Deseada, buscada, provocada, inadvertida, la soledad puede adoptar muchas formas, pero en la mayoría de casos es una situación que nos da miedo, nos genera rechazo y tratamos de evitar a toda costa. En el mundo actual y especialmente a partir de una cierta edad, parece que la soledad se entiende como un fracaso: estar soltero, divorciado o separado es algo que debe superarse a toda costa. Sin embargo, saber estar solo es en realidad un signo de madurez, de autonomía, de riqueza personal.
A solas es una oda a la vulnerabilidad, al atrevimiento, a no dejarse vencer. Silvia Congost, una de las psicólogas más conocidas de nuestro país, rompe en este libro, lleno de reflexiones y consejos, con las ideas preconcebidas sobre no tener pareja y nos invita a perderle miedo al monstruo de la soledad desde su propia experiencia. A quedarnos en silencio escuchando nuestro cuerpo, conectando con los latidos de nuestro corazón, con el ruido de nuestra respiración u observando la forma y el contenido de nuestros pensamientos. A atravesar los tortuosos caminos de la soledad hasta llegar a la propia liberación, esa que solo se consigue cuando vamos de frente, sin dejar de avanzar.
Estaba entre una estrella o dos, pero la idea, en cualquier caso, creo que queda clara: no me ha gustado. En los últimos años me he aficionado a los libros de no ficción porque siento que muchos pueden aportar perspectivas interesantes sobre temas importantes. Esperaba lo mismo de "A solas", pero me ha resultado una lectura pesada, repetitiva y sin nada que aportar. Tengo muchísimas cosas que decir, hasta el punto de que me he planteado si no me merece más la pena dejarlo estar, ponerle la estrella y seguir con mi vida. Pero bueno, ya que he hecho el esfuerzo de acabar el libro, voy a intentar ofrecer algo de opinión para quien pueda necesitarla (aunque, insisto, es todo muy subjetivo, veo que hay gente en esta comunidad que ha encontrado la lectura útil e inspiradora, así que nunca se sabe, confiad siempre en vuestro propio criterio). Dicho eso, allá vamos.
Para empezar, este libro me ha parecido absurdamente repetitivo. La autora vuelve sobre las mismas ideas una vez y otra vez y otra vez, hasta que se hace agotador. No me quejaría ni la mitad si estas ideas sobre las que vuelve pudieran ser provechosas o sugerentes, pero es que siento que tampoco lo son. Yo de Silvia Congost no sabía nada hasta este momento y, francamente, si tengo que hacer un juicio meramente basado en este libro, me cuesta creer que sea psicóloga. No cuestiono que pueda ser hábil en terapia o lo que sea, pero en este libro no ofrece absolutamente nada que no pudiéramos haber escrito mi primo, tú o yo misma. Solo son ideas muy new age sobre que todo está contenido en uno mismo, que la vida que habita en todos los humanos, animales, plantas y objetos es la misma, etc. Y lo reconozco, yo puedo consumir ese contenido. Me llama la atención y conecta con una parte de mí más espiritual, pero tiene que haber dos condiciones para que lo consuma gustosamente: 1) Tengo que haberlo buscado, cogiendo un libro que sepa que específicamente va a ir de eso o se intuya que puede incluirlo. Si cojo lo que parece un manual sobre afrontar bien la soledad no espero leer que si amamos el cuadro que tenemos en la pared nos amaremos mejor a nosotros mismos proque somos iguales (esto no es ni siquiera una exageración, lo acabo de sacar del final del libro). 2) Con que me den la idea una vez me basta. En serio, llegó un punto en que prácticamente en cada página se comentaba lo del universo y el todo, y ya no podía más.
Creo también que toda la parte intermedia del libro sobra. Está llena de anécdotas de la autora yendo a la montaña, o emocionándose con una mujer que conoció en un tren, o esperando para un concierto, o hablando con un taxista. Lo siento, ninguna de esas historias me ha dicho nada. De nuevo, me hacían pensar que era un libro que podía estar escribiendo mi primo, que probablemente no tiene nada interesante que decir sobre este tema. Yo quería ver la perspectiva de una psicóloga, y no me ha parecido encontrar eso.
Y como no hay contenido realmente, sino solo frases largas, repetitivas y cargadas de palabras, esto me ha hecho sentir como los trabajos para el instituto que te piden un mínimo de palabras. Cada vez que cogía el libro no podía evitar pensar en cómo los estudiantes a veces nos hemos esforzado por encajar palabras extra que no suman nada al texto para rellenar huecos. Creo honestamente que este libro se siente como leer uno de esos trabajos, pero a un nivel exagerado. Si Congost tenía algo interesante que decir sobre el tema de la soledad, probablemente podía hacerlo en un único folio. Y probablemente debería haberlo presentado de otra manera, recalcando que iba a ser una obra mayormente subjetiva que giraría en torno a su experiencia personal.
Para terminar, ha habido muchas cosas que me han chirriado enormemente. Frases como "¿De verdad crees que lo peor de este mundo es lo que te ha pasado a ti?" que opino que, lejos de lo que debería intentar hacer un psicólogo, invalidan nuestras emociones y experiencias al forzarnos a compararlas con otras que pueden verse más difíciles desde fuera. Lo típico de "no te quejes, otros lo tienen peor". Pero si algo sé en este momento de mi vida es que ni tenemos que compararnos ni nuestro dolor debe ser menos tenido en cuenta por el hecho de que otros también sufran. Hay espacio para todos.
Esperé más del libro a pesar de que tiene una serie de ejemplos de lo cotidiano y que el lector se sienta reflejado en ello, se queda en lo superficial sin ahondar en soluciones o prácticas.
Un libro muy interesante con tres partes muy diferenciadas. En la primera nos explican que es la soledad y como nos relacionamos con ella, como la tenemos y no la aceptamos. La segunda parte es un ejemplo real donde la autora nos muestra como se enfrentó a la soledad y como se reencontró con ella. La última parte es como convivir con la Soledad en nuestro día a día. Un libro que creo que todo el mundo debería leer para saber que cuando estamos en soledad es cuando más nos conocemos y nos aclaramos. El libro cuenta con ejemplos reales de personas que han sido tratados por la autora, también tiene visualizaciones guiadas que puedes escuchar si visitas la web de la autora o leerlas al final del libro y por último un test para saber si temes a la soledad. Hay que recordar que no es lo mismo estar solo que sentirse solo. Kisses
4/5 ⭐️. Me regalaron este libro y pensaba que sería el típico libro de autoayuda (admitiré que me gustan bastante), pero más que un libro de autoayuda es un libro de aprendizaje. Aprender lo que es el concepto de la soledad, a saber qué tipos de soledad hay y las diferentes formas de combatir la ansiedad que produce el concepto de soledad. Es un libro que mediante casos ayuda a identificar en qué punto vital nos encontramos. Gracias a este libro mi concepto sobre la soledad ha evolucionado, ha cobrado sentido e incluso ha sido apreciado.
A pesar se ser escrito por una psicóloga el libro está escrito desde una perspectiva individual y personal. No es un libro que aporte datos demostrables (de hecho no aporta ningún dato), ni es riguroso ni es científico. Silvia Congost, al ser psicóloga esperaba otro tipo de libro. Cómo digo, está basado en una experiencia individual y personal. Roza lo pseudocientífico. Además es sumamente repetitivo.
Esperaba más de este libro. La primera parte es la más interesante. La parte del medio sobra por completo, se vuelve metafísico y empieza a hablar de "el todo al que pertenecemos" "sentir la vida" "todo forma parte de mi y yo formo parte de ese todo". La tercera parte parece que remonta pero es corta y sabe a poco, cuando en mi opinión debería ser el pilar principal del libro.
Nunca he sido fan de los libros de autoayuda. De hecho, los dos únicos que he leído me acabaron pareciendo muy aburridos y repetitivos. Esta vez, no sé si es porque me encuentro en una situación personal muy complicada, pero ha sido diferente.
Este libro llegó a mi por recomendaciones de varias personas. Comencé a seguir a Silvia en redes sociales y me gustó su manera de enfocar las relaciones de pareja y la soledad tras una ruptura, por lo que finalmente me decidí a leerlo.
Debo reconocer que sobre todo la primera parte me removió mucho, me sentí muy identificada, y vi claramente lo que yo no quería reconocer por mí misma. Me ha ayudado a enfocar mi situación de una manera distinta y creo que da buenos consejos para iniciar esta etapa de estar a solas conmigo misma, pero creo que se queda ahí, en consejos. Para mí este libro no debe ser sustitutivo de ninguna terapia si consideras que lo necesitas.
Le pongo un dos porque la idea en sí me ha gustado (aprender a estar bien a solas, reencontrarse con una misma tras una ruptura, abrirse a conocer nuevas amistades, a pasar el duelo, aceptar el cambio, conectar con la vida, el vacío que hay en todo...) pero se me ha hecho muy repetitivo. Es como si todo el libro estuviera repitiendo una y otra vez lo mismo y por eso no me ha gustado demasiado y se me ha hecho un poco bola.
Sigo a Sílvia por instagram y me gusta mucho su manera de abordar ciertos temas de la soledad, relaciones, etc. Empecé este libro porque necesitaba aprender sobre la soledad, como lidiar con ella, con una pérdida, y sinceramente me he defraudado, no cuenta nada que no se sepa ya de por si, consejos que te pueden dar tus propios amigos o familiares, sin ser psicólogos.
Es un buen libro, si no sabes como comenzar a sentirse agusto con la soledad, este es un buen punto de partida. La autora te dara ejemplo de casos que ha tratado y compartira su experiencia que vivio al conectar con la soledad.
El libro A solas de Silvia Congost nos recuerda (y hasta en algunas casos nos aclara) que la soledad no es un vacío, sino una oportunidad para reconectar contigo mismo, sanar y fortalecer tu autoestima. Aprender a estar bien en soledad es clave para vivir con plenitud, libertad emocional y establecer relaciones sanas desde el amor propio. Gracias a @pasandopaginas.rd por regalarme esta lectura tan enriquecedora.
Havia llegit el seu llibre sobre dependència emocional que en el seu moment em va ajudar molt en ser molt directe, clar i didàctic, i suposo que esperava el mateix amb aquest. Al final de la lectura només algunes idees m'han quedat clares; no he acabat de connectar ja que l'autora divaga bastant i es repeteix, fet que m'ha desconnectat de la lectura sobretot a la meitat del llibre. Està redactat des de la seva experiència personal; no dona directrius clares i en realitat no sembla que l'hagi escrit una psicòloga sinó algú que té ganes d'explicar el seu punt de vista sobre la soledat.
Me cae muy mal y hasta me parece GRAVE que una especialista en salud mental utilice el término "tóxico/a" (relación tóxica/ persona tóxica). Lo espero más de un/a adolescente en sus primeros tropiezos sentimentales o de una canción de Maluma que de una psicóloga.
Pensé que iba a ser más interesante, la verdad que no aporta nada al tópico en cuestión, más allá de (sorpresa): podés ser feliz sin estar en pareja.
Creía que estaba enfocado a la soledad, a disfrutarla y demás pero esta muy enfocado a relaciones tóxicas, a aprender a superar una ruptura, dependencia emocional y tal. He sacado 3/4 frases o conceptos útiles pero en general no es para mi.
Un hermoso libro, totalmente ameno y agradable. Aunque está dirigido específicamente a personas solteras, a medida que nos vamos adentrando en su mundo nos damos cuenta que sus enseñanzas son perfectamente adaptables aún tengamos pareja.
¿Por qué un libro que habla específicamente de la soledad me puede servir si tengo pareja? Porque todos los seres humanos necesitamos aprender a disfrutar de nuestra propia compañía, porque si no aprendemos a ser felices con lo que somos tampoco lo seremos estando con otros, ni seremos luz para otros y esto es solo una pequeña parte de todo el contenido que encontramos aquí.
Me encantó cómo nos motiva a practicar la gratitud, a transformar nuestra forma de pensar y de ver la vida, a valorar nuestra esencia y nuestro propio ser, a identificar patrones de codependencia y a establecer límites sanos cuando es necesario.
Un aspecto muy valioso de este libro son las visualizaciones que contiene al final, las cuales podemos llevar a cabo en cualquier momento dependiendo la emoción que estemos experimentando: miedo, ira, tristeza y una muy especial sobre amar la vida.
Un libro sobre la soledad dividido en tres partes.
La primera parte es la más “clínica”; en ella te explica un poco los sentimientos y pensamientos recurrentes que tenemos los humanos hacia la soledad y por qué le tenemos tanto miedo culturalmente.
La segunda parte es más “Mr. Wonderful” me ha parecido un poco idílico todo porque cuenta una supuesta historia donde gracias a pasar una semana sola descubrió un mundo totalmente nuevo basado en que todos partimos de la misma esencia vital y algunas cosas más por el estilo que sinceramente no me han llegado en absoluto.
La tercera parte son como tips para hacer frente a problemas de la vida cotidiana aunque podrían ser más extensos la verdad.
En general me ha parecido interesante y lo recomiendo aunque la segunda parte me parece totalmente prescindible.
La soledad en sí no es más que el acto de comprender que no existe amor tan grande ni tan liberador como el que sientes hacia ti mismo. Que hay que mirar para adentro primero para poder después hacerlo hacia fuera. Y este libro es una compañía precisamente en ese tránsito que, aunque a veces nos cueste, es tan necesario.
2.5⭐ Es un libro muy especial para una persona a la que quiero mucho, pero creo que el libro es un retrato tan personal e íntimo de la psicóloga, que quizá a mi no me ha tocado el corazón por no sentirlo cercano.
Este libro llegó a mi en el momento preciso... Cuando tenía todo la consciencia necesaria para comprender y conectar con cada una de sus palabras. Silvia Congost nos comparte algo de su viaje personal a través de su conexión con la soledad y como el pasar tiempo a solas la llevo a un camino de descubrimiento y conexión con ella misma. Es un manual de estos para la vida que inspira a conectar contigo mismo y con tu esencia.
El libro está muy bien (sobre todo si lo lees en el momento clave de tu vida en el que tienes un problema como el que se trata), pero para mi gusto hay contenido que sobra un poco, concretamente la parte intermedia. Aún así me ha gustado y creo que tiene unas ideas muy interesantes. Quizás no estoy en el momento justo para leer cierto tipo de reflexiones como las que plantea la autora pero puede que a otras personas les sirva de mucho.
La soledad. Uno de los grandes miedos de nuestra sociedad. Aprender a estar solos es la gran asignatura pendiente que la mayoría de nosotros arrastramos y que resulta indispensable superar si se quiere tener una vida plena.
No soy muy fan de los libros de autoayuda, me resultan algo aburridos, pero considero que tener una educación emocional de calidad es esencial para nuestro pleno desarrollo. Fue por eso por lo que me animé a tomar esta lectura. Sin embargo, no he encontrado demasiadas herramientas que me puedan ayudar en mi día a día en este libro.
Dividido en tres partes, en la primera la autora nos habla de qué es la soledad y los tipos de soledades que existen. A pesar de ser la parte más teórica creo que ha sido la que más he disfrutado. Hasta ese momento se me hacía una lectura ligera y amena, con algunos poemas realmente bonitos. Sin embargo, fue al comenzar la segunda parte, en la que la autora revela cómo fue su proceso de descubrimiento de las bondades de la soledad (que reduce a una semana que pasó sola en una casa en la montaña) cuando comenzó a hacérseme más pesada la lectura. Con la sensación de que la autora se repite demasiado y sin llevarme nada en claro, pues todo resulta algo místico y profundo, comencé la tercera parte que se reduce a un par de consejos banales para afrontar la soledad.
Al final, me quedo con una sola idea del libro, que por otra parte yo misma deduje hace ya algún tiempo. La única forma de afrontar el miedo a estar solos, como ocurre con cualquier otro miedo, es estando solos durante el tiempo que sea necesario.
Este libro definitivamente no era para mi en muchísimos aspectos.
Al leer de qué iba este libro me llamó mucho la atención pensando que podría aportarme algo nuevo. Los primeros capítulos me parecieron muy interesantes y, apesar de que poco después de empezarlo noté que no era para mi (ya que soy una persona que aprecia mucho sus ratos de soledad), decidí continuar oyendolo (sí, escuché el audiolibro, cosa que recomiendo mucho, ya que hay muchas reflexiones guiadas que se aprovechan más oyendolas que leyendolas).
Al continuar oyendo el libro este fue empeorando cada vez más. Los ejercicios guiados eran cada vez más ridículos y las conclusiones y reflexiones cada vez más grandilocuentes y alejadas del "aprender a estar solo" que vende el libro.
Al final tuve que dejar el libro sin acabar a falta de 15 minutos, cuando soy una persona que muy difícilmente deja un libro sin acabar, porque me parecía ridículo aguantar hasta el final cuando llevaba ya rato sabiendo que no me gustaba nada y que no me aportaba nada.
Estar solo es en realidad un signo de madurez, de autonomía, de riqueza personal.
Cuándo dejas de angustiarte para llegar a más, entonces todo fluye. Fluyes con la vida, dejas que te lleve sin juicios, ni exigencias, ni quejas, ni rabia, ni pena ni dolor.
Cuánto más dependientes nos sintamos de objetos o de personas, menos libres seremos y más condicionados estaremos a la hora de tomar decisiones en nuestra vida.
Debemos darnos cuenta de que estando solos podemos sentirnos en paz y armonía y que podemos estar mucho mejor que al lado de alguien que no nos quiere de una manera sana.
Podemos estar sin pareja y ser felices, pero no podemos ser felices estando solos todo el tiempo.
Si conectamos con el amor, no quedaremos atrapados en relaciones tóxicas, no nos aferraremos nunca a alguien que nos trata mal o nos demuestra que no nos quiere con sus actos.
La soledad y el aislamiento social no son lo mismo. El aislamiento social prolongado siempre acabará teniendo consecuencias negativas para los seres humanos.
A solas. A solas conmigo. A solas para entender la soledad y conectar con ella. A solas para comprender la inmensidad de la vida y del amor. A solas para ser.
Debes aprender a contactar contigo, con tu esencia, con la realidad. Con tu propia soledad.
No importa lo duro que la vida te golpee, importa que resistas y sigas avanzando. Debes continuar sin dejar de avanzar. Así es como se gana.
En la amistad siempre hay amor. Y como hay amor, hay bondad. Y compasión. Y disposición total a estar allí siempre que lo necesitemos. Eso es un amigo.