El laberinto de las aceitunas sitúa nuevamente en el centro de una espiral de intriga al detective manicomial y paródico protagonista de El misterio de la cripta embrujada. No es menos deslumbrante aquí que en sus obras anteriores la capacidad del autor para la escritura que contiene en sí su propia caricatura, a la vez que la caricatura de un género, y, en él, de una sociedad y de sus diversas áreas de lenguaje. Pero, aguzada por el dédalo de una peripecia que se bifurca y multiplica en ramificaciones sorprendentes e insólitas, la imaginación narrativa de Mendoza va esta vez todavía más lejos: en un triple salto mortal de funámbulo sonámbulo, el narrador-detective llega, por la distorsión de la peripecia policial, no ya al reino del humor y el absurdo, sino al de la libérrima fabulación que roza, tras lo esperpéntico, el área del prodigio surreal.
Eduardo Mendoza Garriga studied law in the first half of the 1960s and lived in New York between 1973 and 1982, working as interpreter for the United Nations.
He maintained an intense relationship with novelists Juan Benet and Juan García Hortelano, poet Pere Gimferrer and writer (and neighbour) Félix de Azúa.
In 1975 he published his very successful first novel, La verdad sobre el caso Savolta (The Truth about the Savolta Case), where he shows his ability to use different resources and styles. The novel is considered a precursor to the social change in the Spanish post-Franco society and the first novel of the transition to democracy. He describes the union fights from the beginning of the 20th century, showing the social, cultural and economic reality of the Barcelona at the time. A year later he was awarded the Critic Prize.
His most acclaimed novel is probably La ciudad de los prodigios (The City of Marvels, 1986), about the social and urban evolution of Barcelona between the Universal Expositions of 1888 and 1929. It was adapted to the screen by Mario Camus in 1999.
In 1996, he published his third major Barcelona novel, this time set in the 1940s, Una comedia ligera (A Light Comedy).
Also within Mendoza's work stands the saga of Ceferino, a peculiar character, a detective locked up in a mental hospital. The first of these novels, El misterio de la cripta embrujada (The Mystery of the Bewitched Crypt, 1979) is a parody with hilarious moments mixing detective stories with gothic narrative.
In the second novel of the saga, El laberinto de las aceitunas (The Labyrinth of the Olives, 1982) he confirms his talent as parodist; the novel is one of his most successful works. The third (and last) novel of the saga, La aventura del tocador de señoras (The Adventure of the Powder Room) was published in 2002.
The newspaper El País published two of his novels by instalments, Sin noticias de Gurb ( No Word from Gurb, 1990) and El último trayecto de Horacio Dos (The Last Journey of Horatio Dos, 2001).
In 1990, his work in Catalan Restauració made its debut. He later translated it into Spanish himself.
¿Por qué soy un gran admirador de Eduardo Mendoza? Porque con cada uno de sus libros consigue algo que es muy difícil: que me divierta y, por unas horas, me evada totalmente del mundo. Y lo hace escribiendo como los ángeles, sin ninguna pretensión, por el puro placer de la invención y de la literatura. Merecidísimo premio Cervantes, Mendoza es, sin duda, un genio. Y no sólo del humor.
En esta novela, volvemos a encontrarnos con el innombrado detective de El misterio de la cripta embrujada, desafortunado morador de un manicomio, encomiable orador y disparatado protagonista de toda clase de peripecias. A lo largo de las páginas, el absurdo se entremezclará con una ácida crítica social para dar resolución a un caso sin pies ni cabeza, pero, eso sí, descacharrante. Perfecto para pasar un buen rato.
El libro empieza bien con el estrafalario personaje detective del manicomio, pero a medida que la historia avanzaba me ha ido enganchando menos y el final, es raro. Regular. Eso sí esta escrito de manera genial, ahi Eduardo Mendoza un crack
Según el prólogo de F. Marías es un libro para reírse. Bien, ni un poco de risa en mi caso. Creo que la trama está bien, pero abusa de un léxico un poco pomposo, que aun siendo muy rico ralentiza el ritmo del libro.
La obra empieza pareciéndome entretenida: el protagonista estrafalario, el lenguaje rebuscado y las situaciones absurdas despiertan cierta curiosidad. Sin embargo, a medida que avanzaba la lectura, todo se va desinflando.
En primer lugar, el estilo, tan pomposo como intencionadamente ridículo, acaba volviéndose tedioso. Las frases largas, los giros arcaicos y el tono irónico, que en un principio me hacían gracia, terminan por hacérseme bola. La trama, por su parte, no lleva a ningún sitio: es una sucesión de disparates que pierde rumbo y coherencia, hasta desembocar en un final que no tiene ni pies ni cabeza.
En segundo lugar, los personajes son demasiado caricaturescos y planos, y no ayudan a sostener la historia.
En tercer lugar, el humor... El humor, que debería ser el motor de la novela, se vuelve forzado, aburrido y sobre todo, repetitivo, muy repetitivo. Es un chicle de sandia estirado y estirado y estirado.
En resumen, es una novela que puede resultar graciosa al principio, pero que termina por hacerse larga, caótica y vacía. Una sátira que no consigue sostener su propio juego.
at first i though the book was great! i laughed out load on almost every page but then the story got so silly - like it always gets in a not-very-good-mystery-european-movie if you know what i mean :-)
Afirma Javier Marías en el prólogo que la primera parte del libro es, bajo el barniz espeso del humor y la sátira, una "novela negra modélica", mientras que a partir de la mitad se convierte en algo que no es capaz de describir y que define tentativamente como "inclasificable".
Bien, estoy de acuerdo con la separación en cuanto al desarrollo de la historia pero sospecho que no tanto en cuanto a lo que da a entender Marías sobre el disfrute del libro. Personalmente he gozado muchísimo más con la primera parte y el continuo encadenamietno de situaciones absurdas en las que se mete el protagonista cuando pretende hacer de detective que con el absurdo general teñido de conspiraciones estrambóticas que es el marco de la segunda parte. Soy tremendamente fan de las conversaciones del protagonista y los "personajes" con los que se va encontrando en las que empieza de una manera más o menos normal pero que van evolucionando hacia charlas propias del Siglo de Oro por el uso del vocabulario y dominio del lenguaje... si en el Siglo de Oro los contertulios fuesen tarados de solemnidad o la autodenominada escoria de la sociedad. El asunto es que estas situaciones se dan con más facilidad al inicio del libro, con un ritmo más sosegado y con la obvia necesidad de que los participantes en la trama se den a conocer con toda su gloria y sus interminables penurias.
Vaya, que la trama me ha resultado mucho menos importante a la hora de valorar el libro que la manera de comportarse de los personajes y las risas que me han provocado incluso en público. Porque en eso sí estoy de acuerdo con Marías, que un libro me haga reír a carcajadas se da en tan pocas ocasiones que cuando ocurre hay que valorarlo en su justa medida. Ah, creo que también ayuda la curiosa dificultad de nuestro protagonista durante todo el libro para dejar de ir desnudo o tapado con algo que la mayoría de lo gente no considerásemos ridículo o directamente harapos.
Después de lo que me gustó encontrarme con la primera parte de esta serie, esta segunda me ha decepcionado. Me gustó la presentación, pero según fue avanzando la trama ésta me resultaba repetitiva en escenarios y situaciones, perdiendo el hilo y la cohesión global de la novela. Me ha dejado la sensación de no haber entendido el porqué de toda la historia.
Me ha quitado por completo las ganas de continuar con las aventuras del paciente del doctor Sugrañes.
3,5 Encore un bon moment passé grâce à Eduardo Mendoza. Je ne sais pas vraiment pourquoi j'aime tant ses livres. C'est si difficile, si rocambolesque, avec un vocabulaire tantôt pompeux, tantôt trop académique. Mais cela fonctionne parce que le style est bon, les personnages efficaces malgré leur côté caricatural, et aussi parce que c'est bien écrit et que c'est drôle.
Pour Le Labyrinthe aux olives, encore une fois j'ai plongé dans l'univers farfelu de l'auteur, j'ai retrouvé un narrateur ubuesque dont les frasques dessinent une histoire qui n'a ni queue ni tête mais qui tient en haleine jusqu'au bout. Parfois trop farfelu et tiré par les cheveux, j'ai cependant aimé que Mendoza nous livre indirectement une critique de la société espagnole post-franquisme
A personagem principal é uma espécie de Dom Quixote do nosso tempo: o discurso artificialmente (e despropositadamente) palavroso, as alucinações.
A trama é de alguma forma vulgar: alguém incumbido de uma tarefa que não pára de meter os pés pelas mãos.
Um livro divertidíssimo que arranca gargalhadas inusitadas, posso garantir. Cuidado onde se lê: num transporte público ou à espera da consulta no dentista, pode ser mesmo embaraçante.
Embora o elevado grau de delírio e até inverosimilhança, não se pense que é um livro "de brincar"; diz coisas muito sérias. A aparência caricatural que o autor imprime às pessoas e às situações, pode levar o leitor a menorizar a obra.
Não é uma obra menor. Mas pode ser lida como tal, sem grande prejuízo: pelo menos, divertimento é garantido.
Muy divertido. Se mantiene y se mejora todo lo bueno que tenía la entrega anterior. El caso, en principio parece que tiene mas sentido y está mas elaborado que el de la cripta, pero acaba siendo un completo disparate con un montón de hillos sueltos y asuntos que se quedan sin resolver. Pero no importa, lo que cuenta es lo mucho que uno se rie con las situaciones tan rocambolescas en las que se mete el protagonista y lo que se disfruta con el estilo de Mendoza, con su ironía, con su humor algo cervantino, si hasta los nombres de los personajes son para mondarse, como el entrañable Plutarquete Pajarell o la encantadora Pustulina Mierdalojo. Para mí Eduardo Mendoza es el mejor escritor humorístico que tenemos actualmente en este país.
Eduardo escribe que es una pasada. Lo hace con una pedantería sin igual, pareciendo que desyuna diccionarios con leche todas las mañanas, y, aún así, consiguiendo que la lectura se haga amena y en extremo divertida. Me recuerda a los libros de Terry Prachet en lo esperpéntico de las situaciones y es de esos libros con los que ríes cada dos por tres.
Además, un punto a favor es cómo, bajo la simple fachada de una novela detectivesca con fines cómicos, se trata a la sociedad española de cierta época (no muchos después de la muerte de Franco en este libro) a través de los personajes, sobretodo de los secundarios.
Ni Hercule Poirot, ni Sherlock Holmes. Yo me quedo con el quijotesco, paisano, protagonista de esta historia.
Me encanta Eduardo Mendoza, es uno de mis autores favoritos, pero no he conectado demasiado con este libro. No tengo claro porqué, pero no me ha acabado de enganchar. No lo recomendaría como primer libro del autor si nunca lo has leído. Y si, aún así es un 3 estrellas... Pero es que Eduardo Mendoza suele ser más.
Fundamental, junto con "El místerio de la cripta embrujada" para conocer el lado más irónico y loco de Eduardo Mendoza, aunque siempre se presente como una obra menor.
Una pérdida de tiempo increíble. Me ha gustado tan poco que hasta me da pereza reseñarlo. Pero valga como ejemplo que un día me frustré tanto leyéndolo (de hastío y por la constante sexualización de los escasos personajes femeninos) que lo tiré al suelo. En fin, no sé quién en mi departamento ha decidido que es una buena obra para leer en 2° de Bachillerato, porque de buena (y de graciosa, que se supone que es lo que intenta) tiene más bien poco.
Si no le pongo solo una estrella es porque se nota que el autor maneja de manera muy diestra la lengua; que lo haga de manera insufriblemente pedante, eso sí, es otra cosa. Por eso y porque alguna situación, que al fin y al cabo es una parodia de las novelas policíacas, me ha hecho gracia, pero vamos… por lo general, la narración es de un pésimo gusto. Y todo lo que tiene que ver con el protagonista, más.
Cumple su propósito, eso sí, como parodia. Puedo ver por qué en su momento fue interesante y por qué puede gustar a los detractores de la novela policíaca, o por lo menos de sus tópicos. Por lo demás, me ha aburrido soberanamente.
Entretenido y divertido por momentos. Lo más atractivo de la obra sin duda es la forma de escribir del autor, con un léxico muy rico pero sin florituras, preciso y elegante. Me resulta muy atractivo conocer tantas nuevas palabras en una obra que a su vez es fácil de leer. Los primeros dos tercios del libro son muy entretenidos, el ritmo es trepidante y engancha. Sin embargo la última parte del libro me parece bastante pobre por la manera en la que se desarrolla y finaliza la trama. El final carece de gracia e incluso de sentido. Resulta curioso que en la nota que hace el autor al comienzo del libro comenta que la primera parte la escribió de manera rápida y fluida, pero que luego se atascó con su desenlace y estuvo un tiempo considerable sin saber cómo continuar la obra. Luego apunta que consiguió encontrar un final y la acabó rápidamente, diciendo: " Confío en que el resultado no acuse los altibajos de su elaboración." Pues bien, a mi parecer, el final del libro acusa sin ninguna duda los altibajos de su elaboración. Una pena que Mendoza no pudiese concluir la obra de la manera tan brillante en que la comenzó.
Me ha decepcionado. Después de haber leído Sin Noticias de Gurb en mi adolescencia y recordar desternillarme con ese libro, éste lo he encontrado difícil de seguir, muy complejo y que quiere parodia muchas cosas al mismo tiempo... Le pongo tres estrellas porque, aunque me haya costado leérmelo, en algunas escenas si me he reído de lo delirante que llegaban a ser.
Aquesta és una mena de segona part d'"El misterio de la cripta embrujada", però que funciona de manera independent. La història és més enrevessada que la de la primera novel·la (i més llarga també), però m'agrada força els girs absurds que agafa la trama en certs moments. Hi ha algun moment que se m'ha fet una miqueta pesat, però en general manté el to.
No le doy cinco estrellas porque a veces se hacía un poco pesado y el final no me ha gustado mucho. Aún así me he reído mucho - que era lo que esperaba - y la redacción de Mendoza es, sin duda, la mejor.
Preferí 'El misterio de la Cripta embrujada' por el mismo autor. Ambos trata con nuestro protagonista sin nombre, con su lógica único y cómico. El desenlace parecío in poco decepionante para mi.
Me costó acabarlo. Empieza bien, con intriga y gancho. Luego todo empeora. Giros de guión absurdos, personajes que al principio se plantean como antagonista acaban desapareciendo y todo acaba con una resolución en cinco páginas que deja cabos sueltos.
Después de leer el caso Savolta estuve intrigado por este librito que me encontré en el tren, pero este me ha desanimado a seguir leyendo más de Eduardo Mendoza.
A pesar de ser uno de mis autores favoritos, he de reconocer que en este libro no ha estado a la altura de lo que esperaba. Aunque sus obras suelen tener un aura de caos, en este caso es todo un despropósito de grandes dimensiones. Sigue teniendo su estilo inconfundible, esa ironía satírica (por llamarla de alguna forma) repleta de sutilezas y golpes a bocajarro. El mayor problema que tiene es la trama argumental, que no existe: se va construyendo sobre la marcha de cualquier forma y termina de una forma abrupta y sin que nada haya quedado claro.
נוסעים יקרים, בשם הקברניט ליפו, שחוזר היום לשירות מיד לאחר ניתוח קרקט, אנו שמחים לארח אתכם בטיסה 404 למדריד ומאחלים לכם נסיעה טובה. משך הטיסה כחמישים דקות".
כך נפתחת טיסה חסרת מעצורים, משעשעת וקורעת מצחוק בספר "מבוך הזיתים" מאת אדוארדו מנדוסה.
את הגיבור המטורף של מנדוסה, פגשתי לראשונה ב"תעלומת הקבר המכושף". אין לו שם, והכינוי שלו מוזכר פעם אחת בתעלומת הקבר, מה שלא מנע ממני להיקשר אליו בנימי נפשי.
ב"תעלומת הקבר המכושף", בזמן שניסה לא להרוג את הסובבים אותו מריח צחנה של זיעה, פתר תעלומה של העלמות נערה ממנזר.
ב"מבוך הזיתים", בזמן פתרון התעלומה, הוא ינסה לכסות מערומיו.
כבר ב"תעלומת הקבר המכושף" היה אפשר לזהות את התכונות שיהפכו להצלחה היסטרית ב"מבוך הזיתים":
 הגיבור מטורף, דבר שמאפשר חירות יצירתית גדולה, אין לו עכבות ואין לו גבולות.
 חוש הומור מטורף, שמאפשר לסופר למתוח ביקורת חברתית קטלנית מבלי להישמע נדוש.
 הגיבור, למרות היותו מטורף, בעל כושר המצאה והתמודדות שלא מביישים גאון.
 אחותו של הגיבור זונה, מה שגורר שלל סיטואציות הזויות ומצחיקות עד דמעות.
"המנועים רעמו, והמטוס החל להתקדם בטלטלה מדאיגה, שגרמה לי לחשוב שאם כך הוא נע על הקרקע, מי יודע כיצד יתנהל בשמי ספרד."
את הטלטלות של הצחוק שלי היה אפשר להרגיש בכל הביניין. אני בטוחה שבמכון הססמוגרפי הם חשבו שיש באזור שלנו מיני רעידת אדמה.
ואם כל אלה לא שיכנעו אתכם לרוץ ולקרוא, בוודאי תשכנע אתכם העובדה שגיבורנו המטורף מתאהב בשחקנית ליגה ז` ואפילו זוכה לחסדה! או במילים אחרות, יש בספר סקס.
"מבוך הזיתים" לטעמי, אחד הספרים הטובים והמשעשעים שיצא לי לקרוא בשנים האחרונות. סאטירה פוליטית - חברתית שנונה וחדה, מכה בבטן הרכה ואקטואלית גם כיום, חצי יובל אחרי שנכתבה.
מנדוסה לא חוסך שבטו מהממסד, הפוליטיקאים המושחתים, בעלי ההון, הכנסיה ומהאנשים הקטנים, אלה שעמלים ביום - יום להשיג פרנסתם, אבל לא עושים כלום לשפר מצבם.
נותר לי רק לחכות בכליון עניים לספר הבא.
"מבוך הזיתים", אדוארדו מנדוסה
הוצאת הספריה החדשה, 2007, 235 עמ`
נ.ב ולא אמרתי מילה על הכריכה המדהימה בעניי, ציור של הוקני, שמאוד אוהב, מסתבר, גברים (גמני) ומים (גם אוהבת, אבל פחות מגברים )