Born Iosif Solomonovich Grossman into an emancipated Jewish family, he did not receive a traditional Jewish education. A Russian nanny turned his name Yossya into Russian Vasya (a diminutive of Vasily), which was accepted by the whole family. His father had social-democratic convictions and joined the Mensheviks. Young Vasily Grossman idealistically supported the Russian Revolution of 1917.
When the Great Patriotic War broke out in 1941, Grossman's mother was trapped in Berdychiv by the invading German army, and eventually murdered together with 20,000 to 30,000 other Jews who did not evacuate Berdychiv. Grossman was exempt from military service, but volunteered for the front, where he spent more than 1,000 days. He became a war reporter for the popular Red Army newspaper Krasnaya Zvezda (Red Star). As the war raged on, he covered its major events, including the Battle of Moscow, the Battle of Stalingrad, the Battle of Kursk, and the Battle of Berlin. In addition to war journalism, his novels (such as The People are Immortal (Народ бессмертен) were being published in newspapers and he came to be regarded as a legendary war hero. The novel Stalingrad (1950), later renamed For a Just Cause (За правое дело), is based on his own experiences during the siege.
Grossman's descriptions of ethnic cleansing in Ukraine and Poland, and the liberation of the Treblinka and Majdanek extermination camps, were some of the first eyewitness accounts —as early as 1943—of what later became known as 'The Holocaust'. His article The Hell of Treblinka (1944) was disseminated at the Nuremberg War Crimes Tribunal as evidence for the prosecution.
Grossman died of stomach cancer in 1964, not knowing whether his novels would ever be read by the public.
No sé si prefiero verlo como un relato íntimo de los últimos días de guerra, o como la metáfora de lo mismo en la población alemana, aquella que enjaulada, no podía sino soñar con su propia libertad. Cualquiera que sea la interpretación que se le dé, el relato se sostiene, gusta, y con los grabadazos de Eko se disfruta mucho más.
“y cuando los labios del gorila Rosa van el cuello lleno arrugas del guardián, Ramm, turbado, sonreía: poca gente sentía deseos de besar a un viejo abandonado por el destino.” El Zoológico, Vasili Grossman
Visitando Palermo, conocí la librería de la editorial Fondo de Cultura Económica, y la verdad, qué lugar. Salí de ahí con tres libros, dos de ellos siendo las ediciones de “Vientos de Pueblo”. Me llamó mucho en el libro los grabados de Eko (que son espectaculares) y a su vez la lectura histórica me resultaba interesante.
“Un olor a sangre apenas perceptible flotaba alrededor del edificio de muchos pisos, construido de acuerdo con todas las reglas higiénicas y sanitarias… Hasta los frívolos añojos sentían temor.”
Disfruté mucho de la historia, ***, el viejo cuidador de los gorilas en el zoológico, me cayó simpático, es del tipo de persona con la que me gustaría sentarme a charlar (incluso si se la pasa callado, me imagino hablando con él sobre el gobierno y sobre el zoológico). Además de que su relación con *** me dio ternura.
“—Recuerdo cómo me cubrió un derrumbe la mina Kronprinz. Yo yacía así mismo, como este pobrecillo, aplastado, y arrancaba con los dedos pedazos de roca. Nosotros también queremos respirar libremente.”
La escritura de Grossman, por otro lado, me pareció atrapante y entretenida, y sin embargo certera, perfecta para describir la amargura y atrocidades que nos cuenta el libro, situado en Berlín durante la segunda guerra. Lo recomiendo a los amantes de la historia y a los vegetarianos que no les dan asco los mataderos.
“en la conciencia dormida del gorila todo se mezcló y creo un sueño más brillante que la realidad de hoy…”
Berlín es un caos: destrucción, bombardeos y ruinas. En los últimos días de la segunda guerra mundial, mientras las fuerzas rusas y aliadas cercan a los nazis en la capital alemana, los animales del zoológico desesperan dentro de sus jaulas por no entender lo que ocurre. Vasili Grossman cuenta acá varias historias, porque se sirve del cautiverio de los animales y del trato de los humanos hacia ellos para reflexionar sobre la libertad, valor devaluado durante el nazismo; además refleja el clima de descontento que tenía gran parte de la población alemana hacia las políticas estatales de su gobierno. Creer que todos los alemanes eran pro nazis, es un error, pero también es cierto que poco se habla de ello porque pocos se atrevieron a pronunciarse en contra de un régimen que instauró el terror en Europa, comenzando por su propia casa.
Debo confesar que una de los componentes importantes en mi disfrute de este libro fueron las ilustraciones… con esta colección poco a poco Eko se ha ido ganando un espacio muy especial en mi corazón.
Dicho esto, el cuento en sí también me gusto. Siempre es refrescante encontrar un punto de vista distinto de una historia que ha sido contada tantas veces.
Interesante por su valor histórico, por los grabados y por el relato que crea sobre la relación del cuidador con los animales del zoológico de Berlín, todo enmarcado en la derrota del nazismo y la entrada de los aliados y los rusos a Alemania.
It represents the pain of the innocence from a crude but gentle perspective. Describing from details, routines, and subtles changes how the suffering, the hunger, and desperation become the routine under the historical context.
Es una lectura corta pero tiene una visión diferente de la guerra y como los viven los animales, una historia realista y dolorosa Los grabados son un regalo del autor, impresionantes 😲
Con una prosa fascinante, el autor plasma varias reflexiones en torno a la libertad. Si bien, se ha dicho que el autor pretendía hacer una metáfora entre el zoológico y la sociedad alemana bajo el tercer Reich, creo que en la actualidad también coloca el debate en la existencia actual de los zoológicos desde la perspectiva de los animales cautivos.
Que relato más excelso. Yo se que todos vamos a diferir goodreads sirve para mostrar egos a través de las estrellas. Yo todo lo que leo y me gusta es de 5 estrellas. Las estrellas no deberían existir. Solo arruinan la experiencia y el sentido de la lectura. goodreads apesta
La mejor parte de esta historia es como describe como los animales van ha ser sacrificados en el rastro, algo que remuerde la conciencia. Lo recomendaré a todo mundo.