"Por fin un libro sobre la tragedia del Palacio de Justicia que no toma partido. Esta novela y por eso lo es sólo apuesta, entre cruces de aplastantes frases y balazos asesinos, por el partido del alma de quienes aquí viven y mueren". Mauricio Vargas
Después de más de un mes trabajando en el archivo del Palacio de Justicia como infiltrada del M-19, a Yolanda y a todo el grupo guerrillero le llegó la hora. Sin embargo, en la madrugada del 5 de noviembre, prácticamente listos los preparativos de la toma que habría de efectuarse al día siguiente, Ramiro, su amante y uno de los que participarían en la misión, le advirtió: "Mañana no te presentes". Demasiado tarde. Temerosa pero con una ciega fe en la causa, Yolanda acudió a su cita con el destino, sin imaginarse nunca que iba a conocer los extremos del horror. En esta novela apasionante y dolorosa, Marta Orrantia consigue recrear con una intensidad sin precedentes uno de los momentos más dramáticos de la historia de Colombia.
Es la segunda vez que leo este libro y sigo anonadado por su riqueza. Es una montaña rusa de emociones, con una finura al narrar y una cantidad de detalles que me hacen sentir ahí, dentro del baño lateral del Palacio de Justicia de Bogotá durante la toma del 5 y 6 de noviembre de 1985. Marta Orrantia logró construir una historia absolutamente emocionante con personajes y situaciones reales, meternos al lado de la acción que no se ha visto mucho en libros (ni en ningún lado) y ofrecernos el lado guerrillero, lo que sucedía con el M-19 mientras el Palacio se derrumbaba a pedazos.
Estoy casi seguro que esto tiene poco de ficción y mucho de realidad: aunque la autora reconozca en una nota final que sus personajes principales no existieron y muchos de los vacíos de su investigación los llenó con especulación, hay un agradecimiento a los comandantes con los que habló y de quienes juró no revelar sus nombres. Por cosas de trabajo yo también tuve que hacer una investigación sobre este tema, y es extremadamente cercano (por no decir igual) a todo lo que yo encontré.
A través de la narración de una historia real vemos las fallas de ambos lados de la toma: el M-19 y sus deseos de un país en paz, el ejército con una obsesión de mantener el orden y la democracia a costa de lo que fuera, y en el medio los civiles: magistrados, trabajadores, visitantes de Palacio... Gente totalmente inocente que se haya en medio de la violencia y termina muriendo por los ideales de otros... Como sigue pasando en la realidad colombiana.
Este debería ser un libro obligatorio para todos. La toma de Palacio es uno de los eventos históricos más dolorosos, desordenados y sospechosos de las décadas de violencia que ha enfrentado Colombia. La ficción hace que se tome un poco más "fácilmente", entre comillas, a la vez que da para construir una historia con suspenso y acción, que sigue dando giros en cada página y despierta todos los sentimientos posibles: el lector puede pasar por la sorpresa, el dolor, la tristeza, la rabia, la desesperanza... Y ya no me acuerdo por qué más pasé, solo tengo claro que no podía soltarlo, el día pasaba pero yo estaba encerrado en el Palacio de Justicia de 1985, sufriendo con todos ellos.
Narra en primera persona en tiempo presente la toma criminal del Palacio de Justicia por parte del grupo guerrillero M-19, el uso de fuerza desmedida contra civiles por parte del Ejército en la retoma, las torturas con ayuda de personal médico, y las desapariciones después de éstas; rellenando con los rumores no probados e imaginación todo lo que no se conoce aún, dado que este capítulo de la historia de Colombia sigue más lleno de dudas que de certezas. El dinamismo de la narrativa tiene la capacidad para que nos formulemos preguntas y nos lleve a interesarnos por lo ocurrido, sumando a la memoria del país. El espiral central es la historia de amor con final trágico de la protagonista, una guerrilla idealista, impulsiva, emocional, y muy romántica que fue engañada. Es un libro imparcial con buenos y malos en todos los mandos y un final rebuscado.
Este libro me deja sin palabras, realmente sentí felicidad, rabia, tristeza y muchas más emociones con casa frase que leí. Marta Orrantia me llevó a ese momento histórico tan importante y controversial de mi país. Recomiendo 100% este libro. Definitivamente su crudeza al narrar no es síntoma de exageración sino de una realidad que probablemente fue mucho peor. 👌🏼
El ritmo del libro funciona, la mayoría de párrafos están bien construidos. Es un poco predecible y tiene momentos en los que el diálogo se siente raro. Es curioso que digan que es una visión no parcializada de un acto tan político como la toma y la retoma del palacio de justicia. Con algo así, creo yo, es necesario tomar partido.
Ligero para leer. me bastó una noche para devorarme el libro. A pesar que nos cuenta un momento doloroso y penoso en Colombia, la narración es genial.
Me gusto, es una mirada diferente de lo sucedió, en donde hay nuevos pensamientos en cuanto aquel doloroso episodio. Y a la vez me hizo recordar la decepción hacia el gobierno y fuerzas militares del momento.