Este es de mis libros favoritos. Cada tanto intento volver a leerlo junto con otras obras de Vela, y es que, como dijeron alguna vez: Arqueles Vela fue el más estridentista de los estridentistas. Este libro en particular, es una joya que contiene las novelas de Vela publicadas en el libro El café de nadie allá en el lejano año de 1925 en los talleres de la editorial Horizonte en Xalapa, Veracruz. El estilo de Vela es sumamente experimental, lleno de neologismos, metáforas y con un estilo discontinuo que da a sus obras ese toque de vertiginosidad que él y los otros estridentistas sentían traía la modernidad. El café de nadie es una novelita que se centra en la historia de Mabelina que pareciera ser el arquetipo de la flapper. El final se siente como una liberación. Un Crimen provisional es una historia que satiriza la novela negra y pareciera hablar de la desumanización que empieza a haber donde es imposible distinguir a un ser humano de un maniquí. Por último: La señorita Etcétera es una novela capital. Se publicó en 1922 y se coronó como la primera novela vanguardista de hispanoamerica. La novela está construida para narrar los múltiples encuentros del protagonista con distintas mujeres en las que busca su ideal de mujer sin entender que es algo ficticio y que la modernidad y la revolución trastocaron todo lo que él espera. La investigadora feminista Elissa J. Rashkin dice que es una obra impactante que por la escritura de Vela demuestra esa búsqueda del protagonista hasta que se desengaño de sus propias ideaciones. ¡Viva el mole de guajolote!
El estridentismo que viene posterior a la Revolución Mexicana surge como movimiento artístico vanguardista en búsqueda de ideales sociales progresistas ya que se consideraba que había un desfase con vanguardias internacionales, criticando la permanencia de manifestaciones conservadoras del porfiriato. Los estridentistas rechazaban el pasado enfocándose en las estéticas modernas de la ciudad, exaltando temas de lo moderno y cosmopolita.
El 12 de abril de 1925 se inaugura “El café de nadie” (ubicado en lo que hoy es la colonia Roma, CDMX) donde se realiza “una tarde estridentista” con lecturas en voz alta, música y exposiciones de obras plásticas. Arqueles Vela haciendo una evocación en forma de retrato literario del café crea la novela “El café de nadie”, donde nos hace olvidar de la realidad creando una psicología envolvente incompatible con la materialidad, llevándonos al placer de lo sensorial y la contemplación de la descripción, dejando en segundo plano la cronología lineal.
En los tres relatos se busca la identidad del individuo por medio del amor, se percibe una realidad asfixiante.
Me ha gustado muchísimo la prosa de Arqueles Vela. “Un crimen provisional” me recordó a EAP pero con su toque personal. Aunque aquí se busca esclarecer un crimen que ni siquiera se ha cometido, tratándose de un crimen provisional al ser un maniquí el que ha sido “asesinado”. Está lleno de escenas absurdas, pero la belleza de su prosa estridentista radica en que dejarte adentrar por la palabra te lleva a una experiencia única donde se antepone a la acción dejando al lenguaje inundarnos de la surrealidad creada.