Sin un futuro que soñar juntos, ni siquiera un presente que disfrutar, Margarita deja el hogar donde hace diez años vive con Nacho. Solo puede volver a la casa de su madre. La relación entre ellas nunca fue fácil, y el tiempo no la ha mejorado.
Margarita vuelve a la casa de su madre después de años de relación con Nacho. Estas dos mujeres tendrán que reencontrarse en una convivencia forzada que ninguna ha elegido pero que llega para enseñarles que hay mucho de la otra que todavía no conocen y mucho que a pesar del paso de los años se mantiene intacto.
Me encanta como está contada la historia, son pequeños episodios que hacen que uno vuele con la lectura pero que a la vez tienen una gran profundidad y no por cortos dejan de decir lo que hay que decir y lo que el lector necesita saber para conocer a estas mujeres y empatizar con ellas. Una novela atravesada por el amor, la desilusión, la violencia, el feminismo, los perjuicios y por sobre todo, por los vínculos. Vemos a estas dos mujeres relacionarse y nos emocionamos, nos reímos y hasta nos enojamos con sus diálogos, los que en muchas ocasiones se leen muy cercanos.
Una novela que nos invita a resignificar los vínculos, a no quedarnos calladas, a no vivir en el conformismo y a saldar cuentas pendientes. Disfruté mucho de esta lectura, de su dejo melancólico y de su sabor a la vida misma. Una lectura de verano ideal.
Fue una novela rápida que precisaba para salir de un bloqueo lector importante. No fue de las mejores lecturas pero resulta imposible no reconocerse en algunas situaciones y ponerse a pensar con algunos pasajes.
Me aburrió, me desesperó su personaje y lo remé. A pesar de ser corto se me convirtió en una tortura leerlo. Tengo varias frases anotadas, pero nada más.
Que libro este... Fue un libro que me hizo sentir de todo. Me compadecí mucho, de mí misma, porque sentía mucho de lo que Margarita contaba, era como estar viendo no reflejo. Es un libro que no es para leer a cualquier edad. Es para entenderlo, porque te cuenta historias en cada página. Marqué muchas frases en este libro, sobre todo cuando Margarita habla del amor. Cómo decidimos huir en pos de algo que no sabemos cómo va a terminar. Que difíciles que somos las mujeres. El personaje de la madre, Nilda. ¡Ay esa señora! Me dio tanta rabia, tanto odio. Pero también sentí pena, porque pensaba en la mía y sentía algo muy parecido. Mal de muchas es un libro en el que te podes sentir identificada o no. Por eso digo que es un libro para leerlo con cierta edad. Es un libro de 251 páginas, las primeras 100 se me pasaron volando. De ahí hasta la 170 más o menos me costó un poco, sentí que se había vuelto monótono con el tema de encontrar un hombre, es porque sentí que el eje principal era la madre y la vida qué Margarita vivía en base a esta. Después de la 171 el viento sopló fuerte la vela y le metí de un solo tirón hasta que llegó el final y todavía no quiero soltar a Nilda, ni a Margarita, las quiero abrazar un poco más antes de dejarlas ir. ¿Lo recomiendo? Si, así es. Mal de muchas es el primer libro que leo de esta escritora y me gustó tanto que le doy 4/5⭐.
Otro librito que me prestó la Lau 🥹 y nuevamente no me decepcionó, ella sabe siempre que recomendarme y amo que tenga la confianza de prestarme sus libros y dejarme ver sus anotaciones y lo que marca en cada página.
Este libro es cortito, rápido de leer pero que tiene mucho contenido. Me gustó mucho la calidad de la escritura, cada palabra y frase tiene algo que la hace única. Si debo admitir que en me costaba¿ o me enredaba al identificar y leer los diálogos por cómo estaban escritos, pero es solo un detalle.
Sin duda una lectura muy bonita, gracias nuevamente a mi Lau por permitirme esto 💌
Margarita vuelve a vivir a casa de su madre después de una larga relación con su pareja. En cortos episodios que mezclan eventos presentes y pasados vamos viendo la relación de Margarita con su madre. A modo de anécdotas desde el punto de vista de Margarita podemos ver, y a veces adivinar, aspectos de la vida conjunta y también de la vida individual y las relaciones de madre e hija. Es imposible no verse identificado en algún episodio a lo largo del libro, no reconocer en la relación de Margarita y su mamá, sus amores, su hermana, sus amigas algún episodio de nuestra propia vida. Un viaje al centro de una relación conflictiva, llena de prejuicios, complejo, mandatos y cariño.
Es increíble como la gente idealiza y presiona a otros para que sean como ellos creen que deben ser o quieren que sean. Cómo está historia hay miles y las vivimos todo el tiempo. El día que la gente deje a los demás vivir como quieran, habremos evolucionado de verdad.
Ahora con respecto al libro jajajaja. Se lee súper rápido. Me gusta que sean como capítulos cortos. La forma de escribir de la autora es súper llevadera y a la vez bien intensa. Te hace revivir todos los momentos que cuenta.
Había una vez una madre y su hija. Y su relación complicada, caótica, que solo ellas dos pueden entender.
Mal de muchas habla en voz de todas esas que alguna vez quisieron asesinar a su madre, y que al mismo tiempo matarían a sangre fría a quien le llegue a tocar un pelo.
Margarita ya tiene más de treinta se siente adolescente otra vez ahora que volvió a vivir con su madre, una mujer compleja y caprichosa con la que es difícil lidiar. Escuchando peros a cada cosa que dice, siendo criticada por cada decisión que toma, Margarita intenta vivir según su felicidad y según la felicidad de su madre. El problema es que esas felicidades son dos líneas paralelas. Margarita hace lo que puede, y lo que puede es vivir en una realidad limitada hasta que salga.
La lucha por ser feliz y por romper con la expectativa paternal lleva a Margarita a un viaje físico, introspectivo y frustrante que anhela con terminar y sentir la libertad.
La pregunta es, ¿es posible conseguir esa libertad? ¿Es posible, después de tantos años domesticada a las formas de su madre, conseguir la libertad mental?
Lo amé con cada fibra de mi alma, siento que este libro me encontró a mi por azar y no puedo estar más agradecida, es la escritura, la honestidad, la identificación, la narración y el sentimiento lo que hace este libro tan especial, realmente muy muy muy recomendado y espero tenerlo para siempre ahí, conmigo💌
Marcela es licenciada y profesora en psicopedagogía y enseñanza primaria. Ha publicado anteriormente tres novelas y un libro de relatos. Sus temas en la escritora son las madres, el desarraigo, la nostalgia y la lluvia.
Margarita se separa de su pareja y abandona lo que fue su hogar durante diez años. Sin ningún otro lugar a dónde ir, decide volver a la casa de su madre, con quien nunca tuvo una relación demasiado sencilla. Así, madre e hija se enfrentan nuevamente a la convivencia, que no resulta nada fácil. Entre discusiones y cariños poco explícitos, ambas mujeres vuelven a conocerse y reencontrarse, para empezar de a poco a familiarizarse la una con la otra y avanzar en un camino de sanación.
Mal de muchas nos acerca el relato de una mujer que vive una situación nada alejada de lo normal. Como una entrada de diario, Marcela nos relata lo cotidiano de esa convivencia, retractando la complejidad del vínculo madre-hija que tan difícil es de sortear. Además, encontramos desamor, amistad, violencia. Sin embargo, no se vive como un relato triste, sino más bien como un retrato de una mujer empoderada, que debe dejar atrás lo que era su vida para afrontarse a lo que vendrá, con una carga de prejuicios insostenible.
En pequeños capítulos de gran profundidad, la autora logra empatía e identificación en el lector. El humor no queda de lado, ya que ambos personajes tienen una personalidad un tanto sarcástica y confrontativa. Emociones de todo tipo las recorren y quien lee las acompaña en esa dicha.
Disfruté mucho esta lectura. Ubicado al lado de mi cama, este libro fue de los que abrí numerosas noches antes de dormir, decidida a no leer más de dos o tres capítulos ya que la lectura me resultaba bellísima y quise extenderla la mayor cantidad de días posible. Una caricia al corazón.
Precioso libro! Cálido y realista sin perder poesía, habla de mujeres sin exagerar feminismo, romántico y apasionado pero sin empalagar. Mezcla amor, alegría y dolor con un equilibrio maravilloso. Me encontré riendo en voz alta y lagrimeando sin querer. No conocía a la autora, me la recomendaron en una librería donde buscaba lectura de vacaciones, y resultó perfecto. Lo leí en un día!
Me gustó, fue una lectura muy liviana poe así decirlo, creo que mucho de eso fue por la cercanía de la formas de expresión. Pero no me gustó el final, me pareció un final sin fin. Me hubiera gustado que el personaje principal creciera aún más a nivel emocional. Y hay partes muy poéticas que me desconcentraban un poco de la lectura.