Creo que tiene una prosa muy rica. Hay sectores redundantes que no termino de saber si es una decisión (creo que sí) o un enamoramiento de la propia escritura (que no estaría mal de todos modos). Extensa pero entretenida, Massuh se ganó un lugar importante, sobre todo por su ser mujer en tiempos de crisis general.
Pensé que no me iba a atrapar pero se volvió un lesbodrama con formato de diario intimo que juega con ensayo, crónica, poesía, citas. Me encantó la forma y el estilo.
Me costó un montóm de tiempo terminar este libro. Las primeras páginas me atraparon, junto con la historia de Diana, pero al pasar los años la historia solo se fue volviendo aburrida y extensa sin sentido.