Hace miles de años que la humanidad ha perdido la capacidad de soñar. En su lugar, ha averiguado cómo extraer los sueños de los pocos que aún consiguen hacerlo para venderlos al mejor postor o prefabricar cápsulas a un precio más asequible. Y en el principado de Zephanis se concentra una de las mayores redes de tráfico de sueños del mundo. Shoana es una ladrona con un pasado sombrío y un presente miserable en la zona baja de la ciudad; Leiza, una célebre soñadora con un porvenir brillante y una vida llena de comodidades. Los caminos de ambas se entrelazarán cuando, una mañana, Leiza descubra que su peor pesadilla se ha hecho real: ha dejado de soñar a tan solo unos días del acontecimiento más importante del año: la competición de El Imperio del Sueño.
Laura Tárraga (Alcoy, 1994) se dedica a madrugar para enfrentarse al mundo.
Lo primero que hace al despertar es darle un achuchón a sus gatos y, después, sentarse a escribir.
Entre la pila de novelas que tiene escritas puedes encontrar cuatro publicadas: la Bilogía Infortunium (2017); El Imperio del Sueño (Nocturna Ediciones, 2018), Entre vidas (2019) y la bilogía Actuar o Morir (Freya Ediciones, 2021).
Además de estos, le ha dado por escribir sobre clichés románticos en una serie de relatos gratuitos que solo están disponibles por tiempo limitado, entre ellos están: «El café más caro de Navidad» y «El café más frío de San Valentín».
¿Quieres saber algo más? Además de escritora es editora, turismóloga, copywriter, podcaster… —de titulitis va bien—… es mentora y profesora en su propia plataforma: Literatura juvenil para escritores.
En Zephanis, los sueños de la gente es lo que hace ricos a unos, y se convierte en un método para sobrevivir un día más para otros. En una sociedad dirigida por la riqueza económica de las personas, Shoana vive en la zona baja, la más pobre y desfavorecida, viviendo día a día como ladrona de sueños para poder revenderlos y, así, poder tener algo que llevar a la boca de su familia. Por su parte, Leiza es una soñadora, una chica que pertenece a una de las familias que han seguido con esa herencia año tras año, una chica que gana mucho dinero y que es reclamada allá por donde va. Sin embargo, la vida de ambas se cruzarán, a pesar de sus diferencias, cuando Shoana empiece a soñar, algo impensable para ella ya que hace tiempo que en su familia se dejó de hacerlo, y cuando leiza, esa soñadora a la que todo el mundo aclama, la que tiene miles y miles de seguidores, viva en sus propias carnes el miedo de vivir en un mundo sin sueños. La misión de ambas, que Leiza pueda seguir siendo la misma sin levantar sospechas. Pero Shoana no está dispuesta a relucir sus peores miedos, su pasado, uno turbio y oscuro, doloroso y desgarrador, que pretende olvidar a toda costa aunque se reproduzca todas las noches como pesadillas. Shoana y Leiza se meterán en una aventura peligrosa, en el que cualquier paso en falso puede suponer su descubrimiento y su detención por parte de la justicia. Pero Shoana pronto tendrá que hacer frente a aquello que más teme cuando descubre que, la persona a la que lleva evitando años, está más cerca de lo que cree. Y, quizás, con ello la vida de Leiza y su situación actual pueda hacerle perder todo lo que había construido hasta ahora.
El Imperio del Sueño es el nuevo libro de Laura Tárraga, un autoconclusivo cobre la importancia de los sueños y, sobre todo, sobre la importancia de la familia, la unión, la valentía y el enfrentarse a esos miedos que nos mantienen encarcelados tantísimo tiempo. Siendo Shoana y Leiza las narradoras principales, el libro, siempre usando la tercera persona, también introducirá de manera breve a un tercer narrador cuyo nombre no os voy a decir ya que eso lo tenéis que descubrir por vuestra propia cuenta. Así pues, el libro empieza con nuestras dos protagonistas, cada una narrando un capítulo, introduciendo de manera exacta todo el mundo en el que nos vamos a meter, esa zona baja, residencia de Shoana, que nos hará ver cómo se vive allí, las diferencias sociales que existen en comparación con las otras zonas más altas que la suya, una vida precaria, difícil y con muchas piedras por un camino incierto. Siguiendo con esa manera directa de describir y narrar las cosas, también veremos cómo es la zona alta, la más exclusiva, y cómo se mueve eso de los sueños, siendo una primera parte del libro la mar de interesante, conociendo todo el mercado y el dinero que mueven los sueños, así como la vida de esta sociedad futurista que se nos presenta, con detalles muy chulos, muy precisos y originales, y una lectura que va viento en popa a través de la novedad y el presentarnos un mundo arriesgado que puede dar mucho juego en una historia que empieza con bastante fuerza. Sin embargo, y desgraciadamente, creo que es a mitad del libro donde se va desmoronando la cosa. La lectura va perdiendo en esta parte, y poco a poco, esa novedad del mundo que se nos presentaba al principio, se va desinflando, y es en esta parte cuando he notado una lectura más lenta, menos interesante y que no me dejaba con ganas de continuar. No aparece nada que te incite a seguir leyendo, que te siga enganchando, son momentos en los que la trama se estanca en un par de cosas que ensombrecen todo lo que en un principio me llamaba la atención, e incluso he notado esa monotonía con la que me costaba seguir leyendo, y mucho, ya que me empezaba a aburrir. Por suerte, los capítulos están contados de forma muy directa y no se me hacían demasiado eternos, pero sí que perdí ahí el fuelle y el ritmo de lectura que tenía al principio ya que me topé con una lectura que no me decía ni daba nada, algo que sigue hacia el final, escenas que vuelven a incidir en el mismo tema, y hasta lo hace predecible, haciendo que lo que podría haber sido un buen giro argumental se quede en algo que pasa desapercibido ya que se veía venir desde el principio, siendo El Imperio del sueño un libro que empieza con bastante fuerza y originalidad pero que se desinfla a medida que avanza.
Aún así ha habido un par de cosas que me han gustado mucho, y es lo primero que voy a comentar. Por un lado está el tema de los sueños. Me ha parecido un apunte super original, ver cómo los sueños interfieren con la vida y el día a día de esta sociedad, cómo son ellos los que mandan y cómo, por su ausencia, crean esa pobreza de la Zona Baja o, por el lado extremo, esa riqueza en la Zona Alta. Creo que tratar el tema de los sueños como moneda de cambio ha sido un punto completamente a favor de la autora, ya que nadie, que yo haya visto aún, los ha tratado de una manera en la que nos hace ver hasta qué punto perdemos los humanos más humanidad, y algo que nos identifica como eso, con tal de dejar que la tecnología avance. Además, me ha resultado curioso todo el proceso que hay tras esto, cómo se extraen los sueños, cómo se visualizan, cómo otros comercializan con ellos. Ha sido un toque muy personal y original por parte de la autora. Con estos sueños, Laura ha podido exponer también la situación tan desfavorecida y diferencial que hay entre la Zona Baja y la Zona Alta. Creo que ha hecho un buen trabajo creando las dos partes y la zona algo más olvidada, la Zona Media, con sus características, su forma de vivir, sus peligros, sus desventajas, su gente. Supongo que ha querido reflejar con ello nuestra realidad, esa hipocresía y ese egoísmo que hoy en día está muy presente entre nosotros, separando más que uniendo. Ha sido uno de los mensajes que ha querido transmitir, el de hacer ver que todos, tengamos lo que tengamos, al fin y al cabo somos iguales. Y es que no será el único tema que la autora tratará, siendo con ello el último punto positivo que le saco a esta historia. En un ámbito más personal, ha creado una subtrama con buena pinta, ensalzando la figura de la mujer independiente, fuerte, y que no se acobarda, sino que lucha con lo que tenga al alcance de la mano, aunque sea algo diminuto.
Sin embargo, todas estas cosas también tienen su lado más débil, y es lo que más me ha fallado en todo el libro. Ya he dejado claro que me ha gustado todo ese tema de los sueños pero, sin embargo, se me ha quedado muy plano lo de El Imperio del Sueño. Y es que apenas tiene protagonismo. Cuando empecé el libro creía que ese concurso televisado iba a ser un pilar fundamental en la historia, que me iba a meter en sus entresijos, que iba a conocer bien cómo funcionaba y se vivía de eso, que me iba a dejar momentos increíbles con los que poder ilusionarme con este libro y con los que iba a acabar con la boca abierta. Creo que Laura ha cometido un fallo olvidándose parcialmente de ello, dejándolo atrás para convertirse en una excusa para darle el final que tiene la historia. Me ha decepcionado esa parte ya que creía iba a ver más de ello, y no ha sido así. Otro de los fallos que ha tenido ha sido lo que ha venido con esto que acabo de comentar y lo que ha hecho que esa mitad del libro tenga una trama más plana, más lenta, más monótona y más costosa ya que no pasa absolutamente nada, y es el cómo ha tratado justamente los temas y mensajes que os he comentado arriba. Como digo, me ha gustado que la autora haya querido usar esta historia y sus palabras para lanzar mensajes, pero todo me ha parecido a una intensidad muy pero que muy baja. No he sentido emoción alguna, no hay escenas fuertes de acción o tensión, todo pasa demasiado rápido, no se enfatiza ese tipo de escenas y todo se ha resuelto con demasiada rapidez. Creo que ha faltado más descripciones por todas estas partes, más pausa, más dedicación. Si quieres mandar un mensaje como este que se haga notar, que esté bien mostrado, que se haya profundizado en él. Ha sido una pena ver cómo todo iba desembocando a momentos en los que se estanca demasiado la historia, momentos que, salvo la superficie del mensaje, se quedan muy pero que muy flojos y no dan ningún incentivo para reavivar la trama y engancharte. Además, no he llegado a conectar con ningún personaje, algo que también he visto que de trataba de manera precipitada. No me ha dado tiempo de conocer bien a las dos protagonistas, ni a Shoana ni a Leiza. Además, con respecto a la primera he encontrado varios agujeros ya que, por ejemplo, no se llega a explicar nunca por qué de repente puede soñar. Como sigo, me han faltado más explicaciones en todo, más profundidad. Creo que ha sido un libro demasiado directo que se deja muchos frentes abiertos.
En resumen, El Imperio del Sueño no ha sido todo lo que yo esperaba. Bajo una premisa sumamente original, el libro peca de no tener mucha extensión para poder describir bien cada elemento, y de estancarse a partir de su mitad, una historia que empieza bastante bien y con bastante fuerza pero que, desgraciadamente, se desinfla a cada página que pasa.
Me da mucha pena porque El imperio del sueño es un libro con un planteamiento interesante y un desarrollo que realmente no está mal pero tampoco atrapa. Siento que el libro se me ha quedado corto, que me ha faltado acción, intriga, feelings.. algo porque ha sido una historia muy lineal que, si bien la leía con facilidad y no me resultaba nada pesada, tampoco es que tuviera nada que me hiciera querer leer más. No sé como describirlo, es indiferencia en su mayor parte y sí, hay cosillas que me han gustado pero no lo suficientes para que vaya a recordar este libro
No ha sido para nada lo que esperaba, pero no me ha decepcionado. No. Me ha gustado mucho, tanto la trama como los personajes. Puede que a la trama le haya faltado algo más de acción, algo más de movimiento, pero esto se ha visto compensado por los magníficos mensajes que hay entre sus páginas. He sufrido mucho, si, me he indignado con lo que sucede y me he metido en la piel de los personajes, pero también me he emocionado. Lo he leído rápido, por su ritmo ligero y constante.
Si habéis tenido la oportunidad de leer su anterior bilogía, olvidaos de ese toque humorístico que la caracterizaba porque, a grandes rasgos, esta novela es emocionalmente conmovedora, te deja tocada en más de un sentido, te hace reflexionar y sentir un montón de cosas y ello se debe principalmente a dos aspectos: la narración y las protagonistas. Con esta premisa tan inquietante, la autora nos invita a un gran acontecimiento anual llamado el Imperio del Sueño, en el que varios competidores de las más altas esferas muestran sus mejores sueños.
La soñadora de esta historia es Leiza, una joven ricachona a la que le gusta la buena vida y cuya visión de sí misma depende de lo que los demás esperan de ella: sus magníficos sueños.
Problema: de la noche a la mañana (literalmente), Leiza deja de soñar, ergo, se le acabó el chollo de los saraos de photocalls y champán. Y eso sí que no.
Solución: hacer uso del mercado negro de sueños para comprar sueños robados y poder usarlos durante la competición sin que nadie se dé cuenta de que no son sueños propios y además, que son ilegales.
¡Tachán! Aquí es donde ambas protagonistas convergen cuando sus intereses comunes confluyen provocando un choque de personalidades que hace que en toda la novela estemos pensando continuamente en los dichosos polos opuestos y todo ese rollo del magnetismo y su funcionamiento. No me malinterpretéis, tanto Leiza como Shoana me gustan (y más cuando están juntas en la misma habitación). Ambas son unos personajes construidos de una forma demoledora, pero por algún motivo yo me he encaprichado de Shoana porque tiene un atractivo único.
Son muchísimos los temas que nos acerca Laura Tárraga con una historia que en principio suena a ciencia ficción pero os aseguro que sólo es una cortina de humo para que nos despistemos y dejemos nuestro corazoncito desprotegido para lo que de verdad quiere contarnos esta joven autora (y bueno, que también se la ve que disfruta haciéndonos sufrir). Por si fuera poco, no se me olvida comentar la forma tan arrolladora que tiene de escribir Laura Tárraga. Como os digo, se jacta de ser cruel con nuestros sentimientos haciéndoselo pasar (muy) mal a sus personajes, pero es que además lo demuestra palabra por palabra cuando les da voz propia. En El Imperio del Sueño, Leiza y Shoana son las que nos hacen emocionarnos con sus pensamientos, sus sentimientos, sus inseguridades y todo lo que les va pasando, porque en la deslumbrante vida de la soñadora hay muchas sombras y en el oscuro día a día de la ladrona hay muchos haces de luz.
Una clarísima recomendación si aún no conocéis a Laura Tárraga.
El imperio del sueño cuenta la historia de Shoana, una joven que vive en la zona Baja de Zephanis, la ciudad que enmarca la acción. Ésta está organizada en tres zonas, según el nivel socioeconómico de la población, lo que lleva a la protagonista a sobrevivir en una situación de desigualdad y estigmatización social importante. Además, tiene que mantener y cuidar a su hija Niara, la cual por desgracia padece fibrosis quística, una enfermedad que se lleva la mayoría del dinero que entra en su casa. La vida de Shoana cambia por completo cuando una mañana se despierta tras haber soñado. Después de eso su vida dará un giro radical. Por otro lado, Leiza, una joven soñadora popular que vive gracias a comerciar con sus sueños ha dejado de soñar y el principal evento de soñadores en los que se exponen los mejores del mundo, El Imperio del Sueño, se acerca. Una coincidencia las une y ambas se ven unidas por un destino común que acabará uniéndolas casi como hermanas.
No os voy a decir que es un libro fácil de leer, porque tiene muchas escenas que me han costado muchísimo, que me han hecho daño y me han arrancado el corazón y me lo han estrujado como un pañuelo usado. De hecho, he tardado tanto en leerlo porque había ocasiones en las que no podía más.
No obstante no por ello dejo de recomendarlo. Todo lo contrario, lo recomiendo encarecidamente. Laura usa como "excusa" un mundo del futuro para hablarnos de la temática social del día a día, del cruel mundo en el que vivimos hoy, y lo pongo entre comillas, porque a mí esa "excusa", ese mundo, ese posible futuro, es una de las cosas que más me ha gustado y que me hubiera encantado conocer muchísimo más. Para mí, esta idea que me parece tan buena se queda un poco corta, aunque seguro que pronto sabemos más sobre esta ciudad y este mundo futurista tan diferente y original pero terroríficamente creíble.
El ritmo de la lectura es rapidísimo, la mayoría de capítulos son cortos, lo que le añade frenesí a la acción. La trama tiene un sentido y un fin y me hubiera encantado que se alargase más el final y saber más de las galas del Imperio, por ello le he bajado una estrella. No obstante la idea es tan buena, que se merece las cinco. Sin duda es lo que más me ha gustado, la trama de los sueños y de un futuro sin ellos. Sin su magia su poder y con todos los avances tecnológicos derivados de lo que ello supone.
El imperio del sueño es un libro trepidante, con una trama original, unos personajes reales, que te llegan y te hacen empatizar mucho y una temática social detrás brutal y necesaria. Sin duda, os lo recomiendo muchísimo. Es uno de esos pocos libros que te cuentan más allá.
Sinceramente, no sé por dónde empezar esta reseña. Siento que Laura se ha superado con esta novela y no puedo sentirme más orgullosa.
Laura Tárraga ha creado un mundo y una ciudad perfectamente creíble y... real. Podrías sentir la humedad y la niebla de Zephanis, el miedo de sus calles y el contraste entre la Zona Baja y la Zona Alta. Entendías lo que era la vida de Shoana... Y la doble cara de la fama que rodea a Leiza. En esta novela, los sueños parecen los protagonistas. Pero lo que más llegará al lector serán las pesadillas. Las que todavía nosotras vivimos día a día, a pie de calle, en este tiempo y en este mundo.
El Imperio del Sueño podría haberse quedado como una novela de ciencia-ficción más, pero Laura da voz a una lucha que vivimos todos los días. La novela está cargada de sororidad, de miedo y de luchas. Y cerrarás la última página sintiendo que la propia autora te recuerda que no estás sola. Que puedes salir de esto.
También he de decir que a pesar de su crudeza, la novela tiene algo que hace que no puedas dejar de pasar las páginas. Quizás es el ritmo frenético de la vida de las celebridades o la angustia de no saber cómo sobrevivirá Shoana un día más. La novela es ágil, es cercana, es honesta. Se nota muchísimo el esfuerzo y el trabajo que hay detrás de cada párrafo y no puedo esperar a que llegue a vuestras manos.
Y como anécdota: pensaba que había adivinado un plot twist pero... Luego resultó que no era lo que yo pensaba. Y creo que eso es lo mejor de todo: que no te esperas para nada lo que puede ocurrir. Y que cuando todas las piezas encajan, te duele.
Por si no ha quedado claro: muy recomendada. Una historia tremenda, unas protagonistas fuertes y un mundo (in)creíble.
Ha sido una lectura entretenida, con una buena premisa, pero... me ha faltado chicha.
Aquí los protagonistas son los sueños, y todo gira en torno a ellos. Tenemos a dos chicas, Shoana y Leiza como personajes principales, y estas me han gustado bastante. Tienen un carácter y una clase social muy diferente,(una pobre y otra rica), pero enseguida conectan entre sí. La trama empieza bien, pero creo que el mundo que nos presentan está poco elaborado y no llegamos a conocer bien el porqué de esa forma de vida. Me ha faltado información y profundidad en la historia. Y en cuanto al final es bastante precipitado, y por la temática del libro me hubiera gustado algo más de acción.
Pero a pesar de esto, si que ha sido una novela diferente, que se lee muy rápido, y la pluma de la autora es buena, pero esperaba mucho más.
Como fan del género distópico nunca veo satisfechas mis ansias de descubrir nuevos planteamientos y el de este libro tiene ese toque de originalidad que siempre busco y cada vez más me cuesta encontrar.
Este libro cuenta con dos protagonistas, Shoana y Leiza, dos polos opuestos en todos los aspectos pues tienen vidas tan diferentes y objetivos tan distintos que parece imposible que sus intereses comunes lleguen a un entendimiento. Ambas me han resultado interesantes pues nos muestran dos formas de vivir en un mismo mundo futuro, he conseguido comprenderlas y empatizar con cada situación. Reseña completa: https://atrapadaenunashojasdepapel.bl...
Una novela fresca, inquietante y que se lee muy rápido. Me faltaron páginas para comprender las aristas de las protagonistas pero reconozco que me tuvo muy enganchado hasta el final.
Patri: hacia ya mucho que no leía una distopía y la verdad que soy de las que piensan que este libro podía haber dado más de si. La historia empezaba genial, con una muy buena premisa, en un mundo donde los sueños son los protagonistas y el mundo gira entorno a ellos. Como siempre, una sociedad dividida entre pobreza y riqueza, con dos protagonistas opuestas y que el destino las unirá con un fin del mismo interés. Pero a medida que iba avanzando la lectura, notaba que la historia iba perdiendo mucho, y que el hilo principal se descarrilaba para dar más importancia a otros. Además, creo que el mundo está poco elaborado, que no se termina de conocer del todo el tema de los sueños y que se podía haber profundizado mucho más en esta idea que me parecía de lo más original. Realmente, el libro se lee fácil porque es bastante corto y la prosa de la autora esta muy bien, pero en mi opinión, lo hubiera disfrutado más con algo más de páginas, algo más de acción y algo más de chicha en general.
En 'El Imperio del Sueño' navegamos por un mundo donde hay pocos sueños y muchas pesadillas. Debido a x razones, la mayoría de las personas han perdido la capacidad de soñar cuando dormimos y ese privilegio está reservado a unas pocas personas, los soñadores, que conforman la élite de esta sociedad. El resto, pertenecen a la clase media y, sobre todo, baja. Ellos no solo no pueden soñar en la fase REM, sino que apenas pueden tener otra aspiración que no sea sobrevivir un día más a su cruda realidad. Es en este contexto donde encontramos y conocemos los modos de vida tan diferentes de Leiza, una soñadora, y Shoana, una ladrona de sueños. Los problemas individuales de las dos los llevan a encontrarse, necesitarse y ayudarse mutuamente, porque en realidad no son tan diferentes. La verdad es que el libro se centra más en la vida de las protagonistas que en El Imperio del Sueño, el certamen de soñadores que se celebra cada cuatro años donde se elegirá el mejor sueño, de lo que yo me esperaba. Pero es genial porque eso te enseña las dos realidades tan opuestas que vive la gente en esta sociedad distópica, te sirve para empatizar con las protagonistas y los personajes secundarios que la rodean. Así, cuando las cosas más tensas se ponen, tú sufres también con ellas. Y es que la pluma de Laura hace que te introduzcas de lleno en la historia. Es bonita pero muy sencilla. ¡Ya estoy deseando leer su bilogía 'Infortunium'! Pero no puedo terminar la reseña sin hacer mención a los temas de carácter social que denuncia. Y es por esto por lo que yo recomendaría este libro hasta el infinito y más allá para que se leyera, estudiase y debatiera en los centros educativos: la diferencias de clases sociales, la importancia de los sueños (dormidos y despiertos), las enfermedades y cómo afectan a la gente de la persona afectada, la misoginia y el machismo... Sobre todo estas dos últimas. Laura trata y, sobre todo, DENUNCIA estos temas de una manera tan natural y orgánica que no tienes la sensación de que te está sermoneando, pero a la vez te cala hondo y te hace reflexionar. Ojo, esto es muy difícil de conseguir y por eso, desde aquí, quiero felicitar a la autora por tratar unos temas tan complicados de una manera tan sensible. ¡Enhorabuena, Laura! La sociedad necesita más libros así. Y ya ni hablamos de los finales de capítulos, sobre todo los capítulos de la segunda mitad del libro. ¡Malditos 'cliffhungers'! En serio, te deja en la última frase de cada capítulo con ganas de devorar el siguiente antes de que la intriga te consuma ^^ Una maravilla, vamos. Sí que es cierto que yo hubiera agradecido bastante más ilustraciones. Hay unas preciosísimas al comienzo y final del libro, lo cual hace que se trate de una edición preciosa, pero si hubieran habido más ilustraciones repartidas por todo el libro mostrando esta sociedad, sus sueños, las clases que hay, la montaña en la que se sitúa Zephanis... Hubiera sido ya demasié. Esto es una opinión personal mía porque soy una fan incondicional de las ilustraciones y nunca tengo suficiente jaja Pero vamos, que tampoco le hacen falta a este libro para ser disfrutado porque se vale po sí solo para eso. Aunque sí es cierto que hacia la mitad del libro ha habido un momento en el que el ritmo de la acción decaía un poco y eso ha sido lo que me ha hecho dejar aparcado el libro unos días. Pero fue retomarlo y empezar a coger un ritmo de vértigo. Así que ya sabéis. Aquí tenéis una lectura obligatoria que váis a disfrutar sí o sí y que os va a hacer reflexionar sí o sí. ¡ENHORABUENA, LAURA!
La idea era genial. En serio, era chula, y de hecho fue lo que hizo que, aun cuando a la lectora con mejor gusto a la que conozco no le gustó, le diera una oportunidad. (Ojo que eso no suele pasar) Tras hacerlo, he pagado mi penitencia llegando hasta el final del libro. Por lista.
Los personajes eran muy planos e irregulares. Leiza no evolucionaba en absolutos no hacía nada que no fuera llorar por las esquinas. Hasta que de pronto Puma le canta las cuarenta y BAM, reestructuración cognitiva completa hacia una mujer feminista, valiente, lanzada..., y de todo que NO había sido, ni de lejos, antes. ¿Perdón? Alguien debería asegurarse de que todos los manuscritos tienen a algún psicólogo que revise la construcción y la evolución de los personajes, porque eso nos evitaría problemas como este. Las personas no cambian sus sistemas de creencias con tanta facilidad.
También me ha irritado sobremanera el que haya quien entiende el "Show, don't tell" al revés. Porque en serio, sé que la autora se ha esforzado por crear unos personajes con un pasado, unos complejos, unos valores morales..., pero si me los explica a la mínima en vez de mostrarlo a través de cómo actúa el personaje, me fastidian sobremanera. Me fastidian porque me corta la historia para contarme cosas que no son relevantes para la escena, y me fastidian porque en vez de eso podría haber habido alguna introspección emocional o algo con más salsa.
Le concedo a la novela la diversidad y labor de denuncia social, por haber introducido con bastante naturalidad la homosexualidad, la fibrosis quística; y por haber hablado de alcoholismo, violaciones y maltrato. Un OLÉ por ello. Pero el resto... No se salva.
Llevaba queriendo leer este libro desde que salió hace cosa de año y medio. En mi estantería ha estado también unos cuantos meses aguardando a ser leído, y ha llegado esa hora en el momento idóneo.
El imperio del sueño es mi primer libro del año, y no me podría haber gustado ni enganchado más. Me da rabia que haya tenido que ser en época de exámenes porque he tenido pocos ratos libres para leerlo, pero los he aprovechado al máximo, eso sin duda.
Y es que esta novela te engancha, se lee muy rápido porque Laura consigue mantenerte con ganas de más en todas las páginas. Todo el asunto de una sociedad en la que no se puede soñar y donde se llega a robar, incluso, por ellos, da que pensar. Así como las zonas de la ciudad y las diferencias entre ellas. Este libro tiene una carga de crítica social importante, desde las clases hasta el feminismo.
Me quedo, sobre todo, con las dos protagonistas, Shoana y Leiza, que tan diferentes parecen en principio, pero que terminan encajando a pesar de lo distintas que han sido y son sus vidas. En mitad de la tensión que viven, van conociéndose y dejando ver partes de ellas que no muestran y eso es muy bonito.
Por si había dudas: muy recomendada esta novela si buscáis algo rápido de leer y que os vaya a enganchar.
Primero y antes de todo quiero dar mi mas sincera enhorabuena a la maravillosa Laura por su libro y la gran historia que ha creado.
El imperio del sueño es ese tipo de libros que lees super rapido al estar enganchado con el y que practicamente no te deja respirar. Es un libro lleno de aventuras y dramas que me han mantenido pegada a sus palabras. Os lo recomiendo un montón, porque es una historia con una trama muy original y maravillosamente escrita que no os podeis perder.
Ojalá supiera por dónde empezar. Soy terrible para estas cosas, pero creo que este libro se lo merece. Hacía mucho mucho mucho tiempo que una historia no me intrigaba tanto. El worldbuilding que se ha marcado Laura en esta novela es brutal y la envidio muchísimo por haber tenido una idea tan buena y haber sabido desarrollarla tan bien. Porque, podría haber quedado en una simple idea, pero Laura ha conseguido crear un mundo, una sociedad, muy bien definida y que ha conseguido (y esto es muy difícil para mí) que me imagine con claridad cada zona, cada casa, cada persona. Es algo que valoro mucho porque también me cuesta mucho. En cuanto a los personajes: me ha sorprendido (para bien) que la relación entre las dos protagonistas fuera tan real desde el primer momento. Las une lo que las une y tienen sus más y sus menos, pero era una relación personal y real. Es algo que me ha dejado maravillada (y shippeando hasta la última hoja). Además, es muy importante ver a mujeres siendo amigas y defendiéndose por encima de toda la presión que se ejerce sobre ellas. Además, ha sido un placer reencontrarme con el estilo de la autora después de tanto tiempo. Es un estilo muy directo, que no estoy tan acostumbrada a leer (y mucho menos escribir), pero es un estilo precioso. Sabe dónde meter cada metáfora, cada adjetivo... Es el estilo que le pega a los mensajes que cuenta. Porque sí, es ciencia ficción, se habla de sueños, de pesadillas... Pero también se habla de la vida real, de los problemas que nos preocupan ahora y por los que hay que alzar la voz. Laura lo hace muy bien a través de estos personajes. Y si no se lleva las cinco estrellas es porque me ha parecido muy corto. El ritmo era bueno y acorde a las páginas que tenía la novela, pero he sentido que al final me faltaba algo. El final está muy bien llevado, con el clímax que te atrapa y no te suelta, pero me habría gustado que todo lo anterior hubiera sido más pausado. Aunque, esto no deja de ser una preferencia completamente personal. Estoy muy orgullosa de Laura y de su novela y estoy segura de que no será la última con la que nos haga sufrir y disfrutar a partes iguales.
Dije que esperaría a tener tiempo para leer esta novela, pero en la presentación me pusieron los dientes tan largos que no pude resistir la curiosidad. Me alegra un montón que sea tan "corta" y habérmela podido zampar en una noche.
Me ha gustado, me ha gustado mucho. Adoro todos y cada uno de los mensajes que transmite esta historia, a sus dos protagonistas y cómo se ha ido resolviendo todo. Si no le pongo cinco estrellas es porque el final me ha parecido un pelín abrupto y hay una subtrama de la que se habla muchísimo y parece que vaya a ocurrir algo (o te imaginas lo que está sucediendo, que es peor) y al final se desvanece sin aclararse. Laura, cariño, escríbeme lo que ha sucedido aunque sea en un cuento.
A PARTIR DE AQUÍ POSIBLES SPOILERS:
Como todo el mundo hablaba de Shoana, yo ya iba con predisposición a enamorarme de Leiza. Así funciona mi lógica, ¡y las dos me han encantado! Pero hay detalles de Leiza que no me esperaba nada mientras que de Shoana me lo acabé imaginando. Todo el tema del alcoholismo o la escena en la que le ponían nota a su cuerpo, me ha dolido muchísimo. Y ya, cuando empatizas con todo su estrés, es la muerte. Ojo, la parte de Shoana no se queda atrás. Tiene escenas muy duras y está muy bien reflejado su estrés post traumático.
Otro detalle que me ha gustado ha sido cómo se fue revelando la identidad del villano. No es que un momento dado fuese un "¡Sorpresa! ¡Mirad quién es!", sino que va contando poco a poco para que seas tú quien lo adivine sin que se diga quién es. No busca la sorpresa, sino que seas tú la que recoja las pistas y reconstruya los hechos.
¿Me atrevo a recomendar El imperio de los sueños? Por supuesto.
Amo cuando cojo un libro que no conocía, lo leo y me acaba fascinando. Es una sensación...que de verdad, no tiene precio. Me esperaba una trama con mucha más acción y tal, pero cuando vi los mensajes tan fuertes que escondían sus páginas...me enamoró aún más. . La trama me ha parecido original y bastante entretenida. Los personajes brillan. Sí, sobre todas nuestras dos protagonistas, que no he podido shippearlas más durante toda la historia. Es imposible no empatizar con ellas y sobre todo, ir sintiendo todo lo que ellas van viviendo. . Tenemos la típica guerra entre la pobreza y la riqueza. Como los más necesitados siempre son los que lo pasan peor y los ricos viven la vida con sus caprichos y no se pueden imaginar lo que es sufrir por ciertas cosas. A mi encontrarme este tipo de mensajes en los libros siempre me gusta y me da mucho que pensar. . Lo que si he echado más en falta ha sido la profundización en el tema de los sueños. Sobre los tipos que hay, como funciona el mercado negro de estos, que ocurre si se ingiere más cantidad de la debida y ese tipo de cosas...es la única pega que le encuentro. Pero por lo demás, ha sido una lectura de diez y de sobresaliente. . La forma de narrar de la autora me ha gustado bastante y es el tipo de escritura que me suele gustar. Directa, sin embellecer nada, sin demasiadas descripciones innecesarias y realmente quiero leer todas las cosas que pueda escribir en un futuro. Lo recomiendo muchísimo por encima de algunos que he leído ya de la editorial.
Creo que el gran fallo es tambien el mayor acierto en este libro, el cual es que se trata de una novela facil de leer, y por eso mismo me parece que no ahondan mucho en los personajes y sus alrededores, me parece que se queda un poco a medio gas.
Los personajes principales son dos chicas que aunque vivan en la misma ciudad se encuentran en dos mundos distintos, la riqueza y la pobreza. Serian como la noche y el dia. Tal vez al ser del mismo genero se me queda corto, y aunque muchos de los personajes secundarios son hombres no me llama de la misma forma.
Creo que el punto fuerte o el que queria que fuera es el tema del maltrato femenino, aunque este solo se ve en las ultimas paginas y lo hace bastante de pasada. El tema de comerciar con los sueños seria la novedad, el centro de esta distopia. Aunque siendo sinceros como con todo se queda a medias.
La avaricia, la desesperación, la desorientación aunque son los pilaren principales de los personajes no ves un momento critico en si, es como si ningun personajes tocara fondo de verdad.
Aun asi no me parece un mal libro para alguien joven, simplemente a mi se me ha quedado corto.
Me ha gustado mucho la premisa de un mundo donde solo unos pocos pueden soñar y donde los sueños son un negocio. También la prosa de la autora y el mundo futurista que ha creado. Sin embargo, ha habido ciertas cosas que no le han terminado de encajar y el final me pareció algo abrupto comparado con la dinámica que había ido teniendo el libro.
En primer lugar quiero destacar la originalidad de la premisa de este libro. La ambientación y la idea de que la humanidad ha perdido la capacidad de soñar me llamó la atención desde el principio, y me parece un soplo de aire fresco dentro de la literatura de ciencia ficción. Además, algo muy positivo del libro es el poderoso mensaje de sororidad que transmite y la fuerte crítica social que plantea.
Sin embargo, en cuanto a historia, me ha sabido a poco. He echado de menos más profundidad tanto en las protagonistas como en el mundo que las rodea. Me ha dado la sensación de que lo que se nos planteaba era, en ocasiones, una visión superficial de algo que podría haber sido un diamante en bruto. Me ha faltado empatizar con Shoana y Leiza, quizás porque, a pesar de que podía entender sus comportamientos, sentía que se me estaba contando lo que les ocurría, sin que llegara a mostrárseme.
De la misma forma, en ocasiones Zephanis se me antojaba un sitio vago y sin terminar de definir, y, sobre todo, demasiado «actual» como para que la humanidad lleve «miles de años» sin soñar, como asegura la sinopsis. A pesar de ser un libro de ciencia ficción, me ha faltado más futurismo y quizás algo más de detalle a la hora de dotar a este universo de tridimensionalidad. Lo mismo digo del evento al que hace referencia el título del libro: me ha faltado ver más del Imperio del Sueño.
Aun así, aunque no haya cumplido con las expectativas que había depositado en él, el libro se lee de forma muy rápida, es ameno y transmite enseñanzas y valores que son muy necesarios para nuestra sociedad.
Lo primero es que el cambio en la escritura de Laura es espectacular. Vaya evolución bonita en su prosa. Segundo, decir que me siento muy orgullosa de que haya salido esta historia en una editorial tan genial como Nocturna porque sé que la va a leer muchísima gente y me parece que los valores y el tema final van a calar hondo. Al principio me costó entender el que hubiera donado sus regalías a la asociación ACOVIFA porque no relacionaba una historia futurista y que habla de soñadores con la violencia de género. Pero señoras y señores, aún queda muchísimo por hacer a este respecto. MUCHO. Porque el futuro que ha creado esta chica es increíble, con muchísimos avances y la posibilidad de ver tus sueños después, pero es tan real que duele. Es la sociedad en la que aún vivimos, por desgracia. Pensaba que no iba a gustarme el camino que tomaba la novela, ya que me había creado unas expectativas de novela distópica de aventuras, pero creo que ha lanzado un mensaje muy valiente y que el final es el que debe ser. Así que yo solo puedo agradecer a Laura que se haya atrevido a escribir sobre ello. Es cierto que se aleja un poco de lo que acostumbramos a leer sobre heroínas que luchan y mejoran sus destrezas para acabar con cierto mal; que no es desmontar una sociedad dividida y opresora, sino que los temas que trata son mucho más profundos. Es otra clase de lucha. Por ti, por tus sueños, por tus seres queridos.
Acabo añadiendo que todo el asunto de los sueños me fascinó: cómo se usan, cómo se guardan, el mercado negro, la fábrica a granel... ¡Me encantó! Hacía tiempo que no leía algo tan pero tan original. También cómo se lleva el estrellato, con las redes sociales y el agobio de la prensa. Durante toda la novela era team Shoana, pero Leiza se ha ganado un poquito de mi corazón al final.
Hacía mucho que no leía una historia de este género (salvo Infortunium de la misma autora del que aún tengo pendiente la segunda parte) y la verdad es que me ha sorprendido mucho. Creo que Laura ha conseguido un mundo muy interesante, y sobre todo una historia llena de personajes femeninos fuertes muy necesarios en la literatura juvenil. Creo que estos son los puntos más fuertes de la novela, pero al terminar la historia me he quedado con la sensación de que apenas 300 páginas se quedan muy cortas para una historia tan grande. Me quedo con ganas de saber demasiadas cosas sobre Zephanis y sobre los motivos por los que unos sueñan y otros no. Se menciona muy poco sobre la evolución que ha sufrido el mundo para acabar así. Es una historia genial, pero en algunos momentos me ha sabido a poco.
2/5 La idea de la historia me ha gustado pero no como se ha desarrollado. En todo momento he tenido la sensación de que es un borrador que le hacía falta desarrollar. En lo que se centra el libro apenas se explica y pasa por encima, la evolución de una de la protagonista no me ha convencido, a parte, de que no he conseguido conectar con ninguna de las dos. Lo único que le he visto bueno ha sido que se lee super rápido debido a los capítulos cortos! No recomiendo para nada este libro.
He de reconocer que me encontraba muy expectante y nerviosa ante la perspectiva de leer “El Imperio del Sueño” porque no hace mucho que he leído “Infortunium” (como bien seguro sabéis, la bilogía autopublicada de Laura) y tenía las expectativas muy altas, ya que me gustó muchísimo la historia y los personajes. Pero también he de reconocer que todas esas inseguridades se esfumaron cuando comencé a leer, cuando conocí a Leiza y a Shoana y la historia que las une. “El Imperio del sueño” es una novela llena de intriga, misterios y secretos y te tiene en vela hasta prácticamente el final, con un epílogo que te deja completamente exhausta. La historia comienza siendo algo pequeño para terminar siendo algo grande que implica mucho e implica la vida de muchas personas. Me encantaba el detalle de ir descubriendo poco a poco todo lo que rodea la vida de Leiza y Shoana, especialmente los secretos, los cuales tienen un papel muy importante. Si bien es cierto que en algunos momentos la narración se me hacia algo fría y distante, todo ello tiene su explicación a medida que la historia avanza y descubres el por qué de muchas de las cosas. Tenía que ser así, tenías que vivir la historia de esa manera. Y llegados a este punto necesito hablar de Leiza y Shoana. Las quiero. No puedo sentir otra cosa hacia estas dos mujeres tan diferentes, pero a la vez tan iguales, tan fuertes, tan poderosas y tan llenas de vida que traspasan las páginas y te arropan como una manta en mitad del invierno. No puedo quedarme solo con una de ellas, desde mi punto de vista, ambas viven gracias a la otra una experiencia vital que las marcará de por vida. Viniendo de dos mundos tan diferentes encuentran un equilibrio y una comprensión que muy pocas veces se puede vivir en la vida real. ¿Quedarme con una? Lo veo realmente imposible, pero quizá mi corazón siente un poco más de apego hacia Leiza, no sé por qué sentí con ella una conexión desde el principio que con Shoana tardó más en llegar. No quiero dejar de comentar la evolución de Laura como escritora. Al tener reciente la lectura de “Infortunium” he visto un avance brutal en todo lo que se refiere a descripciones y construcción de personajes, se nota la dedicación, el leer a otros autores y el conocimiento que te dan los años y las horas de escritura. Mi más sincera enhorabuena a Laura, porque donde otros autores se estancan, ella continúa hacia adelante y espero y deseo que nadie la pare porque quiero seguir leyendo historias escritas por ella. Quiero hacer una mención especial a Nocturna Ediciones porque el diseño del libro me parece una pasada. Como bien sabéis por el blog he leído (y tengo plan) de leer mucho más de esta editorial pero este libro es, hasta el momento, el que me parece más bonito. La edición está muy cuidada y las ilustraciones son una pasada, con dos portadillas y con las ilustraciones de las protagonistas al final. Un diez para la editorial. Llegados a este punto sobra decir que os recomiendo leer “El Imperio del Sueño”, es un libro corto, ameno y que se os hará muy corto y que cuando lleguéis al final querréis leer más y más, aunque sinceramente lo digo, me gusta quedarme así y con el buen sabor de boca que me ha dejado esta narración. Nota: 8 “Leiza y Shoana te llegan al corazón desde el momento en el que las conoces. Una gran historia llena de grandes personajes”.
5 estrellas para El imperio del sueño, por varios motivos que voy a explicar a continuación.
Entiendo que para muchas personas mi opinión podría no ser objetiva porque soy amiga de la autora. Yo misma estuve dudando a lo largo de toda la novela de la puntuación hasta que llegué al final, al momento antes del epílogo, y luego al epílogo. Que un libro haga que se me ponga la piel de gallina no es cualquier cosa.
Partamos de la base de que la premisa me parece maravillosa.
Zephanis es una ciudad increíble sobre la que se asienta la historia de Shoana y de Leiza, viendo en todo momento la estructura social que hay dentro de la misma, y diferenciando claramente a los soñadores de los no soñadores. Porque sí, la sociedad ha dejado de soñar y solo unos pocos todavía tienen ese privilegio. De ahí que en la punta de la pirámide del éxito social estén los soñadores. Ellos son los que comparten sus sueños, o, mejor dicho, los venden, para que el resto de personas tenga acceso a ellos y tengan una vida mejor. Así que tiene fama, dinero, todo tipo de lujos, representantes... Y el resto de personas se dedican a subsistir. ¿Nos suena la premisa no? Real como la vida misma... Ese es uno de los puntos que me gustan. Otro es el no-romance de la novela. Tengo muchas teorías con respecto a los personajes, sobre todo con respecto a Rasul, pero no puedo comentarlas aquí porque sería spoiler. Otro más el contrabando de sueños, la "mafia", la gente de la Zona Baja, la fábrica de sueños a granel... Y por último, otra de las críticas sociales que hay con respecto a cierto tipo de abusos. Un problema que afecta a personas de cualquier condición. Tampoco digo más para evitar spoilers.
¿Tengo algún "pero"? Lo tengo, pero no creo que eso le reste tanto a mi valoración, porque además es un "pero" con vistas de futuro. Creo que me faltaron páginas, más ambientación, más de sueños y más del Imperio, y un poco más a un personaje secundario en concreto. Pero Zephanis es una gran ciudad donde estoy segura que se seguirán desarrollando historias, y de la que iremos conociendo más y más si la autora decide seguir contando muchas de las cosas que podría contar y reivindicar.
Si una cosa tengo clara es que la premisa del Imperio del Sueño no puede ser más atrayente: un mundo en el que solamente un grupo de afortunados tienen la capacidad de soñar y ganarse la vida con ello. Laura Tárraga presenta un futuro distópico en el que los excesos del primer mundo han conducido a la población a una situación un tanto extrema, donde sólo unos cuantos privilegiados tienen la suerte de vivir cómodamente mientras que el resto de la humanidad malvive en casas de fabricadas con desechos y sin mucho que llevarse a la boca.
Pero El Imperio del Sueño no es estrictamente una novela de ciencia ficción. Probablemente haya muchos lectores (lectores como yo) de esta novela que se introdujeron un poco a ciegas en el mundo de Leiza y Shoana, las protagonistas. A través de la historia de la pérdida de los sueños de Leiza, su encuentro con Shoana y su camino juntas hacia el popular concurso, El Imperio del Sueño nos habla sobre un tema social difícil, cuyas únicas pistas en el libro no están en la sinopsis, sino en la “bienvenida” a la novela.
Confieso que la magia del sistema de sueños me atrapó y el esfuerzo de Laura por darle una explicación médica a muchos de los sucesos descritos en la novela es digno de alabanza. Sin embargo, cuando la trama real de la novela comienza a divergir de este mundo tan hipnótico siento que hay algo que me estoy perdiendo por el camino.
Shoana, marcada por su pasado y por su presente, podría parecer la antítesis de Leiza, la popular soñadora; pero las dos protagonistas crean una bonita sinergia que funciona bien con el propósito de la novela. Quizá he echado de menos un antagonista con mayor presencia en el recorrido de la trama, que de alguna forma podría haberse integrado con mayor armonía en el precioso worlbuilding de esta novela.
La verdad es que es increíble pues hace no muchos años, historias como El Imperio del Sueño eran inimaginables y son personas como Laura Tárraga quien las hace posibles.
Tengo sentimientos encontrados con el libro... Para mí sería un 3.5/5 pero me gusta siempre redondear estrellitas hacia arriba. Me ha gustado, pero se me ha hecho muy corto y creo que la idea está poco desarrollada. La trama principal me parece que es muy buena, aunque podría haber sido mucho más, se me ha quedado muy "general", me habría gustado más que se centrase en ello... Creo que al libro le faltan bastantes páginas para terminar de meterte en la historia de pleno, la trama sobre D. pienso que se "soluciona" muy precipitadamente... A pesar de esto, el libro está bien, se lee muy rápido y tiene temas muy necesarios y bien tratados, cosa que se agradece mucho. La narración me ha gustado mucho, pero Laura escribe muuuuuy bien, así que no me sorprende xD