<p align="center"><strong>Esto no es una antología, ni mucho menos un canon. Esto es un bestiario. </p></strong>
Aquí se reúnen, acaso, los más salvajes, los más sutiles, los más obsesivos, los más anfibios, los más ellos mismos y ellas mismas. Éstos son los <strong>21 autores </strong>con los que Mariana H quiso conversar, por <strong>curiosidad</strong>, por <strong>morbo</strong>, por<strong> capricho</strong>, por <strong>admiración</strong> y por <strong>asombro</strong>. Platicaron sobre el mundo o el mundillo literario, sobre las listas y los premios, sobre el amor, sobre el placer o el parto de la escritura, sobre ansiolíticos y estimulantes, sobre el kafkiano proceso de publicar en México, sobre Dios y los lectores. Estos 21 escritores y escritoras crecieron en <strong>los ochenta y los noventa</strong>, cuando el mundo era otro, más lento y menos público. Quizá sólo eso los une, eso y el triste código genético compartido de la <strong>violencia</strong>. Y, por supuesto, su apuesta a todo o nada por la <strong>literatura</strong>.</p> <br/> Jazmina Barrera <br/> <strong>Luis Jorge Boone</strong> <br/> Hernán Bravo <br/> <strong>Varela</strong> <br/> Jorge Comensal <br/> <strong>Guillermo Espinosa</strong> <br/> Estrada <br/> <strong>Verónica Gerber</strong> <br/> Bicecci <br/> <strong>Laia Jufresa</strong> <br/> Rodrigo Márquez <br/> <strong>Tizano</strong> <br/> Fernanda Melchor <br/> <strong>Jaime Mesa</strong> <br/> Emiliano Monge <br/> <strong>Luis Muñoz Oliveira</strong> <br/> Antonio Ortuño <br/> <strong>Diego Enrique</strong> <br/> Osorno <br/> <strong>Pergentino José</strong> <br/> Eduardo Rabasa <br/> <strong>Antonio Ramos</strong> <br/> Revillas <br/> <strong>Daniel Saldaña</strong> <br/> París <br/> <strong>César Tejeda</strong> <br/> Sara Uribe <br/> <strong>Carlos Velázquez</strong></p>
Este libro lo compré porque Mariana H dio una charla buenísima en mi diplomado de literatura y lo mencionó, cuando vi el índice me entusiasmé, muchos nombres me fueron conocidos, pero muchos, casi a todos los he leído, y eso fue el trampolín a devorarme esta lectura, que no me decepciona.
Las entrevistas son a los escritores mexicanos más o menos jóvenes del momento, los que aparecieron en la lista aquella que causó polémica. Las charlas son amenas, simpáticas, casuales, íntimas y fáciles de leer. Pareciera que andas sentada en la mesa de a lado, tomándote unas chelas o comiendo una tostada de atún, atenta. Escuchándolos.
Como las preguntas que se hacen a todos son muy parecidas o casi las mismas (lo cual es un punto a favor y un punto en contra) me deprime lo que cuentan sobre el gremio de escritores, de los celos, de la falta de apoyo entre ellos, qué feo, qué lástima. Me gusta cuando hablan de sí mismos, de sus vidas, de su proceso de escribir, hay quiénes lo gozan, otros lo padecen como cáncer de colon.
Me gusta cuando dicen a quiénes leen, todos se leen entre ellos, jaja, no sé si es verdad o era una consigna, pero sólo se mencionan entre ellos.
Me gusta cuando hablan sobre las editoriales, muchos de ellos han fundado algunas.
Me gusta cuando hablan sobre sus manías y miedos y sus inseguridades.
Me aburre cuando hablan sobre sus creencias religiosas.
Me sorprende algo: la mayoría de ellos tienen libros que muy pocos han leído en Goodreads y que no gozan de muy buenas calificaciones, me pregunto, ¿por?
Yo disfruto conocer un poquitín (porque son muy cortas las entrevistas) sobre Fernanda Melchor que me encanta, sobre Laia Jufresa porque escucho sus podcasts, sobre Daniel Saldaña porque su libro es mi favorito de la vida, sobre Ramos Revilla que escribió Los últimos hijos y me impactó, sobre Jazmina Barrera porque amo su libro, sobre Luis Muñoz Oliveira, porque lo sigo por twitter y me cae bien, además escribió un librazo sobre la humillación, y conocer a algunos nuevos como Verónica Gerber.
Otra pregunta que me queda es, ¿por qué parecen desconocidos para cierto público y conocidos para otro? Y la última, ¿cómo es que estos escritores tienen libros tan buenos y otros que no me han gustado tanto? ¿Los hace famosos haber escrito uno sólo que sea bueno?
En fin, lo disfruté, aprendí, me entretuvo y me conmueven los esfuerzos de estos chavos por salir adelante.
Muy mala elección. Prometía muchísimo saber que una periodista como Mariana H pudiera sentarse a conversar con escritores contemporanos. Hablar de sus miedos, sus dudas, sus reacciones, de cómo ven la época literaria que está viviendo México actualmente. Y sin embargo conforme van pasando las entrevistas te das cuenta que ninguna tiene nada de reveladora, nada de emocionante, nada que no sea una aburrida plática con cada uno de los autores.
Este es un trabajo digno de ser leído. Me encantó la soltura de sus palabras y el que pudiera reflejar la inquietud que tantos tenemos de conocer el proceso creativo y formas de pensar de autores contemporáneos en nuestro país. Apenas lo bajé ayer en kindle (por la cuarentena) y me emocionó leer nombres conocidos como Fernanda Melchor, Valeria Luiselli (que no tuvo entrevista pero se menciona un montón), Oliveira y Monge; pero me emocionó aún más poder bajar y pedir libros como Mudanza de Gerber, El Buscador de Cabezas de Ortuño, Umami de Laia Jufresa, Rabia de Jaime Mesa y Las Mutaciones de Jorge Comensal. Se me antojó beber mezcales y platicar sobre literatura.
Lo que me gustó es que me di cuenta que hay una gran cantidad de escritores en México, si bien no escriben sobre temas que me gustan, de hecho siento que no hay variedad en sus temas, pero es bueno que se produzca literatura. Por el otro lado, esperaba mucho más de las entrevistas, las preguntas eran genéricas y en cierto momento sentí que la autora ya estaba harta de preguntar lo mismo, creo que se pudo sacar mucho más de cada conversación.
Es un libro al que llegué pensando que se trataba de algo y resultó ser una cosa muy diferente, pero no por eso malo. Me encantó la prosa de la autora y me parecen entrevistas interesantísimas. Lamentablemente no conozco a ninguno de los autores (tal vez lea a algunos) y eso no me dejó conectarme tanto con el libro, pero las preguntas son inspiradoras y te ponen a pensar.
Pues no hay mucho que decir: Esta recopilación de entrevistas a escritores contemporáneos es una invitación a leer, por lo menos, 21 libros , uno por cada autor que aparece en estas entrevistas.
Un excelente libro sobre la industria editorial en México y cómo los escritores mexicanos llevan su proceso creativo y su vida. Lo amé de principio a fin.