Encontré este libro rodeado de otros de Walter Riso, a quien últimamente leo bastante. A Bob Mandel no lo conocía y no sabría si valdría la pena la lectura aunque si quería leer sobre prosperidad. Quitando que ronda a veces en temas religiosos, es un libro bastante bueno que nos enseña como somos dueños de nuestra prosperidad y como todo lo que poseemos tiene valor porque está en circulación. El amor y el dinero es abundancia en este mundo de posibilidades infinitas.