De retour en France, Josh est encore sous le choc de la decouverte qu'il a faite aux Etats-Unis. Avec l'aide de son ami Alex et celle de Kyle, un ancien agent du FBI, il va poursuivre son enquete a New-York. Mettant au service de sa mission ses pouvoirs de telepathe, il ne reculera pas devant les dangers qui l'attendent !
Il est temps pour Josh de resoudre les mysteres d'un passe qui lui a ete vole... Entre complot, telepathie et C.I.A, il se retrouve au coeur d'une machination d'une ampleur inattendue.
Cada uno de los libros de esta bilogía me los leí en menos de cuatro horas. Trasnoche terminando este segundo tomo. Hombre, Flow es súper adictivo y se lee en menos de lo que canta un gallo.
Josh es un chico de 16 años cuya madre murió hace un tiempo. Él lleva experimentando una serie de pesadillas y dolores de cabeza de manera recurrente, y de un momento a otro se da cuenta de que puede escuchar los pensamientos de quienes están a su alrededor. A medida que vamos conociendo su historia, el texto nos muestra otra de manera paralela, la cual sucede algunos años atrás y resulta clave para contextualizarnos.
Poco más puedo contarles de este thriller juvenil con un pequeño toque de ciencia ficción, perfecto para quienes se están enganchando con el mundo de los libros. Se lee fácil, tiene personajes con los que me encariñé y te mantiene en punta constantemente. Recomendadísimo.
Esperaba como agua de mayo esta segunda parte y he de decir que podría haber estado mejor, pero no me ha dejado del todo por los suelos. Vayamos por partes, como dijo Jack. He de avisar de que habrá spoilers en esta reseña porque es el desenlace de una bilogía, así que debo comentar cosas del primero. Si lo no has leído, AQUÍ tienes su reseña a ver si te animas a ello. Ahora sí, vamos a por la reseña.