"La brevedad característica de estos relatos fabulísticos está llevada al máximo en los ejemplos de la colección esópica, con su estilo austero y su ascética sencillez. Esta manera escueta de contar, que prescinde de los adjetivos y de todo lo accesorio, permite captar mejor la estructura lógica del relato, con su esquemática exposición." Carlos García Gual Entre los géneros literarios, la fábula se tiene por menor, debido a su brevedad y sencillez retórica. Sin embargo, el conjunto de fábulas atribuidas a Esopo (620-560 a.C.), protagonizadas por animales parlantes y marcadas por su intención aleccionadora, ha gozado de una popularidad y una vigencia enormes y han penetrado en el repertorio del saber tradicional. Aunque diversos autores reescribieron el corpus esópico durante la Antigüedad clásica, la Edad Media, el Renacimiento y el siglo XVIII, fue Esopo (sea o no un personaje histórico) quien fijó la estructura más perdurable de este tipo de relatos, poblados por animales de rasgos humanos como el mono vanidoso, el asno torpe o el astuto zorro. Traducción y notas de P. Bádenas de la Peña y J. López Facal. Introducción de C. García Gual. Revisada por J. López Facal y P. Bádenas de la Peña.
This credited ancient man told numerous now collectively known stories. None of his writings, if they ever existed, survive; despite his uncertain existence, people gathered and credited numerous tales across the centuries in many languages in a storytelling tradition that continues to this day. Generally human characteristics of animals and inanimate objects that speak and solve problems characterize many of the tales.
One can find scattered details of his life in ancient sources, including Aristotle, Herodotus, and Plutarch. An ancient literary work, called The Aesop Romance tells an episodic, probably highly fictional version of his life, including the traditional description of him as a strikingly ugly slave (δοῦλος), whose cleverness acquires him freedom as an adviser to kings and city-states. Older spellings of his name included Esop(e) and Isope. A later tradition, dating from the Middle Ages, depicts Aesop as a black Ethiopian. Depictions of Aesop in popular culture over the last two and a half millennia included several works of art and his appearance as a character in numerous books, films, plays, and television programs.
Abandoning the perennial image of Aesop as an ugly slave, the movie Night in Paradise (1946) cast Turhan Bey in the role, depicting Aesop as an advisor to Croesus, king; Aesop falls in love with a Persian princess, the intended bride of the king, whom Merle Oberon plays. Lamont Johnson also plays Aesop the Helene Hanff teleplay Aesop and Rhodope (1953), broadcast on hallmark hall of fame.
Brazilian dramatist Guilherme Figueiredo published A raposa e as uvas ("The Fox and the Grapes"), a play in three acts about the life of Aesop, in 1953; in many countries, people performed this play, including a videotaped production in China in 2000 under the title Hu li yu pu tao or 狐狸与葡萄.
Beginning in 1959, animated shorts under the title Aesop and Son recurred as a segment in the television series Rocky and His Friends and The Bullwinkle Show, its successor. People abandoned the image of Aesop as ugly slave; Charles Ruggles voiced Aesop, a Greek citizen, who recounted for the edification of his son, Aesop Jr., who then delivered the moral in the form of an atrocious pun. In 1998, Robert Keeshan voiced him, who amounted to little more than a cameo in the episode "Hercules and the Kids" in the animated television series Hercules.
In 1971, Bill Cosby played him in the television production Aesop's Fables.
British playwright Peter Terson first produced the musical Aesop's Fables in 1983. In 2010, Mhlekahi Mosiea as Aesop staged the play at the Fugard theatre in Cape Town, South Africa.
En esta reseña sólo hablo sobre las Fábulas de Babrio, pues ya hablé sobre las Fábulas de Esopo y la Vida de Esopo. Mientras que el estilo de Esopo parece enfocarse mucho más en la enseñanza que deja cada fábula, Babrio se enfoca (en algunos momentos) en el aspecto cómico de las situaciones que se desarrollan entre los animales. Terminando de manera abrupta, muchas fábulas llaman rápidamente a la reflexión, dejando enseñanzas que se han preservado en el colectivo cultural de Occidente hasta nuestros días.
Algunas fábulas buscan explicaciones últimas de fenómenos observables en el mundo, sustentándose en una ética primordial que para la época de Babrio ya habrá convivido con los sistemas filosóficos de la época. Muchos de los relatos de Babrio son nuevas interpretaciones de las fábulas originarias de Esopo, aunque muchas de ellas reciben pequeños cambios para ajustarlos mejor a la audiencia de la época (o al menos eso es lo que parece ser, habría que investigarlo más a fondo). Lo que es indudable es que leer este compendio de tres textos me ha generado muchísimas dudas, deseos de investigar y hambre por conocimiento. Es una excelente síntesis de uno de los primeros y más importantes géneros literarios del mundo Occidental.
No es la mejor literatura del mundo pero es un texto clásico a tener en cuenta para abordar la cuestión de la fábula, su doble rol de ser narrativa y retórica, y su lugar dentro de la literatura infantil.
La obra de Esopo fue recopilada primero por Demetrio de Falero, luego por Fedro, Babrio, Jean de La Fontaine y Félix María Samaniego. Las fábulas de Esopo pertenecen a lo que se denominó la época arcaica, éstas toman su fuente de los relatos populares y es considerada por algunos autores como una sátira. La estructura de la fábula esópica ha sido definida por varios autores entre ellos Nojgaard, quien distingue 3 elementos imprescindibles: 1) La situación de partida en que se plantea un determianado conflicto, entre dos figuras generalmente animales. 2) La actuación de los personajes, que procede de la libre decisión de los mismos entre las posibilidades de la situación dada. 3) La evaluación del comportamiento elegido, que se evidencia en el resultado pragmático, el éxito o el fracaso producido por tal elección. En sus fábulas hay una enseñanza moral, no una doctrina. Recogen experiencias de la vida cotidiana que forman un conjunto de ideas de caracter práctico.
La Vida de Esopo me ha sorprendido, como cuenta la introducción se observa bien el influjo que tiene la obra en literatura como el Lazarillo, es entretenida aunque de tanta reiteración en la picaresca de Esopo da ganas de tirarle de los pelos (nota 4/5)
En cuanto a las fábulas (tanto de Barrio como Esopo) la verdad es que no me han interesado demasiado, salvo por alguna que deja entrever la mentalidad de la época (nota 2/5)
La vida de Esopo está bastante bien pero no recordaba la simpleza de las fábulas tradicionales, no han conectado conmigo, y muchas de las moralejas me parecen forzadas o risibles. Y para más inri casi todas las de la parte de Babrio son cuasi repeticiones de las de Esopo
Las fábulas que a todos nos contaban de pequeños y muchas más. La liebre y la tortuga, la cigarra y la hormiga etc. Fábulas cortas que se pueden ir leyendo poco a poco. La versión que he leído es la comentada de la Biblioteca Gredos.
Una recopilación de estas fábulas qué fueron muy entretenidas. Me gustó que hubiera una introducción qué explicara el porque de estas fábulas y el hecho de que sean cortas me permitió dar pausas en la lectura.
Muy entretenido y recomendable. Tanto las fábulas como la video de Esopo.