Han pasado cuarenta años de las elecciones de 1977 y el mito de la transición se ha desmoronado. ¿Pero sabemos lo que ocultaba?. Este libro plantea que, entre 1968 y 1986, existió una ciudadanía luchando por una democracia real más allá del estado y los partidos y cuyas ideas, a veces, recuerdan a las del 15M. En la contracultura, política y cultura se unían radicalmente y la democracia era una nueva sensibilidad que lo afectaba todo: el amor, el trabajo, los cuerpos, el espacio público y el privado. Aquella creatividad fue reprimida y cooptada: política y cultura se dividieron e institucionalizaron mediante la Constitución de 1978 y La Movida de los ochenta. Sólo en el ámbito cotidiano, la ruptura con el franquismo fue más nítida. Aunque hemos olvidado los elevados costes personales y sociales de aquellas luchas contraculturales, que llevaron a la marginación de la juventud democrática (suicidios, cárceles, sida, heroína), hay una deuda de memoria con sus sueños, que este libro estudia, a partir de las voces de sus protagonistas y usando la literatura como guía de una democracia por venir.
Libro que narra la historia silenciada de las experiencias de la juventud española entre 1968 y 1986, un período que se conoce como la Transición entre la dictadura y la democracia. Argumento muy interesante, pero demasiado repetitivo para mí.
Aunque un poco largo y a ratos repetitivo, el texto es un excelente estudio, muy bien documentado, de las diferentes juventudes transicionales, las que vivieron el fin de la dictadura franquista y la restauración borbónica y el paso de las utopías del 68 a la cruda realidad de desempleo y marginación de los 80. Contra la nostalgia de una "Transición modélica", hechos y documentos, que se cargan las bondades del PSOE y de la Movida: "La Movida es a la ruptura estética lo que el PSOE a la ruptura política, es decir, un simulacro".
Una espectacular historia de la contracultura en la transición, de cómo «aquella creatividad fue reprimida y cooptada: política y cultura se dividieron e institucionalizaron mediante la Constitución de 1978 y la Movida de los ochenta».