Entre todos los personajes heroicos que protagonizaron nuestra Edad Media, sólo uno alcanzó fama y reputación europea; ese héroe es Rodrigo Díaz de Vivar, el llamado Cid Campeador. El Cid, el Tenorio y el Quijote son las tres grandes creaciones universales de la literatura española, aunque de estas tres creaciones literarias sólo una de ellas admite una biografía rigurosamente histórica.
Pero al lado del Cid Campeador de la leyenda y los cantares existió otro personaje de carne y hueso, el verdadero Rodrigo Díaz de Vivar, el magnate castellano que, desterrado de su tierra burgalesa, con sólo su espada supo crearse un principado en Valencia, tan importante o más que alguno de los reinos cristianos coetáneos. Es el hombre a quien Ibn Bassam, musulmán hostil al héroe castellano, calificaba de “milagro salido del dedo de Dios que llevaba la victoria clavada en su bandera”.
Al celebrarse este año de 1999 el IX centenario de la muerte de Rodrigo Díaz de Vivar queremos, lejos de la cidofobia de Dozy y la cidofilia del maestro Menéndez Pidal, rescatar aquí la verdadera figura de este héroe medieval, desnudo de leyendas y cantares, con los claroscuros de un caballero del siglo XI y ofrecer esta biografía construida únicamente con los testimonios históricos, tanto de cristianos como de musulmanes, que convivieron o pudieron convivir con el desterrado castellano.
Medievalista y sacerdote jesuita español, especialista en Historia del Derecho y miembro de la Compañía de Jesús desde 1942. Es licenciado en Filosofía por la Universidad Pontificia Comillas, en Teología por la de Universidad de Innsbruck, en Derecho Canónico por la de Estrasburgo, en Derecho por la de Valladolid y en Filosofía y Letras por la Central de Madrid, doctor en Derecho por la misma y en Derecho Canónico por la de Comillas.
Ha sido profesor desde 1958 en las universidades de Comillas y Complutense de Madrid, en la de San Sebastián y en la de Valladolid, catedrático de Historia del Derecho Español desde 1968 en la Facultad de Derecho de San Sebastián, como docente entre 1970 y 1973, y entre 1973 y 1989 en Valladolid, donde continuó como catedrático emérito hasta 1994. Fue docente en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid.
Es académico correspondiente de la Real Academia de la Historia y académico numerario de la Institución Fernán González. Ha sido miembro fundador de la Alianza Regional de Castilla y León y uno de los promotores del PANCAL.
Lo bueno del libro es que da lo que pide. Tiene una división de apartados cortos, que ayuda al lector a no perderse ante los constantes dimes y diretes del Cid por la península.
Personalmente, me gusta. Gonzalo Martínez Díez es directo y claro en la historia que quiere contar, en evitar la fantasía alrededor de la figura y en la división de las diferentes hazañas de Rodrigo.
Tiene una especial atención al apartado de la conquista de Valencia y para aquellos que desconozcan al Cid o cuyo conocimiento se limite a la película de Heston o la serie hecha hace un par de años, creo que puede dar bastantes datos sorprendentes.
Y es sorprendente la cantidad de información que saca del Libro Roderici. Prácticamente el 70-80% sale de esa fuente informativa.
Sinceramente, me parece una obra notable. Cumple su cometido y aunque ha sido desafiada (por decirlo así) con otros libros históricos que ponen otro enfoque al Cid, utilizando las mismas fuentes, me sigue pareciendo loable y notable.