BRUTALNE ZABÓJSTWO. BOHATERKA, KTÓRA ZAWSZE STAWIA NA SWOIM. MROCZNE KULISY ŚWIATA HAZARDU. BITWA, KTÓRĄ WSZYSCY Z GÓRY UZNALI ZA PRZEGRANĄ.
Ana Tramel jest zdolną prawniczką, o silnym charakterze, ale słabej woli, uzależnioną od alkoholu, seksu i leków. Kilka lat temu biły się o nią najlepsze kancelarie. Pewne mroczne wydarzenie sprawiło, że zrezygnowała z kariery adwokackiej i pracuje w małej kancelarii swojej przyjaciółki.Niespodziewany telefon od brata Alejandra, z którym od dawna nie miała kontaktu, wywraca jej życie do góry nogami. Okazuje się, że Alejandro nie tylko zamordował szefa wielkiego kasyna, w którym regularnie przesiadywał, lecz także przegrał tam blisko milion euro, których nie miał. Ana decyduje się pomóc bratu, choć wszystko świadczy przeciwko niemu. Wspierana przez osobliwy zespół (stary detektyw, początkująca prawniczka i uzależniony od hazardu stażysta), wypowiada wojnę potężnemu koncernowi z branży gier liczbowych. Pełne zawirowań śledztwo i proces przypominają walkę Dawida z Goliatem. Ana się jednak nie poddaje nawet wtedy, gdy zostaje na polu walki sama, zdradzona przez najbliższe osoby. Jest niczym filmowy Rocky Balboa: tak jak on potrafi wytrzymać każdy cios.
Normalmente, aunque en un libro el peso de una investigación o la narración de la historia se realice desde el punto de vista del protagonista, al final casi siempre la trama se apodera del libro, dejando al protagonista en un segundo plano. Pero en este libro es justo lo contrario. Aunque empieza con un hecho drástico, la llamada del hermano pidiéndole que le defienda en un caso de asesinato, la protagonista Ana Tramel se apodera del libro, de la historia y de los pensamientos del lector desde el principio, convirtiéndose en el centro de una historia de suspense supeditada a su persona. Y es que el título del libro no puede ser más claro. Este libro es la historia de Ana, es Ana, y punto.
Y es que esta persona, que no personaje, lo tiene todo y no tiene nada. Es una abogada excelente, primera de su promoción, a la que todos los bufetes se rifaban, pero que con un hecho desafortunado que no sabemos hasta bien avanzado el libro, ha perdido el rumbo, el control de su vida y su salud. Está hundida en un pozo de alcoholismo y adicción a los narcóticos y antidepresivos. Y es esta persona la que se tiene que enfrentar al caso más importante de su vida; un caso que es imposible de ganar. A su hermano le acusan del asesinato del director de un casino, con testigos y grabaciones. Y sólo cuenta con la ayuda de un pequeño bufete en quiebra especializado en recursos de multas, formado por una amiga con sus propios problemas y dos abogados novatos, y un investigador privado al que prácticamente no puede permitirse pagar.
Y esa llamada, que atiende y acepta, el hacerse cargo de la defensa de su hermano, destapa la caja de los truenos. Y es que nada es lo que parece, y una pregunta lleva a mil preguntas más. Un caso de asesinato da lugar a la apertura de lo que parece la puerta a un infierno, judicial y personal, con derivaciones sorprendentes.
Con esta historia Roberto Santiago nos muestra dos mundos muy diferentes entre sí.
Por un lado, el mundo truculento del juego, legal y no legal. Con una crítica bastante dura a la falta de protección de los intereses públicos por parte de los estamentos estatales. Y es que si para luchar contra el tabaquismo o el alcoholismo se prohibe los anuncios de tabaco y alcohol, en el mundo del juego sucede lo contrario. A pesar del alto número de casos de ludopatía, el juego está en todas partes: anuncios de casas de apuestas a todas horas (sobre todo durante los partidos de fútbol), bingo o poker en televisión (aunque sea a horas intempestivas), etc.
Por otro lado, nos ofrece una imagen muy fidedigna (dentro de lo que sabe una profana del derecho como yo) de los procesos judiciales en nuestro país, al explicarnos los pasos que tiene que dar Ana tanto en el proceso judicial principal, como en otros casos que aparecen por el camino. Una forma amena y gráfica de mostrarnos como funciona, aunque sea someramente, la justicia en nuestro país; la instrucción, el jurado, como se desarrolla un juicio,... alejándonos de esa imagen televisiva de los juzgados americanos.
Y todo ello sin que resulte pesado o aburrido en ningún momento. Es una lectura más que amena, adictiva, que te atrapa en cada una de sus más de ochocientas páginas. Una verdadera joya que no podéis dejar de leer,
Que gran libro, empezando fuerte desde el principio y terminando igual. Trama sobre trama, sin hacer que pierdas el enganche. Personajes fuertes, me gustaron hasta los malos. 9/10
Nos encontramos con un libro muy potente, tanto por los personajes, como por la trama. La historia la cuenta en primera persona Ana Tramel, abogada, adicta al alcohol y los fármacos. Un personaje complejo y con un sentido de la justicia muy particular. Ana recibe la llamada de su hermano, que ha asesinado al director de un casino. La trama ahonda en el mundo del juego, legal e ilegal, los malos tratos y como se desarrollan los casos judiciales. Un libro con unos personajes y trama bien construídos. Narrado con un ritmo y giros que hacen que no puedas parar de leer. Valoración 4.5/5
No puedo más que darle la enhorabuena al autor por haberme mantenido expectante después de cada página, cada capítulo y cada parte de esta novela negra de 944 páginas que, aunque me encanta el cine negro, no soy muy aficionada cuando es novelado, y no porque lo que haya leído haya sido malo, todo lo contrario, sencillamente porque en principio, no me atraen. El caso es que, las pocas referencias que tenía de Roberto Santiago fueron a través de mis amistades de GR, sin embargo, elegí este título al azar por necesidad de cambiar de temática. Leí la sinopsis de unas cuantas novelas y me decidí por esta, aunque no voy a negar que si hubiese sabido que era tan larga, la hubiese apartado y hubiese sido un tremendo error, porque la disfruté a lo bestia. Trama absorbente, ágil, adictiva, giros argumentales… Cuando llevaba más de la mitad de la novela, se me dio por averiguar algo sobre este escritor, director de cine, dramaturgo y “guionista” y me pregunto: “¿cómo es que no se le ha dado por hacer una peli o una serie de este libro?, sería un guión con tirón”. Pues, se adelantó a mis pensamientos, porque lo ha hecho y en serie, desde luego, chicha hay para rato, seguramente yo ya vaya con retraso, pero por si alguien no lo sabe, está en Netflix y ya he empezado a verla.
No voy a hablar de la sinopsis, ahí está, disponible en el perfil del libro. Solo diré que la novela es buenísima, bien escrita, bien ambientada, muy explícita, adictiva, no le falta nada del género: intriga, suspense, acción, crimen, trama judicial, lleno de giros argumentales, para mí, de nivel, a la altura de Anatomía de un asesinato de Robert Traver o Matar a un ruiseñor de Harper Lee. Te mantiene en vilo de principio a fin, cuando la dejas, solo piensas en volver a retomarla. He de decir que he podido también darle caña gracias al audible.
Un libro impresionante y adictivo que te atrapa durante toda la lectura. La historia está bien construida, con unos giros impresionantes y unos personajes muy complejos, con muchos matices y contradicciones. El lenguaje es sencillo pero cuidado y la parte jurídica es impecable. Para mí, un buen thriller jurídico con una protagonista incomparable
- Estoy con Ana, de Roberto Santiago. Creo que podría gustarte bastante.
- Roberto Santiago, ¿el de los Futbolísimos?
- El mismo.
Así que me fui a Ebiblio y vi que ni siquiera había que esperar para descargarlo, dicho y hecho, directo al Kindle.
Nada más empezarlo me sonaba que había visto un anuncio en televisión que se parecía mucho al libro, y sí, efectivamente en unos días RTVE estrenará una serie basada en esta historia en horario de máxima audiencia.
Ana es una novela con mucha acción, lo que los modernos definirían como un thriller judicial, con unos personajes potentes, especialmente la protagonista principal que es quién da título al libro, y que nos irá narrando en primera persona sus vicisitudes a lo largo de toda la trama. Generalmente la trama de los libros termina envolviendo a los personajes, es lo que más peso tiene, pero en este caso estoy por decir que el personaje principal es lo más importante en toda la historia, más incluso que la propia trama.
Ana Tramel es un personaje complejo, lleno de fantasmas que arrastra desde el pasado, alguien que conoció el éxito y ahora apenas se arrastra, adicta a los fármacos, con una vida en la que no le falta de nada pero que es totalmente vacía, pero un día, cuando suena el teléfono, a pesar de los pesares, su vida va a dar un giro totalmente inesperado. Y hasta ahí puedo contar.
Aunque la trama engancha desde el principio en algunos momentos uno tiene la sensación de que al libro le sobran algunas páginas, alguna reflexión personal de la protagonista sin ir más lejos, pero aún así los continuos giros siempre bien hilvanados hacen que la atención no se pierda.
Me ha parecido una historia soberbia, y además me ha llamado mucho la atención que un escritor al que yo tenía encasillado en la novela infantil y juvenil se destape con esta historia. Evidentemente Roberto Santiago tiene oficio para dar y tomar, pero como digo me ha sorprendido muy agradablemente.
Qué bien haber leído este libro. Dudaba bastante, su extensión en páginas me tiraba un poco para atrás, sin embargo, no me arrepiento de haberlo leído. Sí que tiene muchas páginas, pero merece la pena. Creo que desde la primera página me quedé atrapada por la narrativa del autor y por la trama. Me volví adicta al libro, es cierto. Hacía mucho tiempo que no leía un thriller judicial y este me ha encantado. Totalmente recomendable.
Un libro magnífico. La protagonista me encanta soy muy fan de Ana Tramel. La trama es completamente adictiva y a pesar de ser un libro donde se tratan constantemente temas judiciales y también investigaciones no se hace pesado ni te sientes fuera de lugar en ningún momento. Echaré de menos a Ana. ►Reseña completa en Mi Rinconín de Lectura◄
Thriller legal adictivo y entretenido,en el que a pesar de que el autor nos va contando como es el sistema legal español no aburre en ningún momento. Una protagonista que no deja indiferente, una crítica al mundo del juego, todo ello narrado de tal forma que las 800 páginas del libro no se hacen pesadas, todo lo contrario, quieres seguir leyendo para saber que va pasando, ya que no da respiro. Absolutamente recomendable.
En mi opinión, un poco demasiado larga, aunque no se hace pesada. Quizás se explaye més de los esperado en la descripción de los procesos jurídicos españoles; pero esto la hace también muy interesante, por la diferencia que hay entre nuestro sistema jurídico y los que estamos acostumbrados a ver en la tele o a leer en otros libros, al menos para los legos en la materia, como yo. La narración, siempre en primera persona por parte de la protagonista Ana, es amena; la trama, basada en querellas criminales contra una gran empresa de juegos de azar, esta bien desarrollada, a pesar de que al principio cuesta un poco seguirle el hilo. Los carácteres, bien definidos; aunque siempre desde la perspectiva de Ana. El personaje de la propia Ana, muy bien desarrollado, hace que en algunos momentos le cojas manía. Resumiendo, muy recomendable; aunque en algunos momentos, las descripciones judiciales, podrían haber sido un poco más escuetas.
Hoy os traemos hasta el Blog la reseña de la novela de Roberto Santiago “Ana”, una historia con la que Roberto escritor de historias juveniles, director de cine y dramaturgo debuta en la literatura para adultos con un thriller brutal. Reseña: http://algunoslibrosbuenos.com/ana
Una lectura más que me enfrenta al resto de la humanidad 😁.. Esto ya se está haciendo costumbre. Según las opiniones de otros lectores, esta historia era "trepidante y adictiva", y para mí no ha sido ni lo uno ni lo otro. Eso no quiere decir que no me haya gustado ¿eh? , la he leído muy a gusto, sin sentir ganas de abandonar en ningún momento; pero tampoco estaba loca por seguir avanzando, salvo las ansias por acabarlo cuando llevaba ya dos tercios. Me quedo con lo mejor del libro (y que justo es lo que menos gusta a los lectores Jaja) la protagonista, Ana. Cae mal, muy muy mal, pero justo por sus imperfecciones es por lo que me gusta. En realidad es el único personaje que merece la pena del libro, el resto son meros esbozos. Me ha dejado bastante tocada el trasfondo social del libro; lo que se esconde tras la ludopatia. Y no, no me refiero sólo a la enfermedad, me ha dejado tocada cómo en este país se recauda dinero, y se dan todas las facilidades para que sea así, con las adicciones de las personas (gobierno incluido) . El tema jurídico, que es en realidad la trama del libro, es muy muy interesante y aunque el autor se pone demasiado detallista en los procesos, también se disfruta con los alegatos y triquiñuelas. Pero al final, aunque quiere ser muy realista mostrando el sistema jurídico español, nos desenlaza con una americanada como muchas otras de este estilo, cosas bastante inverosímiles según una amiga abogada. El libro no resulta pesado en su lectura pero sí en su extensión; me explico: la narrativa es bastante lineal, sin altibajos de emoción (ha desaprovechado algunos momentos clave) y claro, eso es tantísimas páginas, acaba agotando. Al libro le sobran bien a gusto unas 200 páginas, muy reiterativo y con cosas que se podría haber ahorrado y no habrían modificado en nada la historia. ¿Recomendaría este libro? Sí, al fin y al cabo sí me ha gustado, aunque me deje con una sensación de insatisfacción y agotamiento.
Me encantó; una gran novela de intriga que recomiendo. El número de páginas, más de 800, me echaba para atrás a la hora de comenzar a leer esta novela, pero realmente se hace ameno, ya que el autor tiene una forma de narrar que hace que su lectura sea ágil, y la historia engancha desde la primera página. La protagonista, Ana, es una mujer imperfecta, que tiene todos los extremos: débil y fuerte; llena de defectos, pero también virtudes; orgullosa, desinhibida… en fin, en muchos momentos me gustaría ser como ella. Por otro lado el tema que trata, la ludopatía y el juego, no lo desconocía, pero tampoco me imaginaba algunas cosas....me impresionó mucho. Desde que leí el libro me entra una rabia tremenda cada vez que veo un famoso anunciando las apuestas online.
Ana Tramel👩🏻, abogada👩🏻💼 que lleva años sin ejercer, recibe la llamada de su hermano Ale🧔🏻♂️ que está acusado del asesinato del director del Casino de Robredo. Ana lleva años sin hablarse con él y desconoce la situación personal de éste. Aunque parezca que tratará de la defensa de Ale, y Ana intentará probar su inocencia, pues no, hay un giro que hará que no sea esa su obsesión, surgirán más tramas conforme avanzamos la lectura y de las que no puedo hablar para no hacer spoiler, El autor nos tiene el alma en vilo en todo momento. Se tratan temas tan delicados como la ludopatía🎰, el poder de las grandes empresas y lo difícil que es tener un litigio con alguna de ellas. Además también las adicciones a sustancias como las pastillas💊 y el alcohol🍸.
Además ,después de esta defensa Ana tendrá que enfrentarse a otra más, a la que no podrá negarse por tratarse de un caso también delicado y que la toca también muy de cerca. Dos casos radicalmente distintos que te hacen ver como se llevan los distintos casos cuando no tienes ni idea de cómo se hace al no tener ninguna referencia sobre leyes más allá que lo que vemos en las películas de juicios👩🏻⚖️👨🏻⚖️, el autor ha hecho una gran trabajo, todas estas explicaciones en ambos casos hacen el libro entretenido, y tienes necesidad de seguir, saber que va a pasar aunque te despidas con pena del personaje y desees saber sobre más casos que lleve nuestra protagonista. Si queréis saber más cositas, la reseña completa está en nuestro blog.
He dudado bastante sobre el número de estrellas que darle a esta novela. Y es que si bien es cierto que engancha bastante y que te tiene toda la trama atrapado, queriendo siempre saber más, y que además sabe perfectamente cómo hacer que cada capítulo termine con un cliffhanger muy bien buscado, también lo es que le sobra paja. Y mucha. Es un libro que podía haberse reducido perfectamente en 100 páginas o más sin haberse perdido nada. Por otro lado la licencia literaria que se toma el autor en los distintos juicios que se relatan con el famoso "protesto, señoría", "la pregunta no es pertinente, protesto" etc es algo que a quienes conocemos el sistema penal español nos hace mucha gracia ya que esa forma de preguntar a la americana es absolutamente impensable en nuestro país. Sin embargo también es verdad que dota a la historia de mucho juego. Se acepta. Lo que ya se acepta menos (no quiero entrar en spoilers) es ese deux ex machina que hace que al final... bueno, no sigo. Tendrás que leerlo tú mismo para averiguarlo.
3 de 5 estrellas ⭐️⭐️⭐️ (me ha gustado) A pesar de ser tan largo había visto tan buenas críticas que me puse a leerlo sin pereza, sin pensarlo. El arranque es muy bueno, inesperado y enseguida engancha pero después es bastante pesado. Pasan muchas cosas como es normal en tanta página pero no veo necesaria tanta, tanta y tanta reflexión de la protagonista sobre cada mínima detalle que discurre en su vida. Es interesante y he aprendido mucho sobre la ludopatia y las casas de juego, también me ha gustado seguir un juicio y ver cómo cada parte exprime a la otra. En cuanto al final me ha parecido un tanto decepcionante y demasiado idílico. Lo recomiendo porque es entretenido pero debes tener en cuenta sus numerosas páginas para atreverte....
Por fin lo he acabado, qué tortura! A ver, el libro no está mal, tiene sus giros y sorpresas, la parte fuera del la ley digamos está muy lograda, pero le sobran por lo menos 200 páginas, he leído los juicios en diagonal, está lleno de repeticiones, no hace falta que cada vez que Ana no quiera mostrar afecto nos cuente sus neuras. El otro día escuché en la radio la presión que sufren los autores (sobre todo juveniles) para sacar los siguientes libros una vez que triunfan. Pues este debe ser el caso, un libro que tenía el autor a medias y que, al arrasar con Futbolísimos, le apremiaron a publicar y se olvidaron de revisar y jibarizar.
Un thriller de alto voltaje que te deja sin aliento. Un cocktail perfecto de intriga judicial con el juego como protagonista. La denuncia social de la lacra de la ludopatía es besial. Me ha enganchado como una adicción. Estupenda novela.
¡Brutal ! 860 páginas que me han sabido a poco. Un thriller "judicial" con una protagonista increíble y una trama muy interesante y que nos adentra en un mundo, el del juego(casinos), que yo al menos desconocía bastante y que me ha dado mucho que pensar.
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No recuerdo haber leído muchas novelas cuyos argumentos giren entorno a un juicio o en la que se siga la preparación de un abogado para el mismo; realmente sólo se me viene a la mente "Matar a un ruiseñor" y algunas escenas de juicios segundarios en las tramas.
Dicho esto, es una novela que atrapa al lector en las primeras páginas y que consigue mantener esa atracción y es necesidad constante de saber qué más pasará. Pese a ser un libro extenso para su genero, no cae en capítulos vacíos de contenido o que se desvían de la trama para engrosar más la historia, aquí todo forma parte de la vida de Ana Tramel y nos hace participes de todas sus miserias y todas sus bondades (escasas por otra parte).
Y es que otro de los encantos es que Roberto Santiago ha perfilado una protagonista que se siente cómoda siendo ambigua, que juega al equilibrio de ser heroína y un antiheroína.
Ha sido una lectura absorbente y muy pero que muy disfrutada.