Pese a que el videojuego sigue siendo considerado un trabajo y una afición de y para hombres, los estudios más recientes demuestran que cada vez son más las mujeres que se suman a este mundo (ya sea como desarrolladoras, ya sea como creadoras de contenido, ya sea como consumidoras), no sin muchos obstáculos de por medio. Prejuicios, tópicos y actitudes misóginas y sexistas son algunas de las trabas a las que tienen que hacer frente las mujeres involucradas en el mundo del videojuego. Mujeres con experiencia en todos los ámbitos del videojuego (comunicación, marketing, traducción, arte, programación, diseño, periodismo, crítica?) exponen cómo el género supone una barrera y cómo ellas han empezado a promover un cambio sobre un problema que, por desgracia, es estructural y no exclusivo del videojuego.
Una recopilación fantástica que ataca y reconstruye al videojuego desde un enfoque multidisciplinar. Fundamenta a la perfección su enfoque de género, se expone sin tapujos u ofrece alternativas, reconociendo los avances hasta ahora y a las mujeres (muchas olvidadas) que los han hecho posibles.
Brutal. Es un libro que empieza desde lo más básico y va ahondando más y más en la problemática que sufren las mujeres y situación en los videojuegos. Además puede leerse, como el prologo indica, tanto si se tiene poca idea de videojuegos como si se tiene idea justa de feminismo pero mucho interés. Todo esto gracias a unas autoras que han escrito su apartado correspondiente de la mejor manera posible y tocando todas las profesiones dentro del sector.. 10/10.
Lo he leído poco a poco, saboreando cada artículo y retrasando el momento de terminarlo porque… no quería que terminase, quería seguir leyendo más y más.
Son muchas voces las que aparecen en este ensayo y, aun así, en ningún momento he tenido la sensación de que desentonasen. Al contrario, todos los artículos tienen profundidad, son exhaustivos… Es verdad que hay elementos que se repiten, que piensas «Esto ya se ha mencionado», pero, tratando el tema que tratan, como para que no aparezcan; y el detalle de que se citen entre ellas deja claro que ha sido un proyecto bien trabajado, bien meditado, bien organizado y coordinado.
En cuanto al contenido en sí, no ha habido un solo artículo que no me haya interesado o que me haya parecido cojo o fuera de lugar. Mi nivel de conocimiento en videojuegos es bastante limitado (de haber jugado mucho cuando era joven y de tener amigos y conocidos que trabajan en el sector y que, a veces, me cuentan cosas), pero todo está tan bien explicado que no me he sentido pato, y el último artículo me ha parecido perfecto como cierre, un «de esto estamos hablando, por cosas como estas nos estamos quejando».
Dicho todo esto, he de decir que mientras leía el libro no dejaba de pensar «¿Cómo es posible que apenas haya oído hablar de este ensayo en mi entorno?». No trata de literatura, cierto, pero es friki, es feminista y la calidad de los textos es innegable. Y mientras escribo estas líneas me da por mirar los datos de los Ignotus de 2019 y descubro que solo recibió un voto en primera fase. Uno. Ya sé que se entiende que los Ingotus van de otra cosa, pero, bah, los videojuegos son transversales a la literatura, como pueden ser los cómics o las películas, y estos tienen categoría propia en estos premios, así que… una pena, la verdad.
Por mi parte, solo me queda recomendar mucho este libro. A todo el mundo. Sea gamer o no. Estas voces tienen que ser oídas, lo que cuentan es importante.
Puede ser que ya sepáis que en el mundo de los videojuegos hay pocas mujeres. Si os habéis interesado por el tema, sabréis que hay razones para ello. Includo puede ser que podáis enumerarlas. En cualquiera de los casos anteriores. tenéis que leer este libro. Desde distintas perspectivas de distintas mujeres ¡Protesto! consigue que abramos aún más los ojos y nos demos cuenta de todas las situaciones injustas que han pasado las mujeres en este medio audiovisual (y en otros). Además, el modo en el que está estructurado el libro permite que no se haga pesado o repetitivo.
Extremadamente necesario. Muy completo porque abarca muchísimos aspectos diferentes y experiencias de las mujeres en el mundo de los videojuegos. Me encantaría poder seguir leyendo este tipo de libros porque todavía tenemos mucho que contar.
“De primeras, se cuestiona hasta la saciedad que a las mujeres les gusten los videojuegos. Ya sea por ser «más sociables», por ser menos habilidosas o por no jugar desde niñas, siempre hay algo que hace que no seamos unas verdaderas aficionadas. Nunca juegas suficientes horas, no te sabes todos los detalles de tu juego favorito, no conoces todos los juegos de culto... E incluso cuando te esfuerzas en cumplir todos los requisitos, el desgaste mental es un precio demasiado alto. Personalmente, yo aun me sigo cuestionando si me gustan los videojuegos de verdad, y eso que me dedico a desarrollarlos.”― Irene Alvarado. “¡Protesto!” es la primera colección de ensayos editada en España sobre la industria de los videojuegos desde una perspectiva de género. Esta industria, que está en pleno boom con la popularización del streaming y los esports, ha sido, desde sus orígenes allá por los años 80, un caldo de cultivo para la misoginia más infame. Uno de los ejemplos más ilustrativos del machismo imperante es el caso Gamer Gate, mencionado numerosas veces en el libro, en el que miles de hombres llevaron a cabo una campaña de acoso y derribo (incluyendo, cómo no, amenazas de muerte y violación) a varias mujeres de la industria por motivos tan dispares como absurdos, bajo el pretexto de mantener la ética en el periodismo de videojuegos. A lo largo de la obra, 12 mujeres que trabajan o han trabajado en diferentes ámbitos del mundo gamer aportan su punto de vista desde un enfoque multidisciplinar: desde la representación de la mujer y lo femenino en el videojuego, la necesidad de una traducción inclusiva y neutra, el papel de las mujeres en la programación y la publicidad (¿sabías que fuimos pioneras, hasta que en los años 80 el marketing se hipermasculinizó para atraer solamente al público masculino?), o el hostil recibimiento de las gamers (a secas) en el mundo de la competición profesional. Sin embargo, las cosas pueden cambiar, y lo están haciendo, gracias a los esfuerzos de muchas aficionadas y profesionales, como estas 12 pioneras. En palabras de Marina Amores, coordinadora del proyecto, “este libro es un desafío a esa invitación al silencio que las mujeres (...) hemos recibido prácticamente desde que empezamos a jugar a videojuegos. Es una pequeña pastilla contra el desconocimiento. Es y pretende ser impertinente para los que todavía viven en su casa del árbol”.
A pesar de que algún capítulo se me ha hecho bola, en general me ha parecido un libro muy bien escrito, argumentado y entretenido. Me ha abierto los ojos en cuanto a la situación en un sector que todavía se resiste bastante a evolucionar socialmente, y directamente me ha dado ansiedad leer algunos pasajes.
Si estáis familiarizados con el trabajo de las autoras probablemente no os venga de nuevo el contenido de ¡Protesto!.
Para los que no, es una introducción estupenda a la perspectiva de género en los jueguitos en castellano, abarcando desde la narrativa a las experiencias personales, pasando por el diseño de personajes o la traducción de contenido textual.
Mi única cosa con el libro es que las gráficas necesitan un poco de edición. Muchas se ven pixeladas y la ausencia de contraste dificulta su lectura.
Pero en general me ha parecido una lectura muy ¿satisfactoria?, si bien exasperante por el hecho de esperar que al menos al otro lado de la pantalla fueran un poco mejor las cosas.
No sabía lo que necesitaba leerlo hasta que lo terminé. Una suma de perspectivas muy interesantes y variadas. Se lo recomendaría a cualquiera de mis amigas y conocidas del sector, así como a las aficionadas.
Me parece un ensayo acertado en lo que propone, faltaría otras dicinencias de género, como mujeres racializadas etc... Aunque al final hacen hincapié en que faltan ese tipo de representaciones, por lo que chapo por la editorial Anait.
Me ha gustado mucho. Creo que hay cuestiones muy específicas sobre videojuegos pero la mayoría son cuestiones de género extrapolables a otros ámbitos culturales y laborales.
Como todo libro colaborativo hay capítulos mejores y otros peores pero ninguno es malo y si hay un par que son brillantes y necesarios. Como pega, decir que me faltó profundización, en un libro de este tipo donde quien lo lee suele saber lo que busca, creo que a veces peca de quedarse en la superficie. Aún así es una lectura que recomiendo. (Ese último capítulo de Nerea te destroza y posiblemente sea el mejor de todo el libro, sin por ello desmerecer al resto).
Interesante (y necesaria) visión del panorama del videojuego. He disfrutado y aprendido muchísimo leyendo a estas mujeres, cada una de ellas aportando su experiencia tanto jugando como trabajando en el sector. Localización, e-sports, publicidad... '¡Protesto!' abarca un sinfín de aspectos pertenecientes al mundo de los videojuegos a lo largo de todos sus capítulos, siendo la perspectiva de género su hilo conductor. Muy recomendado.