¿Qué causas históricas han llevado a que buena parte de la izquierda española asocie la idea de España con el franquismo, rechazando por tanto el asociarse con dicha idea, e incluso con defender la nación española como proyecto de izquierdas? La respuesta a esta pregunta conlleva realizar un análisis tanto de la Historia de España como de los avatares que el marxismo ha sufrido desde su entrada en el país en el último tercio del siglo XIX hasta nuestros días. Este libro sostiene que el rechazo de gran parte de la izquierda hacia la idea de España tiene que ver con la nula existencia de un marxismo propiamente español y, por extensión, en español. Y la ausencia histórica de un marxismo español, que tiene causas históricas muy concretas, explica por qué la cuestión nacional española no se ha resuelto desde las izquierdas, particularmente las de raíz marxista, que han acabado derivando hacia derroteros federalistas, confederalistas, plurinacionales o directamente independentistas que no tienen conexión alguna ni con la doctrina de Marx sobre el Estado y la nación, ni con los desarrollos posteriores, inspirados en él, de Engels, Lenin y Stalin. Los textos de estos autores, junto a los de Rosa Luxemburg, fueron traducidos muy tardíamente, cuando la asociación de la idea de España con Franco estaba ya consolidada. El marxismo y la cuestión nacional española analiza las causas históricas que han impedido la construcción del marxismo español, la resolución de la cuestión nacional española desde el marxismo y la asociación entre la idea de España y el franquismo. Pero también ofrece a los lectores la auténtica doctrina marxista-leninista sobre la nación, en base a los autores ya mencionados y a sus textos más importantes sobre este asunto, incluidos los de Marx y Engels sobre España. Y aporta, también, caminos políticos prácticos que ayudarían al marxismo español a actuar de cara al futuro en torno a una nación, España, a la que no debería rechazar sino apropiarse.
Este libro es un "must" para cualquier comunista. Aunque Armesilla es un personaje peculiar por su polémicas en redes, en su libro analiza y explica muy bien la importancia de la cuestión nacional en España. Tiene alguna que otra afirmación un poco pueriles, pero no le quita méritos al resto del libro. Si eres aficionado a la historia de España también es recomendable. Nota: 9/10.
Hay casos en que la valoración de un libro ya no es suficiente hacerla mediante una serie de puntos o estrellas en una escala. Este libro es uno de ellos. Por descontado el libro está bien escrito y la materia explicada con rigor y amenidad, dentro de la dificultad que entrañan algunos capítulos densos y académicos.
Pero en ciertas ocasiones la importancia del libro trasciende el valor literario en sí. En estas páginas se encuentran argumentos filosóficos, políticos e históricos suficientes -sino para convencer, al menos para hacer pensar seriamente al lector español e hispano-americano acerca de realidad política en la que vivimos. El autor propone al ciudadano español un plan de nación. A algunos les puede gustar el nombre con que dicho plan se define y a otros puede no gustarles, léanlo de todas maneras y no se preocupen por el color del gato. Yo a mi edad solo me preocupo de si caza ratones.
Es un libro esperanzador, lo cual me ha sorprendido mucho, pues yo veo a España como un cadáver. ¿Es posible que este vivo realmente? Quizás sea yo pesimista. En cualquier caso le deseo al autor lo mejor, y al cadáver de la nación española, si puede resucitar, que lo haga, pues. Sentirse español es, desde hace ya algunas generaciones, como sentirse ciudadano soviético. Un espíritu sin cuerpo en donde reposar.
Cualquier plan político que consiga hacer resucitar a mi patria (la única patria que un gallego pueda tener) recibirá mis bendiciones. He sido conservador, liberal, anarco-capitalista... todo es vanidad. Sólo me queda la fe en Cristo. Hágase el milagro. Y si hemos de ser comunistas no se me caerán los anillos.
El autor intenta analizar la cuestión nacional española desde el marxismo, pero lo único que logra es trocear y mecanizar el Marxismo para justificar una agenda claramente idealista/chovinista