What do you think?
Rate this book
Heridas del viento
Armenia, el país en el que todo es posible, el país que, como eterna Arca de Noé, pone a resguardo de tempestades humanas y de las otras, variopintas especies de su cultura milenaria. Allí se convive con una historia extravagante en la que persas, árabes, mongoles, turcos y rusos han querido llevar el timón. Aún hoy Armenia, el viejo país de cuatro mil años, el primero de la cristiandad, el que ejerce de bisagra entre oriente y occidente, mantiene más del doble de su población en la diáspora. Ser armenio significa ser superviviente: guerras, invasiones, terremotos, masacres y un pavoroso genocidio que se llevó un millón y medio de vidas, según sus cuentas. Este libro habla de historias imposibles, pero ciertas. Personajes que levantan hoy el país con mucho amor y mejor humor. Virginia Mendoza entra en sus casas y comparte mesa con algunos de los últimos supervivientes de ese genocidio, visita a los yazidíes que rinden culto a Melek Taus, el Ángel Pavo Real, o a los cristianos molokanes, bebedores de leche; habla con la viuda del constructor de un templo subterráneo para salvar a la humanidad del fuego; nos presenta a los homenajeadores de Jachaturian y a la nieta de una esclava. Voces sabias, a veces llenas de melancolía, pero siempre esperanzadas. No deja de ser una ironía amarga que el símbolo de su identidad, el monte Ararat, esté del otro lado de la frontera como emblema de la presencia de una ausencia. Pero «no intentes comprender. Esto es el Cáucaso», dicen por ahí.
http://lalineadelhorizonte.com/214-he...
http://lalineadelhorizonte.com/214-he...
264 pages, Paperback
First published April 12, 2015
7 people are currently reading
126 people want to read
About the author
Virginia Mendoza
10 books59 followersVirginia Mendoza es periodista y antropóloga. Ha escrito crónicas y reportajes para revistas como Gatopardo, Papel (El Mundo), Viajes de National Geographic, Jot Down, El Español, Verne (El País) Altaïr, Salvaje y Yorokobu, entre otros. Es columnista en Plaza. Es autora de 'Detendrán mi río' (Libros del K.O., 2021), 'Jane Goodall. Una revolucionaria en la investigación del mundo animal' (RBA, 2019)'Heridas del viento' (La línea del horizonte, 2018) y 'Quién te cerrará los ojos' (Libros del K.O., 2017). Además del de Jane Goodall, ha escrito el libro sobre Alexandra David-Néel de la colección Grandes Mujeres de RBA. Ha participado en los libros 'Cien años del genocidio armenio: Un siglo de silencio' (E-ditarx, 2016) y '(h)amor' (Continta me tienes, 2015).
Ratings & Reviews
Friends & Following
Create a free account to discover what your friends think of this book!
Community Reviews
Displaying 1 - 13 of 13 reviews
September 13, 2015
Plasma a la perfección la pasión de la autora por descubrir y contar historias, por desprenderse y desprendernos de los prejuicios. La crónica va 'in crescendo', en especial me gusta el capítulo que, si ni me equivoco, se llama Palabras. Y el de Silencios. Está contando con buen gusto, sin recurrir al sensacionalismo, tal y como debe hacerse el periodismo. En sus páginas encuentras detalles preciosos que te hablan de las bondades de la profesión. Es uno de esos libros que dejan con ganas de conocer a la autora para descubrir todavía más.
July 24, 2015
Virginia Mendoza, periodista y antropóloga, realizó un Voluntariado Europeo en Armenia. “Heridas del viento. Crónicas armenias con manchas de jugo de granada”, con prólogo de Ander Izaguirre, es el souvenir que Virginia Mendoza nos ha traído de aquel país. Su primer libro publicado es el resultado de un laborioso trabajo periodístico y antropológico que durante meses Virginia realizó en Armenia, trasladándonos todo lo que conoció y aprendió del país donde todo empezó.
Bajo la mirada del monte Ararat, Virginia recoge testimonios de supervivientes del genocidio armenio, de aquellas personas que se vieron obligadas a dejar sus hogares, y de aquellas mujeres que se vieron obligadas a acceder a matrimonios forzados y convertirse en esclavas sexuales si querían preservar su vida y la de su familia. También recoge testimonios de algunos supervivientes del terremoto que asoló el norte del país el 7 de diciembre de 1988, y que aún siguen viviendo en domiks con la esperanza de obtener algún día la casa que el Gobierno les prometió. Y es que Armenia es un lugar lleno de supervivientes, donde ni genocidios, ni guerras, ni terremotos, son capaces de quitarles la sonrisa ni la esperanza.
A través de silencios, voces, estelas y líneas, Virginia nos transmite la singularidad del pueblo armenio, así como su hospitalidad, siempre dispuestos a poner una mesa de comida para el extranjero. Al tiempo perdí la cuenta de los cafés, tés y vodkas que Virginia se tuvo que tomar por cada casa que visitó. Y es que Virginia no se queda solo en lo superficial, entra en las casas de los armenios, habla con ellos, convive con ellos, les escucha detenidamente, y nos lo traslada con todo detalle y con su peculiar punto de vista. Gracias a su labor podemos conocer la cultura y creencia de los molokanes, cristianos que se opusieron a las normas de la nueva Iglesia Ortodoxa y conocidos como los bebedores de leche, o ver cómo viven los yazidíes, que conforman una minoría étnica en Armenia.
El hecho de conocer personalmente a la autora de “Heridas del viento” enriquece muchísimo la lectura, así como haber seguido sus vivencias en Armenia a través de su blog Cuaderno Armenio, donde podemos poner cara a muchos de los personajes que Virginia retrata en sus crónicas. Personajes como el revolucionario Sasun Papik, que no desiste en su lucha por conseguir que Armenia recupere algún día los territorios que se quedaron Azerbaiyán, Turquía y Georgia; la niña que se empeña en acabar las cosas que a su parecer están sin terminar; o la anciana Hasmik, que teje guantes y calcetines en el cementerio de Noratus.
Sin duda, “Heridas del viento” es una magnífica obra, imprescindible para aquellos que quieran conocer Armenia, un país con gente maravillosa, que enamorará a cualquiera que decida leer este libro.
Reseña publicada también en "De Lectura Obligada": https://lecturaobligada.wordpress.com...
Bajo la mirada del monte Ararat, Virginia recoge testimonios de supervivientes del genocidio armenio, de aquellas personas que se vieron obligadas a dejar sus hogares, y de aquellas mujeres que se vieron obligadas a acceder a matrimonios forzados y convertirse en esclavas sexuales si querían preservar su vida y la de su familia. También recoge testimonios de algunos supervivientes del terremoto que asoló el norte del país el 7 de diciembre de 1988, y que aún siguen viviendo en domiks con la esperanza de obtener algún día la casa que el Gobierno les prometió. Y es que Armenia es un lugar lleno de supervivientes, donde ni genocidios, ni guerras, ni terremotos, son capaces de quitarles la sonrisa ni la esperanza.
A través de silencios, voces, estelas y líneas, Virginia nos transmite la singularidad del pueblo armenio, así como su hospitalidad, siempre dispuestos a poner una mesa de comida para el extranjero. Al tiempo perdí la cuenta de los cafés, tés y vodkas que Virginia se tuvo que tomar por cada casa que visitó. Y es que Virginia no se queda solo en lo superficial, entra en las casas de los armenios, habla con ellos, convive con ellos, les escucha detenidamente, y nos lo traslada con todo detalle y con su peculiar punto de vista. Gracias a su labor podemos conocer la cultura y creencia de los molokanes, cristianos que se opusieron a las normas de la nueva Iglesia Ortodoxa y conocidos como los bebedores de leche, o ver cómo viven los yazidíes, que conforman una minoría étnica en Armenia.
El hecho de conocer personalmente a la autora de “Heridas del viento” enriquece muchísimo la lectura, así como haber seguido sus vivencias en Armenia a través de su blog Cuaderno Armenio, donde podemos poner cara a muchos de los personajes que Virginia retrata en sus crónicas. Personajes como el revolucionario Sasun Papik, que no desiste en su lucha por conseguir que Armenia recupere algún día los territorios que se quedaron Azerbaiyán, Turquía y Georgia; la niña que se empeña en acabar las cosas que a su parecer están sin terminar; o la anciana Hasmik, que teje guantes y calcetines en el cementerio de Noratus.
Sin duda, “Heridas del viento” es una magnífica obra, imprescindible para aquellos que quieran conocer Armenia, un país con gente maravillosa, que enamorará a cualquiera que decida leer este libro.
Reseña publicada también en "De Lectura Obligada": https://lecturaobligada.wordpress.com...
December 8, 2015
Entre el libro documental, la recopilación de artículos periodísticos y la memoria histórica, Virginia Mendoza nos presenta en este libro, con una prosa tersa, cercana y a ratos lírica, sus recuerdos personales del tiempo vivido en Armenia.
Como supongo les sucederá a muchos lectores, en parte a causa del centenario, la mención del pueblo armenio me hace pensar, en primer lugar, en el genocidio que sufrió a comienzos del siglo XX. El libro de Mendoza, sin embargo, ofrece mucho más: una visión antropológica, intrahistórica y, sobre todo, personal, llena de rostros, de nombres, de apellidos, de personas que viven y respiran en sus páginas.
Al acertado prólogo de Ander Izaguirre, lleno de sensibilidad y precisión, siguen los artículos de Mendoza (algunos de los cuales han sido publicados anteriormente en otros medios). De las partes en que ha estructurado el libro, la primera, centrada en costumbres, ritos y todo tipo de curiosidades de tipo etnográfico sobre los lugares que visita en Armenia, determina sin duda el encanto y la simpatía que siente la lectora. Un pueblo vital y sonriente, a la par que profundo, una cultura y una tradición vivos: esto es lo que transmite. La segunda parte del libro está más centrada en los muchos golpes que Armenia ha recibido a lo largo de su historia (el genocidio, el conflicto por Nagorno-Karabaj, el terremoto..). En estas páginas, los testimonios de los personajes que la autora conoce durante su viaje por el país, y que articulan el alma de este libro, adquieren más profundidad y extensión, en consonancia con la gravedad de los temas tratados.
En conclusión, he de decir que considero que este volumen es una lectura muy recomendable, por su mezcla de rigor periodístico, histórico y antropológico que muestra, pero sobre todo por la viveza y la verdad que transmiten los retratos de los personajes que la autora conoce durante su viaje. Un volumen imprescindible para los que queremos iniciarnos en la cultura armenia, o simplemente para cualquiera que quiera abrir los ojos y conocer un poco mejor la hermosa diversidad de las culturas humanas.
Recibí el libro a través de GoodReads First Reads.
Como supongo les sucederá a muchos lectores, en parte a causa del centenario, la mención del pueblo armenio me hace pensar, en primer lugar, en el genocidio que sufrió a comienzos del siglo XX. El libro de Mendoza, sin embargo, ofrece mucho más: una visión antropológica, intrahistórica y, sobre todo, personal, llena de rostros, de nombres, de apellidos, de personas que viven y respiran en sus páginas.
Al acertado prólogo de Ander Izaguirre, lleno de sensibilidad y precisión, siguen los artículos de Mendoza (algunos de los cuales han sido publicados anteriormente en otros medios). De las partes en que ha estructurado el libro, la primera, centrada en costumbres, ritos y todo tipo de curiosidades de tipo etnográfico sobre los lugares que visita en Armenia, determina sin duda el encanto y la simpatía que siente la lectora. Un pueblo vital y sonriente, a la par que profundo, una cultura y una tradición vivos: esto es lo que transmite. La segunda parte del libro está más centrada en los muchos golpes que Armenia ha recibido a lo largo de su historia (el genocidio, el conflicto por Nagorno-Karabaj, el terremoto..). En estas páginas, los testimonios de los personajes que la autora conoce durante su viaje por el país, y que articulan el alma de este libro, adquieren más profundidad y extensión, en consonancia con la gravedad de los temas tratados.
En conclusión, he de decir que considero que este volumen es una lectura muy recomendable, por su mezcla de rigor periodístico, histórico y antropológico que muestra, pero sobre todo por la viveza y la verdad que transmiten los retratos de los personajes que la autora conoce durante su viaje. Un volumen imprescindible para los que queremos iniciarnos en la cultura armenia, o simplemente para cualquiera que quiera abrir los ojos y conocer un poco mejor la hermosa diversidad de las culturas humanas.
Recibí el libro a través de GoodReads First Reads.
February 15, 2020
Me ha gustado mucho, gracias Virginia por tu dedicación para cavar en la historia del pueblo armenio y el buen humor que no te faltó para algunas circunstancias que me han hecho reír a carcajadas.
July 29, 2019
Algunos libros te persiguen durante mucho tiempo. A veces se esconden en la estantería esperando a que mires indeciso sus lomos y en ese momento caen en tus manos. O parpadean cada vez que abres tu página de internet favorita para buscar nuevas lecturas. Te resistes un tiempo, pero al final cedes a su insistencia y los abres. A veces, solo a veces, descubres que ese libro tenía razón en insistir tanto. Esta es una de esas ocasiones.
Mi primera sorpresa con "Heridas del viento" fue descubrir que no es una novela, porque la palabra crónicas está tan asociada en mi cabeza a sagas de fantasía que olvidé sus principales significados:
6. f. Narración histórica en que se sigue el orden consecutivo de los acontecimientos.
7. f. Artículo periodístico o información radiofónica o televisiva sobre temas de actualidad.
"Heridas del viento" son las crónicas escritas por Virginia Mendoza durante su estancia en Armenia, un país situado en el camino de todas las potencias que se han disputado el control de las rutas entre Asia y Europa desde la antiguedad. A pesar de las invasiones los armenios han mantenido su identidad como pueblo aún habiendo sido conquistados docenas de veces. Diezmado su territorio, deportados y asesinados en masa durante la I Guerra Mundial, expulsados de su territorio hasta reducir su país a un tercio de su territorio histórico hoy viven con la esperanza de recuperar algún día su símbolo: el bíblico monte Ararat.
Pero esto solo son datos que cualquier búsqueda en la red puede ofrecer en segundos. Lo que encontrarás en este libro son vidas, fragmentos de realidad que la mirada de Virginia transforma en un relato de resistencia. Estas crónicas de Armenia no son sobre los titulares de los periodicos; tratan de la gente normal que vive, ama, odia, respeta y sueña asomada a lo que pasa en la calle de sus pueblos. Gente que abre las puertas de sus casas a una joven extranjera para contarle sus sueños, para explicar porque son distintos de sus vecinos y el sentido de sus costumbres. Gente empeñada en casarla antes de que las arrugas marquen su piel, que en eso no son tan diferentes de nuestras abuelas. Quizás porque me crié en un mundo rural en el que aún sobrevivían costumbres de tiempos más difíciles he visto en estos relatos fragmentos de lo que fué mi tierra no hace tantos años, quizás por eso me he sentido tan sacudido por las heridas del viento.
A lo largo de todo el texto la mirada tranquila de Virgina te guía por un territorio montañoso, agrietado por el azote de la guerra y los terremotos, con el paso tranquilo de los que conocen los peligros de las montañas. Sin dogmatismos, sin establecer divisiones entre buenos y malos, ganadores o perdedores. Porque al final lo que nos regala son su relato de las imágenes de una tierra lejana.
Tengo que pedir disculpas a Virginia Mendoza por la tardanza en escribir esta reseña. Recibí su libro a través de un giveaway que organizó en esta misma página en Octubre de 2015 y, a pesar de leerlo hace meses, no he sido capaz de poner en orden mis ideas hasta ahora. Ni siquiera después de este tiempo ha desaparecido la sensación de que algún día, si tiene la oportunidad, Virginia escribirá otros libros de viajes que ocuparán en mi biblioteca un sitio al lado de los grandes maestros como Manu Leguineche y Javier Reverte.
Mi primera sorpresa con "Heridas del viento" fue descubrir que no es una novela, porque la palabra crónicas está tan asociada en mi cabeza a sagas de fantasía que olvidé sus principales significados:
6. f. Narración histórica en que se sigue el orden consecutivo de los acontecimientos.
7. f. Artículo periodístico o información radiofónica o televisiva sobre temas de actualidad.
"Heridas del viento" son las crónicas escritas por Virginia Mendoza durante su estancia en Armenia, un país situado en el camino de todas las potencias que se han disputado el control de las rutas entre Asia y Europa desde la antiguedad. A pesar de las invasiones los armenios han mantenido su identidad como pueblo aún habiendo sido conquistados docenas de veces. Diezmado su territorio, deportados y asesinados en masa durante la I Guerra Mundial, expulsados de su territorio hasta reducir su país a un tercio de su territorio histórico hoy viven con la esperanza de recuperar algún día su símbolo: el bíblico monte Ararat.
Pero esto solo son datos que cualquier búsqueda en la red puede ofrecer en segundos. Lo que encontrarás en este libro son vidas, fragmentos de realidad que la mirada de Virginia transforma en un relato de resistencia. Estas crónicas de Armenia no son sobre los titulares de los periodicos; tratan de la gente normal que vive, ama, odia, respeta y sueña asomada a lo que pasa en la calle de sus pueblos. Gente que abre las puertas de sus casas a una joven extranjera para contarle sus sueños, para explicar porque son distintos de sus vecinos y el sentido de sus costumbres. Gente empeñada en casarla antes de que las arrugas marquen su piel, que en eso no son tan diferentes de nuestras abuelas. Quizás porque me crié en un mundo rural en el que aún sobrevivían costumbres de tiempos más difíciles he visto en estos relatos fragmentos de lo que fué mi tierra no hace tantos años, quizás por eso me he sentido tan sacudido por las heridas del viento.
A lo largo de todo el texto la mirada tranquila de Virgina te guía por un territorio montañoso, agrietado por el azote de la guerra y los terremotos, con el paso tranquilo de los que conocen los peligros de las montañas. Sin dogmatismos, sin establecer divisiones entre buenos y malos, ganadores o perdedores. Porque al final lo que nos regala son su relato de las imágenes de una tierra lejana.
Tengo que pedir disculpas a Virginia Mendoza por la tardanza en escribir esta reseña. Recibí su libro a través de un giveaway que organizó en esta misma página en Octubre de 2015 y, a pesar de leerlo hace meses, no he sido capaz de poner en orden mis ideas hasta ahora. Ni siquiera después de este tiempo ha desaparecido la sensación de que algún día, si tiene la oportunidad, Virginia escribirá otros libros de viajes que ocuparán en mi biblioteca un sitio al lado de los grandes maestros como Manu Leguineche y Javier Reverte.
August 16, 2021
Es como conocer Armenia a pie de calle.
August 8, 2019
<< en las inmediaciones de las fronteras ocurre lo mejor y lo peor del ser humano. es ahí donde todo se funde o colapsa, donde se mezclan los idiomas y los rasgos, donde el odio adquiere las características de un ser vivo que nace y muere.>>
.
.
.
este libro es un duelo. así comienza #virginiamendoza sus crónicas armenias. este libro es un duelo porque desde que Noé encayó su arca en el monte Ararat y ésta se convirtió en el útero de la nueva civilización, el pueblo armenio no ha dejado de ser nómada, errante y como todo aquel que parte siempre deja algo por el camino.
. .
Decía Flaubert que la nacionalidad debía ser marcada según aquellos lugares que, por una razón u otra, nos atraían de manera irresistible o como ocurrió en el caso de la autora, a través de un sueño donde sin saberlo su abuelo la mandaba a una Armenia llena de personas con un corazón bondadoso, generoso y hospitalario, personas peculiares que no pierden la sonrisa y las ganas de vivir, gente que lucha por mantener a su país en el mapa y que después de todos los horrores que han visto, de llegar casi a rozar la paz con la yema de los dedos son capaces de decir que únicamente han tenido mala suerte.
.
.
#heridasdelviento es una colección de artículos que la periodista y antropóloga Virginia Mendoza recoge en este libro de sus viajes a Armenia desde el 2013. Virginia te adentra, sin que te des cuenta, en todo el mosaico que es esa zona denominada como la bisagra entre oriente y occidente y a la que yo me atrevería a llamarla la zona limbo. Aquí conviven molokanes y yazidies, turcos, armenios, rusos,... aquellos que sobrevivieron al genocidio, al terremoto y a una paz que se resiste a llegar porque perdieron al Ararat, su cuna de nacimiento, pero no dejarán que nadie les quite el último resquicio de su historia.
.
.
Al estilo de lo que en su día hicieron Ella Maillart y Annemarie Schwarzenbach en sus viajes por Turquía, Persia y Afganistán este libro homenajea a todos aquellos que << levantan el país con mucho amor y mejor humor >> y que montan una mesa para comensales e invitados mientras te desgranan, si así lo creen, sus historias. Pero 'no intentes comprender. Esto es el Caúcaso.'
.
.
.
este libro es un duelo. así comienza #virginiamendoza sus crónicas armenias. este libro es un duelo porque desde que Noé encayó su arca en el monte Ararat y ésta se convirtió en el útero de la nueva civilización, el pueblo armenio no ha dejado de ser nómada, errante y como todo aquel que parte siempre deja algo por el camino.
. .
Decía Flaubert que la nacionalidad debía ser marcada según aquellos lugares que, por una razón u otra, nos atraían de manera irresistible o como ocurrió en el caso de la autora, a través de un sueño donde sin saberlo su abuelo la mandaba a una Armenia llena de personas con un corazón bondadoso, generoso y hospitalario, personas peculiares que no pierden la sonrisa y las ganas de vivir, gente que lucha por mantener a su país en el mapa y que después de todos los horrores que han visto, de llegar casi a rozar la paz con la yema de los dedos son capaces de decir que únicamente han tenido mala suerte.
.
.
#heridasdelviento es una colección de artículos que la periodista y antropóloga Virginia Mendoza recoge en este libro de sus viajes a Armenia desde el 2013. Virginia te adentra, sin que te des cuenta, en todo el mosaico que es esa zona denominada como la bisagra entre oriente y occidente y a la que yo me atrevería a llamarla la zona limbo. Aquí conviven molokanes y yazidies, turcos, armenios, rusos,... aquellos que sobrevivieron al genocidio, al terremoto y a una paz que se resiste a llegar porque perdieron al Ararat, su cuna de nacimiento, pero no dejarán que nadie les quite el último resquicio de su historia.
.
.
Al estilo de lo que en su día hicieron Ella Maillart y Annemarie Schwarzenbach en sus viajes por Turquía, Persia y Afganistán este libro homenajea a todos aquellos que << levantan el país con mucho amor y mejor humor >> y que montan una mesa para comensales e invitados mientras te desgranan, si así lo creen, sus historias. Pero 'no intentes comprender. Esto es el Caúcaso.'
July 6, 2025
No es una novela como tal, sino una trabajada y creo que acertada recopilación de historias reales de personas (como las que me gusta a mí ver en el cine) que, dejando juicios aparte, han luchado por su país, Armenia, por su tierra y por su vida y la de sus familias. A pesar del horror vivido con el genocidio de millón y medio de armenios y demás avatares históricos.
Increíble la inmersión de Virginia Mendoza en su cultura y cómo relata a bocaditos sus dramas y pequeñas alegrías.
He empezado el libro antes de visitar Armenia y lo acabo una semana después de volver, y creo que este libro aporta aún más a mi viaje.
Increíble la inmersión de Virginia Mendoza en su cultura y cómo relata a bocaditos sus dramas y pequeñas alegrías.
He empezado el libro antes de visitar Armenia y lo acabo una semana después de volver, y creo que este libro aporta aún más a mi viaje.
April 10, 2024
Lo que transmite Virginia Mendoza es una auténtica maravilla.
Te hace sentir en Armenia y un poco armenio, no se puede contar mejor la historia de un país y su gente, su forma de ser de vivir e incluso su comida y su afición al vodka (destripe pero no mucho🤭)
Próxima meta en la vida: Subir el Monte Ararat
Te hace sentir en Armenia y un poco armenio, no se puede contar mejor la historia de un país y su gente, su forma de ser de vivir e incluso su comida y su afición al vodka (destripe pero no mucho🤭)
Próxima meta en la vida: Subir el Monte Ararat
July 25, 2020
Valiente escritora o periodista, que relata su viaje a Armenia, dónde consigue interesantes testimonios. Buena lectura para preparar viaje a Armenia.
July 31, 2019
Libro de viajes que nos acerca la realidad y la historia de Armenia. Hermoso y poético. Cientos de historias.
June 3, 2021
A pesar de ser un compendio de crónicas independientes, el libro funciona muy bien como un conjunto y nos acerca a un país - un pueblo - desconocido para muchos (entre los que me incluyo).
Son crónicas a veces anecdóticas, a veces muy cercanas a los personajes a pesar de la barrera del idioma y los referentes culturales. Pero son personas que enseguida quieren entablar conversación, primero para curiosear sobre los visitantes, y que enseguida se van abriendo a contar sus vivencias.
Pero después de ir introduciéndose e introduciéndonos en el país, Mendoza comienza a profundizar en su historia y sus problemas y nos lleva a la gran tragedia del genocidio armenio, a los damnificados por el terremoto de 1988, a la guerra no cerrada de Nagorno Karabaj, todo a través de testimonios y conversaciones con la gente que va encontrando.
En fin, un libro perfectamente encuadrado en la literatura de viajes a la que está enfocada la editorial que lo publica.
Son crónicas a veces anecdóticas, a veces muy cercanas a los personajes a pesar de la barrera del idioma y los referentes culturales. Pero son personas que enseguida quieren entablar conversación, primero para curiosear sobre los visitantes, y que enseguida se van abriendo a contar sus vivencias.
Pero después de ir introduciéndose e introduciéndonos en el país, Mendoza comienza a profundizar en su historia y sus problemas y nos lleva a la gran tragedia del genocidio armenio, a los damnificados por el terremoto de 1988, a la guerra no cerrada de Nagorno Karabaj, todo a través de testimonios y conversaciones con la gente que va encontrando.
En fin, un libro perfectamente encuadrado en la literatura de viajes a la que está enfocada la editorial que lo publica.
November 23, 2016
Desigual. Globalmente interesante.
Displaying 1 - 13 of 13 reviews