Karl Heidemann es un niño con un oído extraordinario que se siente abrumado por el ruido que tiene que soportar al estar con más gente. Ya de bebé no aguanta estar cerca del latido del corazón de su madre. Poco a poco, este niño peculiar que vive en el sótano y prácticamente no sale de casa descubre que matar se convierte en el mayor acto posible de amor y en la única manera de poder vivir en silencio. En poco tiempo, deja un rastro de sangre en el pueblo, hasta que su propio padre descubre la verdad y el joven debe huir.
A los dieciséis años, Karl, ya en la ciudad, seguirá perpetrando crímenes brutales. Su excepcional oído le permite acercarse a sus víctimas sin miedo a ser descubierto y convertirse en un ser prácticamente invisible que vive de noche, cuando el silencio le aporta tranquilidad. Quién sabe si algún día cometerá un error y será finalmente descubierto.
Nach seinem abgeschlossenem Studium der Mathematik und Sportwissenschaften unterrichtet Thomas Raab an einem Wiener Gymnasium.
Wird als Quereinsteiger im Literaturbetrieb 2007 mit seinem Debüt-Kriminalroman „Der Metzger muss nachsitzen“ bekannt und für seinen witzig philosophischen Sprachstil sowie seine Lese-Performances geschätzt. Raab lebt als freischaffender Buchautor und Musiker in Wien.
Antes que nada, agradezco a la editorial Penguin Random House por el ejemplar.
A veces se instalan en las mentes ideas curiosas, percepciones que incluso a sus autores resultan extrañas, ilícitas. Pero ¿acaso existe una fuerza más poderosa, más contagiosa, edificante o destructiva que la mente del ser humano?
"Silencio" tiene un fuerte comienzo donde nos presenta a Karl, un bebé atormentado por el ruido, que más tarde se tornará un salvaje e impiadoso asesino en serie. Raab nos narra los primeros días de vida de un niño bastante latoso, todo lo opuesto a lo que veremos en su adolescencia, donde nos encontraremos con un muchacho retraído, prácticamente mudo por voluntad propia, y con una terrible y peculiar hipersensibilidad auditiva que lo castigará durante toda su travesía psicópata. Es una introducción sofocante y opresiva, la atmósfera durante esta parte de la novela es especialmente angustiosa (pero en un buen sentido, desde luego). Esta primera parte se caracteriza por ser muy abrupta y cautivadora, cargada de muchos sucesos clave para comprender comportamientos futuros. Es casi imposible abandonar la historia tras leer los primeros capítulos, tiene el poder de atrapar en pocas páginas.
Realmente fue una sorpresa encontrarme con menuda historia, tan perturbadora y a la vez, tan bellamente narrada, con una prosa poética que embelesa al lector casi al instante, y con hechos cruentos y repletos de violencia. Una historia bastante rebuscada que analiza la mente de un asesino, quien comente atrocidades "inocentemente", sin estar cien por ciento consciente de que tales acciones lo convierten en un criminal. Es interesante cómo la novela va profundizando en el perfil psicológico del protagonista, cómo pequeñas acciones lo van a arrastrar a su lado más siniestro. Es el thriller que yo necesitaba encontrar para sumergirme más en el género, y a la vez creo que sería una buena idea que este título sea pie de aquellos que jamás hayan leído un thriller psicológico, pues es un libro fácil de llevar.
El único punto débil que le encuentro es la carencia de momentos gráficos correctamente descritos en la muerte de determinados personajes. Por momentos sabemos que el protagonista planea acabar con la vida de algún personaje, y lo próximo que sabemos es que ese personaje está muerto, sin mayor detalle, sugiriéndolo tan solo con metáforas agradables estéticamente hablando, y sin mucha información, lo cual creo que le quita un poco el realismo a la historia. Es difícil figurar de qué modo un chico de sus características logra concretar el sinfín de horrores que aparecen en la historia. No sé si esto será cuestión de mi mente morbosa que quiere los detalles sangrientos o qué, pero en general, sentí que le faltó algo más a esos momentos puntuales. Quizá mayor precisión en su descripción, algo que vaya más allá de la escueta imagen que genera. Y es una verdadera pena, porque hay situaciones ideales para detallar y explotar, que harían que la historia fuera mucho más "jugosa" y equilibrada si se quiere.
En términos generales, una grandiosa novela a la que le faltó poco para ser perfecta, y aún con ese ínfimo detalle, creo que vale muchísimo la pena aventurarse en la misma. Muy recomendado.
Silencio es una novela que despertó mi interés a raíz de la crítica y las opiniones que trae en su contraportada. La pintaban como un thriller psicológico a caballo entre El Perfume de Patrick Süskind y American Psycho de Bret Easton Ellis. Con esas referencias resulta inevitable caer en sus garras ¿no? Y así me adentré en sus páginas. Lástima que no me ha convencido tanto como esperaba. A veces esas comparaciones le hacen mal a la historia que estamos a punto de leer y, bueno, no es que sea una mala novela, simplemente me esperaba otro tipo de enfoque y la pluma de Thomas Raab no ha logrado atraparme.
Karl es hijo de Johan y Charlotte. Es un niño muy querido y esperado pero, tras su nacimiento, el amor de la pareja hacia su retoño se transforma en noches en vela y desesperación por tratar de calmar a Karl y hacerle dormir. Karl ha nacido con un oído muy desarrollado, de tal modo que hasta el latir de su propio corazón le resulta desconcertante y molesto. Por ello, cuando sus padres dan con la razón de su llanto, toman la decisión de aislarlo en el sótano, convirtiéndolo en su habitación y refugio, allí donde ningún sonido es capaz de trastornarle. Con todo, la vida de la familia Heidemann no vuelve a ser la misma y, tras presenciar el suicidio de alguien cercano, Karl, aún siendo un crío, empieza a asociar la muerte a la paz, a la liberación y, por encima de todo, al amor. Karl siente que la muerte es un regalo y ofrecerá ese regalo a todo aquel que sienta merecedor del mismo. [...]
Still: Chronik eines Mörders – Thomas Raab. Als ich dieses Buch das erste mal in den Händen hielt dachte ich erst mal nicht daran, dass es sich bei dem Autor um diesen Thomas Raab handelt der dem Metzger seine Figur verpasste. Aber der Roman ist eben von diesem Thomas Raab. Dass der Mörder am Ende sterben wird, erfährt man schon zu Beginn der Handlung. Das ist eher untypisch, passt aber zum Ablauf und Aufmachung der Geschichte.
Die Hauptfigur Karl Heidemann ist speziell. Schon als Baby hat er einen schweren Start in das Leben. Er schreit sich die Seele aus dem Leib und niemand versteht ihn. Seine Mutter verzweifelt an dem kleinen Schreihals, erst sein Vater findet durch Zufall die Lösung für Karls Problem: völlige Ruhe. Diese findet er fortan in einem umgebauten Kellerbereich des Elternhauses. Seine Mutter mästet ihn regelrecht um ihn ruhig zu halten und erdrückt ihn mit ihrer unbeugsamen Liebe. Die Dorfbewohner machen sich lustig über sein Anders-sein, nur zu seinem Vater hat er Vertrauen. Als seine Mutter sich eher unfreiwillig das Leben nimmt, macht Karl eine ungewöhnliche Entdeckung: sie sieht so friedlich aus in ihrem stillen Schlaf. Für ihn steht fest, dass der Tod nichts schreckliches ist, sondern Frieden für Menschen bringt und es gibt so viele von ihnen, die diesen Frieden verdient haben…
Karl ist eine Hauptfigur die verschiedenste Gefühle in mir ausgelöst hat. Karl, das Kind, möchte man beschützt wissen vor den bösartigen Dorfbewohnern und der Welt da draußen. Dass er zum Mörder wird geschieht auf so sanfte ruhige Art, dass man erst gar nicht böse sein kann. Ich hatte noch nie Mitleid mit einem Psychopaten, Karl hat es geschafft diese und andere Emotionen in mir abzurufen, aber keine in der ich ihn wirklich als widerlichen kranken Mörder gesehen hätte. Der Roman hat mich über längere Zeit beschäftigt. Es war mir nicht möglich die Geschichte in einem durchzulesen, denn ich braucht immer mal wieder eine Pause um das Gelesene zu verarbeiten und den Charakter Karl Heidemanns zu analysieren. Seine Handlungen verstehen gelernt habe ich nur in gewisser Weise. Mit der Zeit kamen auch immer mehr Aspekte in die Handlung dazu, sei es aus religiöser Sicht, Schuld-Unschuld, Gut-Böse. Was ist richtig, was ist falsch? Karl wollte aus seiner Sicht immer das Richtige tun, zum Schluss hat er das auch getan. Das Ende überraschend aber gut, versöhnlich und traurig zugleich. Eine großartige Erzählung in der der Tod etwas Ästhetisches hat.
La historia está narrada en tercera persona y protagonizada principalmente por Karl. En capítulos cortos se nos explica toda su vida.
La trama gira en torno a la curiosa habilidad que posee de tener un oído tan fino y extremadamente desarrollado que le impide vivir como el resto de las personas. A partir de aquí vemos como avanza su vida con esta particularidad.
El libro es totalmente diferente a lo que suelo leer en cuanto a género se refiere y sobretodo en la pluma del autor. Me gustó porque a pesar de que a veces se me hiciera algo difícil seguir el hilo me entretuvo bastante y sobretodo me tenía intrigada y expectante con lo que iba a pasar.
Lo mejor de la historia es el personaje de Karl y como el autor nos lo presenta y lo describe a lo largo de la novela. La manera que tiene el escritor de hablarnos de su mente perturbada es un plus que me ha conquistado ya que me ha parecido muy original.
Existen varios giros argumentales en la novela que no esperaba y que me sorprendieron gratamente. En este sentido me gustó mucho porque es algo clave en este tipo de novelas.
Un final bastante duro pero que disfruté muchísimo.
Si os gustan las novelas donde se analiza al asesino en serie en cuestión esta es vuestra historia.
Schon der erste Satz dieses außergewöhnlichen Romans hat es in sich:
Der Tag, an dem Karl starb, war ein guter Tag.
Wie kann der Tod eines Menschen positiv sein? Und vor allem, für wen ist Karls Todestag ein guter Tag? Für Karls selbst, weil er von einer schlimmen Krankheit erlöst wird? Für seine Mitmenschen, die unter ihm zu leiden hatten? Mit einem einzigen Satz wirft Thomas Raab diverse Fragen auf und sichert sich so von Anfang an die Aufmerksamkeit seiner Leser. Ein Satz, der für das ganze Buch symptomatisch ist. Mit wenigen Worten und kurzen, abgehackt wirkenden Sätzen, erzeugt der Autor eine poetische Bildwelt, die sich oftmals nur zwischen den Zeilen offenbart. Eine Kunst, die der Sprecher Frank Arnold perfekt transportiert und die mir beim Lesen vermutlich gar nicht so deutlich entgegengeschlagen wäre. "Still: Chronik eines Mörders" beginnt, wie viele Biografien, mit der Geburt des Protagonisten. Diese ist, im Gegensatz zum Rest des Buches, eine eher laute Angelegenheit.
Auch nach seiner Geburt hört Karl nicht zu schreien auf und raubt seinen Eltern, durch sein ständiges Gezeter, den letzten Nerv. Zufällig finden sie heraus, dass Karl ein äußerst sensibles Gehör hat und nicht aus Wut oder Unzufriedenheit, sondern vor Schmerzen schreit.
Als sie ihm ein Zimmer im Keller des Hauses einrichten, verstummt der Junge. Und bleibt es auch. Denn reden, möchte er nicht. Vielmehr möchte Karl sich voll und ganz seiner ganz eigenen, stillen Welt hingeben. In der, für viele Menschen unerträglichen, Stille, sieht Karl etwas Positives. Erlösung. Und die größtmögliche Erlösung, den Tod, gewährt er zunächst Tieren und später auch seinen Mitmenschen, nur zu gerne.
Karl ist zwar ein wenig seltsam, alles in allem aber ein sympathischer Protagonisten und einer jener Täter, welchen man (zumindest zu Anfang) noch verzeiht, da man einfach Mitleid mit ihnen hat. Er handelt nicht aus niederen Instinkten, sondern weil er davon überzeugt ist, das richtige zu tun. Gleichzeitig schafft der Autor, Thomas Raab, es in seinem gewöhnungsbedürftigen Schreibstil (kurze, abgehackte Sätze ohne jegliche Emotion) Karls Beweggründe so plausibel darzustellen, dass der Leser immer wieder seine eigenen moralischen Werte hinterfragen muss.
Ein großartiges Buch voller Poesie, das spannend, schwermütig und voller Hoffnung eine alternative Sichtweise auf das Leben und den Tod offenbart.
"Todas las creencias son erróneas a ojos del que no las comparte"
"La muerte no era solo un camino para huir de esta vida, era también un camino para transitarla"
Karl Heidemann es un niño que tiene un oído fuera de lo común, tal es así que vive abrumado por el ruido que tiene soportar al estar con gente. Karl descubre que matar es el mayor acto de amor y una manera de vivir en silencio. Con los años se transforma en un asesino excepcional, gracias a su oído se convierte en un depredador implacable.
Silencio no es el típico thriller, así como Karl, el protagonista, no es el típico asesino. El estilo narrativo es pausado y casi sin diálogos. Durante todo el relato nos vamos a encontrar con planteamientos incómodos sobre la sociedad, religión, justicia y sobre la muerte en particular. No es un libro que se regodee en los detalles sangrientos de los asesinatos, pero sí en los pensamientos del asesino y en lo que motiva a Karl a actuar de la forma en que lo hace.
Definitivamente Silencio no es la lectura que uno esperaría de un thriller psicológico moderno, de esos que se devoran en un par de días, hasta incluso pueda parecer a priori algo pretencioso en sus planteamientos. Pero de todas formas se agradece leer algo fuera del molde al que nos tienen acostumbrados y porque no, domesticados.
Still ist ein Buch wie ich es bisher noch nicht gelesen habe! Thomas Raab schafft es mit einer solchen für mich vorher nicht dagewesenen Mischung aus feinfühliger Prosa und feinsinnig, wohldosierter Wortgewalt, ohne wirklich ins Detail zu gehen, Geschehnisse in diesem Buch zu beschreiben die in ihrem Kern teilweise so furchtbar und brutal sind, das es einem wirklich sprichwörtlich die Sprache verschlagen kann! Man wird auch irgendwie im ganzen Verlauf der Geschichte in seinem Empfinden dem Hauptprotagonisten, Karl Heidemann, gegenüber bis zum Ende immer wieder hin und her gerissen! Aber das ist unter anderem einer, wenn nicht sogar der Punkt, der dieses Buch so lesenswert macht!!
Este libro tiene una pequeña similitud con el de "perfume" de Patrick süskind, es similar, salvo que aquí, raab thomas se centra en otro sentido: el oído. A pesar de eso, consigue llevar una trama bastante buena. Teniendo en cuenta el ambiente con el que fue educado, creo que no lo hacía con maldad como un real psicópata, porque él lo vio así como una forma de liberación... como una manera de llevar a la gente fuera de sus problemas. en su caminno vivirá experiencias nuevas mientras perfecciona su arte, y deberá cuidarse para no ser descubierto. es recomendable, como les digo, trata de acercarse al estilo del perfume, y aunque no es igual, consigue una trama similar y buena.
Inhalt: Nur eines verschafft Karl Heidemann Erlösung von der unendlichen Qual des Lärms dieser Welt: die Stille des Todes. Blutig ist die Spur, die er in seinem Heimatdorf hinterlässt. Durch sein unfassbar sensibles Gehör hat er gelernt, sich lautlos wie ein Raubtier seinen Opfern zu nähern, nach Belieben das Geschenk des Todes zu bringen. Und doch findet er nie, wonach er sich sehnt: Liebe. Bis er auf einen Schatz stößt. Ein Schatz aus Fleisch und Blut. Ein Schatz, der alles ändert.
Still-Chronik eines Mörders von Thomas Raab.
Dieses Buch konnte mich am Anfang wirklich einfangen, ein außergewöhnlicher Sprachstil der auf mich sehr ungewohnt wirkte, war mal was ganz anderes und besonderes. Leider verblasst dieses Gefühl des Außergewöhnlichen doch irgendwann und im späteren Verlauf empfand ich persönlich diesen Sprachstil leider nur noch ermüdend. Die ganze Geschichte wird sehr nüchtern und ohne wirkliche Emotionen erzählt, und so konnte ich keine wirkliche Verbindung dazu aufbauen und auch ein Spannungsgefühl stellte sich nicht bei mir ein. Die Darstellung des Protagonisten Karl Heidemann konnte mich in seinem Verlauf immer weniger in seinen Handlungen überzeugen und empfand es an manchen Stellen auch ein wenig unglaubhaft. So interessant es begonnen hat, so ließ die Geschichte für mich leider immer weiter nach und konnte mich mit dem Ende auch nicht mehr wirklich begeistern.
Mein Fazit:
Mal was anderes, aber leider nicht so meins. Meine anfängliche Begeisterung konnte dieses Buch leider nicht bis zum Ende aufrechthalten.
Ein außergewöhnliches Buch. Das Leben eines Mörders erzählt durch seine eigene Chronik. Die erste Hälfte des Buches hab ich mich wirklich schwer getan weiterzulese, aber ab der zweiten Hälfte hätte mich das Buch in seinen Bann. Allerdings muss man leider sagen, dass es sehr anstrengend ist zu lesen und es sich zwischendurch ziemlich zieht. Trotzdem eine gute Lektüre für Zwischendurch.
Honestamente no se si este libro me gustó o no, todavía no termino de definirme
Puedo decirles que no pude parar de leerlo, desde que lo empecé me atrapo, quería saber que seguía, que iba a pasar, pero al mismo tiempo era una historia que me chocaba en muchos sentidos
Es indudable que el escritor se inspiro en el libro del El Perfume de Patrick Süskind, no quiero decir que la historia sea la misma, pero si tiene la misma base con algunas diferencias en el personaje principal, en lugar de un olfato desarrollado, tiene un oído desarrollado, la historia de El Silencio esta desarrollada en una época actual y por supuesto le falta mucho de ese sentimiento de negro malestar que te envuelve en la trama El Perfume.
No se, como que me falto comprender la razón de la naturaleza de nuestro personaje principal, no es bueno pero tampoco es malo, es asesino, pero tiene sentimientos muy profundos, no le falta empatía en lo absoluto, sin embargo la psicología delineada no me cuadra por ningún lado, al menos no a mi, incluso siento que le falto mucho al escritor para definirnos la personalidad de Karl, para entender el porqué de muchas cosas, lo intentó pero para mi gusto fallo estrepitosamente en el intento, así que, sí, de algún modo nos perfila a Karl pero no hay fondo en ese perfil de personaje no hay razones reales, ni motivos, es un hecho que no hay enfermedad mental, no hay psicopatía, hay una sociopatía, pero no una justificada realmente, fué como si fuera un sociópata a la fuerza, solo porque tenía que serlo, no se comprende la razón del porque de muchos de sus pensamientos y actos, en fin que me quedo a deber.
Así que por un lado tengo un libro que no pude soltar hasta acabarlo, realmente me atrapo, fue intrigante y escalofriante en algunos momentos, pero por otro lado a mi parecer fue una mala copia del perfume, sí, es verdad que no es la misma historia ni es la misma patología siniestra en los personajes principales, pero creo que ahí está sin duda alguna la influencia de ese libro, sin lograr en lo absoluto el resultado del Perfume.
Es un buen libro, creo que cualquier libro en independencia de sus pros y contras, que te atrapa y que no puedes soltar, significa que vale la pena leerse. Ya me contarán ustedes que les parecio.
La narración, buena, pero creo que el escritor nos quiso presumir de su prosa y eso aveces me llenaba la cabeza de muchas palabras, frases bien elaboradas, nada malo, pero si algo cargado, no se como explicarlo, muchas palabras bonitas pero sin decir mucho en ocasiones, sin profundizar.
Dieses Buch ist definitiv anders als die Krimis und Thriller, die ich bisher gelesen hab. Es ist nicht mal wirklich gruselig, trotzdem hatte ich eine Gänsehaut, als ich es letztendlich zuklappte. "Still" ist die Geschichte eines seltsamen Jungens mit einem außergewöhnlich scharfen Gehör. Er kann sogar durch Wände und weite Entfernungen hören, dafür spricht er kein Wort. Er lebt im Keller seiner Eltern, zurückgezogen, kennt die Außenwelt kaum. Deswegen ist auch sein Verständnis von der Welt und seine Moralvorstellung allein durch ihn selbst entwickelt und nicht von der Gesellschaft geprägt. Was schlimme Folgen hat.
Ich habe lange gebraucht um mich von der Geschichte fesseln zu lassen. Sie langweilte mich nicht, aber sie brachte mich auch nicht dazu unbedingt weiterlesen zu wollen. Dies änderte sich erst etwa, als Karl sein behütetes Heim verlässt und beginnt sein Lebenswerk auszuführen. Man bekommt tiefe Einblicke in Karls Gedanken, sieht die Welt mit seinen Augen, das ist teilweise recht schauerlich, aber das Buch hat einen so subtilen Schreibstil, dass man auch diese Passagen gut lesen kann. Mir hat vor allem gefallen, dass nicht alles offensichtlich beschrieben wird. Manchmal wird ein Mord oder ein Entschluss so nebenbei umschrieben, dass ich den Absatz nochmal lesen musste um mir sicher zu sein, ob dies nun wirklich passiert ist. Das Ende fand ich allerdings etwas schwach, ich hatte doch etwas auf eine Art "Showdown" gehofft.
3,5 Sterne ! Der Schreibstil war echt anstrengend ... Außerdem hat es viel Konzentration beim lesen abverlangt. Teilweise hat sich das Buch echt gezogen und es hätten locker 50 Seiten weniger sein können. Aber da es ja eine Chronik ist , ist es ja in Ordnung ;) trotzdem war es schwierig zu lesen und ich freue mich jetzt auf ein locker leichtes Buch ! Aber es war eine tolle Geschichte !
Pausado y poético para hacer un libro sobre asesinos en serie, es una gran experiencia para el lector que sepa superar el prejuicio de estar leyendo un thriller. Recomendado
Karl Heidemann - Ein Mensch, der von Geburt an ein Sonderling ist und das wird sich Zeit seines Lebens nicht ändern. Es geht sogar soweit, dass der Autor Thomas Raab die Geschichte mit folgendem unheilschwangerem Satz beginnt "Der Tag, an dem Karl starb, war ein guter Tag". Was muss das für ein furchtbares Leben sein, dass der Autor seine Hauptfigur bei den Lesern so ankündigt? Aber zurück zum Anfang, dem Nikolaustag im Jahr 1982. An diesem Tag wird Karl geboren und und er verändert das kleine ruhige Dorf Jettenbrunn irgendwo in Österreich. Er schreit und strampelt ohne Unterlass und die Menschen im beschaulichen Ort beginnen sich zu wundern. Das Karl die seltene Gabe eines phänomenalem Gehörs gegeben wurde können seine Eltern erst nach und nach erkennen. Nur die wohlige Stille kann ihn ruhig stellen. Also baut Vater Johann im Keller eine eigene klitzekleine, von jeglichen Geräuschen abgeschottete Welt für Karl. Aber die Isolation vom Lärm der Aussenwelt isoliert Karl auch in zwischenmenschlicher Hinsicht. Kein Kontakt zu anderen Kindern und in die Schule geht er auch nicht.
Karl wird ab und zu vom pensionierten Dorflehrer zu Hause unterrichtet oder bringt sich Wissen autodidaktisch bei. Er schärft sein hervorragendes Gehör bis er den Pulsschlag seiner Mitmenschen hören kann. Dennoch wächst ein monströses Wesen heran, dem jegliche Sozialkompetenz fehlt und das in seiner urigen Gedanken- und Gefühlswelt lebt. Den Suizid seiner Mutter erlebt er vor eigenen Augen mit. Sie ertränkt sich selbst im nahegelegenen See und Karl erlebt die paar wenigen Sekunden vom Übergang vom Leben zum Tod hautnah mit. Dabei erscheint ihm der Tod wie eine Erlösung zu sein. Der leblose menschliche Körper befreit vom seelischen Ballast der Sorgen und Nöte. Bringt der Tod den Frieden mit sich nach dem sich die Menschen sehnen? Eine folgenschwerer Gedanke der Erleuchtung durchdringt Karls Bewusstsein. Ein tödlicher Gedanke der eine eigene Realität erschafft.
Chronik eines Mörders steht im Titel und das passt sehr gut zur Geschichte. Den Beginn der Handlung in den ländlichem Raum einer kleindörflichen Atmosphäre zu setzen in dem jeder jeden kennt macht Sinn. Der Autor beschreibt eindrucksvoll wie es dazu kommen konnte, dass der Mechanismus des gesunden Menschenverstandes ausser Kraft gesetzt wird und die Gedanken in ein irres Räderwerk im Gehirn fehlgeleitet werden. An Empathie fehlt es der Hauptfigur nicht, er handelt so wie er es durch sein verqueres Denken und Fühlen gelernt hat. Er sieht sich in gewissem Sinne als Erlöser der Menschen vom Mühsal des irdischen Daseins. Für uns normale Menschen wird er hingegen zum gefühlskalten Mörder, zum Serienkiller der es irgendwie schafft als Einzelgänger zu überleben und sich der Ergreifung durch die Polizei jahrelang zu entziehen.
Zum grossen Erfolg dieses Kriminalromans trägt zweifellos der aussergewöhnliche Schreibstil bei. Thomas Raab hat das Talent kurze Sätze so aneinander zu fügen das man den Stil trotzdem als poetisch wahrnimmt. Um die sprachliche Wirkung zu verstärken verwendet er regelmässig ausgefallene Metaphern die routinierte Leser zweifelsohne bemerken werden. Dankenswerter Weise verzichtet der Autor darauf die Morde mit blutigen Details zu schildern. Einerseits würde das stilistisch ganz und nicht zur Geschichte passen andererseits entfaltet die Erzählung genug Schauermomente. Voraussehen kann man den Handlungsverlauf nicht. Ich wurde ein paar Mal überrascht von dem was der Autor sich ausgedacht hat. Hie und da hätte man gewisse Passagen etwas zügiger auf den Punkt bringen können aber das ist nur eine kleine Kritik meinerseits.
Für mich ist dieses eindringliche Werk schmerzhaft und der Inhalt ging mir unter Haut. Wie besessen habe gelesen und konnte ich das Buch erst weglegen als ich es ausgelesen hatte. Das Ende ist dann … lassen wir das an dieser Stelle unausgesprochen. Das Buch wird aufgrund seiner nicht alltäglichen Konzeption und Sprache gewiss nicht jeden Leser ansprechen aber wer der Geschichte verfallen ist weiss was ich mit dieser Rezi aussagen will. Für alle anderen tut es mir Leid da sie in diesem Roman nicht dasselbe gefunden haben wie ich. Als Meisterwerk würde ich das Buch nicht bezeichnen aber es ist schon ein Stück verdammt gute Literatur.
1982 wird in einem kleinen Dorf am Fuße des Kalvarienberges ein Kind geboren. Karl Heidemann, der das Glück seiner Eltern komplettieren soll, durchstößt die Stille der Dorfgemeinschaft. Er schreit. Und er hört nicht auf zu schreien. Tag und Nacht ertönt seine durchdringende Stimme, nur unterbrochen durch kurze Phasen schweißnassen und erschöpften Schlafes. Der Alptraum seiner Eltern, des ganzen Dorfes. Einzig auf dem Rücken seines Vaters, wortlos durch die Wälder getragen, kommt Karl zur Ruhe. Denn es ist endlich - still. Karl ist anders. Er hat eine Gabe, die sich für ihn zu einem Martyrium entwickelt. Er hat das sensibelste Gehör, das es je gab, eine Empfindsamkeit, die selbst den hauchzarten Flügelschlag eines Schmetterlings für ihn zu einer unsäglichen Qual werden lässt. Als der Vater zu begreifen beginnt, verlegt er Karls Zimmer in den ruhigen Keller. Dort wächst er auf, versorgt zwar, aber doch isoliert, denn menschliche Gesellschaft scheint ihm unerträglich. Traurig die Mutter, die ihn nicht begreift, die sich ungeliebt fühlt, keinen Zugang finden kann zu ihrem Sohn. Kein Wort kommt über die Lippen dieses seltsamen Jungen, dick, blass und schweigsam stößt er jeden ab, wirkt zurückgeblieben. Und doch ist Karl hochintelligent, begreift schnell, beobachtet, zieht Schlüsse...
Was für ein Buch! Wer einen reinen Thriller erwaret, wird hier womöglich enttäuscht - obwohl es Tote gibt. Viele Tote. Hunderte sicherlich. Denn Karl zieht eine Schneise des Todes durch sein Leben. Doch dieses Buch ist - anders. Diese 'Chronik eines Mörders' bietet einen tiefen Einblick in das Leben Karl Heidemanns. Leise aber eindringlich lässt Thomas Raab den Leser eintauchen in die Welt des Jungen, lässt begreifen, beinahe fühlen, wie dieser denkt, empfindet, entdeckt. Nicht wirklich sympathisch erscheint Karl - bedauernswert, ja, aber fremd und unheimlich, und doch... Und doch entspinnt sich hier eine ganz eigene Logik, erscheint nachvollziehbar, weshalb Karl handelt, wie er handelt. Langsam, behutsam, gleitet die Geschichte voran - und damit das Leben Karl Heidemanns. Ein Tempo, das zuweilen langatmig erscheinen mag, und das doch einfach der Geschichte den notwendigen Raum gibt, sich zu entwickeln - und mit ihr Karl.
Gerne habe ich das Schicksal Karl Heidemanns verfolgt, und aus einem Befremden wurde ein Verstehen wurde ein Berührtsein. Für mich mehr, als ich erwartet hatte, ein staunendes Überraschtsein. Die Befürchtung, womöglich Parallelen zu 'Das Parfum' von Patrick Süskind präsentiert zu bekommen, bewahrheitete sich nicht, denn auch hier ist das Buch - anders. Beeindruckend, nachhallend, intensiv - ein sehr tiefer Blick in eine menschliche Seele, präsentiert in einem gelungenen Schreibstil, der der unaufgeregten Geschichte eine ruhige, unaufgeregte Stimmung verleiht und doch der Intensität der Erzählung Rechnung trägt. Hier passt einfach alles zusammen.
Ein ganz besonderes Buch, eine wirkliche Überraschung für mich, der ich gerne die volle Punktzahl vergebe.
Een mooie, beklemmende en tragische roman, zeker geen thriller. Wordt vergeleken met Patrick Süskinds Het Parfum en ik begrijp waarom. Een boek dat je raakt.
What an extraordinary book. It has been compared to Süskinds The Perfume, and I absolutely see where this is coming from. Still is a haunting tale in which we get to follow a monster from cradle to grave, only this time the protagonist doesn't have an exceptional sense of smell, he much rather has a terrific sense of hearing, which has been torturing him from the moment he was born - and he finds the long desired calm and deace in death, and thus considers death as the greatest gift he can give to mankind. Just like Süskind, Raab has a remarkable way of portraying the anomalities of his main character, and an exceptional sense for prose. .
Still ist an und für sich sehr gut geschrieben und die ganze Geschichte ist durchaus unterhaltsam und regt zum Nachdenken an. Allerdings wurde ich nie mit den Charakteren warm, ich hatte für niemanden Mitgefühl oder war in irgendeiner Weise berührt ihren Schicksalen.
Das Buch ist dennoch empfehlenswert, alleine weil der Schreibstil faszinierend ist.
En un thriller, normalmente te encuentras el caso de un asesino, que nadie sabe quién es y la historia se desarrolla a partir de la policía y su persecución del asesino. Este libro en cambio, está narrado desde el punto de vista del asesino y su visión particular del mundo. Es un libro muy recomendable, imprevisible y peculiar. Lo recomiendo totalmente.
¡Que buen libro! Con una narración sencilla más que necesaria para tratar profundos temas morales hondamente arraigados en la mente colectiva y permitirnos dudar de ellos, cuestionarlos. Muy recomendable su lectura
Zaskakująca powieść. Z początku nie byłam do niej przekonana. Jak zwykle słowo dotrzymalam i do końca przeczytałam. Polecam ją każdemu kto chce zacząć od kryminału. Lekki chociaż może poczatek nie,ale potem wszystkie wątki układają się ładnie w całość.
Wuaw qué historia y qué manera de contarla. Casi es perfecta me encanto solo por el hecho que me dejo con un poquito de sabor a falso. Casi le hubiera puesto un cinco pero...
Uwielbiam booktoury za wiele rzeczy. Przede wszystkim jednak cenię je za to, że pozwalają mi zapoznać się z lekturami, których premiery minęły zupełnie niezauważone. Zastanawialiście się kiedyś, ile takich książek byłoby Waszym TOP ONE? A mimo to mijacie je na sklepowych półkach bo nie ten autor, nie to wydawnictwo i okładka jakaś taka se. Tym razem zapisałam się w kolejce do Ciszy - Thomasa Raaby, by przeczytać - jak mówi okładka - kronikę z życia pewnego mordercy.
O książce: Karl Heidemann od dziecka cierpiał na nadwrażliwość słuchową. Już w brzuchu matki czuł się przytłoczony przez kakofonię otaczających go zewsząd dźwięków. Każdy najmniejszy odgłos stawał się dla niego katorgą, bólem, torturą. Tylko cisza przynosiła spokój i ukojenie. Jedyne miejsce, w którym potrafił się uspokoić i nie płakać była ciemna piwnica rodzinnego domu. Wszystko to w małej, klaustrofobicznej miejscowości, w której ludzie wierzą w zabobony, a inność wytykają palcami. Gdy na oczach Karla chora z bezradności i nerwów matka popełnia samobójstwo, chłopiec po raz pierwszy odczuwa upragnione ukojenie. Zamiast szoku czuje emanujący od śmierci spokój oraz bezwzględną, niczym niezmąconą ciszę. Śmierć do dar. Chłopiec, pełen dobrych intencji, postanawia dzielić się tym darem z innymi.
"Karl Heidemann, patrząc w spokojne oczy, zadawał śmierć, uwalniał od cierpienia, dawał wybawienie. Morderca. Posłaniec. Tylko jedno bezbolesne ukłucie i szczęście. Serce, sprężyna życia przestaje się poruszać, a uwięziona w nim miłość się uwalnia" (s. 139)
Moje zdanie: "Cisza. Kronika życia pewnego mordercy" nie jest typowym thrillerem ani kryminałem, którego moglibyśmy spodziewać się po opisie z okładki. To bardziej powieść drogi - studium życia i charakteru seryjnego mordercy. Dzięki olbrzymim zdolnością pisarskim Thomas Raab dokonuje głębokiej analizy życia i umysłu Karla Heidenmanna. Robi to w sposób bardzo surowy, tworząc tym samym mroczny i ponury klimat powieści. To wszystko nadaje tej książce pewnej realności i pozwala czytelnikowi odkrywać świat oczami chłopca, słyszeć jak on, czuć i myśleć razem z nim. Kim był? Katem? Wybawcą? Mordercą? Chociaż historia nasycona jest wieloma obrazami śmierci, to jednak nie znajdziecie tutaj krwawych, chaotycznych opisów. Każde z mordestw potraktowane jest w sposób wyjątkowy - cichy i spokojny. Jak sama śmierć, która skraca agonię i przynosi ukojenie.
"Niezależnie od tego, jak bardzo zdumiony był Karl, powstrzymał się od jakichkolwiek pytań, ponieważ zdawał sobie sprawę, że próba zrozumienia podstawowych zasad ludzkich byłaby bezsensowna. Dla zwierzęcia - bezlitosne życie, a litosna śmierć. Dla człowieka - bezlitosne życie, a do tego jeszcze bezlitosna śmierć." (s. 280) Historia sunie powoli do przodu, rozwija się ostrożnie, podobnie jak życie głównego bohatera. Jest to także opowieść o samotności, odrzuceniu, braku zrozumienia i próbie ucieczki od innych. Książka ta idealnie ukazuje życie w zamkniętym społeczeństwie, w którym nie ma tajemnic, a każdy wie o każdym wszystko. To jest typ lektury, który na długo zapadnie Wam w pamięć. Zmusza do myślenia i analizowania, pokazuje, że nic nie jest czarno-białe, że w każdym aspekcie życia istnieją odcienie szarości. Smutek i bezradność - to uczucia, które towarzyszą mi na myśl o wspomnieniu tej lektury.