Soy psicóloga y este libro lo leí por mi especialización en psicoterapia infantil, y debo decir que me abrió los ojos ante un mundo nuevo, me enamoré del enfoque Gestalt, me maravillé con las técnicas aquí descritas y definitivamente me reforzó muchísimo.
Recomendado para profesionales que traten con la infancia desde un enfoque humanista/gestáltico.
Un hermoso libro que encontré terapéutico, sobre todo en los últimos capítulos. Una visión preciosa y profunda sobre el trabajo con las niñas y los niños que me da la impresión de haber ganado una mejor comprensión de mí misma.