Una historia de amor tierna y conmovedora por un maestro de la prosa castellana. Las historias de Marta y Fernando narra, a través de varios episodios de la vida amorosa de unos jóvenes, la historia de una relación en sus detalles más íntimos y en su significado más hondo. Marta y Fernando viven, como todos los enamorados, en un universo propio, hecho de claves secretas, deseos medio esbozados, encuentros y desencuentros. Con extrema delicadeza, Martín Garzo va desvelando las múltiples facetas que constituyen los avatares de la vida en pareja.
Gustavo Martín Garzo casado con Esperanza Ortega. Nacio el 13 de Febrero de 1948 en Valladolid. Su labor como narrador y ensayista le ha convertido en una de las voces mas prestigiosas de la literatura española de estos ultimos años. De la extensa lista de titulos publicados cabe destacar El lenguaje de las fuentes, que obtuvo el Premio Nacional de Narrativa en 1994, Marea oculta, Premio Miguel Delibes en 1995, La princesa manca, La vida nueva , na y Bel, El pequeno Heredero, Las historias de Marta y Fernando, Premio Nadal en 1999, La sonadora (2002), y Los amores imprudentes, que se publico en 2004. Ese mismo ano el autor fue galardonado con el Premio Nacional de literatura infantil y juvenil. Con Mi querida Eva, publicada en 2006, se inauguro la Biblioteca Martin Garzo en Lumen, donde han ido apareciendo los titulos destacados de su produccion literaria
Estamos ante una obra aparentemente sencilla, pero cargada de pulsiones, de vida subterránea, de poesía. Bajo esa forma de cotidianidad se esconde la vida misma con todo su peso, su trascendencia, su humanidad y, al mismo tiempo, su espiritualidad.
Me ha recordado al cine de Víctor Erice. Comparte temas, estética (cada uno con su medio, claro; me refiero a ese mundo complejo bajo la imagen y la descripción, o bajo las palabras). Luego también pensé en Pavese, en que pienso en Martín Garzo como una evolución de Pavese. Es un Pavese de hoy. Esa idea la confirmé luego, una vez acabada la novela, al buscar algún texto sobre Martín Garzo y encontrar que se habla de los personajes arquetípicos de sus obras. Y bien, ya se sabe que Pavese se maneja en ese mundo en que personajes, lugares y hechos concretos tienen su vínculo en algo que les sobrepasa, que está por encima, y que lo convierte todo, dentro de su modernidad, en algo antiguo y universal.
Qué fácil hace Martín Garzo entrar en asuntos tan difíciles. Es todo un mérito. Me quedo con eso. Ah, y que ante esas páginas te das cuenta realmente qué mal escribimos, o por lo menos que podríamos escribir mejor. Es el mejor castellano que puede leerse ahora: claro, conciso, puro, sin adornos cargantes. Para educarse.
No me ha quedado claro si Marta está más enamorada de Fernando o Fernando de Marta, pero turnarse para sufrir la vulnerabilidad de ser el que más ama tampoco está tan mal.
Terrible lectura, Las historias de Marta y Fernando, es un libro que demuestra que los premios literarios en mi país, España, son una completa y absoluta estafa. Y es que tras su lectura me queda clarísimo que ningún jurado que se precie podría haber votado por semejante bodrio si no hay recompensa de algún tipo.
Es decepcionante ver como un buen escritor como Gustavo Martín Garzo ha logrado escribir un libro tan penoso como este. Y es que pocas veces he leído una obra tan pesada pero tan bien escrita. El estilo de escritura de Garzo es sencillo, profundo y con una ejecución aceptable que se apoya en una prosa lenta, pesada, en extremo artificiosa y con un desarrollo que deja mucho que desear, un lenguaje funcional con algún lirismo exagerado que acentúa la pedantería de la obra y unas descripciones muy mejorables en su mayoría. Pero caso aparte son los personajes. La pareja protagonista, Marta y Fernando, son un ejemplo de construcción nefasta de personajes. Salvo los nombres no conoces prácticamente nada de ellos. No comprendes sus acciones, y llegado un momento, no te preocupa lo más mínimo conocerlos.
Vamos a empezar dejando claro algo. Las historias de Marta y Fernando no es una novela al uso, si no más bien una compilación de relatos que tienen como protagonista a este par de individuos. Se supone que Marta y Fernando están casados. Son una pareja joven en algún punto de la España de los años 70 u 80. Pero sinceramente no me lo creo. Y es que además de ir a cenar y follar no hacen nada más juntos. Parecen más bien compañeros de piso con derecho a roce que otra cosa. Y entremedias, asistimos a un muestrario de discursos pedantes, cuentos delirantes y situaciones profundamente estúpidas. Así que cuando terminas esta lectura no puedes dejar de sentirte aliviado. Y es que el final es igual que el principio, absurdo, abierto y abrupto.
En suma, Las historias de Marta y Fernando, es una lectura aburrida que muestra un tipo de relación irritante y estúpida que hay que evitar emular. Y es que el tándem pija guapa e intelectual fracasado está pasado de moda. Mi consejo es que evitéis esta novela como si de la Peste se tratara. Da igual cual sea la historia de Marta y Fernando que te cuenten. Seguro que te aburre tanto que consigue dormirte.
Marta y Fernando no son más que una pareja que vive a finales del siglo pasado con intención de perduran al comienzo de este. Son de hoy, quizá ya de un ayer cercano, y sienten y viven de esa forma tan distinta y a la vez tan igual que viven todas las parejas. No hay nada nuevo bajo el sol que dijo el otro. Y así el mérito del autor está en crear unas historias coherentes y consistentes. Marta y Fernando en su simplicidad se dejan leer e incluso se dejan acompañar por cualquier lector sutil. www.preferirianotenerquehacerlo.wordp... www.enbuscadeaquellanoche.wordpress.com
Qué gusto da toparse con un libro, sin querer, ir sin expectativas, dejarte extrañar (no tanto sorprender, pero sí extrañar). Cuando lo compré lo hice sin querer (queriendo coger otro libro con un diseño IGUAL). Nunca me había pasado. Me hace poner fin al verano.
Los dos protagonistas Marta y Fernando, se enfrentan al día a día, como muchas parejas jovenes que empiezan su vida juntos, sus alegrias y sus desengaños.Su lectura me resultó bastante caótica y por ello no logro engancharme del todo, aunque es de resaltar la forma de narrar de este autor.