Su poesía está pensada y sentida en profundidad, lo que es un poco difícil de explicar: hay un tipo de arte cuyas manifestaciones, que pueden por lo demás ser bellísimas, se agotan en la primera percepción; y otro tipo de arte que se puede ahondar. La poesía de Delmira Agustini tiene en un grado excepcional esta cualidad, y, en las sucesivas lecturas se va enriqueciendo con una armonía profunda de resonancias intelectuales y afectivas. Siempre he creído que este es el tipo más elevado de arte.
Delmira Agustini (October 24, 1886 – July 6, 1914), an Uruguayan poet, is considered one of the greatest female Latin American poets of the early 20th century.
She wrote for the magazine La Alborada (The Dawn). She formed part of the Generation of 1900, along with Julio Herrera y Reissig, Leopoldo Lugones and Rubén Darío, whom she considered her teacher. Darío compared Agustini to Teresa of Ávila, stating that Agustini was the only woman writer since the saint to express herself as a woman.
She specialized in the topic of female sexuality during a time when the literary world was dominated by men. Agustini's writing style is best classified in the first phase of modernism, with themes based on fantasy and exotic subjects.
Eros, god of love, symbolizes eroticism and is the inspiration to Agustini's poems about carnal pleasures. Eros is the protagonist in many of Agustini's literary works. She even dedicated her third book to him titled Los Cálices Vacíos (Empty Chalices) in 1913, which was acclaimed as her entrance into to a new literary movement, "La Vanguardia" (The Vanguard).
Agustini was blue eyed, with light skin and a slender figure. Some might have testified that she looked like an innocent angel. The daughter of a distinguished family, Agustini had all that she needed and was at the same time indulged. This unconditional and overbearing love led her to themes of submission and charm as well as spiritualized erotic imagery.
Me topé con esta poetisa de casualidad, absorbiendome enseguida con esos versos de límpida pasión. Creo que su poesía refleja esos encuentros juveniles, profundos y arrebatadores, con sus propias sensaciones eróticas descubiertas a través del amante. De fácil lectura, aunque hay que tomarse su tiempo para saborear relamente esos versos, la recomiendo mucho aún para aquellos que no acostumbran a leer este género.
Por Gabriela Mistral y Rubén Darío llegué a este libro. Los poemas de Delmira tienen una transparencia tremenda, no había conocido poesía así, entendí perfectamente porque esos dos grandes la admiraron tanto, es maravillosa.
Siempre me había interesado la historia de esta autora uruguaya, por todo el misterio que la envuelve y lo trágico de su final; pero en realidad nunca me había acercado verdaderamente a lo que es su arte. Su forma de escribir es dulce y amorosa, destella juventud y pasión. Sus poemas están cargados de una emoción cautivante, supo dejar plasmado su espíritu vibrante y su sentir. Es tan delicada al expresarse, que todo el poemario parece estar compuesto de cantos, Delmira ha logrado vivir para la eternidad en sus textos.
Altamente recomendado para los amantes de la poesía, y también para quienes quieran empezar con el género -ya que no es una obra demasiado rebuscada, por lo tanto es fácil entender-.
Amor, la noche estaba trágica y sollozante Cuando tu llave de oro cantó en mi cerradura; Luego, la puerta abierta sobre la sombra helante, Tu forma fue una mancha de luz y de blancura.
Todo aquí lo alumbraron tus ojos de diamante; Bebieron en mi copa tus labios de frescura, Y descansó en mi almohada tu cabeza fragante; Me encantó tu descaro y adoré tu locura.
Y hoy río si tú ríes, y canto si tú cantas; Y si tú duermes duermo como un perro a tus plantas! Hoy llevo hasta en mi sombra tu olor de primavera; Y tiemblo si tu mano toca la cerradura, Y bendigo la noche sollozante y oscura Que floreció en mi vida tu boca tempranera!
Acabando mi ciclo de poetas uruguayas con un olvido de los que no se perdonan.
La calidad es inegable, la robaron, y con ella a nosotros, en el injusto crimen de su muerte. Qué triste que haya ejemplos de estas cosas, y sus versos fueron "ignorados". ¿Con permiso de quien? No, no, no, poeta tan exquisita como para adornar la historia, tan alta como para ser admirada y tan sincera que no sorprende el escándalo.
Imprescindible
"Así bajo los rostros sombríos y risueños Yo viví sin vivir, largo tiempo, rezando O en la rueca tranquila de las horas hilando Los copos impecables de una seda de ensueños"
¿Acaso importa que adorne el ala lo que oprime el vuelo?
La poesía rioplatense una vez más se llevó toda mi atención y mi amor. Qué bueno toparse con la poesía de Delmira Agustini y encontrar un libro usado y marcado por un estudiante de español. Qué suerte tuve.
Gracias a la vida por regalarnos la oportunidad de leer a Agustini. Potente modernista que colocó alto el techo de lo mágico, lo irresistible y lo musical en la poesía de aquella época. En mi caso, conocer su trabajo, definitivamente, no fue un accidente.
Gracias por compartirla conmigo, Florencia querida.
Me sabe mal darle solo dos estrellas, pero es que, de verdad, salvo dos o tres poemas, el resto no me gustó nada. No me dijo nada o no me llegó, no sé y eso que los releí para ver si tal vez no los había entendido. Leí este libro para el reto anual, dado que en abril tocaba poesía, pero me quedó pena. Seguro busque algún otro poemario y lo lea este mes a ver si me gusta más.
I love Delmira, one of the best writers in our little Uruguay's history. She expressed women erotism way ahead of time, and I think that's a beautiful and bold kind of early age feminism you have to applaud.