Rodeado del bullicio de las numerosas familias que veranean en el concurrido Hotel Argentina, en Dubrovnik, Viktor Askenasi, respetado profesor del Instituto de Estudios Orientales de París, soporta a duras penas la asfixiante canícula de la costa dálmata. Cercano a la cincuentena, el profesor ha emprendido un viaje en solitario por el Mediterráneo movido por una inquietud que lo perturba desde siempre y que lo llevó, unos meses antes, a dar un vuelco radical a su vida. Pese a haber descubierto un reducto de libertad, y estar dispuesto a asumir las consecuencias de sus actos como un paso ineludible en el camino hacia la plenitud, Viktor constata que esa libertad tiene otra cara imprevista que lo sume en el desconcierto. Así pues, atormentado por la duda, en un arrebato llama a la puerta de la mujer desconocida con la que acaba de cruzarse en el vestíbulo del hotel, sin saber si del otro lado del umbral lo aguarda la penumbra de la locura o la luz de la verdad.
Publicada en 1934, La extraña es una de las novelas más redondas de Sándor Márai; un texto breve y vibrante que narra un viaje hacia lo más recóndito del alma humana. Márai mantiene sin titubeos la tensión de un relato sobre la ambigüedad del amor, la angustia de la incertidumbre y el abismo de la soledad. Su inolvidable protagonista, Viktor Askenasi, es un hombre en busca de respuestas, un espíritu insatisfecho para quien lo que llamamos amor conduce apenas a una felicidad transitoria, antesala de la inevitable destrucción.
Sándor Márai (originally Sándor Károly Henrik Grosschmied de Mára) was a Hungarian writer and journalist. He was born in the city of Kassa in Austria-Hungary (now Košice in Slovakia) to an old family of Saxon origin who had mixed with magyars through the centuries. Through his father he was a relative of the Ország-family. In his early years, Márai travelled to and lived in Frankfurt, Berlin, and Paris and briefly considered writing in German, but eventually chose his mother language, Hungarian, for his writings. He settled in Krisztinaváros, Budapest, in 1928. In the 1930s, he gained prominence with a precise and clear realist style. He was the first person to write reviews of the work of Kafka. He wrote very enthusiastically about the Vienna Awards, in which Germany forced Czechoslovakia and Romania to give back part of the territories which Hungary lost in the Treaty of Trianon. Nevertheless, Márai was highly critical of the Nazis as such and was considered "profoundly antifascist," a dangerous position to take in wartime Hungary. Marai authored forty-six books, mostly novels, and was considered by literary critics to be one of Hungary's most influential representatives of middle class literature between the two world wars. His 1942 book Embers (Hungarian title: A gyertyák csonkig égnek, meaning "The Candles Burn Down to the Stump") expresses a nostalgia for the bygone multi-ethnic, multicultural society of the Austro-Hungarian Empire, reminiscent of the works of Joseph Roth. In 2006 an adaptation of this novel for the stage, written by Christopher Hampton, was performed in London. He also disliked the Communist regime that seized power after World War II, and left – or was driven away – in 1948. After living for some time in Italy, Márai settled in the city of San Diego, California, in the United States. He continued to write in his native language, but was not published in English until the mid-1990s. Márai's Memoir of Hungary (1944-1948) provides an interesting glimpse of post World War II Hungary under Soviet occupation. Like other memoirs by Hungarian writers and statesmen, it was first published in the West, because it could not be published in the Hungary of the post-1956 Kádár era. The English version of the memoir was published posthumously in 1996. After his wife died, Márai retreated more and more into isolation. He committed suicide by a gunshot to his head in San Diego in 1989. Largely forgotten outside of Hungary, his work (consisting of poems, novels, and diaries) has only been recently "rediscovered" and republished in French (starting in 1992), Polish, Catalan, Italian, English, German, Spanish, Portuguese, Czech, Danish, Icelandic, Korean, Dutch, and other languages too, and is now considered to be part of the European Twentieth Century literary canon.
Víctor Azkenasi, profesor en París hace su proceso de crisis a los 47 (o 48) años, sintiendo que su vida no ha sido más que una suma de esclavitudes y represiones.
Como parte de su intento por remediarlo, hace un viaje a un balneario del Adriático, donde abre una puerta que lo lleva al umbral de la comprensión, de la satisfacción, que se parece mucho a la locura.
Questi sono i romanzi di Márai Intricati fino alla fine, pieni zeppi di elucubrazioni mentali e di domande a cui è quasi impossibile rispondere o forse che nessuno si pone davvero Lui riesce sempre a darti delle chiavi di lettura, a farti riflettere su tematiche importanti e anche inquietanti. Mette nei suoi libri personaggi che se incontrassimo nella vita reale forse non degneremmo di uno sguardo o che giudicheremmo davvero male, ma mentre li leggiamo, pur condannandoli, li capiamo, li giustifichiamo quasi. Non so come ci riesca ogni volta, ma i suoi scritti somigliano sempre a delle armi cariche puntate verso la nostra coscienza, verso il nostro ego e verso tutto quello che non diciamo di noi perché in fondo ci fa paura.
La novela se inicia con la descripción de un balneario croata venido a menos, que en otro tiempo gozó de mejores esplendores pero que, en el momento de la acción, acoge a turismo de masas, una forma descolorida de los elegantes viajeros de siglos anteriores. Cuando se centra en el protagonista, un profesor de lenguas orientales de 47 años, también descubrimos que es una especie de galán venido a menos, un hombre de clase media atrapado en un matrimonio que ha perdido su sentido y que tiene una aventura extra-conyugal que en absoluto reviste los brillos del romanticismo del siglo XIX.
Lo que viene a continuación es la historia de un colapso nervioso. Sosteniéndose en el modelo de novela dostoyevskiano, el personaje es la trama, en la parte central se nos explica los pormenores y desencantos de esa vida de clase media y sus fugas, hasta que desemboca en un hecho oscuro en dicho hotel, hecho por cierto nunca descrito de forma explícita, menos todavía gráfica.
Lo que creo que Márai intenta ensayar es lo que años después Beckett logró. Ese discurrir hasta el colapso se sostiene en hechos y escenas muy tenues, miniaturas ya muy conocidos de la novela galán centroeuropea (digamos al estilo de Schnitzler o Fontante), que la prosa de Márai detalla de forma muy minuciosa, tanto que la lectura se vuelve morosa y a mí me despertó más pereza que exaltación. En todo caso todo lo que explica a la vez viene impregnado de cierta sabiduría, quizá ese proceder tan sumamente meticuloso no le beneficia a la obra y no me acabó de encajar.
En todo caso, en la valoración global, me pareció un libro estimable. Retrata algunos rasgos de la mentalidad europea de entreguerras y, en una parte final que está entre lo más jugoso del libro, pretende ahondar en las zonas más oscuras de la mente, escarbando hasta alcanzar los cimientos mismos del raciocinio.
“Non esiste alcun fine. È questo l'aspetto divino, grandioso della concezione, questa mancanza di scopo”
In mezzo ai turisti in viaggio da Parigi alla Grecia c’è anche il professor Askenasi, in cerca di riposo. Una delle tappe si rivela per il professore un luogo fondamentale per il proprio destino e per la propria esistenza. La tranquillità del posto di villeggiatura si contrappone alla continua sensazione di “aver dimenticato qualcosa” e all’incapacità di trovare la parola giusta per esprimerla. Lentamente ad Askenasi tornano alla memoria un’avventura con una ballerina più giovane di diciassette anni, che aveva minato gli equilibri della sua vita, l’abbandono della moglie e della propria casa, il dissenso pubblico e l’ammirazione dei colleghi e dell’ambiente accademico durante i mesi della passione. Ma cos’è che gli manca, cosa ha dimenticato?
Al termine del romanzo, su un’isola deserta, dopo un epilogo cruento, c’è la resa dei conti con sé stesso. Il professore riesce a farsi delle domande esistenziali, senza però riuscire a trovare risposte: cos’è veramente l’amore? Come si concorda l’amore con la felicità? È possibile una vita felice?
“Ma che strani movimenti, i movimenti dell'amore! Per chi li osservi da fuori, che cos'altro può essere questo mordersi, abbrancarsi, afferrarsi per il collo, questo disperato battere con i pugni, con le unghie e con i denti sulla porta chiusa, questo rabbioso frugare in un corpo estraneo, che cos'altro può essere se non una grande scena di collera, una punizione, una resa dei conti?”
Un libro complesso, con una scrittura scorrevole anche se lenta. Un libro complicato, pieno di temi esistenziali non facili e che conducono verso verità non scontate e comunque soggettive, un libro sull’incomunicabilità.
“La gente si accontenta della superficie, di quei segni convenzionali che può scambiarsi senza pericolo, dell'assaggio, e resta assetata per tutta la vita”
Uno de los escritores que mejor retratan los detalles de cada personaje y hacen de una ambientación literaria, una experiencia vívida y única. En eso, Márai es un maestro. En este libro en particular puedo resaltar el primer capítulo y el último cuarto. Simplemente magistrales. Esos bloques finales fueron moralmente profundos, pedregosos y maravillosos.
Sandor Marai es un señor escritor. Siempre sabe como meterse en las sombras del alma humana, sabe entrar en sus rincones más reconditos para contar historias memorables o, como en el caso de la extraña, terribles. La historia de la destruccion de un hombre, que al parecer tiene su vida resuelta es buenísima, o la decadencia de su espiritu, como se va rompiendo poco a poco, y alejando de sus sentimientos para adentrarse en sus sombras. Me encantó. Adoro a Marai!!!
Me encantó «La herencia de Eszter» por eso he querido continuar leyendo otras obras de Márai. «La extraña» me ha supuesto una decepción porque no me esperada una historia tan densa y existencialista.
No me importa que la novela se base íntegramente en los pensamientos de un personaje mientras que me interesen y sobre todo que los entienda. Me ha costado mucho pillarle el punto la historia y a lo que quería transmitir el autor. Si no conecto con la historia o el personaje no hay nada que hacer.
Hat mir gar nicht gefallen… Eine zunehmend verwirrte/verwirrende Geschichte über einen Philologie-Professor, der in den Ferien in Dubrovnik von seiner Vergangenheit heimgesucht wird, von den Erinnerungen an die Trennung von seiner Frau und die Liebschaft mit einer mysteriösen Russin und sich in immer enger kreisenden Gedanken über den Sinn des Lebens und der Frage nach der richtigen Befriedigung verliert, bis er schliesslich einen für mich überhaupt nicht nachvollziehbaren Mord begeht und in den Wahnsinn abrutscht.
This entire review has been hidden because of spoilers.
Em A Ilha, Sándor Márai apresenta-nos um texto conciso, intenso e perturbador que narra a dupla viagem do protagonista, Viktor Henrik Askenasi. A real, de Paris a uma estância balnear do Adriático e a interna, a dos questionamentos e reflexões que culmina no encontro de Askenasi com o destino.
O autor é exímio na descrição minuciosa dos estados de alma, dos pensamentos e das reflexões que conduzem o ser humano ao mais profundo do seu íntimo. A sua escrita torna-se visceral, de tal forma que inculca ao leitor as angústias, as dúvidas, bem como as decisões de Askenasi. De forma intensa e marcante, o leitor vive a mesma ansiedade na busca incessante da felicidade e questiona a felicidade temporária, previsível, rotineira e a sensação de vazio.
"Recordava-se feliz do trabalho feito, tinha cumprido praticamente todas as suas obrigações, tinha vivido conforme as exigências das circunstâncias e sociedade, apenas depois tinha seguido uma vida distinta, orientando-se com os instrumentos do corpo, e agora não tinha mais nada para fazer do que procurar a resposta à pergunta (…) Porque é que não conseguia encontrar satisfação? Ainda faltava dar resposta a essa pergunta. Considerou humilhante ter sucumbido de uma forma tão ridícula, e agora tinha que vaguear pelo mundo à procura da resposta noutras mulheres, tentar descobrir respostas parciais nos livros, perguntar a outros homens. «De pouco me serviram os métodos», pensou maldisposto.” (p. 103)
Askenasi aos 48 anos atravessa uma crise. Aconselhado por amigos e colegas, decide empreender uma viagem para recuperar e sobretudo encontrar as respostas às dúvidas que o assolam e que o tornam insatisfeito, ansioso e irritado. Cansou-se da mulher Anna; Fugiu de Eliz a amante sensual e duvidosa que lhe devolveu a liberdade e a felicidade perdida com o casamento e o levou a romper com as regras estabelecidas da sociedade burguesa e conservadora em que se movimentava.
“Lembrou-se de que amara muito Anna, de tudo o que tinham feito juntos nos primeiros anos de casamento, naquele quarto quando ainda «eram desconhecidos um para o outro» e existia um certo mistério entre eles. Quando desapareceu o mistério começou o pudor.” (p. 78);
"Já levava três meses que Askenasi vivia com a mulher desconhecida [Eliz], quando começou a notar com surpresa que a felicidade ou o prazer, ou seja, aquele estado anímico extraordinário que se costuma considerar como a única recompensa pelos sofrimentos terrestres, na realidade era muito pouco parecido com aquilo que havia imaginado. O que estava vivendo era sem dúvida felicidade, mas às vezes parecia-lhe que era um estado incómodo, complexo e, no fim de contas, pouco agradável. (…) Começou a compreender que a felicidade não se podia considerar uma propriedade privada que se adquire de um momento para o outro, com uma herança da qual, posteriormente, só é preciso cuidar e evitar que seja roubada ou perca o seu valor. Tinha que a descobrir em cada meia hora, em cada minuto; manifestava-se sem aviso e, em termos gerais, era mais cansativa e irritante do que agradável e tranquilizadora.” (p. 81)
Como escreveu Saramago “É preciso sair da ilha para ver a ilha. Não nos vemos se não saímos de nós.”, também Askenasi precisou de encontrar a sua ilha para perceber a sua solidão e entender o seu destino.
Not my book, sorry. Sentences that were too long-winded and let my mind wander and then reread and reread until I grasped them; a plot that bored me and wasn‘t executed well in my opinion; too little details to really care. Probably my laziness is at fault too though, I could not be bothered to really dive deep into the text. (Blame the heat!) Such a shame, as I loved the opening sentence and also chapter, and read this book during my Hungary-holiday, in the hopes that it would be set in Hungary as well (as the author is Hungarian etc) and make the experience more immersive. I hope someone on Ebay will want to buy it off me haha.
Un gesto aberrante diventa, per Askenasi, l’unico modo per recidere di netto il destino che gli è stato cucito addosso: un atto estremo e paradossale con cui tenta di riprendersi la propria vita uscendo finalmente dal copione
Un señor insatisfecho de su vida le busca sentido a través de diferentes mujeres a las que utiliza como instrumentos. Y se lo encuentra cuando asesina a una de ellas siguiéndolaa su habitación del hotel para lo que empieza como una aventura con una extraña.
Toda la historia se centra en su insatisfacción y sus sentimientos, que son los importantes. Las mujeres, en tanto que instrumentos, son meros objetos y sus aspiraciones vitales inexistentes o menores.
Estaría bien si fuera una denuncia de algo, pero no parece ser más que la historia del protagonista, pobre hombre, como sufre, abandonando a su mujer por una amante y luego asesinando a otra mujer para darle sentido a su vida.
This entire review has been hidden because of spoilers.
Sandor Marai escritor húngaro que consideró se encuentra entre la crema y mata, es decir nivel superior, lo que implica que a veces sus escritos no son fáciles de entender, pero en un muy buen sentido de la palabra, ya que te permite ir construyendo un mundo que puede ser totalmente distinto al que construyó otro lector, esa es la magia de un escritor de tal calidad.
Hay muchos similitud entre la pluma de este escritor y otros igual de excelentes como Stefan Zweig o Thomas Mann, son los que hacen que uno siga teniendo fe, en que mas allá del entretenimiento, la literatura sigue siendo una forma de arte, por que te permite a veces conectar o sentir emociones que no se pueden explicar, que toma tiempo analizar y esa es la magia que debe lograr un escritor, de esos que se vuelven universales y atemporales.
Esta novela sucede en muchos escenarios, desde un hotel decadente para turistas en iguales condiciones, hasta en una iglesia, por los distintos escenarios vamos acompañando a un hombre roto, a sus 47 con trabajo estable, hace lo que le gusta, mujer, hija, salud, resulta que anda buscando el sentido de la vida, de una forma muy peculiar.
A través de estas andanzas va perdiendo de una manera voluntaria, constante y enfermiza todo lo que tiene, se aferra de sus placeres hasta que descubre que ya no son más, sus placeres, que esa respuesta que anda buscando no llegará, y no sabe si porque planteo mal la pregunta o simplemente porque no existe ese sentido tan buscando.
Varias lecturas requiere esta novela, pero cada una vele muchísimo la pena, y por ahí nos devela un poco del misterio de la humanidad o por lo menos de un solo hombre.
Tiene muchas frases rompedoras, como:
“La imperfección del ser querido no mitiga el dolor de su pérdida.”
Excelente novela, compleja y absolutamente fascinante. En ella Marai se adentra con maestría en los aspectos más intrincados de la condición humana y la eterna búsqueda de sentido, lo hace a través del personaje Askenasi un hombre que cerca de los 50 años se encuentra en una crisis existencial que lo llevará a límites insospechados en búsqueda de la respuesta a esa pregunta que muchas veces no sabemos siquiera como formular. Es una novela difícil de encasillar, donde el lenguaje es exuberante y se maneja el suspenso de forma magistral, con un tono introspectivo que nos lleva a reflexionar junto con el personaje sobre las principales cuestiones de la naturaleza humana. Me recordó en muchos aspectos a la obra de Camus "el extranjero" con la cual guarda similitudes no sólo en la historia sino en el tono narrativo aunque cabe destacar que dicha obra fue publicada en 1942 mientras que la Extraña (cuyo título en húngaro en realidad es La Isla, mucho más sugerente y descriptivo del contenido de la obra que el que la editorial terminó eligiendo para la publicación en español) fue publicada en 1934.
Entrar dins de L'estranya costa. Ens trobem davant d'una història introspectiva d'un home benestant a punt de fer els 50. El que sembla una crisi personal com qualsevol altra acaba essent una crisi existencial d'un home insatisfet, un viatge tan introspectiu dins del seu ésser que inquieta. I el personatge de l'"estranya" és el desencadenant, una dona que l'ajudarà a respondre a una pregunta que ni el mateix protagonista no sap formular i que acabarà evocant-lo un diàleg amb el mateix Déu.
Es tracta d'una novel·la molt ben escrita que ens fa reflexionar sobre què tenim i on volem arribar, què fem en aquesta vida i amb quin propòsit ho fem. No és una novel·la senzilla, però crec que bastant imprescindible pel treball introspectiu que ens evoca i per conèixer escriptors de gran valor que no van tenir una vida gens senzilla.
A pergunta sobre a identidade de si mesmo é um topos recorrente da literatura ocidental. Um romance é o dispositivo tecnológico que se inventou para se observar o homem em busca daquilo que é, em busca da sua identidade. Não se trata, claro, de especular sobre o self, mas de o ver em acção, de observar a gesta que conduz ao reconhecimento. Raramente, porém, reconhecimento e reconciliação vão a par. É o que se passa também em A Ilha, um romance do escritor húngaro Sándor Márai publicado em 1934 e traduzido em 2012 para português.
Depois de "As velas ardem até ao fim", confesso que a expectativa estava muito alta e a desilusão foi grande! Um livro distante, introspectivo e vago, que não me prendeu nem ao enredo nem à história. Askenasi merecia mais
Já não lia Sándor Mária há bastante tempo e a Maratona de Inverno em que estou a participar no grupo "A Ler é que a Gente se Entende" foi a desculpa ideal para finalmente pegar num livro de um dos autores que mais aprecio. Há 7 anos que não lia um livro do autor! Que eternidade.... por isso é que achei algo estranho regressar à sua escrita, que me lembrava ser deliciosa mas lenta, profunda e complexa. Uma escrita que tem que ser absorvida em diferentes momentos e não de uma vez só. A escrita de Sándor esconde nas entrelinhas interpretações escondidas que não são imediatas e que merecem a sua devida reflexão.
Este é um livro pequeno, apenas com centena e meia de páginas que se lê num ápice mas que não é uma leitura para ser apressada. No início da minha leitura, com tantas saudades que tinha, erradamente comecei a leitura um pouco sôfrega mas rapidamente vi que não estava a resultar, porque existiram passagens que nem absorvi ou compreendi bem e tive que voltar várias vezes atrás, para garantir que percebia o enredo. Nestas primeiras páginas, confesso que tive alguma dificuldade em perceber efetivamente sobre o que esta história falava, porque a narrativa não me parecia cronológica, mas existiam poucos detalhes (e os que existiam eram vagos) e andei ali algumas páginas perdidas. Voltei atrás e comecei a ler tudo de novo mais devagar. Creio, ainda assim, que existem alguns detalhes que poderiam ser aprimorados na narrativa - tanto o espaço como o tempo são algo vagos, confusos...
Ao voltar atrás e recomeçar, creio que a leitura se desenrolou de forma diferente. Viktor, atualmente com 48 anos, é uma personagem com diferentes camadas para descobrir, é uma personagem altamente complexa e vive perturbado por uma questão que o assola há anos e para a qual ainda não conseguiu obter uma resposta satisfatória (como todos os personagens de Sándor que já conheci). Na tentativa de dar resposta a essa pergunta, acaba por tomar diferentes decisões que mudarão o rumo da sua vida. Deixa a sua mulher e filha para trás, por exemplo, e inicia um romance com uma bailarina que conhece na rua. Pensa que é através desta relação que irá encontrar a resposta para A pergunta que lhe assola o espírito, mas algum tempo depois percebe que não e também a deixa.
Apesar de ter sido feliz em alguns momentos, de ter sido criticado pela sociedade, pelos amigos e pelos seus colegas de trabalho, Viktor demonstra estar completamente deprimido com o rumo da sua vida e, por tal, decide partir numa viagem para encontrar tranquilidade. Esta viagem irá mudar completamente o rumo da sua vida.
Achei esta história um relato sério, triste, profundo e até algo assustador, para ser completamente honesta. Viktor é uma pessoa que há anos procura respostas para perguntas que não consegue decifrar, levando-o a um estado de depressão total com o qual ele não tem capacidade para lidar ou sequer perceber e não tem as ferramentas certas para melhorar. O final do livro surpreendeu-me, .
É um livro, na minha opinião, sobre aprender a lidar com estar sozinho e um livro sobre o amor: o que é o amor, as suas incertezas, as suas inconsistências e as suas dúvidas, um livro sobre o significado da vida, sobre identidade indiviual. Gostei muito.