on publier comme de la littérature des livres aussi mal écrits? Qu'un prix ait été décerné à ce bidule est tristement symptomatique de l'état du milieux littéraire parisien.
"Mi padre y mi madre se conocieron en Châteauroux, cerca de la avenida de la Gare, en la cantina que ella frecuentaba; a sus veintiséis años llevaba ya varios trabajando en la Seguridad Social, había empezado a los diecisiete como mecanógrafa en un garaje; en cuanto a él, tras largos estudios, con treinta años, ése era su primer empleo. Era traductor en la base americana de La Martinerie" Con esta premisa comienza "Un amor imposible". Christin, autora y narradora de su historia en primera persona, cuenta como se conocieron sus padres, su atracción y sus diferencias. Él, un parisino burgués, ella judía y trabajadora. Las diferencias que asoman desde el principio pero que a pesar de ellas, pareciera todo marchar bien. Una pasión pero que se va contaminando de soledad y crueldad despiadada, lo cual escapa muchísimo a la dulzura nostálgica de su título... Elegí esta novela por su contexto histórico: Francia de posguerra, pero no me gustó. No por la dureza de su temática como quizás puede rechazarlo la mayoría (de hecho me parecen las que mejor se llevan en la literatura) sino desde su narrativa. No me deslumbró desde su prosa, la novela en sí me pareció un tanto aburrida y redundante y lo que más me definió a descartarla: que no me generara ninguna emoción, lo que claramente es muy personal, pero en mi opinión no me resultó una lectura interesante.
Otro pequeño desvío. Alentada por mis amigas de Deforme Semanal, he leído esta novela sabiendo ya la historia que se contaba en ella y debo decir que no me ha aportado nada mejor que el resumen hecho por Lucía Lijtmaer. Es narrativamente poco interesante, bastante plana, y termina además con una interpretación bien masticadita y sobreexplicada de lo que se venía contando en las 200 páginas anteriores. No sé cómo habría sido la experiencia de lectura si no hubiera conocido ya las truculencias, pero, vaya, mucho mejor escucharlas de boca de tus podcasters de confianza.
Escrito de una manera introspectiva, nos cuenta la historia de una familia, es muy usual que los padres o abuelos guarden secretos acerca de los orígenes en que nació tal o cual persona, y hacer como si nada pasara.
En este caso si hay secretos, pero al mismo tiempo también hay mucha información, la protagonista Christine hace un recorrido por la historia de amor de sus padres y la manera tan sui generis en que la vivieron a lo largo de su intermitente, extraña e intensa relación, además en la vejez de su madre nos permite ver las largas pláticas con ella, y como se desarrolló la relación madre e hija, como del amor absoluto, pasan a las dudas, los desencuentros, la lejanía, los reencuentros y por último las reflexiones, todo esto nos permite situarnos en relaciones más cercanas a la realidad y no ese estado idílico de adoración mutua entre padres e hijos.
Me falto que Christine abriera un poco más su corazón y nos contara como vivió las partes difíciles de su niñez y adolescencia, por que reacciono de una u otra manera, o porque a veces su dureza con la madre era tan excesiva.
Bastante entretenido y con una reflexión digna de analizarse.
Kniha sa môže zaradiť medzi tie kvalitné – či už kvôli zachyteniu emócii, ktoré hneď prejdú aj na čitateľa, alebo zhlukom životných trápení, ktoré vás nenechajú chladnými, až po návykový štýl písania, ktorý môže, samozrejme, niekomu nevyhovovať, no stále vás bude niečo nútiť napredovať v čítaní. Budete chcieť vedieť, ako sa všetky osudy v diele zavŕšia, a či je aj to najsilnejšie puto nenarušiteľné.
Recomiendo leerlo sin saber nada de el ni de la autora, ya entederéis el por qué. (Si decidís hacerme caso, no escuchéis el capítulo de "Aniquilación" de DSIT ;) )
PD: último libro del año en que leí solo a mujeres, realmente enriquecedor <3
La violence sociale. La violence patriarcale. Et, en miroir inversé, cet amour mère-fille si beau et salvateur. Je vais aller enlacer ma maman, je pense.
je l'ai lu ce matin et j'ai beaucoup aimé. Je connaissais Angot de la télé. L'écrivain star qui lance des punchlines à la télé et fait pleurer Sandrine rousseau. Mais je n'avais jamais lu aucun de ses livres, tout en m'étant fait une certaine idée de ce qu'elle écrivait.
Je suis content d'avoir commencé par celui ci. Je le vois comme une déclaration d'amour et de force à sa mère. Et comme le récit d'une construction dans un noyau de force, d'amour, feminin, et par consequent féministe; d'une résilience envers et contre tous - contre l'ordre bourgeois et masculiniste qui pousse les hommes du 17eme à engendrer des batards pour au mieux ne plus les voir, au pire abuser d'eux.
Le rapport à la judeité y trouve une place intimiste, mais a toujours son importance.
Tout les passages s'enchaînent avec une certaine subtilité, tout n'est Pas foncièrement chronologique et structuré, mais il y a un cheminement. Je trouve qu'il y a dans les mots d'angot quelque chose de l'enfance, blessée dans sa chair mais pur, qui n'est jamais parti. une vision des choses évidente et simple.
Il y a une phrase du livre qui m'a beaucoup parlé : "j'adorais ma grand mère, j'aimais ma mère". Comme beaucoup de phrases de ce livre, elle veut dire ce qu'elle veut dire, mais peut être interprétée de 1000 façons.
" Vezi tu, nu murim niciodată cu totul, fiindcă le transmitem celorlalți care rămân în urma noastră, mai ales celor care ne iubesc și ne cunosc bine, un pic din propria ființă [...] Când o înțelegem, moartea celor pe care îi iubim este cu mult mai puțin tristă. Depinde de noi să-i facem să trăiască dincolo de dispariția lor fizică, punându-le în practică și ducându-le mai departe calitățile." " Intr-o zi, îți vei pune întrebarea cum de-ai putut încercat astfel de sentimente pentru mine. Iar ziua aceea va fi foarte tristă!" "El îi adusese deschidere către o altă lume, iar ea avusese pentru el sentimente pe care nu le mai încercase înainte."
Beautiful writing, loved experiencing the ups and downs of the mother/daughter relationship over almost a whole lifetime - I want to read Incest to get more of Christine's story.
Remarquable. La conclusion prend le lecteur au dépourvu mais apparaît lumineuse. L’auteure explique comment son histoire de vie, l’inceste subi n’est pas qu’une histoire individuelle, sans rapport, sans lien avec la société française et ses valeurs. Le viol n’est pas un crime sexuel mais un crime commis avec le sexe comme arme par destination. L’inceste comme arme pour dénier le lien de filiation juridique et marquer, paradoxalement, la distance avec l’enfant et sa mère. Pour marquer la domination, la supériorité, la toute puissance et l’impunité. Sur fond d’antisémitisme et de mépris social, de misogynie et forcément de culture du viol.
Mais dans Le voyage de l’est, on voit que ce n’est pas tout à fait ça non plus.
« Il y a une logique maman, il y a une logique dans tout ça. Il y a une logique de fer. C'est pas une petite histoire personnelle tu comprends, c'est pas une histoire privée. Non. C'est pas ça qu'on appelle la vie privée. La c'est l'organisation de la société qui est en jeu, à travers ce qui nous est arrivé. La sélection des gens entre eux. C'est pas l'histoire d'une petite bonne femme, aveuglée et qui perd confiance, c'est pas l'histoire d'une idiote, non. C'est bien plus que ça. Car pourquoi elle perd confiance? Tu as raison de dire que tu as été rejetée. C'est une vaste entreprise de rejet. Social, pensé, voulu. Organisé. Et admis. Par tout le monde. Toute cette histoire c'est ça. Et jusqu'à la fin. Y compris avec ce qu'il m'a fait à moi. C'est quelque chose qu'il t'a fait à coi aussi, avant tout. C'est la continuacion de ce rejet. Pour humilier quelqu'un, le mieux c'est de lui faire honte, tu le sais. Et qu'est-ce qui pouvait te rendre plus honteuse que ça, que de devenir, en plus de tour le reste, alors même que tu pensais être sortie du tunnel, la mère d'une fille à qui son père fait ça ? Tu as été rejetée en raison de ton identité maman. Pas en raison de l'être humain que tu érais. Pas de qui tu étais col. Pas de la personne que tu étais. Et ce rejet allait jusqu'à faire ça à ta fille. Ç'a été jusque-la. Ç'a été loin. Tout ça s'inscrivait dans une même logique. Et il a fallu que la logique soit poussée jusqu'au bout. Puisque tu as essayé de la contrer. Tu ne devais pas sortir de ton tunnel. Tu pouvais juste rêver d'en sortir. Quelqu'un comme toi devait rester dans la voie sans issue. À l'intérieur du tunnel, la où on voit rien justement. »
Tu veux que je te dise vraiment comment je vois les choses? Je suis sûre de ce que je dis. Tu peux ne pas être d'accord. Mais moi je suis sûre. Vous apparteniez à deux mondes différents, étrangers l'un à l'autre, en tout cas c'est comme ça que les choses ont été posées dès le départ. Et tu as accepté qu'elles soient posées comme ça. Parce que tu étais seule, parce que tu étais pauvre, parce que tu étais juive. _ Hmm. Et sans personne pour te protéger. Ça c'est sûr. Et tu étais belle. Différente des autres. Oui ohff... - Si. C'est important. Ça compte. Peut-être que tu t'es crue plus forte. Or, il t'avait prévenue depuis le début, tu pouvais, certes, être en contact avec lui, mais uniquement lui, sa personne, sa personne pri-vée. Il n'était pas question que tu sois en contact avec sa personne sociale. C'est-à-dire son milieu, son identité. Il n'était pas question que vos deux identités se rejoignent. Elles ne devaient pas être en contact. Il te faisait des compliments sur toi, certes, mais en prenant soin de dénigrer, en même temps, les traces sociales accrochées à toi par la culture et le langage. Il te faisait des compliments sur toi, mais de haut, en observant ton niveau, en restant très au-dessus. Ah ça il s'estimait très au-dessus de moi. Il s'estimait au-dessus de beaucoup de monde d'ailleurs, lui, son père, sa famille, tu comprends, cotait pas porte qu, i me le faisait bien comprendre - Il ¿a fait comprendre aussi qu'il avait une vue générale de la société, et que toi tu ne l'avais pas cette vue. Puisque lui appartenait à un monde supérieur au tien. - Sur le plan social, de toute façon, c'était vrai. Oui, bon, bref. Et, comme son monde était supérieur au tien, sur plusieurs plans, selon leur clas-sification, pas seulement sur le plan de l'argent, mais aussi comme ils disent de la « race », je te le rappelle, on n'en parle jamais mais pour eux ça compte, ça existe, il ne pouvait pas y avoir de conséquençes sociales entre vous. Le bur était de te faire perdre. Vous pouviez avoir une relation, mais à condition de respecter certaines règles, qui garantissaient que tu n'infiltrerais pas son monde. Qu'il y aurait des limites. La séparation de vos deux mondes devait être établie, et la supériorité du sien devait être maintenue, bien au-dessus. Il ne fallait pas qu'il y ait de fusion. Donc, évidemment, il ne t'épouserait pas. Ça c'est la base. Er il ne te présenterait pas à son entourage. C'est pour ça, tu pouvais venir à Paris, mais dans une petite chambre. T'avais pas droit au déjeuner boulevard Pereire, ni aux huitres en famille. Avoir un enfant était possible, à condition que ça ne change rien à l'ordre, et qu'il ne me reconnaisse pas. C'est pas une histoire privée ça tu comprends. C'est pas un arrangement personnel, C'est un arrangement social, auquel tout le monde participe, y compris toi. C'est l'histoire du rejet social. Et de la sélection. Avec l'enfant, ça rendait l'exercice plus périlleux, donc plus interessant pour lui, plus excitant. Quand il y a une crise, et qu'une valeur résiste, ça veut dire que la valeur est sûre. Comme l'immobilier à Paris après la crise de 2008. Tu comprends? Il a résisté. Eh ben eux pareil, ils ont résisté, pourtant il y avait histoire d'amour et enfant désiré. C'est fort. Ils sont forts. Tu approches quelqu'un tout près du but qu'il atteindra jamais, et au dernier moment tu le mets K.O. En lui disant, avec ton pied sur sa poitrine, que tu lui avais dit depuis le début qu'il ne pouvait pas gagner. Que c'est lui qui a voulu se mettre en compétition. Tu lui rappelles, au dernier moment, qu'il est qu'une merde. Vous pouviez avoir un enfant, certes, un homme et une femme peuvent avoir un enfant, et s'aimer même en principe pas de problème. Mais ça ne vous rapprocherait pas. Il t'a prévenue, il ne me reconnaîtrait pas. Avoir un enfant avec toi c'était comme un test de solidité si tu veux. Ça l'intéressait. Je vais faire un enfant avec elle, mais au lieu de la hisser je vais l'enfoncer. Je peux très bien lui faire un enfant puisque socialement ça sera pas mon enfant. Elle croit qu'elle a tiré le gros lot, que ça va la faire changer de sphère, et monter deux-trois barreaux d'échelle, alors que ça va la faire descendre. Et moi, ça changera rien, je serai toujours en haut. Parce que je suis en haut de droit, par nature. Toucher la limite ça permet de la vérifier. Ça les excite. Avoir un enfant, dans ces conditions-là, permettait de vérifier à quel point vous étiez de deux catégories séparées. Ça ne changerait rien. Il pouvait très bien avoir un enfant avec toi, et rester supérieur, très au-dessus dans son monde. Au contraire même, il recevrait une confirmation de cette supériorité. Comme un champion du monde qui remet son titre en jeu, mais qui sait que le match est truqué, que l'adversaire sera disqualifié. Parce qu'il fait pas le poids, qu'il peut pas concourir. Ça lui permettra de l'humilier en public, et de lui faire passer le goût de la compétition. En face il y a qui ? Il a quelqu'un, toi, qui croit qu'il a rien à perdre. Alors que si. Tu savais pas, mais tu avais plein de choses à perdre. La confiance. Le sentiment de valoir quelque chose. - Dès que je lui ai annoncé que j'étais enceinte d'ailleurs, il est parti en vacances. Il a pas changé ses projets. Ça faisait partie de la logique. Sans aucune culpabilité. Avec le sentiment de t'avoir toujours bien notifié les règles. - Sur le moment j'ai trouvé ça normal. Enfin... Je voulais pas me poser la question. Et son entourage était d'accord avec lui. Son père avait pas l'air gêné par la situation. Quand je suis allée le voir, j'étais un détail. Et la réaction de sa mère aussi. Qu'il m'avait rapportée. « Méfie-toi, elle lui avait dit, elle veut mettre la main sur un fils de famille. » Voilà. C'est ça. Et après ma naissance il a continué sa route sans dévier. Vous deviez rester séparés socialement et cette séparation primait toutes les autres considérations. __ Sans doute. Et lui, toujours avec la conviction d'avoir été clair, honnête et franc avec toi. Ah oui, ça, il s'est jamais rien reproché. Ces gens-là ils se reprochent jamais rien. Il l'avait bien dit que c'était une voie sans issue. Tu l'empruntais à tes risques et périls sachant qu'elle ne débouchait pas. Tu pouvais la visiter, t'y prome-ner. Mais tôt ou tard tu devrais retourner sur tes pas. Et c'est ce que j'ai fait d'ailleurs. Ben oui, puisqu'il te l'avait annoncé dès le début, comme un panneau à l'entrée. _ Et au fur et à mesure qu'on était ensemble, il me faisait constater tous les signes qui prouvaient sa supériorité, et que moi j'étais moins bien. Il avait d'ailleurs eu la franchise, je te l'ai peut-être déjà dit, de m'avouer que si j'avais eu de l'argent ça se serait passé autrement, il m'avait dit « si t'avais été riche j'aurais peut-être réfléchi ». - Voilà. Et toi tu as trouvé ça normal. Donc, tu as fini par admettre qu'il te rejette. C'était pas facile. Ça a été dur, parce que je l'aimais. - Mais pourquoi tu l'aimais maman? Je l'aimais. Est-ce qu'on sait pourquoi on aime? Je peux pas te dire pourquoi. C'était comme ça. À partir du moment où il était entré dans ma vie... je le voyais pas en sortir. Il avait changé ma vie. Je pouvais plus la voir sans lui. Quand j'ai compris qu'il allait en sortir, j'ai été bien obligée pour-tant. Et, là, j'ai compris que ça pouvait pas se passer autrement. C'était presque... comment dire... pas normal, mais.. . C'était dans l'ordre des choses. Et j'ai admis qu'il me rejette. Ç'a été dur. Mais c'était que du chagrin. Et ce chagrin a fini par passer. lavais la une phrase de Proust, dans Le Temps retrouvé je crois, sur le fait que le chagrin est ce qui passe le plus vite, il le dit mieux que moi évidem-ment. Je la chercherai. Je l'avais recopiée, je l'avais mise dans mon portefeuille, faut que je regarde si elle y est toujours. - Et là où la chose s'est compliquée, c'est avec la mention « née de père inconnu » sur mon acte de naissance. Parce que, ça, t'as pas pu supporter. Tu voulais bien admettre que tu étais rejetée, mais tu n'as pas admis que je le sois aussi. - Je pouvais pas. Je voyais pas pourquoi. Je trouvais ça injuste. Faux. - Peut-être, mais ça faisait partie du pro-gramme. Si je portais son nom, et si j'étais recon-nue, il y avait plus de séparation. Entre vos deux milieux. Entre vous. Or il était missionné pour que ça reste parfaitement étanche. Et t'enfoncer. Parce qu'il y a tout son milieu hein qui lui tient la main et qui l'épaule. Mais toi, tu t'es entêtée. En l'appuyant sur des dispositions juridiques. T'as voulu que cette mention disparaisse et que soit inscrit sur le livret de famille qu'il était mon père. Et que j'appartenais, donc, pour moitié, à son milieu. -- Oui puisque c'était la vérité. - Tu sais pas que ces gens-là ils en ont rien à faire de la vérité. Absolument rien. - Tu crois ? - Oui. Rien du tout. C'est pas leur problème. La vérité c'est ce qu'ils décrètent. C'est pas ce qui est. C'est possible. - Tu as dépensé des années d'énergie, ç'a té long, tu t'y es reprise à plusieurs fois. Et tu as pensé que ç'avait été utile, puisqu'il a fini, après la mort de son père, par te promettre de me reconnaitre. - Au dernier moment, il a refait un pas en arrière. Il a fallu que je reprenne tous mes arguments depuis le début, et que de nouveau je le convainque. - Voilà. Finalement, tu le convaincs. Bon. Et vous allez au bureau d'état civil de la mairie de Cha-teauroux. Mon état civil change. Enfin. Ça y est. Et ie suis reconnue comme sa fille. - Tu étais sa fille de toute façon. Tu es sa fille. - Voilà. Sauf que c'était contraire à la logique de leur camp. Contraire à ce qu'ils veulent. Donc qu'est-ce qu'il pouvait faire? Eh bien, il a trouvé. Il a ignoré l'interdit fondamental pour les ascendants d'avoir des relations sexuelles avec leur enfant. C'était peut-être un interdit fondamental, mais ça ne le concernait pas. Pas lui. Comme s'il n'était pas mon père et que je n'étais pas son enfant. Il était au-dessus de ça, au-dessus de toi, de nous, et des règles sociales d'une manière générale. Y compris de la règle sociale fondamentale, donc très très au-dessus. Ne pas reconnaître un interdit qui s'applique à tous, c'est la distinction suprême. Tu comprends ! Quelle classe ! Et pour lui, ç'a été la façon ultime, impa-rable, d'annuler la reconnaissance. Ça va bien au-delà de la prise de sang. C'était la négation auto-matique. Changement de point de vue. L'interdit fondamental, là, c'est plus celui des relations sexuelles entre ascendants et descendants, mais celui de la mésalliance. Comme ça il y avait toujours d'un côté toi, et de l'autre lui. Puisque c'était ça, qu'il fallait préserver à tout prix, c'était ça pour eux la règle fondamentale. Lui, dans son monde supérieur. Et toi dans ton monde inférieur. Avec en plus, pour toi, dans ce monde inférieur, pour t'inférioriser encore un peu plus, te faire tomber dans le bas du bas du plus bas des bas-fonds, en prime, ta fille, violée par son père, et toi la mère qui voit rien, l'imbécile, la conne, l'idiote, la complice même va savoir. Tu descends encore de quelques degrés sur l'échelle de la respectabilité, là de toute façon il y a pas plus bas. Il y a pas plus bas que ça. Je suis sûre que c'est ça maman. - Peut-être. Mais enfin il s'est rendu coupable de quelque chose de très grave quand même. - Parce que tu penses qu'un interdit, fût-il fon-* damental, allait le mettre au ban de sa petite société? Alors qu'il est convaincu de sa supériorité? Et qu'ils le sont aussi. Non. Donc il transgresse cet interdit pour te faire comprendre, in extremis, puisque tu t'obstines à lui mettre sous le nez que je suis sa fille, que ça ne marche pas comme ça, pas chez eux, il te fait descendre d'un cran de plus. C'est toi qui baisses. Dans leur monde on n'a pas d'enfant avec une juive, surtout si elle a pas d'argent et qu'il n'y a rien à obtenir d'elle. À part son cul. Excuse-moi. Je parle jamais comme ça, c'est pas mon lan-gage, tu le sais. Lui il reste stable, et il assure son rang, et toi tu descends. Dans leur logique, les points que tu as marqués ne sont pas reconnus. Tous tes petits points juridiques la. Ta sortie de tun-nel, ch bien elle débouche sur rien. C'est des points un pion sur l'échiquier, il a trouvé un moyen рош te faire reculer. Et ce qu'il a fait avec moi est le dernier moyen qu'il a trouvé, en fin de course, pour te claquer la porte au nez, et en donnant en prime un tour de clé supplémentaire dans la serrure. Sur le plan tactique, c'est un coup magistral. C'est un coup de maître. C'est une apothéose. Et c'est un coup définitif. Après ça il y a rien à faire. Faire un procès? Ça fait pas le poids. Il y a rien de plus 1821958515 simple pour un type comme lui que de nier. De jouer les diffamés. L'atteinte à la vie privée, les mecs atteints. Les négationnistes assumés. D'ailleurs tu as rien fait. T'as pas porté plainte, t'as rien dit, t'as rien fait. - J'ai fait cette infection, et j'ai été hospita-lisée... C'était quoi comme infection ? - - C'était une infection des trompes. Comme par hasard. Des trompes. Tu venais d'être détrompée. Hhhh !! - Ah. Tu vois ça comme ça !? Oui. En tout cas, j'étais à l'hôpital, et ce week-end-là, du coup tu es pas allée voir ton père à Paris, parce que je venais d'être hospitalisée... - Je sais ça, tu m'as toujours dit ça. M'enfin ça remplace pas une parole de se faire une infection et d'aller à l'hôpital. C'aurait été mieux si tu avais pu me dire quelque chose. Sans doute que je pouvais pas faire autrement. C'est pas grave maman. »
This novel is an example of why one should finish the books one starts, particularly for me because I tend to abandon books if I am bored or uninterested after 50 pages or so. I found the beginning of this novel a plain tale of idealized love gone flat, but I pushed on; by the end, I had completely revised my opinion of the novel and rethought my understanding of the beginning.
Angot is a contemporary French writer whose fiction is often autobiographical. Her most famous novel, "Incest" (1999), is about her relationship with her father. "An Impossible Love" focuses on the relationship between daughter and mother and father as narrated, queried, and analyzed by the daughter, who as an adult and as a writer is trying to figure things out–what happened and why–over the arc of their lives. As the daughter pieces together her knowledge of their relationship through memory, reflection, interviews, discussions, and analysis, the novel shifts focus and recasts itself again and again. To add a metaphor, the novel is a prism, and reading it moves one from facet to facet, changing the reader’s perception of the whole novel with each facet.
The daughter begins with the beginnings of her parents relationship and the love they had for one another, particularly the love her mother had for him. Love is pure and powerful and has the ring of truth, especially in comparison to social relationships, which seem ephemeral and inconstant. The daughter is conceived and born based on that idea of love and the faith that the mother has in it. The “couple” do not marry, because the father says that he wants to be free, to not be constrained by the institution of marriage, and the mother is fine with the decision to not marry because of her faith in love. This all sounds very countercultural, but it comes about before May 1968 and the deep questioning of French social norms. Still, could this couple be prescient? No. Hint: The mother is Jewish (Schwarze) and the father is not, the mother is not from wealth and the father is.
The middle of the book becomes a kind of cat and mouse game as the father moves in and out of their lives. Initially, the circumstances are fine, because the mother has her faith in love, which she treats as a stable core when other things (job, geography, relationships) are changeable. But then he marries, giving the lie to his earlier rejection of marriage, and the mother loses her faith in love or her love for him, transferring that transcendent love to her daughter to redeem some version of her initial idealism. Still, this is a dark period. The mother is casting about for new relationships and values, and the daughter as teen-ager reacts to what she considers her parent’s betrayal of their values and her. For awhile, the father disappears from their lives but then returns at arm’s distance but also does much damage (the incest referenced above).
Up until the last part of the novel, I saw this narrative as fairly ordinary, about the loss of idealism and the shit life throws at us as we attempt to maintain one way or another. Again, it all seemed rather plain, even the father, who is cannily but predictably manipulative and exploitative. In the last part of the novel, the mother is in her 80s, having long settled on a more conventional life with its protections. The daughter, now an accomplished writer, talks with her mother about her life and choices over a series of long lunches in order to come to some kind of conclusive understanding of their strained, strange, and difficult lives. The daughter lays out a class and race-based (anti-Semitic) argument for why the father behaved as he did, keeping them at arm’s distance while also giving himself the freedom to do what he wanted with them–slumming, as we would say in the US–without reprisal and yet always able to maintain his distanced, superior position as someone who has the power to punish, exploit, or reward: untouchable, in other words. Pursuing this systemic analysis with her mother, Angot does not relieve her mother of guilt but shows how her mother’s choices vis-á-vis the three of them, were grounded in her own unconscious acquiescence to social order and her subservient place in it. Thus, the idealized love at the beginning of the book becomes false consciousness, a mask behind which to hide an exploitative society and those who operate the levers of exploitation. A harsh ending, but an amazing accomplishment: to return to my earlier metaphor, the last facet of "An Impossible Love" is difficult to look through.
O operă cu multe lecții de învățat, îmi place abordarea subiectului..; De asemenea, scrierea este interesantă, iar sentimentul de a o arunca pe geam (cartea) din cauza anumitor situații care nu sunt bune… m-a prins. 💯
Navonok nenápadná kniha s krásnou obálkou, perfektným prekladom a nečakaným koncom je pre mňa príjemným prekvapením leta. Opäť dokazuje, že maličké vydavateľstvo Inaque má čuch na dobré príbehy. Spomedzi postáv je pre mňa ale najzaujímavejšou Rachel. Je to fatalistka, ktora sa akoby všetkým, čo sa okolo nej deje, len necháva unášať. V konečnom dôsledku sa tým paradoxne stáva tou, ktorá rozhýbe sled všetkých udalostí. Reč postáv je zaznamenaná tak, ako zvyčajne rozprávame, bez takej tej knižnej štylizácie. Veľmi mi to pripomína Tatarkove Navrávačky. Zároveň je to niečo, čo knihu a samotné postavy veľmi oživuje. Vyvoláva to podobný pocit, ako keby ste ich sledovali spoza záclony, len kúsoček od nich.
Blijkbaar autobiografisch verhaal... Ik heb het niet graag gelezen: zo simpel en rechtlijnig. Aan de ene kant de goeien en de slechteriken aan de andere kant... Ook de stijl is me niet bevallen. Zal wel aan mij liggen, want dit boek kreeg overal veel lof. :-)
Empecé a leer esta novela sin saber de que trataba, a veces me gusta escoger libros por el título y la portada sin leer la sinopsis. La verdad es que me llevé una gran sorpresa, no era nada de lo que imaginé que iba a tratar, me gustó bastante aunque los temas tratados son muy fuertes.
Christine Angot, es una escritora francesa, novelista y dramaturga, es autora de numerosas novelas y obras de teatro, que la han convertido en una escritora indispensable y controvertida.
"Un amor imposible", es un libro autobiográfico, se centra en la relación entre su madre (Rachel Schwartz) y su padre (Pierre Argot), construida sobre la base de dominación y la diferencia de clases sociales.
Christine narra como su madre estaba cegada no solo por su amor, sino por su propia falta de autoestima, estaba obsesionada por el rechazo. En este libro encontramos temas sobre la maternidad, las mujeres en el trabajo, el sexo, el envejecimiento y el incesto.
Sinopsis.
Una hija, una madre, un padre. Una relación marcada por el incesto y el distanciamiento. Un libro estremecedor y valeroso. En este libro se entrecruzan tres historias, tres vidas, tres personajes movidos por pasiones destructoras en lo que es, por encima de todo, el retrato de una madre.
Este es un libro estremecedor, un relato íntimo que conmociona al lector. - "No puedo decirte exactamente lo que quiero. A veces es difícil expresar ciertos sentimientos. Ojalá pudiera expresar mis sentimientos. Pero las cosas íntimas son las más difíciles de expresar."
"Este es el amor de una madre y su hijo. Él nunca muere. Nunca termina. Es un amor eterno."
"Lo amaba. ¿Sabemos por qué amamos? No puedo decirte por qué. Fue así. Desde el momento en que entró en mi vida... No podía verlo salir. Había cambiado mi vida. Ya no podía verla sin él."
"Pertenecías a dos mundos diferentes, ajenos el uno al otro; en cualquier caso, así fue como se establecieron las cosas desde el principio. Y tú aceptaste que fuera así. Porque estabas sola, porque eras pobre, porque eras judía."
"Jamás me curaré, hasta el día de mi muerte, de no haber dicho nada, de no haber hecho nada, de no haber visto nada."
No podía estar ni un minuto más sin hablaros de esto.
El tráiler de su adaptación cinematográfica (que me salió de casualidad por YouTube) me llamó tanto la atención que, a falta de poder ver la peli, encontré el libro. Y que buena sensación es esa cuando una historia te deja con la boca abierta, y cerrada, con los dientes apretados, te da un mazazo en la cabeza (como la propia autora describe en una de sus páginas), y también te trae la ternura y la felicidad, el amor, te hunde con un peso, y luego te libera de él para más tarde, al acordarte, sentirte de igual forma amarga, indescriptible, confusa, triste, pero todavía con la sensación de ser libre de verdad, al fin. ¡Aleluya! Dios, qué grande era ese maldito peso... (¡Yo lo sentía atado en las piernas mientras leía, de hecho!).
De corte autobiográfico, UN AMOR IMPOSIBLE, de Christine Angot, te arrastra a su interior y no te suelta ni siquiera al terminar; como si las propias manos de la autora se metieran bajo los recónditos más imposibles de tu cuerpo y te obligara a participar en la inevitable destrucción, pero también en la liberación (perdonad, si repito mucho esta palabra, pero es que ese final, después de todo lo que hemos pasado, ES LO QUE ME HIZO SENTIR (así, en mayúsculas, porque fue REAL)) de Rachel Schwartz... Y la propia Christine Angot, a manos no solo del psicópata de Pierre Angot, sino de la sociedad, la clase y la raza que lo respalda (al fin y al cabo, todavía acabamos de salir de la SGM cuando esta obra comienza).
Una historia inteligentísima, viva, que respira por los poros de tu propia piel... Uno de los mejores libros que he leído este año (vengan los que vengan) y que os recomiendo A TODOS, porque además de todo eso, es corto (pero profundo e intenso, como suele ser), no puedes parar de leer y mucho menos dejar de pensar en él. (Me ha durado dos tardes, y porque ayer tuve que parar a cenar, jaja).
Me cuesta hasta ponerle nota, pero... 5/5. Dadle una oportunidad, por favor.
PD: Si os gustó tanto "El amante" de Marguerite Duras, como "Desgracia" de JM Coetzee, ¡este libro os encantará!